Muchos municipios, además, han hecho un llamamiento a sus habitantes y visitantes en época estival para hacer un uso "responsable" del agua ante la escasez de precipitaciones, y que restrinjan el riego de jardines, el baldeo y el riego con manguera de calles, plazas y patios.
Algunos pantanos, como los que abastecen a la ciudad de Ávila, están muy por debajo de la media nacional, en torno al 36 % de su capacidad, la mitad que el año pasado, según los datos semanales del Ministerio para la Transición Ecológica (Miteco).
Esta situación llevó a mediados de julio pasado al Ayuntamiento de Ávila a declarar la "emergencia" en la ciudad por la situación de "sequía extrema" y la "escasez de agua para el abastecimiento".
Una situación que ha obligado a las autoridades a suspender un concurso hípico internacional que debía celebrarse a finales de agosto y a aprobar obras de sondeo de agua.
También en Castilla y León, en Lastrilla, una pedanía del Ayuntamiento de Pomar de Valdivia, con apenas diez habitantes censados, el agua llega por medio de cisternas, según han explicado esta semana fuentes de la Diputación de Palencia.
En los municipios segovianos de San Idelfonso y El Espinar, ambos en el catálogo de reservas de la biosfera y a los pies del Parque Natural del Guadarrama, donde en verano se duplica la población, las autoridades han adoptado medidas para restringir el uso de agua potable, mientras que en La Granja se ha reducido el funcionamiento de las fuentes del Palacio Real.
En Zamora, siete municipios están recibiendo agua mediante camiones cisterna, y, en Castilla-La Mancha, los pantanos de Entrepeñas y Buendía, en la cabecera del río Tajo, se encuentran al 20,69 % de su capacidad total.
Pese a ello, el lunes pasado la Comisión Central de Explotación del Acueducto Tajo-Segura aprobó un nuevo trasvase de 20 hectómetros cúbicos para el mes de agosto.
La escasez de agua la están viviendo los vecinos de Chillarón del Rey, pueblo que a pesar de estar al lado de los embalses de cabecera del Tajo, están siendo abastecidos por cisternas.
En La Rioja, varios municipios con necesidades de abastecimiento han recibido entre enero y julio el suministro de agua transportada por camiones, que han distribuido ya un total de 347.000 litros de manera gratuita.
Desde las once de la noche a las ocho de la mañana está restringido el suministro en la localidad cacereña de Caminomoriscos, en la comarca de Las Hurdes.
Mientras tanto, en Andalucía, una de las regiones con el menor registro de precipitaciones y unas reservas de agua embalsada bajas, no se ha declarado situación oficial de sequía.
Tampoco Cataluña está en situación de sequía, ya que sus embalses se encuentran en el 66,8 %; eso sí, lejos del 84,9 % del mismo periodo del año pasado.
Pero los efectos de la escasez de precipitaciones la están padeciendo también en la ganadería y la agricultura.
Así, según datos de Asaja Extremadura las pérdidas por la sequía en la ganadería se cifran en más de 195 millones de euros en los últimos cinco meses.
Y en la agricultura, según la misma fuente, la sequía está afectando a cultivos como el olivar, con la reducción de un 40 %, cifra similar en los viñedos y un 30 % en la producción de higos.
Ante esta situación, el responsable de campañas de Consumo y Biodiversidad de Greenpeace, Julio Barea, ha explicado que España padece una "sequía estructural" y a pesar de "la falta de una declaración oficial al respecto, se podría hablar del inicio de otro periodo muy escaso de precipitaciones al igual que en 2017".
Las cuencas del Duero, el Ebro, el Tajo, el Guadiana y el Guadalquivir "no están en sequía todas enteras", pero sí prácticamente "en más del 50 %", explica, y alerta de que las reservas están ya "bajo mínimos" pese a que aún no hay sequía oficial.

Déficit de lluvias

Las lluvias acumuladas desde que el pasado 1 de octubre comenzó el año hidrológico 2018-2019 se sitúan un 14 por ciento por debajo del valor normal de lo que correspondería a este periodo hasta el 30 de mayo, que son 520 litros por metro cuadrado, según datos de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
Por zonas ha llovido por debajo de los valores normales en lo que iba de año hidrológico en la mitad oeste peninsular, en el norte del cuadrante nororiental, en el archipiélago canario y en la mitad oeste de las islas Baleares.
Asimismo, el déficit de lluvias superó el 25 por ciento en extensas áreas de Castilla y León, en la provincia de La Coruña, en el norte y sur de Extremadura, en zonas de Andalucía occidental y en la Comunidad de Madrid, así como en todas las islas del archipiélago canario con la excepción de Fuerteventura.
Por otra parte, habría llovido más de lo normal en amplias zonas del tercio este de la Península y Baleares, especialmente en zonas del levante, sierra Nevada y provincias de Teruel y Castellón, donde en algunas zonas las precipitaciones llegan hasta el 75 por ciento de los valores normales e incluso los duplican en algunos puntos más aislados.