El Congreso de los Diputados ha tumbado los Prepuestos Generales del
Estado del Gobierno surgido de una moción de censura contra Mariano
Rajoy Brei el pasado mes de Junio, y ha abocado al presidente Pedro
Sánchez a la disolución de las Cortes y a la convocatoria de elecciones
generales. Algo que, probablemente, hará este Viernes, tras oír al
Consejo de Ministros, según establece el artículo 115 de la Constitución
española.
Sorprende que haya trascendido que haya sido la
vicepresidenta del Gobierno Carmen Calvo la que, según La Vanguardia,
la que ha recordado al Presidente del Gobierno que debe tener un
soporte legal constitucional para la disolución, cuando eso está
establecido en la Constitución y el Presidente conoce perfectamente la
Constitución.
Con la votación de este mediodía de las enmiendas a la totalidad de
los Presupuestos, enmiendas presentadas por el Partido Popular,
Ciudadanos, Foro Asturias, Coalición Canaria, PDeCat y Esquerra
Republicana de Catalunya (ERC ), con el resultado de 191 votos a favor,
158 en contra y una abstención, ni siquiera ha cabido la posibilidad de
entrar en el debate de unos Presupuestos muy criticados pero que tienen
medidas sociales de calado, como la elevación del salario mínimo hasta
900 Euros, especial dedicación a la pobreza infantil y, en este caso,
una financiación para la Generalitat catalana, prácticamente paralizada
para el gobierno cotidiano, que supera a casi todas las Comunidades
Autónomas con más de dos mil millones de euros por encima de lo
previsto.
La votación y el tenso debate de este Miércoles y de ayer Martes en
el Congreso de los diputados, han sido el punto final de una larga y
conflictiva semana en la que había prevista una nueva reunión en
Barcelona de una Delegación de la Moncloa y de la Generalitat, que se
suspendió ante la presión del independentismo para el nombramiento de un
mediador para una Mesa de Partidos nacionales y catalanes, algo de lo
que no se tenía la menor noticia.
La propuesta de la vicepresidenta
Carmen Calvo de substituir la figura del mediador por el de Relator
(algo que recuerda mucho la figura jurídica de un mediador relacionado
con las Naciones Unidas) provocaba una auténtica REBELIÓN en el partido
Socialista, con declaraciones indignadas de los Presidentes de Castilla
la Mancha, Aragón y Extremadura, del antiguo Presidente castellano
manchego José María Barreda y hasta del expresidente del Gobierno Felipe
González y el ex vicepresidente Alfonso Guerra.
En la oposición provocaba la convocatoria apresurada por parte del
Partido Popular y de Ciudadanos, a la que se sumaría Vox e, incluso,
Falange Española, de una manifestación en la Plaza de Colón por la
unidad de España, en la que se pedía la dimisión del Presidente del
Gobierno (cubierto de todo tipo de indultos) y la exigencia de
elecciones generales.
Ninguno de los asistentes a ese día de protesta
podía imaginarse que su petición podía cumplirse días más tarde, tras
perder el Gobierno la votación para comenzar a debatir los Presupuestos
Generales del Estado y tras confirmar la Moncloa que habría una decisión
presidencial sobre la convocatoria electoral este Viernes, tras el
correspondiente debate en el Consejo de Ministros.
Aunque todos los partidos han entrado este mismo Miércoles en “modo electoral”.
(Albert Rivera ha llegado a advertir que no hay ninguna posibilidad
de un pacto de su partido con Pedro Sánchez y Pablo Casado que no habrá
pacto con los populistas) habrá que esperar hasta el mismo Viernes a ver
cómo se aclara el escenario político. Un escenario que está siendo
examinado con lupa con los barones más críticos con Sánchez, que no
quieren que unas posibles generales coincidan el 26 de Mayo con las
europeas, municipales y autonómicas.
No quieren cuatro urnas (en
Canarias cinco) y, sobre todo, no quieren resultar castigados por la
política que se ha venido desarrollando con el independentismo, a pesar
de que se ha roto y no se ha querido ceder a unas peticiones delirantes
de Quim Torra. “Demasiado tarde y demasiado forzado… nos puede pasar lo
mismo que le ha pasado a Susana Díaz en Andalucía“.
Descartado el 26 de Mayo, tampoco la fecha del 28 de Abril, a menos
de un mes del Superdomingo electoral, es aceptada con entusiasmo por
muchos dirigentes del partido que creen que ha pasado muy poco tiempo
desde la ruptura con el independentismo, aunque reconocen que, al final,
se ha mantenido una situación de firmeza ante peticiones que, en medio
de la crisis del Relator, en la que tanto ha tenido que ver la
Vicepresidenta del Gobierno, sonaban a auténtico disparate como el
reconocimiento del Derecho de Autodeterminación y el compromiso de
celebrar el tan manido Referéndum, basado precisamente en ese derecho
que no está reconocido en ninguna Constitución del mundo.
Como sostiene el catedrático de Derecho Penal Enrique Gimbernat ese
derecho no existe sino que sucede todo lo contrario: “Las normas
internacionales atribuyen el derecho de autodeterminación solo en
supuestos de colonialismo, o bien cuando existe una discriminación
racial o una discriminación de los ciudadanos en su vida pública o en
sus relaciones económico-sociales de carácter privado, prohibiéndose
expresamente ese derecho a decidir precisamente en supuestos como el de
Cataluña”.
(*) Periodista y economista
No hay comentarios:
Publicar un comentario