Acaba de ser aprobado el Plan General de Ordenación del municipio de Totana (PGMO) con el único voto a favor del PP y los votos en contra de IU y PSOE. A juicio del portavoz de IU en el Consistorio, Pedro Martínez Gómez, el PGMO aprobado es el plan del “pelotazo” urbanístico y la especulación, ya que se basa en la recalificación masiva del municipio como suelo urbanizable.
En este Plan General se procede a recalificaciones masivas de terreno rústico en urbanizable, incluyendo parajes protegidos en el perímetro de Sierra Espuña o de las Cabezuelas, la gran mayoría de las veces al servicio de los intereses multimillonarios de personas muy cercanas al poder municipal”.
Estas recalificaciones masivas están basadas, también según Pedro Martínez, en la figura de los convenios urbanísticos que, en un número de 60, han sido también aprobados. En estos 60 convenios urbanísticos el Plan General contempla la recalificación de más de 16 millones metros cuadrados (en estos momentos la superficie urbanizable del municipio es de 4 millones de metros cuadrados) para la construcción de alrededor 40.000 viviendas, además de dos campos de golf y una ciudad deportiva. Esta recalificaciones masivas pueden suponer, a juicio de IU, unas plusvalías de más de 1.500 millones de euros ,de los que únicamente 56 millones (un 3%) van a recalar a las arcas del Ayuntamiento.
A juicio de IU, el procedimiento seguido por el PP en Totana ha sido también de ocultación de información y falta de transparencia “saltándose a la torera” el decálogo de transparencia urbanística proclamado a voces por el presidente regional del partido y presidente de la Comunidad Autónoma Ramón Luis Varcárcel. Según informa el edil de izquierdas, buena parte de los convenios urbanísticos aprobados han sido “amasados” en reservados de restaurantes sin ningún tipo de publicidad y sin ninguna comisión técnica que los respalde.
El portavoz de Izquierda Unida en el Ayuntamiento, Pedro Martínez Gómez, destaca también que “con este PGMO Totana pierde oportunidades históricas para resolver problemas como la falta de espacios verdes en los alrededores del municipio (el paraje de las Cabezuelas estaba destinado y protegido con este fin), el problema del tráfico (la circunvalación oeste del casco urbano pudiera haber sido la solución) o la falta de vivienda para jóvenes en el municipio (de las 40.000 viviendas propuestas sólo hay destinadas a este fin 150, un 0.003%) “.
Para Pedro Martínez está claro que el PGMO aprobado en solitario por el PP totanero obedece más a intereses particulares que al interés general del municipio, abriendo las puertas a la tan temida “corrupción urbanística” imperante en parte de nuestro país, “el sacrifico del interés público y general en beneficio del interés particular y especulativo”.
Izquierda Unida dice que precisamente “Valcárcel no acude a la inauguración de la ampliación del edificio del Ayuntamiento por temor a que le estalle en las mnos la trama urbanística de su partido en Totana”.
Pese a haber sido anunciado con antelación, el presidente de la Comunidad Autónoma no ha acudido a esa inauguración. Al respecto, Izquierda Unida de Totana ha emitido un comunicado donde expresa su extrañeza por este desplante de última hora por parte de la máxima autoridad regional.
Pedro Martínez interpreta que “la negativa de Valcárcel a acudir a nuestra población, pese a haber comprometido su asistencia a la inauguración del Ayuntamiento, es una demostración del vértigo que debe producir en el Partido Popular de la Región el andamiaje de especulación urbanística montada por el ayuntamiento de Totana, que ha tenido reflejo en los medios de comunicación regionales y nacionales”.
Izquierda Unida argumenta que “existe la impresión de que algo se les ha ido de las manos con el recientemente aprobado Plan General de Ordenación Urbana de Totana, y hay miedo, mucho miedo, de que lo sucedido con los alcaldes populares de Telde, Andrax o Alhaurín pueda ocurrir en cualquier momento en nuestra población”.
El pasado martes se aprobó provisionalmente el PGOU de Totana, que arroja cifras que pueden resultar de escándalo: Se aprueban 60 convenios urbanísticos, que van a producir unas plusvalías superiores a 1.500 millones de euros, lo cual supone una recalificación de terrenos rústicos en urbanos de más de 16 millones de metros cuadrados, con 40.000 nuevas viviendas, con varios campos de golf incluidos. Plan contestado por la falta de agua por la Confederación Hidrográfica del Segura, reconvirtiendo en urbanizables zonas de regadío tradicional donde el Estado y la Comunidad autónoma han invertido miles de millones en modernización de riegos, lo cual elimina casi el 40% de la zona regable en Totana.
Dice esta coalición electoral que “el Ayuntamiento ha pasado por encima de las más de 4.000 alegaciones que los vecinos de Totana han presentado al contenido de este Plan General, lo cual lo convierte en la norma urbanística más contestada y más impopular de toda la democracia totanera”. Plan que ha producido fuertes enfrentamientos internos en el seno del propio Grupo Municipal Popular, que se ha saldado con la dimisión del anterior concejal de urbanismo, así como en fuertes discrepancias entre el actual edil de Urbanismo, Juan Carrión y el propio candidato a la alcaldía por el PP, Martínez Andreo.
Según Izquierda Unida, con el Plan General el Ayuntamiento centra en los convenios urbanísticos la gestión urbanística de Totana. Es la política de “hacer caja” por encima de todo, y que mete al ayuntamiento de Totana de lleno en los entresijos de la corrupción urbanística, el dinero opaco y los maletines.
Estos convenios urbanísticos pueden representar una hipoteca económica muy importante para el ayuntamiento de Totana, dado que, de forma irregular, el Grupo Municipal Popular está utilizando el dinero proveniente de dichos convenios para su particular precampaña electoral de galas masivas, invitaciones, comidas y premios. Cuando las leyes obligan a que dichos recursos se inviertan en la dotación de infraestructuras necesarias para dichas promociones urbanísticas.
Izquierda Unida hace un llamamiento a todos los totanero y totaneras para "acabar con el secretismo con que el Partido Popular ha pretendido encarrilar todo este proceso de aprobación del Plan General”.