CARTAGENA.- Los agricultores del Campo de Cartagena, a través de su portavoz,
Manuel Martínez Madrid, declararon este martes sentirse «consternados»
ante la muerte de toneladas de peces y crustáceos durante el sábado pasado en el Mar Menor, pero piden «prudencia» antes de señalar culpables.
Martínez,
que da voz a más de 12.000 agricultores de las comunidades de regantes y
a otros tantos de otras plataformas, calificó de «injusta» la
«persecución» por parte de la Administración, después de que la ministra
Teresa Ribera señalara ayer lunes a la agricultura como principal responsable de la crisis del Mar Menor.
La titular del Ministerio para la Transición Ecológica expresó que «hay prácticas agrarias que tienen poco recorrido», en referencia a la agricultura intensiva, un modelo que calificó de «insostenible».
Según el portavoz de los agricultores, se achacan todos los males «a nuestra manera de trabajar»
y «no creemos que la Administración Central esté capacitada para
hacerlo cuando ellos han paralizado y eliminado sistemáticamente los
planes de desarrollo controlado de la agricultura en el Campo de
Cartagena».
El comunicado de los agricultores defendió que el
sector innova en sus procesos de trabajo desde hace muchos años.
«Somos
conscientes del valor del agua y más del 90% de las explotaciones
utilizan el riego por goteo. Ya hemos limitado la agricultura en algunas zonas para evitar la sobreexplotación
y todos nuestros productos cuentan con unos sellos de calidad que nos
permiten ser proveedores de países como Reino Unido, Alemania, Suiza o
Estados Unidos», puso de manifiesto Martínez, quien destacó que Murcia
«es la región de Europa con mayor porcentaje de superficie de cultivo
ecológico con 80.000 hectáreas, el 22,2% de la superficie total
cultivada».
Un comité de expertos se reunió en las últimas horas, a
instancias de los propios agricultores, para analizar las causas del
episodio de anoxia en el medio que mató a miles de peces, pero todavía
es pronto para conocer qué ha pasado y su alcance real.
Mientras tanto,
consideran «arriesgado e incluso imprudente aventurarse a marcar unas
causas y unos culpables sin saber un diagnóstico real».
«Los
agricultores pedimos que la Fiscalía investigue a fondo. Que se haga un
análisis a los peces, una necrosia. La catástrofe se ha producido en un sitio muy puntual, donde no hay agricultura, lo cual es cuanto menos sospechoso», apuntó Martínez.
Los agricultores aprovecharon el comunicado para expresar su dolor ante el suceso y destacar que «los primeros afectados por todo esto somos nosotros y nuestras familias. Es una catástrofe medioambiental de magnitudes que no podemos calcular».
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