martes, 17 de abril de 2018

El Rectorado de la UPCT recibe duras críticas del Claustro


CARTAGENA.- En las últimas horas ha tenido lugar una sesión extraordinaria del Claustro de la UPCT que ha sido posible gracias a la petición efectuada por un centenar de miembros de este órgano y que de acuerdo con su reglamento de régimen interno ha obligado a convocar una sesión en la que poder debatir el proceso de restructuración departamental impulsado por el Rectorado. 

Ha sido necesario recurrir a esta petición a causa de la negativa del Rectorado a elevar esta reforma a este órgano para poder someterlo a debate en el mismo como corresponde a un tema de esta enorme trascendencia, sin atender a las numerosas protestas que ha provocado este proceso en la comunidad universitaria ya que carece de argumentos que lo justifiquen, según fuentes de la Escuela de Ingeniería Industrial.
La reestructuración de departamentos que pretendía imponer el Rectorado consiste en suprimir los 25 departamentos actuales para dejarlos limitados a un número máximo de 15 departamentos, lo cual supondría una reducción del 40% de los departamentos que agrupan al profesorado de las diferentes áreas de conocimiento y se encargan de la impartición de la docencia en los diferentes centros y titulaciones académicas de la Universidad Politécnica de Cartagena.
El Claustro de la UPCT consiste en el órgano que proporciona una mayor representatividad de los miembros de la comunidad universitaria, con un total de 241 miembros, entre los cuales se cuenta con 3 miembros natos que son el Rector, la Secretaria General y la Gerente, 135 representantes de los profesores titulares, 27 representantes de los profesores contratados, 54 representantes de los estudiantes y 22 representantes del personal de administración y servicios. 
Este órgano se encarga de la aprobación de los temas de especial trascendencia dentro de la UPCT, como son entre otros la ratificación de las modificaciones en el Reglamento de Régimen Interno del Consejo de Gobierno, la convocatoria de elecciones a Defensor Universitario, la convocatoria de elecciones a representantes del Claustro en el Consejo de Gobierno, en la Comisión de Asesoramiento y Ayuda al Defensor Universitario, en la Comisión de Calidad y en la Comisión de Normativa, la elección de los miembros de la Junta Electoral Central, la presentación de la memoria de cada curso académico y del proyecto de actuaciones para el curso siguiente, la aprobación del nombramiento profesores honoris causa por la Universidad Politécnica de Cartagena, etc.
“En cambio, el órgano a través del cual se pretendía tramitar únicamente este tema desde el Rectorado es el Consejo de Gobierno de la UPCT, lo cual no sorprende si se tiene en cuenta que de los 56 miembros que forman parte del Consejo de Gobierno el Rectorado tiene como mínimo el control de un total de 24 votos, entre los votos que corresponden a los miembros del Equipo Rectoral y a los cargos designados directamente por el Rector”, explica el Director de la Escuela de Industriales, Patricio Franco.
Desde que se produjo el anuncio de esta medida, el Rectorado ha recibido duras críticas en el seno de la comunidad universitaria, y esto ha dado lugar al pronunciamiento en contra del 60% de los centros que forman parte de la Universidad Politécnica de Cartagena y del 80% del profesorado, personal de administración y servicios y representantes de alumnos a través de los Consejos de Departamento de los distintos departamentos que se encargan de la docencia. 
Sin embargo, el Rectorado pretendía llevar a cabo este proceso a pesar de esta postura en contra que les había manifestado la comunidad universitaria, que se quejaba especialmente de la falta de argumentos justificativos que acreditaran la conveniencia de esta medida y de no permitirles analizar previamente en profundidad esta reforma en lugar de limitarse a imponerlo desde el Consejo de Gobierno.
Al comienzo de esta sesión el Rector ha efectuado una presentación acerca de diversos temas sobre los nuevos servicios y oficinas que se han creado durante los últimos años dentro de la estructura de la universidad, sobre el descenso en las cifras de estudiantes matriculados en un cómputo total sin distinguir entre centros y otros diversos temas que en su mayor parte no guardaban ninguna relación con el tema que se debía tratar en esta sesión.
Además el Rector ha presentado unas gráficas relativas al proceso de reforma que defiende la postura oficial, e incluso por primera vez ha reconocido que la estructura de vicerrectorados de la UPCT está claramente sobredimensionada, cuando en las sesiones del Consejo de Gobierno en las cuales se debatió este tema había sido negado sistemáticamente por parte del Equipo Rectoral. 
Y también ha admitido que efectivamente el número de coordinadores que dependen de estos vicerrectorados es excesivo si se compara con el resto de universidades españolas. 
"A este respecto, sorprende que el Rector haya insistido en que en su opinión para la reducción del número de vicerrectores y coordinadores que dependen de estos últimos se requiere un estudio sosegado y su aprobación por consenso en el Claustro, cuando al mismo mantiene que la reducción del número de departamentos que pretende sí se debe llevar a cabo sin necesidad de consulta al Claustro", dice Franco.
El Rector de la Universidad Politécnica de Cartagena, Alejandro Díaz Morcillo, ha indicado “no me parece bien que la reestructuración de departamentos se pueda negar en el Claustro porque eso sería afear una decisión que se ha aprobado en el Consejo de Gobierno”, pero ha olvidado mencionar que el Claustro es un órgano con mayor legitimidad que el Consejo de Gobierno para la discusión de los temas de especial relevancia de esta universidad dada su mayor representatividad y que de hecho es una reivindicación histórica que se traigan a este órgano aquellos temas que resultan de especial interés para la comunidad universitaria.
Una vez finalizada su intervención, el Rector ha comentado que a continuación iba a ceder el turno de palabra a dos profesores que, a pesar de no ser miembros del Claustro, le habían solicitado asistir a esta sesión y poder expresar su opinión al respecto con voz pero sin voto. Estos profesores que han sido invitados expresamente a este Claustro son Juan Ángel Pastor, Director de la Escuela de Telecomunicación, y Antonio Viedma, Delegado de la UPCT en el CUD, y ambos han defendido en su intervención la tesis oficial del Equipo Rectoral.
Juan Ángel Pastor indicó que “los departamentos no hacen prácticamente ninguna función, y toda la responsabilidad la tienen los centros y los vicerrectorados”. Algunos de los asistentes le reprocharon que consideraban una absoluta falta de respeto que hablase así de los departamentos porque en realidad son los que se encargan de dar clase a nuestros estudiantes y por tanto los verdaderos responsables de su formación académica.
Muchos asistentes han coincidido en agradecer que por fin se pudiera debatir un tema de tanta importancia para esta universidad, y que se haya podido hablar por primera vez desde un punto de vista más amplio sobre el exceso de tamaño de otras distintas estructuras como son los vicerrectorados y los coordinadores que dependen de ellos, en lugar de limitar este proceso a la reducción del número de departamentos.
Uno de los asistentes ha recriminado al Rector que haya estado en todo momento a la defensiva durante la celebración de este Claustro, y que parecía que había entendido esta sesión como si se tratara de una moción de confianza, dedicando un tiempo innecesario a realizar un extenso balance acerca de las últimas acciones que se han llevado a cabo por parte del Equipo Rectoral en esta universidad, aunque no tuvieran ninguna elación con el tema para el cual ha sido convocado esta sesión.
Emilio Trigueros, ex-Vicerrector de Planificación Económica y posteriormente nombrado como Delegado del Rector para la reestructuración de departamentos, José Luis Muñoz, Vicerrector de Ordenación Académica y Calidad, y Arantxa Aznar, Directora de la Escuela de Agrónomos, han comentado que en su opinión esta reforma es necesaria y que el problema se debe a la falta de colaboración de los directores de departamento que formaban parte del Grupo de Trabajo que se creó para trabajar en la definición de este proceso, que de hecho después de las primeras sesiones comunicaron que no iban a asistir más dado que no se respetaban su opinión. 
Sin embargo otros de los asistentes han explicado que eso no es cierto, sino que por el contrario la razón por la que se produjo el abandono de esta comisión se debe a que comprobaron que en ningún momento se organizó por parte del Delegado del Rector para la reestructuración de departamentos como un grupo de trabajo sino como unas reuniones que se limitaban a trasladar la tesis rectoral y ni siquiera tomar nota de los numerosos argumentos y sugerencias que hacían acerca de las propuestas.
Antonio García Martín, que es el máximo responsable de las metodologías que han sido desarrolladas durante los últimos años en la UPCT para la mejora de la calidad docente, ha reprochado al Rector las cifras que ha mostrado sobre la calidad de la docencia para intentar rebatir la relación entre el tamaño de los departamentos y el rendimiento académico de los estudiantes, y ha argumentado que en los departamentos pequeños no cabe duda de que es más probable que se pueda brindar una mejor formación a nuestros estudiantes.
Algunos otros asistentes han defendido la conveniencia de llevar a cabo la modificación de la estructura de nuestra universidad si resulta oportuno para mejorar, si bien la práctica totalidad de los asistentes han remarcado en sus intervenciones que en su caso lo que debería abordarse es una reforma global de toda la universidad.
Más adelante, en este Claustro se ha vivido un bochornoso espectáculo que ha consistido en que el Rector se ha dedicado a consumir el tiempo con varias intervenciones que había organizado a favor de la postura oficial, para de este modo acortar el tiempo disponible para que los miembros de este órgano puedan ejercer su derecho de palabra para expresar su opinión acerca de este proceso. Esto ha provocado que el Rectorado haya recibido muy duras críticas por los miembros del Claustro, que han tachado su postura de falta de respeto al Claustro, según fuentes de la Escuela de Industriales.
En efecto esta sesión del Claustro ha comenzado con retraso respecto de la hora prevista, que era las 9:30 en segunda convocatoria, el Rector ha llevado a cabo un discurso muy largo incluyendo aspectos generales sin relación con el tema a tratar, a continuación han intervenido dos profesores que a pesar de no ser miembros del Claustro han sido invitados por el Rector no sólo a asistir sino a decir unas palabras desde el atril y posteriormente han comenzado las intervenciones de los asistentes que han ido pidiendo la palabra, hasta que de repente sobre las 12:30 el Rector ha explicado que había acordado con la Mesa del Claustro que daban de margen solamente hasta las 13:00 para las intervenciones de los claustrales, para según ha explicado poder terminar como mucho a las 14:00 para poder ir a comer.
Esto ha provocado duras críticas al Rector por su forma de actuar durante esta sesión, ya que si la Mesa del Claustro había adoptado ese acuerdo con anterioridad al inicio de la sesión debería haberlo aclarado al comienzo, para que de ese modo los miembros del Claustro hubieran podido protestar por el hecho de que la mayor parte del tiempo ha sido monopolizado por el Rector y los dos profesores que han venido invitados por el Rector para defender la tesis oficial. 
Esto ha sido entendido como una falta de a este órgano, ya que de ese modo han dejado sin turno de palabra a muchos claustrales que querían poder expresar su opinión sobre estas reformas o en el mejor de los casos algunos de ellos tan sólo han podido efectuar una apresurada intervención en la que no han podido explicar sus argumentos ni su postura.
A modo de ejemplo, el Rector tan sólo ha concedido cuatro minutos al Director de la Escuela de Industriales, a pesar de que como director de esta escuela representa a casi la mitad de la Universidad Politécnica de Cartagena. 
Patricio Franco ha reprochado esa actitud del Rector y ha reconocido “me produce vergüenza formar parte de una universidad como ésta en la que se falta al respeto de esta manera a los miembros del órgano de mayor representatividad como es el Claustro. Esto demuestra un claro desprecio a lo que siempre he creído que debía ser la universidad, y no me extraña que por culpa de estas formas de actuar las universidad en estos momentos estemos siendo criticadas”.
Sorprende que el Rector sí haya concedido todo el tiempo que han necesitado al Director de la Escuela de Telecomunicación y el Delegado de la UPCT en el CUD, a pesar de que representan a un número muy inferior de estudiantes y sobre todo a pesar de carecer de la condición de claustrales, y en cambio no se haya permitido expresar al Director de la Escuela de Industriales sus argumentos acerca de esta reforma, al igual que ha sucedido con los demás claustrales a los que se les ha negado la palabra o se les ha limitado el tiempo para su intervención.
Patricio Franco ha expresado que con ese escaso tiempo no podía más que hacer una breve enumeración de los puntos que pensaba desarrollar, sin poder expresar sus razonamientos en contra de este proceso. 
“Con respecto a esta reforma que pretende el Rectorado de la UPCT, me gustaría decir de la forma más resumida posible, ya que el Rector no me brinda el tiempo suficiente para poder explicarme, que en primer lugar se trata de una medida que va claramente en contra de nuestros estudiantes, porque supondrá una peor dedicación por parte del profesorado; en segundo lugar tiene mucho que ver con el modelo de universidad que queremos para la Universidad Politécnica de Cartagena, y a este respecto por mi parte preferiría un modelo de universidad participativa en lugar de un modelo de universidad vertical donde las medidas se imponen desde arriba y los demás no tenemos más que acatar esas órdenes; y en tercer lugar querría resaltar que la restructuración de departamentos que pretende imponer el Rectorado consiste en el tema de mayor trascendencia que se ha abordado en nuestra universidad desde su creación en el año 1998, y que por tanto merecería que se efectuara una consulta a la totalidad de la comunidad universitaria y que se pudiera analizar en profundidad en lugar de hacerlo de manera precipitada".
“En cuarto lugar esta reforma no está justificada como una reestructuración de departamentos de manera indiscriminada, sino que se debería haber centrado en su caso en determinados casos concretos en lugar de poner patas arriba una estructura que funciona; en quinto lugar la principal crítica que tenemos en el seno de nuestra universidad es acerca de que este proceso se ha hecho mal desde el principio por parte del Rectorado, sin permitir opinar a este respecto o sin atender como deberían los razonamientos en contra que hemos planteado muchos de los miembros de esta universidad porque no les interesaba escucharnos sino imponer esta medida utilizando su posición de ventaja en el Consejo de Gobierno; en sexto lugar está claro que en caso de llevarse a cabo algún tipo de reestructuración en nuestra universidad se debería hacer de manera global, empezando por adelgazar el excesivo número de vicerrectorados y de coordinadores que dependen de los diferentes vicerrectorados, porque en relación a esas cifras destacamos como la peor universidad en términos de exceso de vicerrectores por alumnos matriculados, teniendo en cuenta los cálculos que hizo uno de los profesores de nuestra escuela; en séptimo lugar considero que hay otras cuestiones mucho más importantes a las que deberíamos dedicar nuestro esfuerzo, porque sí que afectan gravemente a nuestros estudiantes matriculados y a la captación de futuros estudiantes, como es la pésima red de transportes de que disponemos para poder llegar a Cartagena, la falta de zonas de aparcamientos suficientes y el pésimo estado de nuestro campus entre otras muchas cosas; y en último lugar considero que estaría bien que de una vez por todas comenzásemos a hacer las cosas de un modo mejor”, concluye el Director de la Escuela de Industriales.
Los profesores Andrés Perales, Rafael Vilar y Jose Patricio Castro, también destacan la falta de respeto que ha supuesto la forma de actuar por parte del Rector en esta sesión del Claustro, y consideran que éste no es el modo más adecuado de proceder en una universidad. Por otra parte insisten en que no están de acuerdo con esta medida limitada exclusivamente a los departamentos, sino con la realización de una reforma que afecte a toda la universidad comenzando por la reducción de vicerrectorados.
Gregorio Munuera, Director de la Escuela de Navales, y Juan José Hernández Ortega, subdirector de la escuela, explican que en el proceso pretendido por el Rectorado no se ha tenido en cuentan las características específicas de la Unidad Pre-departamental de Construcción Naval, la cual si se produjera la fusión de departamentos que pretende el Rectorado en lugar de fomentarlo se vería diluido en otro departamento más grande.
Además de los asistentes que han sido indicados, se produjo las intervenciones de otros claustrales. El orden del día de esta sesión ha incluido dos puntos que corresponden literalmente a lo solicitado por un centenar de miembros del Claustro. 
El primer punto a tratar en el orden del día ha consistido en un debate sobre el proceso de reestructuración departamental, en el cual se pudiera discutir en profundidad los argumentos a favor y en contra de esta medida. 
Y el segundo punto ha estado dedicado al pronunciamiento del Claustro mediante votación acerca de dos preguntas como son si se considera que la reforma departamental planteada debería formar parte de un plan global que abarque la estructura completa de la universidad y si se considera que debe paralizarse el proceso de reestructuración que pretende el Rectorado.
Ha ejercido su voto un total de 155 claustrales del total de 241 miembros del Claustro de la UPCT, sin registrarse ningún voto nulo. La primera pregunta ha recibido 142 votos a favor, 22 votos en contra y 1 voto en blanco, lo cual supone un 92% de los votos emitidos; mientras que para la segunda pregunta han sido emitidos un total de 47 votos a favor, 105 en contra y 3 en blanco, lo cual representa un 68% del número total de votos. 
Estos datos han sido anunciados tras el recuento por la Secretaria General de la UPCT, María del Carmen Pastor.
De este modo, se ha recibido un 92% de los votos a favor del sí a la primera pregunta y un total de 68% de los votos que corresponden al no a la segunda pregunta. 
Por tanto, el pronunciamiento del Claustro es contrario al proceso pretendido por el Rectorado en relación con una reforma parcial limitada exclusivamente a la restructuración y fusión de los departamentos de la UPCT, y en su lugar ha aprobado que este proceso pueda continuar pero únicamente como una reforma global que abarque la totalidad de la estructura de esta universidad, lo cual incluye no sólo los departamentos sino también los vicerrectorados, las coordinaciones que derivan de los mismos y las diferentes unidades, servicios y oficinas que existen en la Universidad Politécnica Cartagena.
El Director de la Escuela de Industriales destaca que “en respuesta a la primera pregunta el Claustro se ha pronunciado claramente a favor de que la reestructuración sea abordada como una reforma global que afecte a la estructura completa de la universidad, con un 92% de los votos emitidos acerca de esta pregunta, y en relación con la segunda pregunta ha expresado que no se opone a llevar a cabo un proceso de reestructuración siempre que se trate de una reforma de carácter global, lo cual ha sido apoyado con un 67% de los votos. 
"Precisamente esto es lo que desde el principio ha sido defendido por los miembros de la comunidad universitaria que nos hemos opuesto a la medida que pretendía imponer el Rectorado que consistía en centrar esta reforma únicamente en los departamentos como el eslabón más débil, y en este sentido cabe destacar que el propio Rector ha reconocido por primera vez en esta sesión que la UPCT cuenta con un número excesivo de vicerrectorados y coordinadores que dependen de los mismos si se compara con lo que sucede en el resto de universidades de toda España y que por su parte también considera necesaria la reducción del número de vicerrectorados”, sostiene Franco.

No hay comentarios: