Banco Sabadell y BBVA empujan el tránsito de la banca desde la euforia a la depresión

MADRID.- “Estamos en un mo­mento sen­ci­lla­mente de­ci­sivo para la banca en bolsa. En lí­neas ge­ne­ra­les, no han gus­tado los re­sul­tados del ejer­cicio 2017, y el es­pe­rado plan es­tra­té­gico de Banco Sabadell ha de­jado he­lados a los in­ver­so­res. De mo­mento, y ya ve­remos hasta cuando, al­gunos bancos se han que­dado sin ca­ta­li­za­dores en bolsa. Hemos pa­sado de la eu­foria a la de­pre­sión en cues­tión de cuatro se­ma­nas. Todo va muy rá­pi­do”, señalan en una de las prin­ci­pales firmas de aná­lisis es­paño­las a Capital Madrid. 

En febrero, los bancos españoles han marcado las diferencias en Europa… pero en sentido negativo. Han caído más de un 6% de media y han devuelto cerca de dos terceras partes de plusvalías acumuladas en el primer mes de año. Nadie lo ha hecho peor entre los bancos europeos, hasta el punto de que entre las 10 peores entidades de la zona euro en 2018 cuatro son españolas. La peor parte es para BBVA, que no consigue levantar el vuelo tras un mal comienzo de año.

El punto de inflexión fueron los resultados del año pasado. Desde entonces, el banco que preside Francisco González ha perdido alrededor de un 10% de su capitalización bursátil. Los resultados, condicionados por la depreciación de la participación del banco en Telefónica, marcaron el comienzo de una corrección que parece no tener fin. Tras perder un nivel muy importante como el de los 7 euros por acción, BBVA apenas ha dado señales de vida. La debilidad es la constante en Bolsa.

“No había mucho que celebrar en los resultados de BBVA, donde persisten las mismas dudas que cuando empezó el año. Hay preocupación por los mercados internacionales de la entidad. En México, donde se celebran elecciones el 1 de julio, BBVA se juega cerca del 30% del margen bruto. Y Turquía es un foco de preocupación, porque la debilidad de la lira turca resta atractivo al negocio de BBVA en el país, el cuarto mercado del banco español”, señalan fuentes bursátiles.

De momento, los inversores mantienen en ‘stand by’ a BBVA (es el peor banco del Ibex en 2018 con una caída del 4%), en un ejercicio en el que Bankia (pese a la buena recpeción de la presentación del plan estratégico hasta 2020) también está en números rojos en el parqué. También es el caso de Banco Sabadell, que ha sido el peor banco español en un mes de febrero en el que se ha dejado atrás alrededor del 10% de su valor. Había subido más de un 15% en enero.

En revisión

Los analistas financieros han puesto bajo revisión al banco catalán, mientras que los inversores han decidido recoger las ganancias acumuladas en enero. Todo después de la presentación de las grandes líneas de actuación del banco hasta el año 2020. Un paquete de previsiones que va de desde sumar un beneficio atribuido en torno a 1.400 millones de euros en tres años hasta alcanzar un retorno sobre capital tangible (ROTE) del 13% cuando finalice el plan estratégico.

La mayoría de los expertos califica el plan como “agresivo” (Sabadell contempla superar a Bankia como cuarto banco español por beneficios) y considera que habrá que analizar una variable clave como la evolución de los tipos de interés para medir su potencial de cumplimiento. “Sabadell contempla un escenario de subida del euribormás agresivo que Bankia para los próximos tres años. Está por ver que se cumpla, porque sus expectativas son altas”, señalan fuentes bursátiles.

Los espectaculares retrocesos de BBVA y Sabadell en febrero contrastan con las caídas sensiblemente inferiores del resto de los grandes bancos cotizados españoles, aunque Santander y CaixaBank también han sufrido descensos superiores al 5%. En pleno proceso de reevaluación por parte de los analistas, los bancos españoles sufren en bolsa. De momento, el arranque del mes de marzo no ha servido para mitigar la sensación de debilidad de las últimas cuatro semanas.