jueves, 10 de marzo de 2022

Ucrania: Una conversación con el historiador César Vidal


https://youtu.be/16XMCvm5mro

El arquitecto que investiga los oscuros centros de datos: "Nos controlan y no sabemos dónde están"


BERLÍN.- ¿Pero cuáles son los grandes edificios en las ciudades del siglo XXI que reflejan el poder tecnológico? “En realidad, el poder está en la nube, pero la nube no es intabgible, es un edificio, muchos edificios”, explica Niklas Maak. Este escritor y arquitecto alemán que enseña en la Universidad de Harvard y de Frankfurt no habla de internet como un conjunto de edificios metafóricos, sino de edificios muy reales que ha estudiado a fondo y que, tal y como están planteados actualmente, considera una amenaza a la democracia, ha dicho a El Confidencial. 

“Los centros de datos son los edificios más importantes del siglo XXI en términos de poder, pero están hechos para pasar inadvertidos, son gigantes en horizontal escondidos en medio de desiertos o zonas rurales para ser invisibles”, explica Maak. “Ha habido mucho interés por parte de las empresas tecnológicas en que estos centros de poder físico sean invisibles”, añade mientras paseamos por el Colegio de Arquitectos de Madrid donde realizamos la entrevista. “La explicación más aburrida es que están tan apartados por razones de seguridad”. Según Maak, hay también otras razones menos confesables.

En 2019, había más de tres millones de centros de datos en EEUU y algunos de los más grandes tenían más de 25 km2 de superficie. ¡25 kilómetros! “Estos edificios gigantes que sirven de centros de datos son una nueva tipología de edificios. Si los pusiéramos en vertical serían más grandes que cualquier rascacielos”, añade. ¿Dónde están esos edificios? ¿Cómo son? ¿Por qué sabemos tan poco o nada de estos edificios que acumulan toda la información que vertimos en la red? 

Arquitectónicamente, los centros masivos de datos o ‘cibergranjas’, como las llama Maak, manejan nuestra vida diaria pero se puso a investigarlas al constatar que no están jugando un papel relevante en el debate urbano, en el artístico ni en la arquitectura de las ciudades. Las grandes empresas e instituciones tradicionalmente han tenido edificios simbólicos, pero los centros de datos suelen tratar de pasar inadvertidos, lo mismo andan perdidos en el desierto de Nevada que en Albacete.

“¿Por qué apenas sabemos nada de ellos si en realidad son fortalezas tecnológicas, el equivalente actual a los castillos en la Edad Media?”, se pregunta este arquitecto y ensayista, que además de haber sido editor de arte y arquitectura en el diario ‘Frankfurter Allgemeine Zeitung’, es autor de la novela ‘Technophoria’ (Carl Hanser, 2020), una distopía tragicómica convertida en ‘bestseller’ en Alemania y cuya adaptación a serie de televisión se está rodando y se estrenará el año que viene. 

En su último ensayo, ‘Server Manifesto – Data center Architecture and the future of democracy’ (Hatje Cantz Verlag, 2022), Maak analiza por qué estos centros de datos tan enormes y decisivos son a la vez son invisibles a la mayoría: “Son el centro de poder de nuestro tiempo, el poder tecnológico, pero están diseñados para ser invisibles en el debate público.”

Según sus investigaciones, no es casualidad: “Los datos ocupan un espacio físico, por más que la retórica habitual de estas empresas hablen de una ‘nube’ con retórica celestial, como si los datos estuvieran a salvo en el cielo flotando en el espacio. En realidad, cuando estás viendo una película o escuchando música en streaming, algo está pasando en estos centros de datos. A la nube la llamamos nube porque la invisibilidad es un truco del poder tecnológico para que no nos preguntemos qué hacen con nuestros datos”. 

En ‘Server Manifesto’ plantea problemas muy tangibles que tiene el almacenamiento de datos. Como el incendio que en marzo de 2021 destruyó en Estrasburgo un edificio de OHV, uno de los centros de datos más importantes de Europa. ¿Somos conscientes de lo dependiente que es el mundo digital del mundo físico? “Muchos de aquellos datos se esfumaron físicamente esa noche. Se perdieron, porque la idea de la nube puede ser muy tranquilizadora pero no es real”, insiste. Hubo páginas web que desaparecieron, algunas de organismos públicos franceses. “Lo que había aquella noche en el incendio que destruyó ese centro de datos era una nube, pero una nube de humo, como una metáfora del tránsito de la era de la combustión a las pantallas digitales, en estructuras prácticamente invisibles que controlan nuestras vidas pero no sabemos dónde están”.  

PREGUNTA. ¿Qué consecuencias tiene esa invisibilidad arquitectónica? ¿No será simplemente que los ‘data centers’ están apartados porque es más barato situarlos lejos de las ciudades y tienen estas formas grises a veces incluso miméticas con el entorno, no porque se escondan, sino porque es más práctico?

RESPUESTA. En gran medida, la invisibilidad sirve para que no nos hagamos tantas preguntas sobre nuestros datos. Estos edificios son cada vez más grandes y más anónimos. Por primera vez, el centro del poder (y los datos son ahora el centro del poder) quieren ser anónimos y no ser vistos. Esto tiene implicaciones sociales y políticas, pero también tiene implicaciones ecológicas, porque internet es muy contaminante. Estar todo el rato conectado a la red, viendo cosas en streaming, almacenando en una pulsera el número de pasos que das, o minando bitcoins es muy contaminante, porque todos esos datos se almacenan y necesitan enormes sistemas de refrigeración. Pero mientras parezca que internet es algo etéreo que solo pasa en la pantalla no nos preocupará la huella de carbono que dejan estas empresas. La nube contamina, pero lo llaman nube para que parezca algo limpio y etéreo cuando en realidad si vemos lo que contamina sería una nube de chimeneas muy grandes que devoran energía. Contamina más internet que el conjunto del tráfico aéreo. Así que debemos fijarnos en los centros de datos también por el cambio climático. 

P. ¿Dar un ‘like’ contamina?

R. Si internet fuera un país, estaría justo por detrás de EEUU y China en cuanto a consumo energético y emisiones de efecto invernadero. Las granjas de datos gigantes representan el 2% del efecto invernadero. Algunos países como Singapur ya quieren prohibir la construcción de centros de datos en su territorio y hay empresas tecnológicas que están tratando de operar con energía verde, para hacer frente a estas críticas. Apple está construyendo parques solares y Microsoft quiere dejar que sus servidores funcionan de forma independiente en el fondo del océano, sin intervención humana directa. Podemos imaginar esa inaccesibilidad casi como algo romántico: allá abajo, en las profundidades azules, estarán nuestros mensajes y películas, fotos familiares, mensajes… Pero lo cierto es que allí, bajo el brillo de las olas, tendremos una parte de nuestro cerebro subcontratado. Estamos dejando que una parte de nuestra toma de decisiones se vaya volviendo invisible e ingobernable, en manos de empresas privadas que no nos dicen qué hacen con nuestros datos. Es un problema para la libertad individual y también para la democracia. 

P. ¿Por qué cree que el hecho de que los servidores no estén presentes de forma visible en la arquitectura de las ciudades tiene consecuencias en nuestra democracia? ¿Por qué es un peligro?

R. Antes al llegar a una ciudad sabías dónde estaba el centro del poder de ese lugar, ya fuera el Ayuntamiento, el Palacio, o los grandes rascacielos como en Manhattan. Pero la revolución digital está cambiándolo todo de una manera cada vez menos transparente. Las granjas de servidores son instalaciones en las que si pasas cerca conduciendo no se sabe lo que hay dentro. Y dentro está toda la información de lo que nos gusta, lo que no nos gusta, lo que compramos y hasta los datos del agua, el transporte, de las infraestructuras estratégicas de las ciudades… El fenómeno que más forma está dando a nuestra civilización se ha vuelto invisible. ¿No tendríamos los ciudadanos que saber dónde están nuestros datos y a qué organización pertenecen? Amazon, por ejemplo, gana más dinero almacenando nuestros datos que enviando paquetes. Su verdadero gran negocio es el almacenaje de datos. Los recopilan y procesan como propiedad privada para predecir la conducta de los ciudadanos. La soberanía política, tecnológica y económica está en riesgo si no replanteamos quién, cómo y para qué almacena todos nuestros datos.

P. ¿Cómo se puede recuperar esa soberanía?

R. Recolectar datos es algo grande, puede ser muy bueno y muy útil. No estoy en contra de los móviles y la tecnología, todo lo contrario. Pero necesitamos entender cómo funciona. Necesitamos nuevas leyes que regulen el almacenaje de los algoritmos de predicción del comportamiento y más educación para que la gente entienda cómo hacer un buen uso de sus datos. La falta de preocupación que todos compartimos al darle a ‘aceptar’ todas las condiciones de uso sin saber dónde van esos datos ni qué beneficio generan es el primer éxito de la manipulación de estas compañías que prometiendo la libertad socavan la autodeterminación. Estos datos que se dedican a predecir el comportamiento humano no deberían estar en manos de empresas que pueden hacer con esos datos lo que quieran. 

P. ¿Las ‘smart cities’ no son entonces tan ‘smart’ como dicen?

R. Deberíamos estar preocupados. En Dresde, Volkswagen está cooperando para la implantación de coches eléctricos en la ciudad, pero la pregunta debería ser si la ciudad en el futuro necesita realmente más coches o si más bien hay que repensar el modelo de movilidad en formas menos contaminantes y más eficientes que necesitar una mole de dos toneladas para transportar una o dos personas. Delegar en las empresas el diseño del futuro de las ciudades no es lo innovador, porque nos van a vender aquello que ya saben hacer, que no es necesariamente lo que más falta hace en una ciudad ni lo que las nuevas tecnologías permiten desarrollar. No tenemos por qué definir el futuro con las estructuras heredadas del pasado. Los algoritmos pueden ayudarnos mucho, pero hay que repensar qué uso les queremos dar. Las ‘smart cities’ tienen que replantearse qué es lo que realmente les hace ‘smart’.

P. ¿Necesitamos también cambiar el marco legislativo?

R. Necesitamos leyes que protejan a los ciudadanos del uso que se da a esos datos. ¿Cómo se establece la propiedad de esos datos y el uso que se hace de ellos? La mayoría de los políticos no entienden desde el punto de vista técnico qué pasa con estos datos y no están capacitados por tanto para legislar bien sobre ello. Pero esto compete no solo a grandes instituciones, también a pequeños ayuntamientos que están desarrollándose como ‘smart cities’. ¿No se están preguntando esos alcaldes qué pasa si los datos de movilidad de todos sus ciudadanos o de consumo de agua o electricidad pasan a estar en manos de una empresa privada? Estamos dejando que el futuro quede en manos de las empresas privadas, pero necesitamos soberanía tecnológica. Estamos regalando nuestros datos a las empresas y después pagando por los servicios que nos dan estas empresas tecnológicas con la explotación de nuestros propios datos. Pagamos dos veces. La capacidad de gobierno de las ciudades ya no es posible sin el acceso a los datos, pero los gobiernos están delegando por completo la gestión de esos algoritmos a empresas privadas. 

P. ¿Qué significa su propuesta de que necesitamos espacios públicos en los que experimentar con lo digital? ¿Qué papel puede jugar la arquitectura en estas soluciones?

R. Igual que antes se construían bibliotecas para que la gente pudiera tener acceso a la lectura y a la educación, en la era digital hacen falta edificios que permitan comprender cómo funcionan los datos y qué suponen para la democracia. Si los datos son los tesoros de la era digital, tenemos que reivindicar espacios públicos para experimentar con ellos y reclamar la gobernanza digital para la gente. Las granjas de servidores en sí, como edificio, no son el problema. No es el crimen, es la escena del crimen. Es lo que sucede en su interior lo que debe preocuparnos, porque debería ser más transparente y estar regulado. 

Para eso Maak piensa que los ayuntamientos deberían construir unos centros cívicos que hagan visibles los datos. No habla de este edificio en la teoría ni como una arquitectura simbólica e imaginativa, sino como un centro de la era digital. Con sus alumnos de arquitectura ha trabajado en diferentes modelos de diseño, algunos más utópicos que otros. Niklas Maak propone una especie de Centro Pompidou de los datos. Un lugar público donde la gente en sus ciudades pueda acudir a entender cómo funcionan los algoritmos y experimentar con ellos, con acceso a la información necesaria para saber quién controla la inteligencia artificial, las plataformas y la nube; una granja de servidores que haga visible lo invisible como lugar de activación política. “Un centro cívico para la era digital tendría que ser un lugar donde incluso los políticos podrían entender que la digitalización”, explica Maak.

‘Servermanifiest’ deja más preguntas que respuestas, que de eso es de lo que va el futuro, de hacerse muchas preguntas: ¿Cómo puede la gente tener soberanía si no es dueña de sus propios datos? ¿Es democrático que unos algoritmos en manos privadas traten de predecir continuamente nuestro comportamiento? ¿Qué nuevas formas de democracia participativa son posibles? Su manifiesto sobre el peligro de los algoritmos sale a la venta el mes que viene. En Amazon, por supuesto.

Josep Borrell anuncia una próxima batalla dentro de la Unión Europea contra la libre información


ESTRASBURGO.- Ante la Comisión especial sobre Injerencia Extranjera en todos los Procesos Democráticos en la Unión Europea, incluida la Desinformación, del Parlamento Europeo, el Alto Representante para la Seguridad y la Cooperación de la UE, el español Josep Borrell, ha anunciado una próxima batalla dentro de la Unión Europea contra la libre información.

"La información es el combustible de la democracia", dice Josep Borrell, "y si la información es mala y está contaminada por la mentira, los ciudadanos no pueden tener cabal conocimiento de la realidad y su juicio político estará sesgado", ha dicho sin empacho en una velada amenaza a la prensa alternativa europea en Internet.

Paradójicamente, Borrell ha afirmado: "No soy el ministro de la verdad" y "La información debe ser un bien protegido".

El jefe de la diplomacia europea ha sentenciado: "La democracia se alimenta con la información que recibe la ciudadanía. Hay que proteger la libertad de información y combatir la desinformación. Es una batalla crítica para la democracia".

El informe que está debatiendo y votando el pleno del Parlamento Europeo en Estrasburgo aboga también por un "régimen de sanciones contra la desinformación". 

Ante las amenazas, los eurodiputados instan a la UE "a sensibilizar al público" y a "reforzar sus capacidades y construir un régimen de sanciones contra la desinformación".  

Además, la comisión parlamentaria recomienda: apoyar a verificadores de hechos y a los medios de comunicación pluralistas y ampliamente distribuidos. 

miércoles, 9 de marzo de 2022

Lo que esconde Ucrania: bioterrorismo, lavado de dinero y fin del petrodólar


 

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'El tercer imperio': el posible libro de cabecera de Putin que predice sus pasos


MADRID.- ¿Y si todo esto estuviera escrito? Es decir, ‘escrito’ no como predestinación o diseño divino, sino más bien a modo de aspiración, incitación e incluso manual de uso. Lo llamaremos distopía. Su título es El tercer imperio: la Rusia que estaba destinada a ser, una novela de ciencia ficción publicada por Mijaíl Yuryev en 2006, según recuerda el digital theobjective.com


Diputado de la Duma entre 1996 y 1999, de la que llegó a ser vicepresidente, Yuryev, que falleció hace tres años, se dedicó al periodismo y a la novela tras su paso por la política. El tercer imperio, editado sólo en Rusia, es probablemente la más bizarra de sus creaciones, una crónica más pseudo ensayística que narrativa que describe, desde la óptica de un historiador brasileño del año 2053, los pasos que llevaron a la forja del Tercer Imperio Ruso bajo el impulso de Vladimir II el Restaurador y su sucesor Gabriel en el primer cuarto del siglo XXI.

Llegué a esta historia a través de un artículo en Novaya Gazeta (traducido por Google) del pasado día 3. Cuando regresé para rescatarlo como material para mi propio artículo, me encontré con que la censura rusa había hecho de las suyas: debido a una nueva norma, los periodistas de Novaya Gazeta, referente en la prensa opositora, tuvieron que eliminar contenidos polémicos para eludir los 15 años de cárcel a los que se enfrentan quienes informan contra los intereses del Ejército o el Estado. 

Por suerte, a base de redirecciones entre blogs de toda calaña, logré dar incluso con el texto de El tercer imperio, que sirve de base para el presente reportaje. 

Se ha señalado que es el libro de cabecera de Putin e incluso algunas fuentes reflejan que el ahora sí conocido en Occidente Alexander Dugin (a quien se tiene por el pensador más influyente del presidente ruso) lo puso en las manos de Putin con la siguiente inscripción al dorso: «Esta es la Rusia por la que deberíamos matar y morir».

 El libro saltó tangencialmente a la prensa rusa y anglosajona tras la anexión de Crimea y el estallido en Donbás debido a que los hechos narrados por Yuryev encajaban asombrosamente con lo sucedido en el año 2014. La periodista Mariya Snegova escribió entonces en una web rusa: «Se rumorea que fue leído por muchos miembros de la administración presidencial y por Putin; el libro ofrece una visión única de toda la trayectoria de Rusia en los últimos ocho años».  

A pesar de ser lo que llamaríamos una distopía, una novela de ciencia ficción que augura un mundo poco halagüeño para las libertades occidentales, puede haber inspirado movimientos geopolíticos de la administración presidencial. 

Imaginando el futuro, de alguna manera Yuryev, que algo debía saber sobre lo que hablaba, podría haber influido en la Historia. En ese sentido, El Tercer Imperio, si no como crónica cerrada de lo que está por venir, sí puede leerse como el armazón visionario (trufadísimo de apología y mesianismo ruso-imperial, de guiños y símbolos patriótico-históricos, cual un Silmarilion eslavo) y hasta cierta ‘hoja de ruta’ de lo que viene haciendo Putin en la esfera internacional y lo que podría estar pensando hacer.        

Y ahora sí, vamos con la ‘Historia’

Estructurada en tres partes y narrada desde el año 2054, Álvaro Branco dos Santos, historiador nacido en Sao Paulo, da cuenta inicialmente de los avatares del Primer y Segundo Imperio rusos, correspondientes grosso modo al zarista y el soviético; del periodo de «degradación» de Boris II el Maldito (Yeltsin) y de la etapa reformista de Vladimir II (tampoco hay que ser muy avispado para ver a Putin) que pone la primera piedra para la rehabilitación imperial y la dominación rusa del mundo. 

El narrador recuerda que a Vladimir se le conoció como el Restaurador porque bajo su mandato «Rusia volvió a convertirse en una gran potencia (incluso con elementos de una superpotencia al final del reinado)». 

Aunque contemporizador en un principio, las «agresiones» a los intereses rusos de Estados Unidos en Georgia, Bielorusia y Kirguistán, hacen a Vladimir tomar cartas en el asunto y prepararse para el choque de civilizaciones: «Al darse cuenta de que había llegado el momento, Vladimir II comenzó a actuar: el período de paz aún continuaba, pero se acercaba rápidamente a su fin. 

En primer lugar, era necesario cuidar la economía, de hecho, en ese momento estaba en alza, pero en términos de su estructura sectorial e institucional estaba completamente desprevenida para cualquier choque. La dependencia de las importaciones era inaceptablemente alta, así como de la exportación de materias primas y productos semielaborados, y la mayor parte del potencial de inversión provenía de grandes jugadores cosmopolitas (aunque en su mayoría de origen ruso). 

Además, los enormes fondos para Rusia en ese momento, las reservas de oro y divisas del Banco Central y el fondo de estabilización del gobierno, por un total de más de 300 mil millones de dólares, estaban directamente en la moneda, y principalmente en dólares estadounidenses. Esto significaba que simplemente se pueden congelar en cualquier momento, y con cualquier agravamiento de la situación internacional, América, y bajo su presión, Europa no dejará de hacerlo». 

Las previsiones de Yuryev, no tanto en la política económica y comercial rusa (que venían apuntándose ya en la época en que fue publicado el libro) sino en cuanto a la reacción occidental de ‘cordón sanitario’ son asombrosamente actuales.

A partir de aquí, el libro pierde el apoyo directo en la Historia y comienza la recreación de la misma desde un futuro en que todo ha sido ya realizado. Sin embargo, las coincidencias continúan: Rusia se hace con el control de Turkmenistán, Transnistria, Bielorusia y, ojo, Abjasia y Osetia en Georgia. Vladimir II promulga una nueva Constitución, que amplía territorios y le da poderes autocráticos; los oligarcas pasan de ser vividores del Estado a patrióticos colaboradores en la restauración imperial gracias a la política firme del regente. 

Como resultado de los intentos democráticos en Ucrania, en 2007, según la cronología del libro, estalla un levantamiento en toda la zona este de Ucrania. Regiones como Donetsk, Kharkiv, Zaporozhye, Luhansk, Dnepropetrovsk, Kherson, Odessa, Mykolaiv y Crimea se separan del resto del país y piden amparo a Rusia, que despliega 80.000 unidades en la zona y vence a la OTAN. «La histeria antirrusa en la prensa y en el establecimiento político en Europa y Estados Unidos durante este período alcanzó un nivel completamente surrealista. Se convirtió en un lugar común decir que los rusos son infinitamente más terribles para la humanidad que Genghis Khan y Hitler juntos, por lo que parecía que desayunaban bebés. Los ucranianos, por otro lado, fueron retratados no solo como víctimas, sino casi como el centro de todo lo brillante y valioso en la Tierra». 

Para 2009, el mundo vive una Guerra Fría y Occidente está llamado a declinar bajo el liderazgo cada vez más inoperante de Estados Unidos, empeñado en «gobernar sin poseer» amplias partes del mundo: «Y fue precisamente este enfoque de Occidente, y nada más, lo que predeterminó su muerte, así como por alguna razón en general en la historia cada civilización, habiendo alcanzado la cima de su poder, comienza a cavar su propia tumba con sus acciones». 

Antes de la deflagración definitiva, estalla una Gran Crisis Financiera (2010 según el libro), algo que quizás podía ser previsto para alguien informado como Yuryev en el año 2006 pero no deja de ser sorprendente. Desconozco si hay ediciones posteriores en las que el autor pudiera hacer correcciones al hilo de la actualidad. En cualquier caso, Rusia capea mejor el temporal por las medidas previas aislacionistas de Vladimir II y Occidente se debilita sin remedio.

En 2012, Gabriel Sokolov, «claramente el hombre más grande del siglo XXI», ha llegado al poder. En Estados Unidos, mientras, se ha pasado de Bush II a Hillary Clinton (no, nada se dice de Trump o Biden) y de ésta a Bush III, un hombre «ansioso de poner a Rusia en su lugar». 

Ambas civilizaciones están abocadas a la más titánica de las confrontaciones. El escenario de la conflagración nuclear arranca en la Bahía de Bengala, con India como protegido de Rusia. 

Aquí es ya la nueva potencia imperial la que tiene la mano ganadora: «Pero los tiempos en que los rusos actuaban reactivamente en la política mundial, reaccionando exclusivamente a las acciones de otras personas, han pasado: toda esta situación, de hecho, fue cuidadosamente preparada por los rusos durante mucho tiempo y en realidad fue concebida como nada más que un episodio no muy significativo en el gran juego». 

Así, después de dimes y diretes, el Tercer Imperio lanza varias ojivas nucleares en zonas despobladas de Estados Unidos. Alarmado, Bush III descarga 500 ojivas sobre Rusia (el 12% de su arsenal, ya que no pretende una destrucción universal), todas ellas neutralizadas por un «escudo milagroso ruso» del que, dice el narrador, se desconoce su composición en el año 2054.

Totalmente amordazado por el poderío nuclear, Estados Unidos capitula; Rusia ocupa zonas estratégicas pero acaba replegándose (en un giro hacia la fantasía redentora) garantizando la independencia y la seguridad de Norteamérica y todo el continente, que queda neutralizado para ejercer acciones exteriores y pierde su influencia financiera en el mundo. A partir de entonces, los Estados Unidos serán un apéndice tolerado por Rusia. 

El gran Gabriel realiza entonces un discurso histórico a los americanos: «¿Y quién te hizo juez y maestro sobre el resto del mundo? Sin embargo, esta pregunta es retórica, solo uno da poder sobre el mundo, el Diablo, y solo uno, el Anticristo empuja a globalizar todo el mundo, haciéndolo igual. Es más, si hubieras llevado tus valores a otros pueblos, es decir, el dinero y la democracia, incorporando cada vez más países a la propia América, aunque sea por la fuerza, como lo hizo la Primera Roma, entonces al menos los frutos de lo que le impusiste sería cosechado. Pero no, no querías cargar con ninguna responsabilidad por tus acciones. Entonces, aparentemente, el Señor nos eligió para ponerte coto».

Sojuzgada la gran potencia, sólo queda Europa. Para entonces, Alemania ha decidido acercar posturas, pero Francia, Gran Bretaña, Italia y España (sic), persisten en la OTAN. Viajan a Moscú amedrentados, en busca de una salida y piden a Gabriel un estatuto similar al norteamericano.

 «Pero se esperaban una sorpresa muy desagradable. Gabriel dijo que Rusia no les iba a ofrecer tales condiciones, en cambio les ofreció rendirse en condiciones diferentes. Los países europeos serán anexionados y se convertirán en partes de Rusia, con una pérdida total de soberanía, y las partes no serán autónomas ni autogobernadas, sino las más ordinarias. 

Su población recibirá un permiso de residencia y, después de ocho años de naturalización, en ausencia de reclamos de la Policía, todos se convertirán en ciudadanos rusos». Europa capitula en bloque. La asombrosa generosidad de Rusia con Estados Unidos no tiene cabida con ellos porque «Europa ha intentado destruirnos, conquistarnos o debilitarnos muchas veces en todas las épocas». 

Ya sólo quedan reductos levantiscos en Turquía, Polonia y en una Ucrania «muy polonizada», la del Oeste, destruidas sin remedio por el Tercer Imperio.

En 2054, según la fantasía de Yuryev, Rusia se extiende desde Siberia hasta Groenlandia, con toda Europa en sus manos. América es un conglomerado unitario de naciones bajo la protección de Moscú y apenas queda espacio para China y una confederación africana. La profecía se ha cumplido: Moscú es la Tercera Roma; el mundo es eslavo. 

El estado de Florida no inoculará a los niños sanos


TALLAHASSEE.- El principal funcionario de Salud de Florida dijo esta misma semana que el estado no recomendaría la vacuna contra el Covid para niños sanos, rompiendo con la orientación de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE.UU..

Al anunciar la medida durante la conferencia de prensa convocada por el gobernador de Florida, Ron DeSantis, el cirujano general del estado, el Dr. Joseph Ladapo, citó estudios que mostraron pocas muertes por Covid entre niños sanos y un riesgo elevado entre los niños pequeños que recibieron la vacuna de efectos secundarios como la miocarditis. 

«El Departamento de Salud de Florida va a ser el primer estado en recomendar oficialmente que no se usen las vacunas contra el Covid en niños sanos», confirmó Ladapo.

Así lo informa el digital ‘Tampa Bay’, en un artículo que se puede leer en este enlace.

La semana pasada, un estudio basado en los registros de salud del estado de Nueva York sugirió que la vacuna de Pfizer/BioNTech fue menos efectiva para prevenir infecciones en niños de 5 a 11 años que en niños mayores, pero aun así redujo las hospitalizaciones en un 50 %.

Un informe de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE. UU. publicado en enero encontró que la vacuna fue 91% efectiva para prevenir afecciones raras pero a menudo graves en niños que causan inflamación de órganos semanas después de las infecciones por Covid llamadas síndrome inflamatorio multisistémico en niños de 12 a 18 años. viejos

Los CDC han recomendado enfáticamente que los padres tengan niños mayores de 5 años vacunados, a pesar de una fuerte disminución en las infecciones y hospitalizaciones en todo el país desde un pico invernal en enero y la evidencia de que ha sido menos efectiva contra la variante Ómicron .

DeSantis, un republicano a menudo nombrado como posible candidato presidencial para 2024, a menudo ha discutido con Biden, un demócrata, sobre los mandatos y restricciones contra el Covid.

Dr. Anthony Phan: "La Fundación Gates introdujo un programa de vacunación en Vietnam que aumentó el autismo un 300%"


SAN FRANCISCO.- El Dr. Anthony Phan, médico vietnamita- estadounidense, menciona en el documental Vaxxed sobre el gran incremento del autismo en los niños en Vietnam que coincide con la llegada al país del programa de vacunación de Bill Gates.

Parece que la Fundación de Bill y Melinda Gates se ha dedicado a promover la vacunación masiva en países africanos y asiáticos seguramente con el velado objetivo de provocar la esterilización y el deterioro de la salud de los pueblos, hasta provocar la despoblación. 

"Bill Gates y la Fundación Gates introdujeron el programa de vacunación en Vietnam y Vietnam tuvo más de un 300% de casos de autismo", dice Phan.

Atención a lo que revela Zhao Lijian, ministro de Relaciones Exteriores de China, sobre laboratorios biológicos de EE UU en Ucrania


PEKÍN.-  China insiste en culpar a EE UU y la OTAN de la guerra en Ucrania. Ahora el Ministerio de Exteriores chino ha retomado su argumentario: que la OTAN, y sobre todo Estados Unidos, son responsables de que las tensiones entre Rusia y Ucrania llegaran “al límite” y estallara la guerra. Y ha revelado la existencia de laboratorios del Pentágono en Ucrania para la guerra biológica.

“Lo que la OTAN, liderada por Estados Unidos, ha hecho es lo que gradualmente ha llevado al conflicto entre Rusia y Ucrania al límite”, ha sostenido el portavoz Zhao Lijian en la rueda de prensa diaria del ministerio en Pekín. 

“Obviando sus propias responsabilidades, en su lugar, Estados Unidos critica la posición de China en la cuestión ucrania” e intenta “perjudicar a China y a Rusia al mismo tiempo para mantener su hegemonía”, ha asegurado. 

El portavoz ―el representante más célebre de la nueva generación de la nueva diplomacia china conocida como de los “guerreros lobos”, más agresiva verbalmente en la defensa de los intereses de su país― criticó las sanciones que Occidente ha impuesto a Moscú como represalia por el ataque al país vecino.

“Las sanciones nunca han sido una manera efectiva de resolver los problemas. China se opone firmemente a cualquier forma de sanciones unilaterales”, declaró Zhao.  

“A la hora de afrontar la cuestión ucrania y sus relaciones con Rusia, Estados Unidos debería tomar en serio las preocupaciones de China, y no perjudicar los derechos y los intereses de China de ninguna manera”, agregó el portavoz.

En su rueda de prensa, Wang quiso dejar claro que la invasión no ha afectado la cercanía de Rusia y China. Los lazos entre ambos gobiernos, subrayó, son “sólidos como una roca” y la cooperación entre los dos países continuará haciéndose más y más profunda “por sombría que sea la situación”.

 

https://euskalnews.tv/video/atencion-a-lo-que-anuncia-el-ministerio-de-exterior-de-china/

Austria suspende la vacunación obligatoria, al menos durante tres meses


VIENA.- El Gobierno austriaco anunció este miércoles la suspensión de la ley que obligaba a vacunarse contra el Covid-19, un mes después de que entrara en vigor.  “Hemos decidido seguir el consejo de la comisión de expertos”, y “suspender” el texto, que no es “proporcional” a la peligrosidad de la variante ómicron del coronavirus, anunció la ministra Karoline Edtstadler, en una rueda de prensa en Viena.

“No vemos la necesidad de la vacunación obligatoria en este momento, dada la variante actual”, que causa síntomas menos graves que la variante dominante anterior, Delta, explicó.

“Actualmente hay muchos argumentos para decir que esta violación de los derechos fundamentales no está justificada”, añadió Edtstadler, responsable de la Constitución.

La ley entró en vigor el 5 de febrero, una medida sin precedentes en la Unión Europea (UE) y que había suscitado una fuerte oposición de una parte de la población de 8,9 millones de habitantes.

La obligación afectaba a todos los residentes mayores de 18 años de este país de 8,9 millones de habitantes, a excepción de las mujeres embarazadas, así como los que contrajeron el virus hace menos de 180 días y los que estaban exentos por motivos médicos.

La base de la nueva decisión será un informe de la comisión de expertos. Austria suspende la vacunación obligatoria contra el coronavirus, al menos durante tres meses.  La obligación de vacunación no es proporcional a la variante de Omikron que prevalece, dijo en Viena la ministra constitucional Karoline Edtstadler (ÖVP). 

La decisión se basará en el informe de una comisión de expertos. En tres meses se tomará una nueva decisión, según el ministro de Sanidad, Johannes Rauch (Verdes)".

La vacunación obligatoria estaría en vigor desde principios de febrero. A partir del 15 de marzo, las infracciones de la obligación de vacunación se castigarían con multas de hasta 3.600 euros. Durante esta fase, la Policía debía comprobar la prueba de vacunación como parte de sus controles y denunciar cualquier infracción a las autoridades.  

Antes de que se "agudice" la ley en Austria, por así decirlo, y se amenace con castigar a los que se niegan a vacunar, una comisión de expertos debería presentar un informe para su evaluación. El gobierno ha creado esta comisión sobre la vacunación obligatoria. 

Desde el 17 de febrero, cuatro expertos, dos de ellos de la medicina y de la judicatura, se ocupan de la ley. Están examinando principalmente la proporcionalidad de la ley con respecto a la situación actual del viruscorona.

Desde el inicio de la vacunación obligatoria, la ley ha sido criticada. El canciller austriaco Karl Nehammer (ÖVP) no descartó un final. Quiere atenerse a la recomendación del consejo de expertos, subrayó Nehammer en varias entrevistas. En aquella época, la comisión de expertos ni siquiera existía.

Aparte de las críticas a la vacunación obligatoria y la disputa sobre los controles de vacunación obligatoria, probablemente también haya problemas con la aplicación. El periódico austriaco Der Standard informó de "incertidumbres técnicas". Faltaría un sistema central de almacenamiento digital para registrar las exenciones de la vacunación obligatoria. 

Ahora Austria ha levantado en gran medida todas las normas de viruscorona desde el 5 de marzo. La gente baila en las discotecas sin máscaras, ya no se comprueba su estado de vacunación o similar, incluso la norma 3G en el lugar de trabajo. 

Por tanto, parece poco probable que las personas no vacunadas se enfrenten realmente a multas y sanciones a mediados de marzo. En Austria, casi un millón de adultos incumplen actualmente la obligación de vacunación (13%). 

La vacunación obligatoria se aplica a todas las personas mayores de 18 años residentes en Austria. A continuación, deben presentar un estado de vacunación válido.


    Tras el final de la fase de entrada, prevista en principio para el 15 de marzo, se iban a llevar a cabo controles aleatorios por parte de la Policía.


    Quienes incumpliesen la obligación de vacunación se enfrentarían a multas de entre 600 y 3.600 euros.


    Se iban a hacer excepciones para las mujeres embarazadas y las personas que no puedan vacunarse por razones médicas.

martes, 8 de marzo de 2022

Antivacunas y negacionistas / Jesús Villajos Barja *

 En el escaso año de experiencia con estos fármacos experimentales de ARNm hemos ido comprobando lo que los ensayos clínicos apuntaban, es decir, que no evitan la transmisión ni el contagio y tampoco reducen la mortalidad y los casos graves (descartados después de los ensayos clínicos sin justificación) por lo que de momento nos tenemos que quedar con la tan repetida como ambigua frase: “evitan que los síntomas sean más graves”. Cualquiera puede deducir que por muy grave que sea un síntoma, siempre se puede afirmar que se ha evitado que fuera aún más grave. Un bucle del que solo podríamos salir bien parados con unos buenos datos en la reducción de la mortalidad.

Peter Doshi, editor del British Medical Journal (BMJ), ya denunciaba en un editorial que la pregonada (y lucrativa,dicho sea de paso) eficacia del 95%, estaba falseada por lo que estaríamos hablando de una reducción de riesgo relativo del 19%, (lo que equivale a 0.84% de eficacia absoluta) muy por debajo del umbral de efectividad del 50%, requisito insoslayable para poder optar a ser autorizada por los reguladores, también explicaba que no se podía esperar una reducción significativa de muertes, todavía no hay evidencia científica de que las vacunas covid-19 hayan salvado una sola vida

 De hecho, en base a los ensayos clínicos de Pfizer y Moderna que se conocen hasta ahora, se podría afirmar exactamente lo contrario. 

Con asombro descubrimos ahora, la inmunidad natural, en esta publicación reciente (7 de febrero 2022) en The Lancet Rheumatology, escrita por McGonagle

https://www.thelancet.com/journals/lanrhe/article/PIIS2665-9913(22)00038-8/fulltext#%20

La carta denuncia la vacunación obligatoria que muchos países, como Inglaterra, impusieron a los trabajadores de la salud, donde aquellos médicos y enfermeras que no deseaban vacunarse se enfrentaron a despidos injustificados de sus puestos de trabajo. En el artículo plantea que para virus de ARN de una sola cadena, como el virus de la gripe y también SARS-CoV-2, la inmunidad generada de forma natural provee de mejor protección que la vacunación, ahora puede parecer trivial pero esto se negó al principio de la vacunación. 

Los individuos expuestos a la infección natural también eran menos dados de ser admitidos al hospital. Por último, aborda el concepto de «inmunidad híbrida» que se obtiene de la infección más la vacunación al «incrementar los niveles de anticuerpos y de linfocitos T (un concepto absolutamente inventado, que carece de ningún estudio de largo plazo que muestre una correlación clínicamente relevante) en la misma línea de lo que explicaba Peter doshi en su editorial, presencia de anticuerpos no implica inmunidad. Afortunadamente, el gobierno de Inglaterra está considerando ahora eliminar estos despidos.

Por todo ello, en el artículo anterior ya afirmábamos que  “Las inyecciones de ARN no vacunan”, pero lo cierto es que la realidad nos devora. Llevamos meses observando un nuevo giro de tuerca; un fenómeno que se ha dado en llamar de mil maneras: eficacia negativa,  inmunidad negativa, anti-inmunidad, inmunodeficiencia. Es un concepto escurridizo que no expresa bien de lo que estamos hablando: de antivacunas.

Datos de eficacia negativa

Esta sección en otro contexto se podría omitir pero desgraciadamente vemos cómo en los medios aparece el experto de cabecera hablando de que simplemente se ha detectado una cierta “pérdida de efectividad”. 

Antes estos datos ahora se afirma que el análisis del número de casos está fuera de contexto y que tiene una eficacia mucho mayor contra las hospitalizaciones y las muertes, que es realmente la clave. Quizás seamos unos ilusos por esperar algo de inmunidad o protección de un producto que llaman “vacuna”.

Es importante darse cuenta de que no se trata de vacunas que no funcionen o que pierdan su eficacia. Si las vacunas simplemente no funcionaran, su eficacia sería similar a la eficacia de los sistemas inmunitarios no vacunados, y las nuevas infecciones se distribuirían proporcionalmente entre toda la población, pero la realidad es que no está sucediendo esto, sino exactamente lo contrario. Son las personas inoculadas las más propensas a infectarse, y según dicen los datos, el efecto se incrementa en cada dosis. 

Si hubiese 1000 nuevos casos en un contexto de eficacia nula, es decir, de igualdad de condiciones, en una población vacunada al 90%, se darían 900 nuevos casos en los vacunados y otros 100 en el resto. La realidad de los datos nos demuestra que en muchos países no solo se están dando menos de 100 se están dando hasta solamente entre 10 o 15 casos en ese grupo. 

Antes de Ómicron, a finales de octubre, The Lancet Infectious Diseases publicaba que “la eficacia de las vacunas, en reducir la transmisión, es mínima en el contexto de la variante delta”. En términos similares este otro macro estudio sueco publicado en The Lancet concluía que las vacunas de Pfizer y Astrazeneca (82% de las dosis administradas en España) no tenían “ninguna eficacia”. En diciembre se han realizado más estudios que han encontrado una eficacia negativa confirmada después en todos los países, los repasamos brevemente:

1-. Dinamarca

Publicado el 23 de diciembre, fueron los primeros en hablar de eficacia negativa, este estudio analiza las infecciones positivas en Dinamarca para determinar el porcentaje de Ómicron, los investigadores descubrieron una eficacia de la vacuna contra la variante Omicron de -76,5% para Pfizer, y -39,3% para Moderna a partir de los 3 meses de la inoculación. Dicho de otro modo, la variante infecta principalmente a las personas vacunadas, en mayor medida a las personas que han sido vacunadas con tres dosis.

https://www.medrxiv.org/content/10.1101/2021.12.20.21267966v3.full.pdf


Extrapolando estos datos, si a los 60 días la protección es cercana a cero, para mantener la protección sería necesario vacunarse cada 30 días. 

Este otro estudio con dos grupos de control, también se evidencia eficacia negativa.

https://medrxiv.org/content/10.1101/2021.03.08.21252200v1

 


2-.Reino Unido

Los datos disponibles de la Agencia de Seguridad de la Salud del Reino Unido muestran que las inyecciones de Covid están teniendo una eficacia negativa en todos los mayores de 30 años, y una eficacia de hasta -100% en la edad de 40 y 69. Una eficacia del fármaco de -100% significa que las sucesivas inoculaciones han desactivado totalmente su respuesta inmune al Covid-19

En el mismo informe de vigilancia de vacunas de la semana 42 publicado por el UKHSA se afirma lo siguiente: “Los niveles de anticuerpos (N) parecen ser más bajos en las personas que adquieren la infección después de 2 dosis de vacunación”. Este dato se confirmó en posteriores estudios realizados en otros países. 

Para “incentivar” la vacunación se nos ha contado que lo más importante son los anticuerpos S y no los N, cuando es justo lo contrario.

 En esta imagen se puede visualizar S, N, M y E. Lo que esto significa es que las llamadas “vacunas Covid-19” interfieren con la capacidad del sistema inmunológico de producir anticuerpos N, encargados de la respuesta contra la nucleocápside que es la cáscara del virus, y una parte crucial de la respuesta del sistema inmunológico.

Las personas vacunadas no parecen producir anticuerpos contra la proteína de la nucleocápside (N), la cubierta del virus, que son una parte crucial de la respuesta en las personas no vacunadas. Las vacunas interfieren con el desarrollo de una inmunidad robusta a largo plazo después de la infección.

Cuando nos infectamos de forma natural, generamos respuestas eficientes y de larga duración contra muchos otros fragmentos de proteínas, no solamente contra S, a diferencia de lo que ocurre con la inmunidad que generan las vacunas de ARNm (Pfizer/BioNTech, Moderna), las vectorizadas (Astrazeneca, Cansino, Janssen) y las subunitarias proteicas (Abdala, Soberana, Novavax).

Aunque las sucesivas variantes hayan desarrollado mutaciones en la S, las otras proteínas del virus (nucleocápside, matriz, envoltura, ARN polimerasa), prácticamente no acumulan mutaciones, porque de hacerlo, afectaría su normal funcionamiento y su habilidad de replicar. Por ello, las personas que cuentan con inmunidad natural están bien protegidas contra las diferentes variantes del virus SARS-CoV-2, y los vacunados sin embargo, no. 

3-. Escocia 

Los datos oficiales de Public Health Scotland muestran que las muertes entre los triplemente vacunados aumentaron en un 495% en enero y los vacunados representaron 4 de cada 5 casos, hospitalizaciones y muertes de Covid desde diciembre. La población vacunada representó el 86% de los casos de covid-19, el 80% de las hospitalizaciones y el 84% de las muertes. La campaña de refuerzo ha sido un fracaso porque el porcentaje de casos, hospitalizaciones y muertes ha disminuido en la población no vacunada mientras que se ha incrementado notablemente en la población triplemente vacunada. 


A raíz de estos malos datos, ”El Ministerio de Sanidad de Escocia ha decidido “dejar de publicar estadísticas de hospitalizaciones y muertes por covid desglosadas por estado de vacunación, para evitar que los antivacunas los malinterpreten”. Nos piden centrarnos en hospitalizaciones y muertes y no tanto en el número de casos, a partir de ahora se darán los datos categorizados en sus comorbilidades subyacentes. 

¿Alguien piensa que los datos de las dos columnas de hospitalizaciones y muertes al desglosarlos en varias categorías más,  serán mejores?. Desde aquí les advertimos que tengan precaución en desagrupar los datos en exceso, no sea que comprueben que en grupos con comorbilidades o pacientes de riesgo, el dato no mejore pero si lo haga en el de los pacientes sanos o de muy bajo riesgo.

4-. Canadá

https://web.archive.org/web/20220114005412/https://www.alberta.ca/stats/covid-19-alberta-statistics.htm#vaccine-outcomes

Número de casos: 

Un gran pico en el período de aproximadamente 0-14 días después de la primera vacunación y después de aproximadamente 6 meses de la segunda vacunación. Como nos piden no analizar el número de casos, pasemos al de hospitalizaciones y muertes. 


 Hospitalizaciones:

Muertes:

El mismo patrón

5-.España


Se vuelve a repetir el mismo patrón. Habría que añadir enfermos, ingresos en UCI y defunciones de personas vacunadas sin pauta completa, ya que éstos no contabilizan como fallecidos vacunados. Por lo que, el porcentaje de no vacunados sería aún más bajo del reflejado.

Manipular los datos es contar como no vacunado a todo aquel que no haya pasado un periodo de 14 días de la inoculación de la segunda dosis y también a todos los que no tienen la pauta completa (solo una dosis).

Esto significa que si das positivo, eres hospitalizado y/o falleces en estos 14 días post segunda dosis, esa muerte se cuenta como la de un “no vacunado”, inflando así los datos de ese grupo. El grupo de control (no vacunados) y un mínimo de ética es algo que se llevó por delante esta pandemia. 

Esta praxis no se restringe a España. Es un modus operandi que se repite en todos los países y supone la piedra angular que permite publicar titulares del estilo: “Estar vacunado reduce 5 veces la probabilidad de ser ingresado”. Sirva de ejemplo este caso en el estado de Alberta en el que se llega a incluir en el grupo erróneo el 40% de casos, 48% de hospitalizaciones y 56% de muertes. Esto hace imposible hacer un seguimiento de la eficacia real de los productos, y lo que es más grave, miles de muertes no relacionadas con covid posteriores a las ‘vacunas’ están siendo clasificadas deliberadamente como muertes de no vacunados.

Según los datos de Sanidad en España, en valores totales o absolutos (sin el efecto estadístico de tasas relativas): 3 de cada 4 muertos por covid desde otoño estaban perfectamente vacunados (entre el 72% y el 80%). El clamoroso silencio sobre este dato nos hace perder como sociedad la noción de la realidad. A modo de verificación simplemente preguntarle a conocidos, si creen que la vacunación este año ha evitado más muertes que en el 2020.

Los datos oficiales de muertes: https://stories.lavanguardia.com/sociedad/20211228/47672/el-2021-cierra-con-el-doble-de-fallecidos-por-covid-que-en-2020

  • 2020: 1,8 millones de muertos ( cepa más virulenta,  sin vacunas)
  • 2021: 3,6 millones de muertos ( el doble que en 2020 )
  • 2022: ¿4 y 5 dosis?. Ensayos clínicos en marcha con 3 dosis en bebés de 0 a 5 años.

Estos resultados eran el elefante en la habitación hasta la reciente comparecencia de Joan-Ramon Laporte en el Congreso, donde simplemente dijo lo que que son, unos malos datos, también para el caso de muertes. 

Este señor es el artífice de la puesta en marcha del sistema de farmacovigilancia en España, y fue su director hasta la creación de la Agencia Española del Medicamento. Además, también fue Presidente del Grupo para Medicamentos Esenciales de la OMS, asesor externo de la Agencia Europea de Medicamentos, fundador de la European Association of Clinical Pharmacology and Therapeutics y un largo etcétera, en la nueva normalidad este es el perfil de un negacionista según los medios. 

Entre sus logros en su campo, se encuentra el haber conseguido retirar del mercado el Rofecoxib, medicamento estrella de Merck, que demostró multiplicar por dos el riesgo de sufrir infarto entre sus usuarios. Esta retirada del producto le valió al señor Laporte recibir una demanda contra él, que finalmente acabó ganando.

En su intervención explica minuciosamente el fracaso de las vacunas (con cifras oficiales) y como tampoco han evitado más muertes, el supuesto último beneficio que se les quiere otorgar. El vídeo de su comparecencia se ha eliminado y censurado en los principales medios de comunicación pero afortunadamente en diario16 tenéis la intervención por escrito:

https://diario16.com/diario16-publica-la-intervencion-escrita-del-catedratico-y-experto-en-farmacovigilancia-joan-ramon-laporte-en-la-comision-de-investigacion-de-las-vacunas/

Como era de esperar, los medios se lanzaron a su yugular de manera inmediata. Incluso el propio partido del gobierno que fue quien lo invitó hizo ostensible su desagrado por su intervención. 

https://www.lasexta.com/noticias/nacional/profesor-invitado-comision-gestion-vacunas-lanza-argumentos-negacionistas-congreso_202202076201a06c6a40a200010cde24.html

Lo más suave que le han llamado es “negacionista o antivacunas”, después el gobierno se ha desligado de las declaraciones manifestando literalmente que las vacunas, “se diga lo que se diga, están funcionando”.  Pero esta “vacunolatría”, o “tecnolatría” que diría el señor Laporte, ni es espontánea ni elegida;  siempre es complicado gestionar los fracasos y más aún los que llevan la mochila de tantas muertes asociadas a ellos.

La pinza negacionista que padecemos los ciudadanos, entre los medios y nuestros dirigentes, nos conduce a un preocupante escenario de realidades paralelas donde no cabe el error y todo funciona según lo previsto, donde nunca habrá una cantidad suficiente de muertes, infartos en jóvenes y deportistas o cualquier otro suceso que nos forzase a realizar cualquier cambio sustancial.

Como bien comentó Laporte en su intervención, estas vacunas de ARNm tienen el triste récord de ser el medicamento más dañino fabricado hasta hoy, la base de datos oficial de VAERS indica que las «vacunas» COVID han lesionado a 30 veces más personas y matado a 60 veces más personas que la suma de todos los daños producidas por TODAS LAS VACUNAS inoculadas en los últimos 30 años. Una imagen vale más que mil palabras:

 


Naturalmente hay un porcentaje de casos en los que no existe relación de causalidad, pero está bien documentado que históricamente VAERS ha infravalorado en orden de magnitud, la incidencia total de efectos adversos, en un factor 44 veces menor.  Por lo que 400.000 muertes sería la cifra real por las vacunas en Estados Unidos. Si esto no es inusual, ¿qué lo es?. 

Si eres uno a los que le chocan estas cifras, deberías entender que pase lo que pase “las vacunas están funcionando”  y en todo caso siempre “hubiera sido peor”. (da igual cuando leas esto). 

Apelar a una realidad alternativa, siempre peor y sobre todo intangible solo habla de la incomodidad de los datos. Es urgente dejar de vivir en realidades paralelas y hacernos responsables del dolor, muerte y sufrimiento de la realidad en la que todos vivimos

No cabe esperar ni a corto, ni a medio plazo, ver a nadie asumir explícitamente el fracaso: Exoneradas las farmacéuticas de toda responsabilidad hasta el 2075 por contrato, nos quedaría encomendarnos a la EMA o a la FDA, apelando a su función primigenia, pero en la práctica no pasan de ser meros lobbies de las propias farmacéuticas, cuyo máximo logro hasta la fecha ha sido el de forzar la dimisión de alguno de sus miembros por conflicto de intereses. 

Tampoco cabe esperar gran diligencia de los propios organismos sanitarios nacionales, sin ir mucho más lejos todavía queda en el recuerdo como se gestionó la anterior pandemia (gripe A). Se tenían evidencias en estudios publicados por pares, de que el Tamiflu causaba graves trastornos mentales (esquizofrenia), y no por ello se retiró en el momento. Simplemente se dejó pasar tiempo hasta anunciar que los lotes habían caducado o bien que había otros tratamientos más efectivos. Los afectados por sus efectos siguen esperando.

Con la misma impunidad no esperemos que los próximos ensayos clínicos den prioridad a la vida ni a la salud por encima de los beneficios. Porque no es necesario recopilar más muertes para demostrar causalidad  (aquí un análisis bayesiano en 145 países que debería estar abriendo portadas en todos los periódicos de tirada nacional, en el que se demuestra causalidad y no mera correlación), como tampoco es tiempo ya, de otros 1000 estudios que demuestren que las inyecciones K0B1T no son ni seguras ni eficientes. Estos productos son un fraude y debieron retirarse con las primeras muertes registradas, es hora de depurar la cadena de responsabilidades

Como explicó Laporte en su intervención es urgente modificar la legislación europea en materia de farmacovigilancia. No podemos seguir tolerando que sean las compañías farmacéuticas las que diriman la seguridad y eficacia de sus propios productos. En este sentido, sirva de ejemplo lo que ocurrió cuando Pfizer intentó aprobar su fármaco en India, donde se vio obligada a retirar su solicitud de autorización de uso de emergencia de su vacuna, después de que el organismo regulador del país exigiera llevar a cabo un estudio local específico sobre inmunidad y seguridad.  Dicho de otro modo: sin fraude, no hay autorización posible. 

En definitiva, la inmunidad negativa se traduce en una desactivación del sistema inmune siendo este efecto muy notable en las siguientes semanas a la inoculación. Los vacunados sufren un debilitamiento de los glóbulos blancos y reducción de las células T, CD8+, una clase de inmunodeficiencia adquirida (SIDA) de la que todavía no se conoce su duración ni su alcance y lo que es más preocupante, aumenta el efecto a cada nueva dosis. 

Ahora se están empezando a publicar estudios científicos sobre los mecanismos por los que la proteína S de las terapias génicas de ARNm debilitarían el sistema inmune. Se ha comprobado que están activando vías de señalización celular de forma artificial, lo que puede causar una grave desprogramación del sistema inmunológico natural, y también induce un profundo deterioro en la señalización del interferón tipo I, lo que explicaría el aumento de cáncer y otras enfermedades inmunes meses después de la inoculación.

https://www.cell.com/cell/fulltext/S0092-8674(22)00076-9#relatedArticles

https://www.medrxiv.org/content/10.1101/2021.05.03.21256520v1

https://www.authorea.com/users/455597/articles/552937-innate-immune-suppression-by-sars-cov-2-mrna-vaccinations-the-role-of-g-quadruplexes-exosomes-and-micrornas

Esto da en las líneas de flotación de las políticas de una vacunación masiva que ha provocado un cambio de timón en las recomendaciones de la agencia europea del medicamento (EMA), ahora nos advierte que “las inyecciones frecuentes de refuerzo pueden afectar negativamente al sistema inmunitario”. 

La sucesión de noticias en estos días, donde los actores principales saltan del barco, debería servir de aviso a navegantes. El jefe del Departamento de Inmunología de la Universidad de Tel Aviv lo resumía así, en una carta abierta: “Es hora de admitir el fracaso”. 

Y respecto, al incremento de infartos y miocarditis en jóvenes y deportistas (los nietos están teniendo el doble casos que sus abuelos), Pfizer pidió más tiempo para contestar a esta pregunta en el informe presentado a la FDA para la aprobación de la vacuna para niños (página 11, párrafo 3), donde afirman “necesitar 5 años para estudiar los riesgos de miocarditis en los niños, ya que el ensayo clínico realizado es demasiado pequeño para poder detectar riesgos”. 

En noviembre la EMA les respondió como no podría ser de otra forma con una autorización exprés. Recordemos que en ese momento los niños perdieron la categoría de “niños”, y pasaron a ser «vectores de transmisión», así es como el ministro de sanidad se atrevió a referirse a ellos, pasaban a ser el foco de la pandemia y los responsables del contagio de sus abuelos (vacunados).

Nunca antes se había forzado a la ciudadanía a convertirse en ratas de laboratorio por una vacuna 5 años antes de obtener unos estudios clínicos sólidos basados en las pruebas adecuadas, violando además los principios básicos del consentimiento informado. La evidencia médica y científica sobre la eficacia y seguridad de la vacuna no respaldan ni la obligatoriedad de su uso para nadie, especialmente para niños sanos. Suecia ha sido el primer país en decirlo, luego le siguió Dinamarca, e Inglaterra.

 A España, como es natural, ni se la espera. En pocas palabras, en grupos de nulo riesgo como son los niños, la vacuna matará a más individuos de los que se pretendía salvar, como ya reflejan los datos oficiales hasta 31 de Octubre del ONS  (Office of National Statistics), homóloga en Reino Unido de nuestro INE, donde se ha registrado que para esa franja de edad y periodo de tiempo por cada niño que ha muerto sin vacunar han muerto otros 52 vacunados, como ya anticipó este estudio publicado en julio del 2021

En definitiva hace falta más tiempo, más ciencia, pero sobre todo más valor para dejar de ser meros títeres al son de las farmacéuticas. Mientras tanto, permanecemos a la espera de los pregonados beneficios de estas “vacunas” de ARNm. Lo que sí hemos podido comprobar tristemente son los riesgos. Gracias al esfuerzo de ciudadanos anónimos es posible hacer seguimiento de casos sin filtrar en esta sencilla página de testimonios. ¿Son pocos? ¿Son leves?.  Sacar vuestras propias conclusiones…


 (*) DEA en Biomedicina Molecular por la UAM