MURCIA.- La nueva Junta Directiva del Teléfono de
Esperanza de Murcia ha afirmado que la imputación judicial de su ex
presidente, Jesús Madrid, por un delito de abusos sexuales no ha
alterado la actividad de la institución, que ha continuado "totalmente
igual". Así pues, permanecen el 91 por ciento de los voluntarios
colaboradores y la demanda social de cursos y actividades "sigue siendo
la misma".
Así lo han hecho saber en un contacto con los medios de
comunicación los miembros de la Junta Directiva, encabezados por su
presidenta, María Victoria Gómez; su vicepresidente, Ramón Bernabé; y su
vicepresidenta primera, Inés Paredes.
Gómez fue elegida en las elecciones celebradas el pasado mes de
junio, y propuso el nombramiento de los dos vicepresidentes al
presidente nacional de acuerdo con los estatutos.
El vicepresidente de la entidad ha manifestado que el proceso
judicial en el que está imputado Jesús Madrid está actualmente 'sub iudice'
"hasta que la jueza que lleva el caso no lo resuelva", por lo que, de
momento, lo que está en cuestión "es si existe o no delito en los hechos
que se le imputan al anterior presidente".
En este sentido, Bernabé, como abogado, considera que la
resolución "va a ser favorable" al entender que "no hay ningún tipo de
delito" desde su punto de vista, es decir "que no es delito lo que se le
imputa", y cree que "así saldrá reflejado en la resolución que dicte la
jueza".
De todas formas, el vicepresidente añade que lo que va a resolver
la jueza es "simplemente el aspecto penal", pero "cualquier otra
valoración es de libre apreciación de cualquier persona".
Bernabé cree que la sentencia será favorable porque, en el caso de
los abusos sexuales --delito imputado al ex presidente-- es preciso que
las personas agraviadas "estén privadas de razón o de sentido como, por
ejemplo, ser menor de edad, estar narcotizada o tener algún tipo de
problema psíquico que le impida decidir libremente".
Al ser preguntado por la posibilidad de que Jesús Madrid vuelva si la
sentencia no lo encuentre culpable, Bernabé ha señalado que se trata de
algo "muy difícil de valorar" porque el Teléfono de la Esperanza es una
organización nacional en la que hay una junta directiva para todo el
país que "lógicamente, tendrá que valorar el asunto".
El Teléfono de la Esperanza, que tiene su sede en Murcia en la
calle Ricardo Zamora número 8, enfrente de la Jefatura Provincial de
Tráfico, tiene entre sus principios fundacionales la atención a las
personas en situación de crisis humana, lo que realiza a través de un
servicio permanente de teléfono las 24 horas del día, todos los días del
año.
Asimismo, el Teléfono de la Esperanza, que tiene 35 años de
existencia en Murcia, presta una atención personalizada a través de un
equipo de profesionales, como psicólogos orientadores familiares y
abogados que conciertan citas entre los afectados llamantes y los
profesionales que consideran más adecuados a la problemática planteada.
Respecto a las perspectivas de futuro, Gómez ha destacado que está
en marcha el proyecto 'Tele esperanza digital', que pretende atender a
través de las nuevas tecnologías a los afectados que recurren al
Teléfono de la Esperanza, empleando Internet y redes sociales.
Gómez ha señalado que el Teléfono de la Esperanza pide una
colaboración responsable para pagar el material con el que se realizan
los cursos, y afirma que hay donativos de personas que reciben
asistencia por el teléfono y se sienten muy agradecidos. No obstante,
afirma que hay otras fuentes de financiación, como la realización de
mercadillos, o las campañas de lotería.
La presidenta del Teléfono de la Esperanza también ha remarcado
que la entidad desarrolla un programa "muy interesante" que se llama
'Entre amigos' y que se realiza los primeros y terceros sábados de cada
mes, durante todo el año. A estas actividades "acude cualquier persona
que quiera ir" y, de hecho, la asistencia ronda las 60 ó 70 personas
cada sábado.
En estas actividades, los participantes "se sientan y se les sirve
un café y una merienda para hablar en grupo", ya que "hay mucha soledad
y mucha gente que se siente sola, por lo que acuden a este programa
porque encuentran que tienen un grupo de gente en la que pueden
compartir".