MURCIA.- Hasta trece conductores de vehículos de grandes dimensiones y
tonelaje destinados al transporte de mercancías o viajeros fueron
interceptados, el pasado año, circulando bajo la influencia de drogas o
alcohol. El último, ocurrió el pasado 10 de diciembre y ocasionó un
accidente de circulación en el que una persona resultó herida grave.
Otra
de las operaciones realizadas por la Guardia Civil de Tráfico tuvo
lugar en octubre. Sus agentes denunciaron, en dos ocasiones en apenas
quince días, al conductor de un autobús por ponerse al volante tras
tomar cannabis y cocaína.
El sospechoso, de 48 años y nacionalidad
española, afronta 2.000 euros de sanción y a la pérdida de 12 puntos del
permiso de conducción.
El 25 de octubre fue, además, detenido el
conductor de un camión de 14 toneladas a la altura del kilómetro 155 de
la autovía A-30, en el Puerto de la Cadena.
Según explicaron fuentes del
cuerpo, el chófer quintuplicaba la tasa de alcoholemia permitida al
volante.
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