Hoy jueves
25 de julio de 2019 es el Día Fuera del Tiempo en el calendario maya
de las trece lunas de 28 días, y mañana viernes comienza el año
nuevo maya. Hoy, 25 de julio, la estrella Sirio asciende en
conjunción con el Sol, y termina el 24 de julio del año siguiente
(es decir, 364 días). Es un día de reverencia y apreciación
cultural para el concepto de mi querido José Argüelles, ya
desaparecido: “el tiempo es Arte”.
El calendario maya consta de 13 lunas de 28 días cada una, divididas
en cuatro semanas de siete días cada una. La primera semana es roja,
inicia el conocimiento, la segunda es blanca de refinamiento, la
tercera azul de transmutación y la cuarta amarilla de maduración.
Comienza una revolución solar de la tierra. En este día se reúnen
las energías de todo un año. Así pues, el día 25 de julio, es un
día muy especial: un día espiritual, de meditación que sirve para
prepararnos para recibir el año nuevo, con mejores energías; es un
día especial para preparar el alma, crear un espacio para el juego,
el arte, la magia y la creatividad.
También es el día Verde, día del perdón universal de la
liberación galáctica, un día de pausa con invitación para
vivenciar el tiempo como arte con la sincronía natural del universo,
la danza ritual el canto y la música.
Este día también es celebrado como el día de la Paz Internacional
a través de la Cultura. La paz a través de la cultura es una
premisa fundamental del calendario de las Trece Lunas de 28 días.
Cuando celebras el tiempo es arte, estás promoviendo la paz a
través de la cultura.
UN DÍA ESPECIAL
Un año solar que son 13 lunas o meses de 28 días, son 364 días,
tiempo que tarda la Tierra en dar una vuelta al Sol, quedando un día
perdido o día fuera del tiempo que se dedica a los rituales con la
Tierra, de pago y limpieza, con el perdón y el disfrute del Arte.
Es un día de retiro y reflexión, pero también es un día especial
para activar la Divina Presencia en ti, dedicándolo al juego, el
arte, la magia y la creatividad. Un día para agradecer, perdonar y
bendecir. Todos gozaremos de la oportunidad de tener un golpe de
suerte.
Un día especial para enviar una señal telepática a otros mundos a
través de meditaciones grupales o individuales. Visualiza a la
Tierra cubierta de rayos de colores sanadores.
El día verde, como también le llaman, era considerado por
los Mayas como un día especial para preparar al alma y crear un
espacio para el juego, el arte, la magia y la creatividad. Era un día
de limpieza antes de iniciar el nuevo ciclo.
Un día que invita a amar a todos y a reflexionar sobre el
significado del saludo maya respetuoso “In Lak’ech”
cuya traducción es “Yo soy otro tú”. Al
saludo de “In Lak’ech” se responde con “Ala K’in”
que significa “Tú eres otro yo”.
CONVOCATORIA
El Día Fuera del Tiempo es una convocatoria a los artistas y gente
creativa de todo el mundo para crear un día completo de celebración
a la vida, el amor, el arte y el perdón universal, marcando una
nueva era de paz y armonía y el nacimiento de una Tierra Galáctica
renovada con el nuevo sistema financiero.
El emblema de este día es la bandera de la Paz diseñada por
Nicolás Roerich que contiene tres círculos que representan
el arte, la ciencia y la espiritualidad, dentro de otro más grande
que simboliza la Cultura. El color de estos círculos es rojo, el
color de la sangre humana, sobre un fondo blanco que escenifica la
pureza.
El día fuera del tiempo es una celebración Planetaria en más de
140 países, cuando cientos de miles de personas realizan Festivales
de Paz sincrónicamente para establecer la armonía a través del
Arte, la Espiritualidad y la Cultura, atrayendo la Paz hacia todos
los seres y lugares de la Madre Tierra. Izándose miles de Banderas
de La Paz en todo el mundo, es resucitada la gran visión del Pacto
de la Paz de Roerich que entiende la Cultura como
una propiedad indispensable para el funcionamiento natural de la
biosfera.
ASÍ SE ROMPIÓ EL EQUILIBRIO
La casta sacerdotal maya, llamada ah kin, era poseedora de
conocimientos matemáticos y astronómicos que interpretaba de
acuerdo con su cosmovisión religiosa, los años que iniciaban, los
venideros y el destino del hombre.
Según el calendario maya, el tiempo se ajustaba a los movimientos de
la Luna, hasta que aparece la religión y lo fastidia todo, y el
calendario Gregoriano es impuesto por el papa Gregorio XIII, que
rompió el equilibrio eliminando diez días del año 1582 para
asegurar que la fiesta religiosa de la Semana Santa coincidiera con
el equinoccio de primavera.
Se decide entonces modificar el calendario por el de doce meses. Se
pierde la lunación completa. Los días que sobran se agregan a los
otros meses. Así se obtiene un calendario irregular con meses de 28,
29, 30 y 31 días, que nos elimina la espiritualidad y un
calendario natural, cosa que produce un mundo desarmónico en el
que el tiempo es oro. Ahora en la nueva era, el
tiempo es arte.
Con ello el consiguiente desequilibrio del hombre y del planeta. Los
seres humanos somos la única especie que no vivimos
conforme a los ciclos de la naturaleza. Además el calendario de
las 13 lunas y 28 días no es una idea únicamente de los Mayas ya
que los Druidas, Los Incas, los antiguos Egipcios, los Polinesios y
los Lakota también seguían dicho calendario basado en el ciclo de
menstruación femenino, que también corresponde al ciclo lunar.
¿POR QUÉ ES TAN ESPECIAL?
Es un día que no está dentro del calendario maya, que es el
calendario más exacto conocido hasta nuestros días, y que es
especial para trabajar en meditación, es un día de limpieza
interna, de convivencia e integración espiritual, pues se abren
puertas de vibración importantes cósmicamente y hay una alineación
de nosotros con la sabiduría suprema.
El Día Fuera del Tiempo es el día de Tiempo Fuera, es el día que
levantamos un poco la válvula de presión y damos un respiro. Un
respiro para escuchar aunque sea unos latidos y sintonizarlos con la
Tierra. Es un día para tomarnos de las manos y recordar quiénes
somos.
Es un día para mirar lo que está sucediendo afuera y saber lo que
sucede adentro. Es un día para pensar lo que ha pasado en el
transcurso de pasado año solar y una guía para el que comienza.
No es el último día del año, ni el primero, sino, el día cero,
el giro terrestre que une el pasado y el futuro en un Tiempo de no
Tiempo, un Día Fuera de Tiempo, un día de aquí y ahora, en el
presente.
(*) Periodista
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