MURCIA.- Javier Sánchez Serna, diputado de Unidos Podemos en la Cámara Baja,
ha presentado una proposición no de ley para que el gobierno central
"garantice" la continuidad del proyecto.
Una regeneración en la que se
deben resolver los problemas técnicos, en la que debe haber una mayor
dotación económica y todo ello de manera transparente y ofreciendo la
información durante todo el proceso.
Sánchez Serna ha recordado que la comunidad científica ha calificado
lo de la Bahía de Portmán "como uno de los mayores desastres ecológicos
del Mediterráneo. Según un estudio de la Universidad Complutense es
actualmente uno de los puntos más contaminantes que existe en la
península. La presencia de cadmio, plomo y arsénico está muy por encima
de los niveles admitidos y en la zona viven más de 20.000 personas".
Es por ello, ha dicho el diputado de Unidos Podemos por la Región de
Murcia, por la que pedimos que su restauración "no sea una chapuza".
Por
eso, "hemos presentado esta iniciativa porque desde hace meses las
obras de regeneración, que se iniciaron hace dos años, presentan una
serie de dificultades y parones de actividad, que parecen derivar de
insuficiencias técnicas. El problema está en que el anterior Gobierno
del PP licitó en 2015 un proyecto de dudosa solvencia técnica, sin
suficiente presupuesto y con una notable carencia de transparencia".
Ante esta situación, ha subrayado Javier Sánchez Serna, y como desde
Podemos consideramos la regeneración de Portmán "una deuda histórica con
la ciudadanía de la Región de Murcia, debemos aunar esfuerzos políticos
para que el proyecto de regeneración de la Bahía de Portmán continúe
ejecutándose y se solventen los principales problemas, que presenta el
proyecto en ejecución y viene arrastrando desde prácticamente sus
orígenes".
Tal y como ha detallado Sánchez Serna, entre esos problemas se
encuentra que la Corta San Jóse, destino final de estos residuos no
cumple con los requerimientos técnicos para albergar los residuos
tóxicos y los peligrosos dragados.
Otro es que los lodos dragados no se
secarán del todo en las balsas previstas para su depósito en un
vertedero de residuos tóxicos.
Por último, cuando se inicien las obras
de dragado, las aguas resultantes de estas operaciones y del propio
escurrimiento de los residuos, resultarán altamente peligrosas por
metales pesados y el proyecto no dispone de ninguna acción ni partida
presupuestaria para su tratamiento.
Según el diputado de Unidos Podemos
en el Congreso por la Región de Murcia, Javier Sánchez Serna, "con las
tecnologías disponibles, esto tendrá un coste financiero importante. De
ninguna forma estas aguas pueden acabar contaminando el mar
Mediterráneo".
No hay comentarios:
Publicar un comentario