MURCIA.- El ingeniero Juan Guillamón, el héroe del accidente ferroviario de Chinchilla, ha dimitido esta tarde como presidente del Real Murcia, oficialmente por sus diferencias con Jesús Samper y Juan Manuel Trujillo, máximos accionistas de la entidad, pero realmente le ha urgido también el riesgo de contraer responsabilidades societarias en el proceso concursal en ciernes con eventual afección a su patrimonio personal. Otra gota menor que, se dice, ha colmado el vaso es el bloqueo por parte de los propietarios del club de un dinero que estaba destinado a satisfacer la nómina correspondiente al mes de enero tanto de los futbolistas como de los empleados del Real Murcia. La deuda del club ronda los 40 millones de euros.
Guillamón accedió al cargo el pasado 17 de diciembre, sucediendo en el mismo a Jesús Samper y en la rueda de prensa en la que ha anunciado esta tarde su renuncia, también ha lamentado las polémicas de los últimos días con el jugador José María Movilla, quien se ha quejado públicamente por la falta de información que reciben los futbolistas y el impago de determinadas cantidades de los derechos de imagen.
Junto a Guillamón, que se ha convertido en el presidente más efímero en la historia del Real Murcia, también se han marchado los consejeros murcianos José Luis Morga y Guillermo Martínez Abarca, mientras que el vicepresidente deportivo, Manolo Álvarez, ha anunciado que pospone su decisión hasta el próximo consejo de administración.
Esta mañana Guillamón ya comunicó a los otros consejeros murcianos del club su intención.
4 comentarios:
Pues lo de afección al patrimonio personal es algo que no dicen al menos en radio. Realmente la información está muy manoseada.
Vaya un murciano! Échale de comer aparte!
¿ y no será por diferencias con Cámara?
Guillamón I, El Breve.
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