sábado, 20 de mayo de 2006

Los más ricos de la Región

Una publicación económica prepara la lista de los 25 murcianos más ricos con residencia fiscal en España. Poca gente sabe que el paisano nuestro más acaudalado que ha llegado a vivir en Estados Unidos era natural de Cartagena y residió todo el tiempo en Nueva York. Pues bien, ahora no hace falta emigrar para ganar mucho dinero. En la Región de Murcia, según las primeras investigaciones de la citada publicación especializada, la bonanza económica de los años 90 y lo que llevamos de siglo XXI, ha alterado sustancialmente la lista al alza y perfilado una "nomenklatura" de nuevo cuño, que goza, además, de una enorme influencia política en el ámbito de la Comunidad Autónoma.

Con las lógicas relativas excepciones de quienes residen en Madrid, el grueso de nuestros particulares multimillonarios se ha "pegado" al PP en los últimos diez años y pocos, que se sepa, apoyan hoy a un PSRM que no ven claro en sus reales posibilidades electorales en 2007. Saura sigue sin tener su beneplácito todavía aunque parece que algunos contactos de altura no faltan ni faltarán. En los próximos meses tendrá que sentarse a la mesa con los que aún no conoce.

Según el avance que podemos dar de esa investigación periodística en marcha, en la lista parecen estar empresarios y especuladores a un tiempo, tal que Tomás Fuertes y sus dos hermanos, como la mayor fortuna declarada entre los murcianos. No faltaría tampoco el promotor Tomás Olivo (famoso por sus actividades recientes en Marbella) ni el legendario hombre de negocios cartagenero, Alfonso García, socio a su vez de su paisano Mariano Roca Meroño, trístemente célebre por sus oscuras relaciones con el agua de riego en tierra de tanta escasez.

Otros miembros de la lista por derecho serían los hermanos Huertas, de Cartagena, y en Jumilla, José García Carrión, dueño de un imperio relacionado con el vino, los zumos y las sopas. En esa misma línea estaría la conocida familia Muñoz, dedicada al negocio de los cítricos y los zumos desde su factoría de Espinardo. Y, aunque ya fuera de su negocio tradicional de la hojalata, Miguel Vivancos, hoy dedicado a la compra-venta de terrenos y negocios varios con las fuertes plusvalías obtenidas por la venta de su empresa, en una cifra tan astronómica para lo que se ventila habitualmente en Murcia, que nunca se ha hecho pública.

Ya de última generación con mucho dinero estarían Eugenio Galdón, presidente de ONO; Luis del Rivero, presidente de "Sacyr-Vallehermodso"; y, según parece, la familia Egea Krauel, tanto por el exfinanciero Ricardo como por Carlos, director general de "Caja Murcia". Ahí también podría estar el oriolano afincado en La Unión, Trinitario Casanova Abadía, presidente del grupo inversor "Hispania", dueño de los periódicos "El Faro" y "Crónica del Sureste"; y los hermanos Zambudio, propietarios de ITETE y de "Televisión Murciana" . Finalmente en Cartagena, estarían la familia atunera, Fuentes; la propietaria del "Licor-43", Restoy Zamora, y el ahora detenido por su presunta relación con la trama de Marbella, Juan Antonio Roca.

En la zona más clásica se puede encontrar a Andrés Bastida, Francisco Ruano , Clemente García, Francisco Vera Meseguer, Ángel Tomás, la familia Pujante, Juan Pérez Gil, los hermanos Vidal, Tomás Maestre, José Marín Núñez, el financiero Santos Montoro, Alfonso García, terrateniente de Águilas, y sus colegas de Mazarrón, Hernández Navarro de la hortícola "Paloma", los hermanos Durán, y las familias Zamora y Méndez España. No habría que excluir a la familia Viudes ni al totanero Juan Segura, dueño de la empresa "Etosa". Aunque todavía pueden surgir en el escenario nuevos millonarios como producto de la fuerte especulación en el sector turístico-inmobiliario, y entre ellos podría ser el caso de Pedro García Meroño, ex presidente de "Polaris World", o beneficiados del actual poder político, aún en la opacidad mediática. (NEM)

martes, 16 de mayo de 2006

Periodistas murcianos en serio peligro

El secretario de la Presidencia de la Comunidad Autónoma de Murcia, José Antonio Ruíz Vivo, atraviesa uno de sus peores momentos desde que trabaja al lado del presidente Valcárcel en temas de imagen. Enfrentado con varios consejeros clave y con algunos alcaldes del PP, que lo obvian sistemáticamente, atraviesa una situación que puede hacerle perder poder y hasta provocar que tenga que abandonar el gobierno autónomo si se produce una última remodelación (con la posible entrada del constructor, y actual presidente de la CROEM, Miguel del Toro, ya vocero oficioso de Valcárcel) cara a afrontar en mejor situación dentro de un año las elecciones municipales y autonómicas. La solución, parece ser, está en desplazarlo al frente de un proyecto de televisión digital en Molina de Segura de acuerdo con el alcalde Contreras.

Señalado culpable de la situación relativa de Murcia en los medios de comunicación nacionales y europeos, y de tenerla enfrentada con varias regiones españolas por la ocurrencia del "Agua para todos" que, a juicio de destacados militantes del PP regional, no ha servido absolutamente para nada en la práctica, este osado caradura, que presume de ser periodista profesional sin serlo al no constar en ninguna universidad homologada su formación académica en las disciplinas de ciencias de la información y la comunicación, sus meteduras de pata en estas cuestiones durante diez años han sido sonadas y todas perjudiciales para los murcianos, su democracia real y su libertad de expresión. Su ignorancia sólo ha sido comparable al ruido que introducía en el proceso comunicativo para que pocos notasen que trabajaba en lo que no entendía. Algún consejero ya lo trata en privado como una especie de impostor por ofrecer soluciones sobre conocimientos de los que carece, y aconseja al presidente que se deshaga de él cuanto antes, por falta de resultados.

Su aceptación en las filas del PP murciano es ya tan escasa o nula, que el exvicepresidente del ejecutivo autónomo y mentor suyo ante Valcárcel en 1995, Antonio Gómez Fayrén, ha puesto ahora como única condición para estar al frente de la próxima campaña electoral de 2007, que Ruíz Vivo no aparezca por la sede del partido en Trapería ni opine de su trabajo en temas de comunicación. Parece que la asistencia técnica que precise se la va a prestar la moderna agencia "Publicidad Líquida", dirigida por su hermano menor y el excuñado de la alcaldesa de Cartagena. Su desatino con la SER, un afán desmedido de protagonismo y excesiva capacidad de decisión en el tema de la nueva televisión autonómica, la 7, parece haber precipitado una situación que ya se venía pudriendo desde la salida de Fayrén, y que se aceleró con Francisco Marqués tras la espantada de Saénz de Buruaga del proyecto de Tercer Canal que dirigía desde su gestación.

Y otra crisis provocada en el mundo de la prensa convencional murciana deriva del entusiasta tratamiento dado a las peticiones empresariales, de crear la provincia de Cartagena, en las páginas del diario "El Faro". Su director de proyectos, el ATS cartagenero Manuel Ponce, hombre de Ruiz Vivo, de Felipe Julián y del cartagenerista vergonzante y empresario, Tomás Martínez Pagán, a un tiempo, podría tener que ceder su puesto y abandonar la empresa ante las presiones y advertencias de San Esteban para dejar de apoyar a este periódico y a su hermano menor "Crónica de Sureste", (ambos controlados por el Grupo "Hispania", de La Unión, de la mano del empresario Trinitario Casanova Abadía, promocionado por el diputado del PP y brazo derecho del ex ministro Trillo, Andrés Ayala) si sigue dando cobertura y alas a las pretensiones de la oligarquía cartagenera. Las tensiones provocadas en el PP regional por la patronal de Cartagena, COEC, al solicitar un debate "ad hoc" cara a la reforma del Estatuto de Autonomía, sólo parece el principio de una gran fractura probable entre Valcárcel y Trillo en la lucha por el poder en la Región. Y Ponce la primera víctima de ese "debate sereno" del que el presidente habla con la boca pequeña porque es de los murcianos que más detestan que se plantee siquiera.

Una región que también puede ver desaparecer "de facto" a su centenaria Asociación de la Prensa, si se confiman los insistentes rumores de sus graves dificultades económicas por endeudamiento con algunas entidades de crédito y ahorro. El actual presidente, Juan Antonio Heras, apoyado como candidato oficialista y de continuidad pero con una legitimidad cuestionada (fue elegido recientemente tras una convocatoria de elecciones de procedimiento irregular y resolución más que discutible por no estar contemplada en los vigentes estatutos), y exjefe del gabinete de Patricio Valverde aparte de vinculado familiarmente a la firma avícola "Pujante", de Alquerías, va a proponer (¿a la Directiva o a la Asamblea?) alquilar la actual sede asociativa en el mejor edificio de la GranVía Escultor Salzillo (construido por Bartolomé Bernal Pareja en los años 60 del siglo XX para su familia, entre la que figuraba su hija y madre del actual fiscal-jefe del TSJ, Manuel López Bernal) para poder afrontar con su renta las deudas contraídas y el funcionamiento ordinario de la entidad. Ofrece, al parecer, como alternativa aceptar una oportuna oferta de caridad del Ayuntamiento de Murcia para que la Asociación de la Prensa traslade en precario su sede a un rincón del Palacio del Almudí sin cargo alguno para sus diezmados asociados.

Existe, y no se puede evitar ante esta sorpresiva situación de hechos que parecen casi consumados, la sospecha de que detrás de todo ande "Cajamurcia" como principal interesada, y acreedora importante, ojo, en hacerse finalmente con el entresuelo sito encima de su oficina de empresas, a un buen precio aprovechando las dificultades de una propiedad tan fraccionada y con responsabilidad colectiva pero también individual. La fórmula de alquiler con opción de compra parece sería suicida para el casi único patrimonio de sus periodistas asociados y tasado en su día muy por encima de los 100 millones de pesetas. Hay quien piensa en solicitar una auditoría urgente antes de tomar una decisión tan estratégica y saber, sin presumir nada escabroso, qué hizo el anterior presidente (cuyo vicepresidente era precisamente Heras) con los ingresos procedentes de los fondos de formación, el convenio con la Fundación "Integra" y del patrocinado Anuario elaborado por los asociados. Sería muy conveniente para evitar, ahora y en el futuro, cualquier sombra de duda interesada sobre Felipe Julián desde fuera de la profesión.

lunes, 15 de mayo de 2006

Los amigos murcianos de Zaplana

El ahora cuestionado político cartagenero Eduardo Zaplana mantiene en la Region de Murcia excelentes relaciones políticas y de amistad, desde su época de secretario en Benidorm de las Juventudes de UCD. No es ningún secreto para lectores de buena prensa, que su interlocutor telefónico en las cintas publicadas del "caso Naseiro" que le involucraban, era el entonces responsable de las actividades culturales de la "Expo-92", el exconcejal de UCD en el Ayuntamiento de Murcia, Alfonso Riera, de la mano del murciano subsecretario socialista de Cultura, José Manuel Garrido Guzmán (un hermano suyo, profesor de Derecho en la UA, fue luego subdelegado del Gobierno de Aznar en Alicante por decisión de Zaplana). Ruiz Gallardón ya trató, sin suerte en aquel momento, de expulsar del PP a un Zaplana que era bastante intocable por la gran cantidad de donativos que aportaba su concurso a Génova 13. Ahí nació también su estrecha amistad con el periodista Pedro J. Ramírez, intacta hasta nuestros días.

A través de Riera, conoció Zaplana al intermediario de relaciones públicas, Chema Serrano (un protegido de Adrián Ángel Viudes desde su época municipal), y por concurso de ambos, supuestamente, Carlos Egea vio muy facilitada la expansión de "Caja Murcia" en la Comunidad Valenciana siendo Zaplana presidente de la Generalidad. Una foto publicada en los periódicos de la época, con un Egea más que satisfecho junto a un Zaplana "triunfador", selló públicamente esa alianza de intereses puntuales (que no gustó mucho en su día ni a "Bancaja" ni a la CAM pese a su escasa incidencia final) procurada por amigos comunes. La recompensa vino enseguida para los "facilitadores" en forma de asesorías cultural y de comunicación en la entidad expandida, con retribuciones finales nunca bien conocidas por el público impositor. Ahí se gestó, la más que opaca en su presupuesto, "Semana Grande", susceptible aún de pesquisas por la Fiscalía si procede.

Es a Riera a quien se dirige Zaplana, en plena época socialista, para que le ayude a ganar algún dinero y, según expresa el mismo exministro, comprarse un automóvil "Opel", del modelo "Vectra" con seis vávulas. En ese momento, Zaplana, con despacho abierto de abogado en Benidorm, estaba alejado a la fuerza de la política por sus enfrentamientos con los liberales alicantinos de Segurado, y posterior expulsión bajo sospechas, liderados por el abogado Luis Carlos Amérigo, hoy cónsul de México, y confesaba estar falto de dinero. No ocultaba su necesidad de estar en política para no pasar estrecheces. El único amigo que le ayudó en aquella época (se decía en Benidorm que don Eduardo no sabía redactar ni un contrato, incluso se dudaba, sin fundamento, de que realmente se hubiese licenciado en Derecho tras ir de la Universidad de Alicante a la de Valencia, y viceversa una y otra vez) era el hombre de negocios y promotor inmobiliario alcoyano, Joaquín Domenech, hoy segundo de a bordo en la alicantina "Ciudad de la Luz", quien le mandaba como clientes a todos los jóvenes argelinos que tenían problemas con la Policía, ya que era de su propiedad en aquel momento el local alquilado al Consulado de la República de Argelia en Alicante.

Pero no eran esos los únicos amigos de Zaplana en la Región de Murcia. El conocido abogado democristiano y exdirigente nacional de las Juventudes de UCD, Jaime Sánchez-Vizcaino, hoy flamante secretario del consejo de administración de "Polaris World" y de "Aeropuertos de Murcia", dice la rumorología que gracias a sus buenas relaciones con Carlos Valcárcel, Sánchez Carrillo y Tomás Fuertes, y el alto funcionario de la Comunidad Autónoma, todavía destinado en el INFO, el jurista y hombre de la máxima confianza de Patricio Valverde desde su época en el INFO, Francisco Martínez Ruíz, figuran entre quienes no ocultaban, ni ocultan, para nada una relación estrecha con el entorno del ya presidente de la Generalidad, de donde indirectamente salió más de un buen negocio para otros amigos del también exjoven centrista y jefe del gabinete presidencial, el auditor de cuentas Juan Francisco Sánchez, enseguida relacionado por ellos y otros militantes del PP, con una nueva compañía de seguros de nombre "Metrópolis".

No son tampoco los únicos. El célebre diputado popular murciano Jesús Martínez Pujalte (hermano de su exjefe de gabinete, Antonio Luís Martínez-Pujalte); el alcalde de Murcia y profesor de la UMU, Miguel Ángel Cámara, secretario regional del PP; el catedrático Javier Guillamón, miembro del consejo de administración de la CAM hasta 2007 por insistencia y la intransigencia del exministro, y el exrector de la Universidad de Murcia, José Ballesta, pasan por ser los hombres de Zaplana dentro de sus planes políticos en la Región de Murcia, para colocarlos en la esperada situación de orfandad que va a producir la casi segura marcha de Ramón Luis Valcárcel, después de doce años al frente de la Región, e impedir así el ascenso a San Esteban de su rival interno eterno y paisano, el también exministro Federico Trillo-Figueroa, aspirante a jubilarse en esta periférica "Baviera", que ya desea, a su medida, por fín biprovincial. (ZPI)

viernes, 12 de mayo de 2006

El cuñado de Cerdá y dos más

Está visto que los políticos murcianos en Madrid no atraviesan su mejor momento. El campanazo de lo de Zaplana, del que todavía no se desprenden diligencias penales, pero presuntamente beneficiándose en lo personal de la realización de obras (encarecidas artificialmente) en "Terra Mítica", y la vergüenza ajena que provoca el despropósito de Martínez Pujalte mofándose del presidente del Congreso delante de las cámaras de TVE, y por tanto de toda España, sólo es comparable a la situación relativa de Trillo tras el accidente del "Yak-42", por lo que aún queda por saber de la responsabilidad política de un cartagenero que llegó a la cumbre de la pirámide del Estado y que ahora parece está moviendo la provincialidad de Cartagena para llegar un día a ser presidente de nuestra Comunidad Autónoma con ayuda de la UCAM. El primero es un liberal de boquilla, y los segundos, miembros del Opus Dei (no se entiende muy bien como gente, que suponemos piadosa, aparentemente parece carecer de esa virtud en política), evidentemente poco ejemplares para los aspirantes jovenes a ingresar en una institución gobernada desde una prelatura personal en Roma. (De eso podría ilustrarnos mejor el catedrático Javier Guillamón).

Lo del cartagenero Zaplana es muy grave si se prueba la denuncia con acusación de que ha cobrado comisiones estando en activo como político. La acumulación de viejas sospechas de corrupción tratan de sacarlo de la vida pública. Significa, de momento, su casi seguro final como portavoz del PP en el Congreso, precisamente en un delicado trance para su partido si también fuese cierto el insistente rumor que circula por Madrid y Valladolid, en el sentido de que la cuestionada empresa "Forum Filatélico" ha estado financiando, si no al PP como tal, supuestamente sí a algunas de sus fundaciones vinculadas. Ahora se ha sabido, de fuentes de las asociaciones de consumidores, que el "zaplanista" murciano Martínez Pujalte votó en 2003 en las Cortes contra un control del Ministerio de Economía y Hacienda sobre sus actividades de compra-venta de sellos; que el Gobierno del PP dió, entre 1999-2003, subvenciones de formación a "Afinsa"; y que se da la circunstancia, de que hay bastantes militantes del PP entre los delegados de ambas empresas, ahora intervenidas por el juzgado, en toda España. En el caso de Murcia, quien representaba a "Fórum Filtélico" también lo hacía, al parecer, como interventor del PP en una mesa electoral de Espinardo, sin que ello suponga prejuzgar nada.

Que Zaplana salga ahora como un presunto delincuente y como un presunto político corrupto, es lo que le faltaba a Rajoy después del espectáculo bochornoso de un cualificado diputado de la Oposición, por portavoz de Economía, y cuñado de nuestro consejero de Agricultura, Antonio Cerdá, alardeando publicamente de desacato a la actual tercera autoridad del Estado, como es el socialista, Manuel Marín, ex vicepresidente de la Comisión Europea. Martínez Pujalte ha pecado de soberbio, para ser un católico militante, y esa falta es un pecado capital, extensible a lo que también le hizo al actual ministro de Defensa y que, por encima de diferencias políticas, debiera llevarle a pedir perdón a ambos por un principio elemental de humildad. Lo contrario significa "hemorragia" de votos centristas para el PP.

Si los que tenemos mejor "colocados" en Madrid atraviesan una crisis que puede acabar de un tajo con su situación de poder, y Valcárcel ha perdido pié del todo en Génova 13, se demuestra que no sale gratis que un señor de la carretera de Alcantarilla, como Pujalte, o que un señor de la Cartagena marista, como Trillo, se convierta uno en el primer parlamentario expulsado del hemiciclo desde 1977, y que el otro no acepte sus errores políticos ante el Ejército cuando hay por medio más de 6o cadáveres por presunta negligencia de la cadena de mando en el Ministerio de Defensa, sin excluir a un ministro tan supervisor como él era. Y todo eso, en plena pelea de los gobernantes murcianos, del PP, con los gobiernos autónomos socialistas de Andalucía, Aragón y Castilla-La Mancha, provocándoles, además, con el manipulador slogan "Agua para todos".

El caso de Zaplana nos toca menos de lleno por su vinculación con Benidorm desde que enviudara su tía paterna, una mujer que reclamó a Cartagena el concurso del padre del político, un militar de Marina, para administrar los sustanciosos negocios que heredó del marido, y por tanto su repercusión política lo sera mucho más en la Comunidad Valenciana que en la Región de Murcia. Pero llegadas sus horas, definitivamente bajas, ahora todo el mundo recordará su condición de cartagenero para que quede más que claro que no es benidormí, ni alicantino, ni valenciano y que, si es lo que dicen, es un "chorizo" porque es "murçiá". Hay pocas dudas de que don Eduardo se acerca, si no está ya, a la fase final de su carrera política tras amenazar veladamente con crear un partido para competir con el PP en la Comunidad Valenciana y no parar de importunar en Alicante dentro de la guerra interna desatada y que le ha vuelto un político incómodo hasta para sus propios seguidores y partidarios. Ni Martínez Pujalte ni Javier Guillamón, que tanto deben a Zaplana, han salido en su pública defensa. Es condición humana.

Desde las filas socialistas no se lo van a poner fácil una vez que han visto el silencio de estruendo en el PP. Zaplana está muy solo porque la denuncia sugire la existencia de una trama para delinquir. Al parecer, para algunos, es posible vivir en la impunidad y en la desigualdad ante la ley pese a la nueva ética que promueve Zapatero desde la Fiscalía General del Estado. En Valencia, Alicante y Benidorm lo que ha comenzado a pasar se esperaba desde hace mucho tiempo porque nadie se mostraba dispuesto a pagar por otros si se producía una inspección de Hacienda o una actuación de la Justicia. En su pueblo ya le llaman "Zaplata", y "Quiebra Mítica" al fracasado parque temático que promovió y se encareció hasta un 40% su construcción. Ahora más que nunca el cartagenero es prisionero de su expresada intención de estar en política para enriquecerse y, desde la obligatoria presunción de inocencia, hay quien se muestra convencido de que las circunstancias lo van a convertir en el "roldán" del PP. Detrás irán los alcaldes de Orihuela y Torrevieja en el linchamiento público. No les andará a la zaga el excuñado de Zaplana y exadministrador de la Academia General del Aire, amén de exconsejero de la CAM, el teniente coronel Justo Valverde, ya imputado en la investigación abierta por el fiscal de Valencia como exresponsable de contratación en "Terra Mítica". Ahora aparece también como presunto beneficiado de un pago en especie, parece que no declarado a Hacienda, para reformar su casa en la Ciudad del Aire, por un importe no inferior a los 40 millones de pesetas.

Nadie duda ya que habrá más denuncias contra Zaplana para justificar que Rajoy lo sustituya como portavoz popular en el Congreso de los Diputados. Lo cierto es que, desde hace años, los rumores apuntaban a supuestos negocios millonarios con los que siempre se relacionaba al ex ministro de Trabajo, ex presidente de la Generalidad Valenciana y ex alcalde de Benidorm. Ha sido "caer" su amigo Florentino Pérez, y empezar a complicarse la imagen pública de un Zaplana, que no se entiende tan provocador con todas las barbaridades con las que se relaciona su concurso o beneficio. Lo de este hombre parece que sólo ha hecho empezar y promete emoción hasta el final porque todos sus enemigos estarán ya afilando cuchillos tras una larga y paciente espera. No hay que olvidar su cuestión pendiente con el Tribunal de Cuentas, que le puede resultar letal, ni sus investigados presuntos negocios con el cantante Julio Iglesias. (ZPI)

jueves, 11 de mayo de 2006

Valcárcel no quiere una Cartagena que brille con luz propia

El presidente Valcárcel, más noqueado que nunca ante la falta de un funcionamiento mínimo de San Esteban, un palacio hoy paralizado y en manos de "talentos" políticos de la talla de Ruiz Vivo y Sánchez-Solís, se vió sorprendido por la súbita y oportuna petición de la patronal cartagenera COEC, apoyada por la Cámara de Comercio que controla Ginés Huertas, de introducir la provincialidad de Cartagena en la reforma del Estatuto de Autonomía, que él intuye va a dividir al PP en la Región y va a suponer la puntilla a su triste carrera política. No se equivoca al oponerse a una Cartagena que brille con luz propia al ser cabeza de una provincia con voz.

Ciertamente Valcárcel no da la talla para liderar un proceso de pacto, entendimiento y reparto de poder interno. Y él sabe muy bien de dónde, y de quién, le viene ahora este órdago, sólo para profesionales. Se trata, nada más y nada menos, que de aumentar el Presupuesto del Estado, de ganar dos Diputaciones y de tener más fuerza política en las Cortes al casi doblar nuestro número de parlamentarios en Madrid. Nadie duda de sus ventajas para la Región de Murcia. Sólo el susceptible de perder poder. Es su caso y el de sus amos, y también el de los jefes huertanos que tanto influyen en sus decisiones por proximidad y larga relación de años.

¿Le han abierto Trillo y Zaplana ese frente con la anuencia de Rajoy, al objeto de que quede patente su nivel de incompetencia? Desde Génova 13 le están gritando que se vaya, cumplida y recompensada con creces su "suprema" misión de apuñalar por la espalda, como Bruto, a quien fué su mentor político, Calero, para beneficio directo de los amigos íntimos de la familia de don Federico y del propio Fraga. ¿Se cree Valcárcel un estadista y no ve claro para qué se le ha estado utilizando todo este tiempo por quienes han llegado a darle órdenes, por teléfono a voz en grito, desde despachos próximos, situados al este y suroeste, a San Esteban? Los acontecimientos le han superado y lo han dejado inservible ante el papelón de Murcia región en la prensa europea por la especulación del suelo y el fraude del agua. No sabe ya dónde tiene su mano derecha tras el espantoso y oneroso ridículo que acaba de protagonizar en Londres.

Aparte de Trillo-Zaplana, ha sido la oligarquía cartagenera-pachequera quien le acaba de retirar su apoyo incondicional al plantearle una espinosa cuestión política que Valcárcel no tiene talla para lidiar, por ya acantonado junto a varios mediocres en un regionalismo hidraúlico que no da más de sí, e incapaz, parece, de afrontar el último año de su tercera legislatura sin asistencias orgánico-terapeuticas para poder aguantar el tirón del propio devenir de los acontecimientos ordinarios. ¿Dónde ha estado retirado las dos semanas de las últimas vacaciones de abril? Sus adversarios internos lo saben muy debilitado, y falto de entorno de nivel para salir airoso. Gómez Fayrén se puede caer del cartel en cuanto quieran la SER y "El País". Parece otro desesperado en busca de mejor destino. No acepta que estamos ante un cambio generacional, que le afecta.

El presidente, muy notorio desde el corte de mangas dado a los cartageneristas que le demandaban la provincia un 9 de junio de 1998 ante la Asamblea Regional, está por una Región huertana exclusivamente. En once años al frente de los destinos de esta tierra, no ha puesto en marcha ni siquiera el proceso de comarcalización que ahora esgrime como alternativa a la justa e histórica reivindicación cartagenera. De algo más fácil, los nuevos municipios, no ha querido ni oir hablar. Quienes principalmente le sostienen y manejan, pero no son visibles en el escenario, un ilustre ciudadano de Fortuna y otro no menos ilustre oriundo de Lorca, no quieren tampoco ni oir hablar de una Cartagena con suficiente entidad político-administrativa propia por el pié de igualdad que le procuraría una Diputación Provincial. Ya sería mucho más difícil para ellos dominar un policentrismo con voces propias. Por eso han venido evitando, todos estos años, el debate parlamentario sobre comarcalización las fuerzas murciano-centralistas instaladas en PP, PSRM-PSOE e IURM. La oligarquía cartagenera tampoco estaba unida y con fuerza. Ha tenido que esperar su oportunidad y capitalización gracias a la bonanza capitaneada por Rodrigo Rato.

Pero la entidad económica adquirida por Cartagena y su comarca natural (Hispania, Polaris World, Grupo Huertas Automoción, Grupo Licor 43, General Electric, Repsol, Caja Rural Regional, Alfonso García, Tomás Olivo, Mariano Roca Meroño, Mancomunidad del Taibilla, las cooperativas agrarias, Tomás Maestre, La Manga Club, Cavite, Fuentes, Navantia, los grandes intereses que defiende Andrés Ayala y los que protagonizan la familia Navarro-Valls, lo que significan Trillo y José Luis Mendoza, presidente de la UCAM, lo que prospera alrededor de la Universidad Politécnica...) no se conforma ya con ser capital de una comarca, como pueden serlo con mucho derecho Caravaca de la Cruz, Yecla o Cieza. Ha roto el corsé que le pusieron Pérez Crespo y la Armada a la oligarquía cartagenera en un momento de declive y crisis industrial de la ciudad, un cambio de época y escasas situaciones de poder de los cartageneros tras el fín del franquismo, y que ahora se traduce en reivindicaciones que es obligatorio atender en la coyuntura apropiada e irrepetible de las reformas estatutarias y constitucionales en marcha, para hacer justicia con una ciudad castigada por su beligerancia en el XIX, con el no reconocimiento de su rango de capital de una provincia en 1833, cuando sí lo fueron otras más pequeñas de su entorno como la misma Murcia, Alicante, Almería o Albacete.

El PSRM-PSOE llegó a plantear un referendo en los años 90 pero el ciezano Ramón Ortíz estaba en la trama antiprovincialidad, junto al comunista huertano, Pedro Antonio Ríos porque supondría, tal vez, la desaparición de IU de la Asamblea Regional. La CROEM, dominada por el pasado más triste, se opone frontalmente pero ahora, si persiste, será el final de su burócrata-jefe. Los sindicatos UGT y CCOO, no se sabe bien por qué, no entienden qué se pretende siendo dos provincias. La gaceta local por antonomasia, ve ahí peligrar una hegemonía mediática que no sabe que ya ha perdido por codiciosa en sus intereses económicos y desleal con la opinión pública regional; mucho más con la cartagenera. Además, en Murcia no desean que el litoral sea la provincia de Cartagena, como sería natural. Si, al final, tiene que haber provincia, prefieren pues que sea tierra adentro sin Águilas, ni San Javier ni San Pedro. Y Mazarrón, a regañadientes, procurar que tampoco. Bastante tienen con Cartagena, La Unión y Los Alcázares. Capidisminuidos mejor para que la oligarquía murciana siga controlándolo casi todo sin ruido.

Sin embargo, llegar al final no va a ser fácil. Si Zapatero no lo ve claro, no habrá provincia.Él es la clave política para conseguirlo y el pachequero Pedro Saura, un convencido a favor, el instrumento. Cataluña no ha conseguido cinco provincias nuevas en su reformado Estatuto. Moncloa puede temer que a Cartagena quieran seguirle Vigo, Gijón, Ferrol, Jerez, Algeciras, Antequera, Gandía o Denia, Elche, Játiva, Talavera, Ponferrada, Plasencia, Puertollano, Motril, Calahorra o Lorca. El Senado también tiene algo que decir con esa reforma intermedia de la estructura territorial española. En la Asamblea Regional, Cierva y Celdrán están, por cartageneros insignes, a la fuerza en la "pomada" pero el grueso del Grupo Popular es de la disciplina de Valcárcel. La alcaldesa Barreiro se reserva hasta que llegue su momento pero el Ayuntamiento terminará estando a favor con la ayuda de los socialistas hermanos Alonso. La sociedad cartagenera actuará toda a una, diga lo que diga un Valcárcel ya contra las cuerdas por abandonado de su desodorante. De ahí al arzobispado de Cartagena, un paso de la mano de Navarro-Valls, Trillo y Mendoza. Ahora o nunca la rehabilitación de la catedral románica de Santa María del Mar. Y la vuelta del sucesor de Santiago a la verdadera sede primada de España.

Torre Pacheco, La Unión y Fuente Álamo no se opondrán a cambio de ventajas pactadas. Mazarrón puede hacer lo mismo. Y San Pedro, San Javier y Los Alcázares, se resistirán algo más. La incógnita es Águilas (viven muchos más aguileños en Cartagena que en Murcia) por estar en la orbita de Lorca. Valcárcel no la soltará con facilidad si los límites de la nueva provincia no deben coincidir a la fuerza con los del litoral. Existen demasiados negocios inmobiliarios a la vista como para soltar ese municipio. Y la moneda de cambio puede ser el Mar Menor, por su ya inferior potencialidad y saturación claras. Menudo año queda por delante. Y al primer mártir de la causa, Carlos Martínez, habrá que ir pensando cómo reconocerle su atrevimiento del otro día en la Politécnica al retar públicamente a Valcárcel. Él sabía muy bien lo que hacía al abrir "fuego" a sabiendas de que iba a pasar la noche en la Comisaría de Policía. (EA)

miércoles, 10 de mayo de 2006

Un "garganta profunda" para la SER

Los correspondientes "servicios" del palacio de San Esteban andan de cabeza tratando de averiguar con absoluta seguridad quien es el "garganta profunda" que, desde su complejo de culpabilidad y más sincero arrepentimiento, está sirviendo en bandeja todas las pistas a los servicios informativos de la Cadena SER en Murcia sobre la presunta corrupción estructural del PP murciano. Parece la hora de un inesperado ajuste de cuentas entre lobos de la misma camada pero con diferente cantidad de horas de vuelo. En el partido en el poder todo es ya conspiración.

Existen sospechas de todo tipo ante la secuencia de "primicias" de una redacción no caracterizada hasta ahora, con la excepción hecha del tiempo que el periodista profesional Vidal Coy destilaba unos comentarios mañaneros que espabilaban al oyente murciano más dormido, por actuar de contrapoder mediante un periodismo de calidad y referencia, al igual y junto a medios emergentes y libres de última generación como "Economía Avanzada", "En Cieza Digital", "Gaceta del Mar Menor" o "Vega Media Press", cabezas de puente de la incontrolable proliferación que se avecina para mayor desgracia del polémico consejero Ruiz Vivo, varado ya para siempre en el "Agua para todos" e instalado en la prebenda de la "Gala de la Región".

El caso es que el perfil de la privilegiada fuente informativa de la SER parece corresponder a un varón bien parecido, maduro, profesional de prestigio, socialmente muy relacionado y, por supuesto, el mejor informado. De nombre, al parecer común y corriente aquí, está sugiriendo las líneas de investigación a seguir y los personajes a marcar, desde la certeza de no errar ni por equivocación. El método es lo que mejor ha introducido este personaje discreto, pero de mente muy despejada, en Radio Murcia para que todo el esfuerzo desplegado por razón de fuerza mayor recoja frutos con la máxima frecuencia posible y luego se sepan administrar con talento los tiempos y las dosis para conseguir su adecuada repercusión en la opinión pública regional.

La estricta y buena preparación profesional de este "garganta profunda" casi a la fuerza, garantizan la solvencia y calidad de la información manejada, y dan seguridad sobre el no agotamiento de esta cantera descubierta en el momento oportuno para las necesidades de la estrategia empresarial de la SER tras haber sido excluido su patrón, Polanco, de las concesiones del Tercer Canal de TV en Murcia. Sus fuentes dentro y fuera de la Comunidad Autónoma son privilegiadas y, especialmente, dentro de la Agencia Tributaria y la Policía, más que excelentes. Dicen que es un viejo zorro en el arte del ajedrez desde su época ¿en los Maristas?.

Por otra parte, las sorpresivas declaraciones de un periodista "amateur" metido en pequeña política municipal, en el sentido de que se retira de ella por problemas de salud, que son ciertos y serios pero no irreversibles, parece más bien una estrategia conducente a provocar que la Justicia se compadezca de él por sus dolencias crónicas y poder así afrontar mejor el calvario que, presumiblemente, se le avecina tras que se le relacione con presuntas conductas públicas un tanto heterodoxas aunque entre nosotros ya se hayan convertido en algo común por frecuentes. Tal vez muy bien aconsejado desde dentro de la judicatura por persona de su confianza, parece se fuga hacia delante antes de que se presenten los problemas derivados de algunas de sus actuaciones de los últimos años y provocar, tal vez, que no se ponga el foco en él al hacer público un estado de salud que pudiera ser, o no, una verdad exagerada para jutificar una retirada a tiempo.

martes, 9 de mayo de 2006

Perspectivas pesimistas para 2006

La economía regional murciana tiende a empeorar en 2006-07. Su pilar básico, la agricultura de exportación, comienza a tener una seria recesión estructural por la competencia exterior en nuestros tradicionales mercados europeos. No es, obviamente, un problema de falta de agua. La competitividad de Holanda, Marruecos y Argentina es la que, realmente, está acabando con nuestras posibilidades de futuro en producciones de primor y calidad, en el tomate y en el limón. La actual campaña citrícola, la tradicionalmente más rentable en los últimos años, ha sido un desastre en 2005-06. Su Valor AñadidoBruto dentro de la economía murciana fué ya de - 1,65 el año pasado, según la Fundación de las Cajas de Ahorro Confederadas, entre ellas la CAM y Cajamurcia.

Esto explica, en gran parte, el fuerte déficit de la balanza exterior murciana y su tasa de cobertura tan desfavorable desde el año 2000. Murcia no parece preparada para digerir la globalización con unos mercados universales prácticamente abiertos. Todo indica que este año será mucho peor enmedio de un crecimiento del PIBR que tendrá poco que ver con la tasa del + 3,56% alcanzada en 2005, sólo por detrás de Madrid, Andalucía y Cantabria pero por delante de La Rioja (3,39%), Comunidad Valenciana (3,37%) o Cataluña(3,32%). Ese particular escenario nuestro tiende a desaparecer rápidamente ayudado por la vertiginosa alza en el precio del petróleo.

La Construcción, cuyo VAB en 2005 alcanzó el + 6,48%, hasta ocupar el liderato español, también va a sufrir una fuerte desaceleración este año y a provocar un importante desempleo como consecuencia de la contracción generalizada de la demanda de vivienda turística-residencial, tanto en la costa como en el interior, y de la caída en la compra de pisos y viviendas unifamiliares por los precios tan elevados que han alcanzado ante la perspectiva de una subida de los tipos de interés el próximo mes de junio, el recortado poder adquisitivo de los murcianos como consecuencia de la inflación más alta de España y, finalmente, una menor capacidad de endeudamiento ante una precariedad laboral que no remite en nuestra región.

El principal componente del encarecimiento de la vivienda entre nosotros es el precio del suelo urbanizable y la especulación en busca de altos beneficios de las empresas promotoras; los materiales de construcción y la mano de obra, apenas han experimentado alzas notables en 2005. Un 25,6% de la mano de obra murciana ocupada (unas 200.000 personas) estaba en este sector, sin contar el empleo inducido ni los trabajadores ilegales. El impacto de la recesión sectorial puede llegar a ser brutal, hasta afectar seriamente al empleo de la población inmigrante.

Una de las reacciones de algunos promotores murcianos ante coyuntura tan adversa, por lo menos hasta el año 2010, y la resistencia de un sector muy concienciado de la sociedad civil ante la ocupación intensa del territorio, especialmente el litoral todavía libre de edificaciones, ha sido orientar su actividad hacia países más exóticos y muy necesitados de inversión foránea para comenzar a desarrollar su sector turístico, hoy en destinos inexistentes. Una aventura que no les resultará tan fácil como creen por necesitar una infraestructura operativa mínima tan lejos de Murcia como Rumanía o Bulgaria, Méjico o Brasil, y República Dominicana. Y que les puede hacer volver fracasados a donde fueron rechazados por su sesgo, precisamente tercermundista, y tener que dedicarse a construir para alquilar con, obviamente, rentabilidades mucho menores de las que se han llegado a alcanzar.(NEM)