MADRID.- Ciudadanos ya no quiere ser un partido bisagra. Cuatro años después de
irrumpir por primera vez en casi todos los Parlamentos autonómicos (se
quedó fuera de tres), Albert Rivera mira más alto. Ciudadanos busca un
salto cualitativo que le sitúe dentro de la mayor parte de los Gobiernos
regionales, con la vocación de poder encabezar algunos. El partido
lanza en febrero su proceso de primarias con una profunda renovación de
sus candidatos a las autonómicas con el objetivo de disputar al PSOE y
al PP el poder territorial, recuerda hoy El País.
El tablero político en España está ya consolidado en cuatro —ahora quizá
cinco— grandes partidos, pero el poder territorial se resiste todavía a
las nuevas formaciones. El PSOE y el PP se repartieron los Gobiernos de 13 comunidades en las últimas elecciones autonómicas
y municipales de 2015, con la excepción de Cantabria y Canarias, donde
gobiernan partidos regionales. Desde las últimas elecciones, Ciudadanos
ha envejecido mejor que Podemos, sumido en una grave crisis interna.
El
partido de Rivera llega en cambio a las urnas con la expectativa de
crecer y de entrar en la mayor parte de los Gobiernos autonómicos, ya no
solo de facilitarlos. Y con posibilidades de tener la llave en todas
las autonomías.
La marca está en alza, pero gran parte de los candidatos de
Ciudadanos en 2015 eran unos desconocidos, y en el partido saben que
necesitan cabezas de lista sólidos si quieren disputar de verdad el
poder territorial a socialistas y populares.
En la falta de cuadros es
donde más se percibe la bisoñez de las nuevas formaciones, aunque
Ciudadanos empieza ya a construir una plantilla con figuras potentes más
allá del líder. En mayo se presenta en las dos principales ciudades,
Madrid y Barcelona, con candidatos capaces de ganar — Begoña Villacís y
Manuel Valls—, una meta a la que no aspiraba hace cuatro años.
La ejecutiva de Ciudadanos aprobará hoy el calendario de las primarias para todos los cabezas de lista en las comunidades autónomas (obligatorias) y en los municipios de más de 400 afiliados,
que se celebrarán a lo largo de este mes de febrero. Y promoverá una
renovación profunda de sus candidatos, una tarea en la que lleva meses
trabajando el secretario de Organización, Fran Hervías, en el papel de headhunter.
Como mínimo, el proceso de primarias va a renovar a seis de los 13
candidatos autonómicos, según distintas fuentes consultadas en el
partido. Al menos en Asturias, Cantabria, Aragón, Navarra, Comunidad
Valenciana y Canarias, (el 46%) Ciudadanos tendrá en mayo un cabeza de
lista distinto al de 2015. Podrían ser más.
El candidato de Castilla y
León, Luis Fuentes, por ejemplo, tiene detractores en la dirección. Y no
está previsto el cambio de Ignacio Aguado, cartel en la Comunidad de
Madrid, aunque tampoco despierta entusiasmo en algunos miembros de la
ejecutiva.
Ciudadanos reivindica su mentalidad empresarial. El partido prefiere
competir con candidatos capaces de lograr un buen resultado por encima
de las lealtades partidistas. Por eso la política es de puertas abiertas
a los independientes, a los que si hace falta se encuentra a través de
plataformas digitales como Linkedin, como se ha operado con los consejeros independientes
del nuevo Gobierno andaluz.
“En Andalucía hemos actuado como una
multinacional para elegir a los cargos públicos”, resume una fuente de
la cúpula. Se busca, sobre todo, a especialistas que hayan ocupado
cargos que les dieran a conocer, del mundo universitario o de colegios
profesionales. En Asturias el candidato será uno de estos fichajes, el
exrector de la Universidad de Oviedo Juan Vázquez.
Además de los independientes, Rivera también promociona a cargos
internos con proyección, aunque para eso tenga que vaciar a parte su
banquillo en el Congreso. Es el caso de Toni Cantó, candidato a la
presidencia de la Comunidad Valenciana, y Félix Álvarez, Felixuco, que encabezará la lista en Cantabria, ambos diputados.
La negociación del Gobierno andaluz
restrasó el calendario de primarias (estaba previsto en enero), así que
toda la maquinaria está volcada ahora en la selección de candidatos a
contrarreloj.
Lo inusual en el caso de Ciudadanos es que el terremoto en las listas
sucede sin que apenas afloren incendios internos. “Nadie está dando
problemas”, se felicitan en el partido. Ya avisó Rivera a los líderes
territoriales: “Quien esté pensando en las listas, no irá en las
listas”.
La disciplina es marca de la casa. Un ejemplo: la líder en Aragón,
Susana Gaspar, ha anunciado obediente su dimisión esta pasada semana
alegando que quería pasar más tiempo con su familia, justo a escasas
semanas de las primarias. El nuevo cabeza de lista apoyado por la
dirección aún no se conoce.
Hay primarias en todas las comunidades pero la disputa será verdaderamente reñida solo en algunas, como en Murcia.
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