MADRID.- Las empresas españolas son más
optimistas que la media europea sobre la evolución de sus negocios
durante el año que viene, especialmente en cuanto al comercio exterior,
pero sus expectativas son de las que han sufrido un recorte más drástico
respecto a las de 2018.
Así se desprende de la
Encuesta de Perspectivas Empresariales 2019 de Eurochambres, la
asociación que agrupa a las Cámaras de Comercio europeas, y en la que
han participado 45.000 empresarios de 26 países europeos, 3.073 de ellos
españoles.
Estos datos, difundidos hoy por la Cámara de Comercio de
España, muestran que hay confianza empresarial en los 22 países
participantes, con España por encima de la media de la UE y de países
como Alemania, Italia, Países Bajos o Francia (el más pesimista de un
listado liderado por Finlandia).
En cualquier caso,
España se encuentra en el puesto 16 de los 22 países participantes en
cuanto a nivel de confianza y llama la atención que el recorte de sus
expectativas entre 2018 y 2019 ha sido de los más pronunciados, junto a
Portugal y Bulgaria y sólo por detrás del gran retroceso sufrido en
Eslovaquia.
En el ámbito en el que despunta el
optimismo español es en el de exportaciones, ya que las expectativas
netas españolas son veinte puntos porcentuales superiores a las de las
compañías de la Unión Europea, aunque son cinco puntos inferiores a las
de 2018.
En cuanto a ventas nacionales, las
expectativas de los empresarios españoles superan en un punto las
europeas, aunque caen quince puntos respecto a las del año anterior,
mientras que en materia de empleo son también un punto más optimistas
que la media de la zona euro, pero retroceden hasta en siete puntos.
Por lo que se refiere a las inversiones, la confianza de los
empresarios cae de un año a otro ocho décimas y aún así se sitúa tres
puntos por encima de la media europea.
Entre los
factores que condicionarán la actividad empresarial los más citados por
los empresarios españoles son la demanda nacional (argumentado por el
73,6 % de los encuestados), los costes laborales (48,5 %), la demanda
externa (26,1 %) y la escasez de personal cualificado (25,9 %, el único
porcentaje inferior a la media europea, que es del 40,1 %).
El cambio más significativo de las expectativas para 2019 de las
empresas españolas es la menor importancia relativa que se da al precio
de la energía y las materias primas como factor que limita su actividad,
que ha pasado del tercero más preocupante al quinto.
El "brexit" sólo es citado por el 2,4 % de los empresarios españoles consultados y por el 4,7 % de media europea.
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