martes, 23 de septiembre de 2008

Navantia Ferrol-Fene inicia la construcción del primer buque anfibio para la Marina de Australia

FERROL.- Los astilleros de Navantia en Fene y Ferrol iniciaron hoy la construcción del buque ALHD1, el primero de los dos buques anfibios para la Armada australiana que construirá la empresa naval pública española en colaboración con los astilleros Tenix de Australia, en un contrato que supone 915 millones de euros para Navantia.

Los actos comenzaron a las 11.00 horas, con la presencia del director del astillero de Ferrol, Ángel Recamán, y del jefe del programa ALHD, Jorge López Novo, junto con una delegación australiana en la que participaban responsables de la empresa Tenix. Se inició el rotulado y el cortado de las chapas del barco, con dos planchas de cubierta con un peso de 1,87 y 3,5 toneladas.

El contrato para la construcción de los dos buques anfibios, junto con el diseño y tecnología para tres nuevos destructores basados en las fragatas F-100 españolas, fue firmado el 9 de octubre de 2007 en Canberra. Navantia percibirá 1.185 millones de euros, de los que 915 se corresponden a la construcción de los barcos, en un acuerdo que supuso el mayor contrato firmado hasta el momento por la empresa naval.

Navantia estima que, aproximadamente, un 80% del programa de construcción de buques se acometerá en España, mientras que el resto será ejecutado por Tenix. Supondrá para Navantia unas 9.347.700 horas de trabajo, mayoritariamente para los astilleros de Ferrol y Fene.

Los buques para Australia tienen unas dimensiones similares al Buque de Proyección Estratégica de la Armada española, botado el 10 de marzo de este año. Es el mayor buque militar diseñado y construido por Navantia y cuenta con 232 metros de eslora, siete de calado y 32 de manga.

La ejecución del encargo de Australia, junto con los proyectos que se acometen para la Armada española, dotarán de carga de trabajo a los astilleros de la ría de Ferrol hasta aproximadamente el año 2014.

Protesta sindical

En coincidencia con el acto de inicio de la construcción de los buques para Australia, el Comité de Empresa de Navantia Ferrol realizó una protesta sorpresa para denunciar la falta de avances en la negociación del Plan Industrial comprometido en diciembre de 2004 tras la última reconversión que supuso la desaparición de Izar y la creación de la nueva compañía.

En presencia de los directivos de Navantia y los representantes de la comitiva de Australia, los representantes sindicales realizaron una protesta a las 11.00 horas en el taller de elaborado del astillero ferrolano. Desplegaron una pancarta en la que reclamaban la negociación del Plan Industrial que deberá definir el futuro de los astilleros y de las distintas áreas de negocio del grupo. También exigen que se avance en la negociación pendiente sobre la situación de la industria auxiliar y del convenio colectivo.

A través de un comunicado de prensa, el presidente del Comité Intercentros de Navantia y del Comité de Empresa de Ferrol, Ramiro González (CC.OO.), aseguró que las negociaciones son "necesarias para una mejor posición de la empresa que redunde no sólo en el empleo, en el diseño futuro, en políticas más adecuadas, sino también en poder satisfacer mejor las necesidades de los clientes".

Los sindicatos iniciaron en septiembre, con un paro de dos horas y con la recomendación a los trabajadores de que no se realicen horas extras, un calendario de movilizaciones motivado por la falta de avances en la negociación y por el "incumplimiento" del "acuerdo verbal" de incremento de las plantillas.

En concreto, los sindicatos reclaman la incorporación de 44 operarios en el conjunto de los astilleros, 22 de ellos en Navantia Ferrol, de forma casi inmediata, con contratos de dos meses en pruebas que se conviertan en indefinidos. Sin embargo, pese a haberse realizado todas las pruebas pertinentes, la dirección de Navantia propuso una incorporación progresiva y con contratos temporales de seis meses.

El Comité ya reclamó al Gobierno que adopte "medidas políticas" contra los directivos de Navantia y de la SEPI (Sociedad Estatal de Participaciones Industriales), a los que acusan de "mentir" sobre los acuerdos adoptados en 2004, y de "incumplir" reiteradamente los compromisos posteriores.

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