"Lo peor que le ha pasado a la Bahía de Portmán es que su regeneración haya estado en manos de los sucesivos gobiernos del PP desde 2011 hasta 2018", según Fernández, quien indica que la actuación de Francisco Bernabé y del Partido Popular "ha sido una absoluta vergüenza y una chapuza, que ha acarreado un retraso de nueve años por proyectos fallidos, desaparición de documentación, adjudicaciones recurridas y anuladas, y sentencias de la Audiencia Nacional y del Tribunal Supremo contra las actuaciones de sus Gobiernos".

Para la socialista, en el proceso "se han visto dos formas muy diferentes de hacer política: una, la del PP, centrada en los intereses particulares de unos pocos empresarios y de espaldas a las peticiones de los vecinos; y otra, la del Gobierno socialista, que ha puesto a disposición de la regeneración de la bahía los recursos económicos suficientes, garantizando la seguridad de los vecinos y el medio ambiente para cerrar definitivamente este capítulo".

"Desde el Gobierno de España se ha generado consenso con las asociaciones y la sociedad, y se ha trabajado para abrir nuevas posibilidades de futuro para Portmán, La Unión y sus vecinas y vecinos. Además, el Ejecutivo nacional va a invertir un total de 60 millones de euros en el desarrollo de las obras, que podrían reanudarse en 2023", ha afirmado Fernández.

También ha recordado que solo con gobiernos socialistas ha avanzado con garantías y con presupuesto suficiente esta regeneración, y que el Ministerio de Transición Ecológica ha garantizado que el proyecto será totalmente ejecutable y contará con todas las garantías desde el punto de vista medioambiental y para la salud de los vecinos de la zona.

"Además, el Gobierno de España ha escuchado las demandas de los vecinos y vecinas, así como del Ayuntamiento de La Unión, de integrar, en el proyecto de regeneración, la solución al puerto de uso tradicional y deportivo".

"El PP es el responsable de los retrasos acumulados durante todos esos años. Una sentencia del Tribunal Supremo paralizó las obras de regeneración por la chapuza administrativa. A esto hay que añadir los graves problemas técnicos detectados en la ejecución del proyecto, que generan un peligro para la seguridad de los vecinos, para la salud y para el medio ambiente", ha finalizado.