Vaya con Valle, como le ha dado la vuelta al partido: de ir perdiendo el PP por goleada resulta que quien ahora pierde son PSOE y Ciudadanos. Teodoro y López Miras, triunfantes, y doña Ana, doña Inés y don Conesa, fuera de la cancha por el momento.
De doña Isabel y su amigo Álvarez ya se sabía la intención de su voto, pero doña Valle ha sorprendido. Poco premio, tan solo un sillón en el consejo de Gobierno, para la de vidas políticas que ha salvado. El tiempo y el elector juzgarán la maniobra.
Yo no hubiera firmado la censura para luego incumplir el compromiso, soy muy antiguo, sigo creyendo en el valor de la palabra dada, pero tal vez de haberse negado a la firma y no poner en peligro el futuro del PP no hubiera habido sillón.
La cosa por ahora está así: a favor de la investidura de doña Ana, 22 votos, uno menos de la mayoría absoluta, eso contando con el del presidente de la Asamblea que, de no prosperar la moción, puede ver en peligro su alto cargo; en contra, 19 y 4 diputados que, por ahora, no se han pronunciado.
¿Estará pensando Moncloa cómo conseguir el voto que falta? El partido sigue, el culebrón nos tiene entretenidos pero hasta el minuto final de la votación aconsejo no dar nada por supuesto.
(*) Ex presidente de la Autoridad Portuaria de Cartagena y de la CHS
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