jueves, 12 de diciembre de 2019

El futuro de Europa / Félix de la Fuente *

Hoy toca hablar directamente de Europa, y digo directamente, porque, cuando hablamos de España, estamos hablando indirectamente de la UE. Queramos o no, todo lo relacionado con España afecta también indirectamente a la UE. La política de España afecta indirectamente a la UE y viceversa. Nos preocupa Europa, porque nos preocupa España, y nos interesa España porque nos interesa Europa.

Con la mejor intención del mundo, estos últimos días he dado publicidad en las redes del “Libro blanco sobre el futuro de Europa”, publicado en 2017 por la Comisión Europea. Creo que el ciudadano debe estar informado sobre los que dicen las instituciones de la UE sobre el presente y el futuro de Europa, más aún cuando se nos brinda la oportunidad de poder presentar ideas y propuestas, aunque luego, en realidad, creo que nuestras propuestas van a tener el mismo recorrido que las peticiones que dirigimos a los Defensores del pueblo o nuestras iniciativas legislativas populares.

Pues bien, después de un primer estudio superficial de dicha publicación, empiezo a dudar si he obrado correctamente dándole publicidad. ¿Por qué? Pues, porque al hablar de los logros de la UE, que reconozco son ciertos y muchos y que deberían darse a conocer mucho más de lo que hasta ahora viene haciendo la prensa, el libro tiene sólo una pequeña referencia a los retos sociales a los que todavía tiene que enfrentarse la UE y a los graves problemas que aún existen dentro de ella. 

Supongo que a los millones de europeos que todavía siguen en paro o con “sueldos de hambre” no les sirven de consuelo todos esos logros económicos y políticos, si no ven un rayo de esperanza y un interés sincero de los políticos por mejorar su situación. A mí no me serviría.

Este libro blanco nos presenta cinco escenarios para la UE del año 2025:

I Seguir igual

II Sólo mercado único

III Los que desean hacer más hacen más

IV Hacer menos de forma más eficiente

V Hacer mucho más conjuntamente

Espero poder hablar de ellos la próxima semana. Entretanto, y como introducción al comentario de esos cinco escenarios, quiero decir que frente al futuro de la EU tengo el mismo escepticismo que frente a la solución de los independentismos periféricos de España. 

No sé cómo se pueden compaginar los cuatro primeros escenarios con el artículo primero del Tratado de la UE que dice: El presente Tratado constituye una nueva etapa en el proceso creador de una unión cada vez más estrecha entre los pueblos de Europa. Tampoco sé cómo se puede compaginar los independentismos con la unidad del pueblo español

Puede que, ante tanto euroescepticismo y xenofobia como impera en Europa, parezca muy realista hacer una pausa en el proceso integrador de la Unión Europea, pero de eso a contradecir de una forma tan abierta al Tratado de la UE proponiendo un parón definitivo o incluso un retroceso hay muchas líneas rojas que se están sobrepasando.

Hay, además, en dicho libro frases que me preocupan. Una de ellas dice:

“El punto de partida para cada uno de los escenarios es que los veintisiete Estados miembros avancen juntos como Unión”. Demasiado bonito para que sea verdad. ¿Se han puesto de acuerdo los veintisiete en alguno de los problemas serios que ha tenido últimamente la UE?

Prometo seguir estudiando con más calma este libro y ojalá pueda emitir la próxima semana un juicio más positivo y optimista que el de hoy, Y les pido que hagan lo mismo para que con nuestra crítica positiva podamos seguir avanzando hacia una unión cada vez más estrecha de los ciudadanos de Europa.


(*) Ex funcionario del Parlamento Europeo


Enlace de este libro blanco: 

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