SAN JAVIER.- La concejala de la Coalición Independiente de San Javier (CISJ) y antes militante socialista, Arancha Espeso, garantiza que "José Hernández no va a seguir siendo alcalde de San Javier" y afirma que su grupo es partidario del cambio político en el municipio. No obstante, explicó que tampoco le va a dar "un cheque en blanco" al PSOE para pactar y advirtió a los socialistas de Princesa que su partido "va a luchar por la alcaldía".Los independientes comparecieron ante los medios de comunicación para acallar aquellos rumores que apuntaban a un pacto secreto con el PP para gobernar el municipio a cambio de 300 millones de pesetas para financiar su coalición. De este extremo no se llegó a hablar ni nadie preguntó por el precio de una coalición con los "populares", dispuestos a todo para que el centro-izquierda no se haga con ninguno de sus feudos históricos. En Águilas, las ofertas millonarias también cotizan al alza por parte de Valcárcel y los suyos en espera de un "abrazo del oso" a los concejales electos del MASd, cuyo líder, Pedro Gil, continúa imputado por un presunto delito de inducción al cohecho en el "caso de La Zerrichera" .
Espeso reconoció que han mantenido negociaciones con el PP regional y que les han ofrecido la alcaldía, además de la salida de José Hernández y de otros dos concejales, pero insistió en que "con el PP en el Ayuntamiento no es posible el cambio que nosotros propugnamos". También dijo que José Hernández todavía no se ha dirigido a ellos para dialogar, "aunque sí lo ha hecho con el PSOE".
La edil electa se mostró dispuesta a continuar negociando con los socialistas para alcanzar un acuerdo, pero considera que este partido "no actúa en clave local, que es lo que nos interesa a nosotros, y está bajo la tutela de la dirección del PSRM-PSOE, y nosotros no nos vamos a mover por los intereses de los partidos".
Asimismo, Arancha Espeso comenta que "para el PSOE la alcaldía es irrenunciable y nosotros consideramos que su candidata, Pepa García, es inexperta, porque un equipo de Gobierno es mucho más que un organismo que decide si se hace o no un carril bici, no puede ser una jaula de grillos".
Por su parte, fuentes del PSOE aseguran que le han ofrecido a Espeso ser la primera teniente de alcalde y portavoz del equipo de Gobierno, pero dicen que "la alcaldesa debe ser Pepa García, que logró más votos que ella".
La alternativa que se le ofrece desde el PSOE es la concejalía de Urbanismo y ser la primera teniente de alcalde mientras desde el PP, aparte de los 300 millones, no tienen inconveniente en cederle la alcaldía durante una de las dos mitades del mandato.
El alcalde en funciones de San Javier, José Hernández, ya habría puesto su cargo a disposición del Partido Popular y renunciado a su acta de concejal en la próxima legislatura, tal y como adelantó ayer el periódico "El Faro", órgano oficioso de un sector del gobierno autónomo en funciones.
La pérdida de la mayoría absoluta, según "El Faro", es la razón principal que ha impulsado a Hernández a retirarse de la política municipal, una decisión que ha sido valorada de diferente manera por las distintas formaciones políticas. Así, Arancha Espeso, cabeza de lista de la Coalición Independiente, manifestó durante la rueda de prensa que ofreció para “pedir tranquilidad” a los vecinos ante las negociaciones que se llevan a cabo para un pacto de gobierno en el municipio, que “nosotros hemos sido el único partido que ha solicitado la dimisión de José Hernández durante los plenos y el pueblo espera que se produzca un cambio con su partida”.
La número uno del PSOE, Pepa García, manifestó al mismo diario que “es lo coherente porque esperaban mayoría absoluta”, pero apunta que “por esa regla de tres, tanto Arancha como yo deberíamos dimitir porque no hemos alcanzado tampoco ese objetivo”.
Una fuente del PP afirmó a "El Faro" que “las elecciones se han perdido y es normal que el alcalde dimita, ha sido un magnífico gestor pero no debería haberse presentado a estas elecciones”.
Arancha Espeso, que ha conseguido cuatro concejales en las elecciones del 27-M, tiene en estos momentos la llave de la gobernabilidad del municipio costero y esta circunstancia la ha convertido en el ojo del huracán de una tormenta de rumores y especulaciones de tal calibre que la han obligado a celebrar esa rueda de prensa “para aclarar cuál es el estado de las negociaciones que llevamos a cabo a fin de conseguir un gobierno de cambio en un Ayuntamiento tan complicado como es el de San Javier”.
Ni maletines con dinero, ni promesas de ascenso laboral, ni peticiones de retirada de demandas judiciales. Espeso, que no ocultó su deseo de ser alcaldesa de San Javier “porque para eso mi cara está en los carteles electorales”, desmintió que haya llegado a un acuerdo con el todavía alcalde para alternarse en el gobierno.
“José Hernández no se ha dirigido oficialmente a nosotros, que le pedimos en su día la dimisión y ahora las urnas han hablado”, asegura con rotundidad y reconoce que el PP le ha ofrecido la alcaldía a cambio de un pacto “pero ha sido el PP de la Región, no el de San Javier”. Espeso reconoce que el municipio quiere un cambio de color político y se inclina por un pacto con los socialistas “pero debe ser con el PSOE local y no con el de la Región” y pone como condición que aclare si quieren que el cambio sea ‘moderado’.
El presidente Valcárcel en persona ha ordenado a los negociadores que los municipios de San Javier y San Pedro se mantengan bajo control "al precio que sea". De ahí el sacrificio de Pérez y la resistencia de Hernández, quien habría amenazado con "cantar" ante el fiscal-jefe si San Esteban y la Glorieta se empeñan en dejarlo "caer" para facilitar así la venganza personal de Espeso.
Espeso reconoció que han mantenido negociaciones con el PP regional y que les han ofrecido la alcaldía, además de la salida de José Hernández y de otros dos concejales, pero insistió en que "con el PP en el Ayuntamiento no es posible el cambio que nosotros propugnamos". También dijo que José Hernández todavía no se ha dirigido a ellos para dialogar, "aunque sí lo ha hecho con el PSOE".
La edil electa se mostró dispuesta a continuar negociando con los socialistas para alcanzar un acuerdo, pero considera que este partido "no actúa en clave local, que es lo que nos interesa a nosotros, y está bajo la tutela de la dirección del PSRM-PSOE, y nosotros no nos vamos a mover por los intereses de los partidos".
Asimismo, Arancha Espeso comenta que "para el PSOE la alcaldía es irrenunciable y nosotros consideramos que su candidata, Pepa García, es inexperta, porque un equipo de Gobierno es mucho más que un organismo que decide si se hace o no un carril bici, no puede ser una jaula de grillos".
Por su parte, fuentes del PSOE aseguran que le han ofrecido a Espeso ser la primera teniente de alcalde y portavoz del equipo de Gobierno, pero dicen que "la alcaldesa debe ser Pepa García, que logró más votos que ella".
La alternativa que se le ofrece desde el PSOE es la concejalía de Urbanismo y ser la primera teniente de alcalde mientras desde el PP, aparte de los 300 millones, no tienen inconveniente en cederle la alcaldía durante una de las dos mitades del mandato.
El alcalde en funciones de San Javier, José Hernández, ya habría puesto su cargo a disposición del Partido Popular y renunciado a su acta de concejal en la próxima legislatura, tal y como adelantó ayer el periódico "El Faro", órgano oficioso de un sector del gobierno autónomo en funciones.
La pérdida de la mayoría absoluta, según "El Faro", es la razón principal que ha impulsado a Hernández a retirarse de la política municipal, una decisión que ha sido valorada de diferente manera por las distintas formaciones políticas. Así, Arancha Espeso, cabeza de lista de la Coalición Independiente, manifestó durante la rueda de prensa que ofreció para “pedir tranquilidad” a los vecinos ante las negociaciones que se llevan a cabo para un pacto de gobierno en el municipio, que “nosotros hemos sido el único partido que ha solicitado la dimisión de José Hernández durante los plenos y el pueblo espera que se produzca un cambio con su partida”.
La número uno del PSOE, Pepa García, manifestó al mismo diario que “es lo coherente porque esperaban mayoría absoluta”, pero apunta que “por esa regla de tres, tanto Arancha como yo deberíamos dimitir porque no hemos alcanzado tampoco ese objetivo”.
Una fuente del PP afirmó a "El Faro" que “las elecciones se han perdido y es normal que el alcalde dimita, ha sido un magnífico gestor pero no debería haberse presentado a estas elecciones”.
Arancha Espeso, que ha conseguido cuatro concejales en las elecciones del 27-M, tiene en estos momentos la llave de la gobernabilidad del municipio costero y esta circunstancia la ha convertido en el ojo del huracán de una tormenta de rumores y especulaciones de tal calibre que la han obligado a celebrar esa rueda de prensa “para aclarar cuál es el estado de las negociaciones que llevamos a cabo a fin de conseguir un gobierno de cambio en un Ayuntamiento tan complicado como es el de San Javier”.
Ni maletines con dinero, ni promesas de ascenso laboral, ni peticiones de retirada de demandas judiciales. Espeso, que no ocultó su deseo de ser alcaldesa de San Javier “porque para eso mi cara está en los carteles electorales”, desmintió que haya llegado a un acuerdo con el todavía alcalde para alternarse en el gobierno.
“José Hernández no se ha dirigido oficialmente a nosotros, que le pedimos en su día la dimisión y ahora las urnas han hablado”, asegura con rotundidad y reconoce que el PP le ha ofrecido la alcaldía a cambio de un pacto “pero ha sido el PP de la Región, no el de San Javier”. Espeso reconoce que el municipio quiere un cambio de color político y se inclina por un pacto con los socialistas “pero debe ser con el PSOE local y no con el de la Región” y pone como condición que aclare si quieren que el cambio sea ‘moderado’.
El presidente Valcárcel en persona ha ordenado a los negociadores que los municipios de San Javier y San Pedro se mantengan bajo control "al precio que sea". De ahí el sacrificio de Pérez y la resistencia de Hernández, quien habría amenazado con "cantar" ante el fiscal-jefe si San Esteban y la Glorieta se empeñan en dejarlo "caer" para facilitar así la venganza personal de Espeso.
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