La Región de Murcia se convierte así en una de las Comunidades que cierra 2008 con la menor inflación del país, detrás de Castilla-La Mancha (0,9 por ciento) e igual que Castilla y León. Al contrario las más inflacionistas fueron Ceuta (2,1 por ciento) y País Vasco (1,9 por ciento).
En el conjunto nacional, el IPC bajó cinco décimas en diciembre con respecto al mes anterior, mientras que la tasa interanual (últimos doce meses) se situó en el 1,4 por ciento, logrando su nivel más bajo de la última década.
Por grupos los más inflacionistas en la Región de Murcia en el mes de diciembre fueron Ocio y Cultura, con una subida del 2 por ciento; seguido de Medicina (0,2 por ciento) y de Alimentos y bebidas no alcohólicas (0,1 por ciento).
La congelación de precios en Menaje, Enseñanza y Otros (todos con 0,0 por ciento) y los descensos experimentados por Transporte (-3,7 por ciento); Vestido y Calzado (-2,4 por ciento); Comunicaciones (-0,5 por ciento); Hoteles, cafés y restaurantes (-0,4 por ciento); Vivienda (-0,2 por ciento) y Bebidas alcohólicas y tabaco (-0,1 por ciento).
En el conjunto del país, el IPC bajó cinco décimas en diciembre de 2008 respecto al mes anterior y la tasa interanual cayó un punto, hasta el 1,4 por ciento. En concreto, esta tasa es la más baja desde diciembre de 1998, cuando la inflación alcanzó también el 1,4 por ciento, y es además 2,8 puntos inferior a la obtenida a cierre de 2007, que fue del 4,2 por ciento.
En diciembre, la inflación interanual retrocedió por quinto mes consecutivo gracias al abaratamiento de los carburantes y de alimentos como el pescado fresco, la leche y los aceites.
Con esta tasa, la inflación se aleja de los máximos cercanos al 5 por ciento que logró alcanzar en 2008 por la escalada del precio del petróleo. Fue a mitad de ejercicio, concretamente en julio, cuando los precios tocaron 'techo', con un IPC del 5,3 por ciento. A partir de entonces, la inflación comenzó a descender, experimentando su mayor caída, de 1,2 puntos, el pasado mes de noviembre, algo que no se veía en 22 años.
En total, desde julio hasta diciembre de 2008, el IPC se ha reducido casi cuatro puntos, mejorando las estimaciones del Gobierno, que esperaba que este indicador cerrara 2008 en el entorno del 2 por ciento, para seguir bajando en 2009, aunque sin llegar a una situación de deflación (tasas negativas de crecimiento de los precios). En el acumulado de 2008 (enero-diciembre), la inflación subió también un 1,4 por ciento.
La caída de la inflación interanual en diciembre se debió al comportamiento del transporte, que ha reducido más de cuatro puntos su tasa anual respecto a noviembre, hasta el -5,6 por ciento, como consecuencia del abaratamiento de los carburantes y lubricantes, cuyo precio se ha reducido este año en contraste con el ascenso que experimentaron en diciembre de 2007.
También han influido en esta variación los alimentos y bebidas no alcohólicas, con un descenso de siete décimas en su tasa anual, hasta el 2,4 por ciento, gracias a la disminución de precios de parte de los alimentos, frente a las subidas que registraron en diciembre del año pasado. Destacan, especialmente, el pescado fresco, la leche, los aceites, las carnes de vacuno y porcino y la charcutería.
La vivienda ha colaborado también en la caída de la inflación, al haber reducido en diciembre siete décimas su tasa anual, hasta el 5,9 por ciento, impulsada por la bajada del precio del gasóleo para calefacción.
Por su parte, la inflación subyacente (que no incluye los precios de los productos energéticos ni de los alimentos no elaborados) se situó en diciembre en el 2,4 por ciento, tres décimas inferior a la tasa de noviembre, mientras que el Indicador de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) alcanzó el 1,5 por ciento interanual, nueve décimas menos que en el mes anterior, coincidiendo con los datos adelantados por el INE a finales del mes pasado.
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