El SMS convoca 4.200 nuevas plazas pese a la crisis fiscal y el déficit presupuestario previsto

MURCIA.- El Servicio Murciano de Salud (SMS) ofertará un total de 4.260 plazas de empleo público en virtud del acuerdo suscrito en la Mesa Sectorial de Sanidad del pasado 30 de mayo, aprobado ayer por el Gobierno regional. El SMS se encuentra en quiebra técnica desde comienzos de este año.

El acuerdo firmado por el SMS y las organizaciones sindicales CC OO y UGT recoge la oferta que se realizará mediante la convocatoria de 1.923 plazas por consolidación, 625 por promoción interna y 1.712 por el turno libre, lo que no termina de entender con la crisis fiscal que se acusa y la previsión de un déficit superior a los 1.000 millones de euros a final del presente ejercicio presupuestario.

En la oferta de consolidación se incluirán todas las plazas de las distintas categorías que estén ocupadas por personal interino y temporal con anterioridad al 1 de enero de 2005, según prevé el Estatuto Básico del Empleado Público, y se ofertarán como plazas libres las vacantes posteriores a la citada fecha.

Respecto a las características del proceso de selección en ambos casos será por concurso-oposición.

Precisamente el portavoz de Sanidad del grupo socialista, el yeclano Domingo Carpena, ha presentado en la Asamblea Regional varias iniciativas para "conocer la dimensión del problema de falta de liquidez del Servicio Murciano de Salud, que está afectando a sus empresas proveedoras", según una nota.

Carpena recaba en su iniciativa información sobre las causas de este retraso, la cantidad total que se adeuda a los proveedores, la cuantía del gasto mensual que supone para las arcas regionales, los intereses de demora a pagar, el número de empresas afectadas por este retraso y el tiempo de demora media que el SMS tarda en pagar a sus proveedores.

Reclama a la consejera de Sanidad que haga "una valoración política" sobre lo que este retraso puede suponer, tanto para la estabilidad económica de las empresas afectadas, como para la estabilidad en el empleo de sus trabajadores.

Carpena critica finalmente "la falta de capacidad política, y de eficacia, de los responsables del Gobierno regional en el control del gasto farmacéutico por receta".