MURCIA.- La Federación Regional de Empresarios de la Construcción de Murcia prevee en 2008 un retroceso del 2,2% si el crecimiento negativo se repitiera por segundo año consecutivo tras esgrimir el fantasma del paro como arma para presionar y justificar posteriores decisiones políticas de la Administración regional en su favor tras un largo periodo de bonanza y grandes beneficios económicos.La crisis no sólo se centra ahora en el sector residencial, que cerró el último trimestre del 2007 con un descenso del 50% en las viviendas iniciadas, lo que redundó en un descenso interanual del 9% con respecto al 2006, cifra que en 2008 es del 10%, sino también en la construcción de obra pública, a causa de la disminución en un 60% de la licitación en el primer trimestre del año ante la expectativa de una severa crisis fiscal.
Desde la Construcción, se culpa en parte de la situación a la falta de agilidad en la tramitación y calificación de las viviendas de protección oficial y a la escasa aportación de la obra pública que, debido a la entrada en vigor de la nueva ley de Contratos del Sector Público, y el consiguiente retraso que ello ha originado, mantiene unos niveles de inversión que sólo alcanzan el 15% del total presupuestado para todo el año.
Anima ahora a la Comunidad Autónoma a buscar financiación privada para adelantar obras del plan de choque contra la crisis, de forma que puedan salir a licitación este año proyectos por importe de 3.000 millones.
El Gobierno regional, la Administración del Estado y los ayuntamientos tienen unos 2.000 millones de inversión presupuestados para 2008, pero consideran necesario conseguir otros 1.000 de los inversores privados o de entidades financieras para adelantar obras proyectadas a más largo plazo.
Las cifras que desde la Construcción se manejan son: -50%: en el número de viviendas iniciadas en el cuarto trimestre de 2007; -20% de bajada del número de viviendas terminadas en 2007; -10% en el descenso en la compraventa de viviendas en los dos primeros meses de 2008.
En consecuencia, el desempleo en el sector se ha doblado en los últimos doce meses, hasta alcanzar los 13.000 parados. En el mejor de los casos, se considera inevitable llegar a los 20.000 desempleados de la construcción en los próximos meses.
Los constructores insisten en la importancia de la vivienda protegida como alternativa al descenso registrado por la vivienda libre y desean que el cupo de 2.800 asignadas a la Región de Murcia para este año, se comprometa cuanto antes y sea posible aspirar a la financiación adicional que el Ministerio de Vivienda reparte en otoño entre las comunidades autónomas con el mayor grado de ejecución.
En este sentido, las nuevas medidas de apoyo a la vivienda protegida ya han conseguido que se presenten 500 solicitudes en quince días.
Precisamente, el coordinador regional de IU, José Antonio Pujante, manifestó su «sorpresa» tras conocer que el Gobierno autonómo «concederá ayudas directas por valor de 2.000 euros por casa a los propietarios de suelo calificado como libre que decidan destinarlo a la construcción de vivienda protegida de precio limitado».
Pujante señaló que los promotores privados «se han enriquecido durante mucho tiempo a costa de los ciudadanos y ahora pretenden mantener una gallina de los huevos de oro que ellos mismos han matado», según informó IU.
Pujante subrayó que «éstos se han mostrado partidarios de que no haya intervención de la Administración pública en la promoción de suelo y vivienda, y ahora que la burbuja inmobiliaria se ha pinchado, quieren que los murcianos paguemos sus errores».
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