MURCIA.- Antonio Gómez Fayrén podría ser propuesto en los próximos días como nuevo vicepresidente de Caja Murcia, dentro de la remodelación de la cúpula directiva de la entidad financiera que tendrá lugar tras la Asamblea General de mediados de mes, según "La Verdad"El nombramiento de Gómez Fayrén en Caja Murcia conllevará su renuncia del acta de diputado en la Asamblea Regional, ya que ambos cargos son incompatibles. Fayrén ocupa escaño en la Cámara desde las elecciones autonómicas del pasado año y hasta ahora ostenta la presidencia de la Comisión de Hacienda y Presupuestos.
El nombramiento del diputado popular formaría parte de un deseado reforzamiento de Caja Murcia y es visto con buenos ojos por quienes están llamados a formar parte de la Asamblea General de la entidad, dada la personalidad de consenso y su preparación como inspector financiero y tributario, aspectos ambos que se le reconocen tras su buen hacer como vicepresidente del Ejecutivo autónomo en la primera legislatura del Gobierno de Ramón Luis Valcárcel.
También está prevista la entrada en el consejo de administración de la ex presidenta regional socialista María Antonia Martínez y del polémico ex concejal del PP en Murcia, Antonio Sánchez Carrillo.
6 comentarios:
Este nombramiento se puede interpretar como su definiva renuncia a la sucesión de Valcarcel? Parece que ahora el mejor aspirante es el ex-rector Ballesta, bien visto en Génova 13, mucho mejor que el poliedrico Cámara, ya muy visto y quemado.
Esto supone su definitiva renuncia a la sucesión de Valcárcel? Ahora el mejor colocado es el ex-rector Ballesta, bien visto en Génova 13, mejor que el poliedrico Cámara, ya muy visto y muy quemado.
Esa remodelación es otro traje a medida para los Polaris y los golfos...
Argárico, con esta remodelación a la carta, tienes materia para investigar y comentar. Una remodelación un tantico rara, rara, rara..., no?
Otra medida más que refuerza mi posición de sacar las perras de CajaMurcia en cuanto sea posible y la coyuntura favorable. Una entidad demasiado provinciana y "paradisiaca". Muy previsible.
Descaradamente el PP no tiene ningún problema en dejar constancia pública del control que ejerce en Cajamurcia.
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