MADRID.- El Comité Electoral Nacional del Partido Popular se reunirá el próximo jueves para designar a sus cabeza de lista al Congreso de los Diputados, donde habrá una renovación cercana al 40%. En circunscripciones como Murcia, Navarra o Asturias, el cambio en el primer puesto será total y no repetirá ninguno de los elegidos hace cuatro años.Por lo pronto, casi todas las comunidades autónomas tendrán novedades en sus número 1, salvo la de Aragón, donde da por hecho que mantendrán los mismos cabeza de lista que en 2004: Luisa Fernanda Rudí (Zaragoza), Ángel Pintado (Huesca) y Santiago Lanzuela (Teruel).
En las circunscripciones de Murcia, Navarra y Asturias habrá caras nuevas. La ex ministra Elvira Rodríguez, que encabezó la lista murciana en 2004, ocupa ahora la Presidencia de la Asamblea de Madrid, el diputado pamplonés de UPN, Jaime Ignacio Del Burgo, no repetirá, y lo mismo sucede con la asturiana Alicia Castro, que anunció su retirada a finales del pasado verano.
El presidente del Partido Popular de Murcia, Ramón Luis Valcárcel, presentará el próximo miércoles al comité electoral regional de este partido su propuesta de candidaturas al Congreso y al Senado para las elecciones generales del 9 de marzo.
Antonio Sánchez Carrillo, secretario del comité electoral regional desde 1991, dijo hoy que hasta el miércoles no se conocerán los nombres de los candidatos que presentará Murcia a las elecciones generales de marzo.
Este dirigente recordó, además, que el PP siempre ha aprobado por unanimidad las distintas propuestas de candidatura realizadas por el presidente Valcárcel, quien hasta ahora no ha desvelado sus preferencias sobre la composición de las listas
Esta renovación en el primero de la lista también podría alcanzar a Extremadura y La Rioja y se espera que sea bastante amplia en Castilla-La Mancha, lo que podría ocurrir en provincias como Albacete, Guadalajara o Toledo. En esta última, se confía en que la dirección nacional apueste por un toledano; algo que no ha ocurrido en las últimas generales.
En los número uno de las circunscripciones andaluzas la renovación puede producirse en Jaén, Sevilla o Granada.- (EP/EFE)
(El diputado murciano, Martínez Pujalte, que irá en la lista por Murcia)
3 comentarios:
El cabeza de lista del PSOE al Senado por Murcia, Manuel Hurtado, ex alcalde de Ceutí, afirma que vuelve a la vida política «con fuerzas e ilusión por conseguir lo mejor para la Región de Murcia». La candidatura de Hurtado fue aprobada el sábado por el Comité Federal del PSOE junto a la del ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, quien encabezará la lista de los socialista de Murcia al Congreso en los comicios del próximo mes de marzo.
En declaraciones a Efe, Manuel Hurtado explicó si finalmente es elegido senador centrará sus esfuerzos en mejorar las infraestructuras, dar soluciones al déficit hídrico que afecta a la Región y «buscar lo mejor para Murcia». «Si tienes ganas de hacer cosas se pueden hacer, y yo las tengo», aseguró Hurtado. Apuntó que su reincorporación a la vida política activa se produjo a raíz de la llamada que le hizo el secretario general del PSRM, Pedro Saura, para decirle que su partido quería contar con él.
Lo que nos faltaba el payaso de Martinez Pujalte en Murcia. Sin comentarios.
EL PP, CORRUPTOR DE MURCIA
¿Y en Murcia? En Murcia la derecha posfranquista y caciquil le tiene comido el seso a la ciudadanía con un trasvase que ella no trajo y al que no se le espera, despreciando la desalinización. Venden la destrucción, cuanto menos, del Delta del Ebro, y con ello lo que propicia es, además, coartada al antitrasvasismo castellano manchego. Estos clérigos fundamentalistas del desarrollo sin escrúpulos son como sus aliados de la vieja religión, sólo creen que el suyo es el único Dios verdadero y salvador, el del Santo Ladrillo y su santa esposa, la Corrupción. Esta sí que es coyunda, el sermón del agua para todos con el que quieren tapar sus vastas corruptelas a lo largo y ancho de toda la región murciana.
Esa derecha y carcundia eclesial es lo único que queda sin reciclarse democráticamente de aquella herencia dictatorial del todo atado y bien atado, es la rémora autoritaria y caciquil de la más negra España. Pero, como por mucho que mientan o recen, el Dictador no va a resucitar y 1936 no es 2008 (y no precisamente gracias al difunto Caudillo como los hagiógrafos de la dictadura pretenden), la próxima campaña electoral se presenta como un duro y radical enfrentamiento democrático entre esa extrema derecha anunciadora de catástrofes sin cuento y una izquierda cuyo radicalismo deberá consistir en consolidar, cuanto menos, los avances sociales y derechos civiles conseguidos y en continuar progresando. (¿No se habían acabado las ideologías?).
Lo deseable es que la ciudadanía murciana deje de avalar de una vez por todas a esta corrupta derecha murciana y abandone el canto de sirena de pretender desvestir un santo para vestir a otro, o lo que es peor, pretender querer destruir un ecosistema ajeno para ayudar a destruir el propio y situarlo en depredador masivo de un recurso cada vez más escaso y tan vital como el agua. Es insostenible, además de que debería ser indeseable a todas luces, el intento de duplicar en un corto espacio de tiempo en más de un millón las actuales viviendas (turísticas) en la región murciana en tales circunstancias de galopante corrupción e incertidumbres ante peligros ecológicos irreversibles. Y si desde esta perspectiva se puede enfrentar a esa estupidez que desde Aragón se quiere en Los Monegros, la derecha se verá obligada a morderse su lengua. La derecha valcarceliana ha querido vender una Murcia hermosa y lo que ofrece es la peor de las realidades, la que nunca debieron merecer murcianos y murcianas: la de la corrupción generalizada y sistemática, que todo lo pudre y mata, enarbolando la bandera de la especulación, pues no otra es esa pancarta del agua para todos que en manos del corrupto PP valcarceliano es nauseabunda y falaz, como lo es el arrogarse en beneficio propio el espíritu de las víctimas del terrorismo.
¿El electorado murciano seguirá cautivo de esa embustera pancarta de los que lo esquilman y embrutecen, de los que lo explotan al máximo, de los que lo engañan? ¿O aprovechará para dar señales de sacudirse a sus seculares y falaces corruptos?
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