MURCIA.-La Consejería de Obras Públicas y Ordenación del Territorio de la Región de Murcia ha contratado ya la redacción del estudio informativo relativo a la evaluación de impacto ambiental de la futura autovía que unirá los municipios de Santomera y Yecla y al proyecto de trazado de esta vía.
Las obras de este importante proyecto supondrán una inversión aproximada de 250 millones de euros que costearán, conjuntamente, las comunidades de Murcia y Valencia. La comunidad vecina participará en la dotación de medios económicos ya que 14 kilómetros de su trazado pasan por la localidad alicantina de Pinoso.
Este estudio incluirá, entre otros puntos, una página web donde se mostrará la memoria del proyecto, así como los datos necesarios para el proceso de información pública, según informaron ayer fuentes del Gobierno regional.
Además, supondrá la realización de paneles, maquetas, trípticos, folletos e incluso un vídeo virtual del trazado para quien no disponga de acceso a Internet con el fin de que todos los ciudadanos puedan conocer de primera mano esta actuación.
La autovía conectará, en un futuro, la zona del Altiplano en menos de una hora con el Mar Menor, pasando por los municipios de Yecla, Abanilla, Fortuna y Santomera. Además, esta vía permitirá acercar, aún más, la Comunidad Valenciana a la Región de Murcia.
El proyecto se basará en el enlace de la autovía A-7 y la variante final de Yecla de la N-344. La carretera, que tendrá una longitud aproximada de 45 kilómetros, se acometerá en tres tramos.
Por un lado, los 18 kilómetros que separan Yecla de la Comunidad Valenciana; de esta frontera hasta los 14 kilómetros que distan de la Región pasando por Pinoso, y, por último, de ese punto a la A-7, a la altura del municipio de Santomera.
Además, esta nueva vía conectará, además, con la zona del Mar Menor, aprovechando el enlace con la carretera que une Santomera con San Javier.
20.000 coches diarios
El Gobierno regional explicó que uno de los beneficios de esta actuación es que «hará posible la descarga de tráfico pesado de las carreteras actuales», ya que está previsto que tenga una capacidad que le permita absorber el tráfico de unos 20.000 vehículos diarios , al tiempo que vertebrará las comunidades de Murcia y Valencia, y descongestionará la autovía Madrid-Alicante, muy masificada actualmente, y que discurre paralelamente.
Según el consejero de Obras Públicas y Ordenación del Territorio, José Ballesta, con esta infraestructura, la Comunidad Autónoma «continúa invirtiendo en la mejora de infraestructuras de transporte necesarias para un desarrollo económico acorde con las expectativas de empresarios e instituciones».
En concreto, entre la localidad murciana de Yecla y el límite de la provincia de Alicante habrá tres enlaces, uno con la autovía Murcia -Jumilla-Fuente La Higuera; un segundo con la carretera A-27/C-813, de conexión con Villena (Alicante), y un último enlace con la A-15, que comunicará el municipio murciano de Jumilla.
El tramo que discurre por la Comunidad Valenciana enlazará con la carretera C-3213/CV83, de acceso a Pinoso y conexión con el municipio alicantino de Monóvar, y con la CV-840, de acceso a El Rodriguillo y conexión con Novelda (Alicante), y tendrá además una variante en Pinoso y Rodriguillo de cinco kilómetros.
El tercer segmento, el más largo, tendrá treinta kilómetros y enlaces con las carreteras A-10/A-9; de acceso a Barinas; C-3223, con conexión con Fortuna ( Murcia ); A-7, de acceso a Abanilla ( Murcia ); A-23, de conexión con Benferri (Alicante), y con la autovía A-7.
Además, contará con las variantes de El Algarrobo, Puerto de Barinas, El Salado Alto, Mahoya y Abanilla, y con dos viaductos que salvan sendos terrenos del Lugar de Importancia Comunitaria (LIC) del río Chícamo.
Las obras de este importante proyecto supondrán una inversión aproximada de 250 millones de euros que costearán, conjuntamente, las comunidades de Murcia y Valencia. La comunidad vecina participará en la dotación de medios económicos ya que 14 kilómetros de su trazado pasan por la localidad alicantina de Pinoso.
Este estudio incluirá, entre otros puntos, una página web donde se mostrará la memoria del proyecto, así como los datos necesarios para el proceso de información pública, según informaron ayer fuentes del Gobierno regional.
Además, supondrá la realización de paneles, maquetas, trípticos, folletos e incluso un vídeo virtual del trazado para quien no disponga de acceso a Internet con el fin de que todos los ciudadanos puedan conocer de primera mano esta actuación.
La autovía conectará, en un futuro, la zona del Altiplano en menos de una hora con el Mar Menor, pasando por los municipios de Yecla, Abanilla, Fortuna y Santomera. Además, esta vía permitirá acercar, aún más, la Comunidad Valenciana a la Región de Murcia.
El proyecto se basará en el enlace de la autovía A-7 y la variante final de Yecla de la N-344. La carretera, que tendrá una longitud aproximada de 45 kilómetros, se acometerá en tres tramos.
Por un lado, los 18 kilómetros que separan Yecla de la Comunidad Valenciana; de esta frontera hasta los 14 kilómetros que distan de la Región pasando por Pinoso, y, por último, de ese punto a la A-7, a la altura del municipio de Santomera.
Además, esta nueva vía conectará, además, con la zona del Mar Menor, aprovechando el enlace con la carretera que une Santomera con San Javier.
20.000 coches diarios
El Gobierno regional explicó que uno de los beneficios de esta actuación es que «hará posible la descarga de tráfico pesado de las carreteras actuales», ya que está previsto que tenga una capacidad que le permita absorber el tráfico de unos 20.000 vehículos diarios , al tiempo que vertebrará las comunidades de Murcia y Valencia, y descongestionará la autovía Madrid-Alicante, muy masificada actualmente, y que discurre paralelamente.
Según el consejero de Obras Públicas y Ordenación del Territorio, José Ballesta, con esta infraestructura, la Comunidad Autónoma «continúa invirtiendo en la mejora de infraestructuras de transporte necesarias para un desarrollo económico acorde con las expectativas de empresarios e instituciones».
En concreto, entre la localidad murciana de Yecla y el límite de la provincia de Alicante habrá tres enlaces, uno con la autovía Murcia -Jumilla-Fuente La Higuera; un segundo con la carretera A-27/C-813, de conexión con Villena (Alicante), y un último enlace con la A-15, que comunicará el municipio murciano de Jumilla.
El tramo que discurre por la Comunidad Valenciana enlazará con la carretera C-3213/CV83, de acceso a Pinoso y conexión con el municipio alicantino de Monóvar, y con la CV-840, de acceso a El Rodriguillo y conexión con Novelda (Alicante), y tendrá además una variante en Pinoso y Rodriguillo de cinco kilómetros.
El tercer segmento, el más largo, tendrá treinta kilómetros y enlaces con las carreteras A-10/A-9; de acceso a Barinas; C-3223, con conexión con Fortuna ( Murcia ); A-7, de acceso a Abanilla ( Murcia ); A-23, de conexión con Benferri (Alicante), y con la autovía A-7.
Además, contará con las variantes de El Algarrobo, Puerto de Barinas, El Salado Alto, Mahoya y Abanilla, y con dos viaductos que salvan sendos terrenos del Lugar de Importancia Comunitaria (LIC) del río Chícamo.
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