lunes, 29 de octubre de 2007

La ganadería murciana en crisis por el avance del ladrillo sobre las tierras de pastoreo

MURCIA.- Las organizaciones agrarias de la Región lo tienen claro: «La culpa de las crisis que está viviendo la ganadería es de las multinacionales del sector, que retienen los cereales en sus almacenes para especular. De esta forma se crea déficit y los productores se ven obligados a pagar más por ello», según "La Verdad".

Hay que tener en cuenta que el 70% de los costes de producción es por la alimentación de los animales, por lo que si los ganaderos tienen que pagar más por los cereales y los precios de venta están congelados, las pérdidas están aseguradas.

Otro de los problemas que critican las organizaciones agrarias que han hecho que se agudice la crisis ganadera es la eliminación de los stock de la Política Agraria Común. Explica el secretario de Organización de la organización agraria UPA, Manuel Zaragoza, que si «no se hubieran eliminado, ahora habría suficientes cereales en el mercado y sus precios no se hubieran disparado».

Para paliar este déficit, las organizaciones agrarias reclamaron a la Unión Europea que se eliminara la obligación de dejar el 10% de los terrenos en barbecho, para controlar la producción, para que así hubiera más cereal y poder hacer frente a la crisis.

Los expertos aseguran que uno de los problemas endémicos del sector caprino y de la ganadería en general es la excesiva dependencia del uso de piensos, que provoca la intensificación del sistema de producción y el aumento en los costes.

Pero si algo bueno tiene este subsector es la cabra murciano-granadina. Un ejemplar único en su especie por el hecho de ser una raza muy prolífica, con dos partos anuales, lo que favorece la producción de leche y quesos durante todo el año. Está considerada por los expertos como una de las más productivas del mundo, capaz de dar con un ordeño diario más de 500 litros de leche anuales.

La cada vez menor existencia de tierras para el pastoreo es una de las principales quejas de los ganaderos, lo que les obliga a tener una producción estacional. Los expertos explican que, debido al urbanismo, algunas explotaciones ganaderas deben buscar otras ubicaciones, ya que se han visto amenazadas por la llegada del ladrillo.

Además, el subsector ovino destaca por su escaso desarrollo y falta de conocimientos sobre técnicas reproductivas, a lo que hay que unir la falta de diversificación de productos y de denominaciones de calidad, según el plan estratégico del sector ganadero de la Consejería de Agricultura.

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