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lunes, 20 de septiembre de 2021

La Armada ya prueba barcos no tripulados para reforzar sus misiones


LISBOA.- La Armada Española planea adquirir en 2022 su primer buque no tripulado como apoyo a las misiones de su nuevo barco oceanográfico, logísticos o fragatas F-110. Con tal objetivo participa por primera vez en las mayores maniobras de la OTAN sobre doctrina y experimentación de este tipo de buques conocidos como USV ('Unmanned Surface Vehicle'). El ejercicio 'REP MUS 21' tiene lugar en aguas de Troia y Sesimbra (Portugal), desde el 13 al 24 de septiembre, según crónica de Abc.

«Es el futuro. Tal y como se ha desarrollado en el ámbito aéreo también experimentaremos una evolución parecida en el entorno marítimo», explica el teniente de navío Ignacio Vicente Salas, quien supervisa la maniobra que involucra a tres empresas españolas que presentan sus prototipos:

 Navantia Sistemas con el buque Vendaval (construido en aluminio por la empresa Aister); Seadrone el buque Sead 23; y Utek, con el Kaluga DS armado con una torre ligera de 12,7mm.

Además, la empresa Marine Instruments, especializada en drones aéreos para detectar bancos de atunes, participa como complemento con su avión tripulado remotamente con energía solar.

«España está intentando subirse al carro de esta tecnología lo más rápido posible. Otros países ya lo han hecho. El año próximo participaremos con un buque de acción marítima (BAM) en las maniobras 'Dynamic Messenger 22' donde integraremos hasta cuatro barcos no tripulados», explica el capitán de corbeta Jaime Rodríguez Tortosa.

El objetivo de estos USV o buques no tripulados es reforzar misiones de vigilancia, contra el tráfico ilegal, piratería, inmigración ilegal, salvamento y rescate, terrorismo, control de pesca, guerra de minas, detección de submarinos...

Los sistemas del USV

La clave no es tanto el buque sino los sistemas de detección, cámaras, sónares o radares capaces de integrar en su plataforma y conectarse con el buque matriz desde el cual se tripularía.

Para avanzar en esta adquisición, que se prevé a finales del próximo año, el Ministerio de Defensa ha puesto en marcha programas experimentales. Por ejemplo, la fragata Santa María pudo comprobar recientemente el funcionamiento del SUV Sead 23 en unas maniobras en el Mediterráneo. 

A través de unas coordenadas que se le indican al sistema del SUV, éste va navegando y realizando las misiones remotamente desde una cabina. En este sentido el funcionamiento es parecido a los aviones no tripulados pero con el condicionante del estado de la mar.

Pero los buques no tripulados no son una mera experimentación. En España ya hay un proyecto real: el USV Vendaval que navega en el Puerto de Ceuta, cuya dirección apostó por este buque autónomo hace dos años.

De 11 metros de eslora y 2,5 de manga el USV Vendaval incorpora los sensores necesarios para la navegación autónoma e incorpora sensores específicos como fluorímetro y estación de meteorología, un gancho de remolque, un lanzador de bengalas, otro de balsa de salvavidas, etc. (todos ellos operables por control remoto). 

«Es insumergible y cuenta con un casco de aluminio capaz de soportar altas temperaturas», explican desde Navantia Sistemas.

La compra de este buque –cuya licitación fue de casi un millón de euros– fue consecuencia del plan de seguridad del Ministerio de Interior al que tuvo que hacer frente la Autoridad Portuaria de Ceuta.

«Proporciona una alta disponibilidad con un mínimo de respuesta, permite la operatividad ante condiciones adversas de mar y elimina el riesgo humano. También es fundamental para vigilar condiciones medioambientales del agua. Por ahora siempre va un patrón dentro, para coger los mandos en caso necesario, pues la legislación así lo estipula», indica el director de la Autoridad Portuaria, César López.

Desde el astillero Navantia, los buques no tripulados –para su utilización en puertos o por la Armada– se han convertido en una «línea estratégica» previendo un incremento de la demanda en el mercado nacional e internacional.

martes, 31 de agosto de 2021

El S-81 'Isaac Peral', de nuevo a flote tras su primera varada programada


CARTAGENA.- El submarino S-81 ‘Isaac Peral’ ha vuelto al agua este martes tras finalizar los trabajos previstos durante su primera varada programada y se encuentra en el Muelle de Armamento de Navantia  después de su puesta a flote en el mes de mayo. 

Durante estos dos meses se han llevado a cabo distintos trabajos, como el embarque del periscopio de ataque o el arranque de las consolas del sistema de combate en el local de mando y control. Esta semana se procederá a la instalación de la primera versión del software correspondiente al sistema de combate.

El submarino permanecerá durante los próximos meses en el Muelle de Armamento de Navantia, donde continuarán las pruebas de puerto. Está previsto que a principios de 2022 se lleve a cabo una segunda varada previa al inicio de las pruebas de mar. La entrega del submarino a la Armada Española se ha programado para 2023.

sábado, 24 de abril de 2021

Comandante del S-81: "Pasamos de submarinos analógicos a uno digital"


CARTAGENA.- Manuel Corral Iranzo tiene 39 años y lleva 20 en la Armada. Ya de estudiante en la escuela naval militar de Marín (Pontevedra), este turolense "de secano" se enamoró de un submarino al navegar en él. Ahora, es el comandante del nuevo S-81, el sumergible más avanzado del mundo puesto a flote esta semana.

El capitán de corbeta atiende desde el Arsenal de Cartagena a los medios tras la puesta de largo del submarino, un prodigio tecnológico e industrial que convertirá a España en uno de los 10 países del mundo capaces de diseñar y construir un sumergible.

Los datos son elocuentes: 17 años para culminarlo, 80 metros de eslora, 60 kilómetros de cables, 26 millones de horas de ingeniería y trabajo y 3.907 millones de euros de techo de gasto para los cuatro que Navantia está construyendo para la Armada. Al nivel de las casi 11.000 horas de inmersión que acumula Corral desde que hace 13 años se dedicó en cuerpo y alma a los submarinos.

A su cargo, 40 hombres y 4 mujeres de dotación. Llevan, la mayoría, un año aprendiendo en Cartagena con simuladores que pronto sustituirán por los mandos de verdad. El S-81 empezará ahora con las pruebas de puerto y luego las de mar, tras lo que se entregará a la Armada, que lo pondrá a prueba un año antes de entrar en servicio. Eso ocurrirá probablemente ya en 2024.

¿Qué le cautivó al ver ese submarino en Marín?

Lo primero, el ambiente a bordo. Es algo muy particular de los submarinos. El ambiente tiene que ser muy bueno porque la vida a bordo es dura, y esa dureza la suplimos con buen ambiente. La convivencia es muy estrecha, desde el último marinero hasta el comandante, y eso me gusta mucho. Al final se trata de disfrutar de nuestro trabajo, y cuando hay buen ambiente se disfruta más.

La otra cosa que me gustó fue el tema táctico. Es una plataforma con muchas capacidades, con un gran número de misiones que puede realizar, y no solo ejercicios, sino que de manera casi permanente hacemos operaciones reales, como obtención de inteligencia. Eso también me cautivó.

¿Qué siente al comandar el S-81?

Me siento tremendamente afortunado. Y sobre todo es un gran reto y una gran responsabilidad. Un reto no solo personal, sino para toda la dotación, de llegar bien formados al primer día de mar. Y la responsabilidad porque todo comandante de submarinos la tiene por los riesgos inherentes a la plataforma. Navega sumergido en un medio muy hostil y cualquier problema puede suponer una catástrofe. La capacidad ofensiva que tiene es muy alta y, en la toma de decisiones, está en ocasiones aislado del exterior. No puedes consultar a nadie.

Entre los últimos submarinos españoles de la serie S-70, construidos en los años 70 del siglo pasado, y los nuevos S-80, ¿hay un mundo?

El salto generacional va a ser muy importante, no solo por el intervalo de tiempo entre uno y el otro sino porque la tecnología es completamente diferente. Pasamos de submarinos prácticamente analógicos a uno completamente digital y con una tecnología muy avanzada. Eso implica muchos cambios de mentalidad. En toda la dotación tenemos que cambiar la forma que tenemos de operar.

Otro de los cambios importantes es el armamento y los sensores. Los de la clase S-80 van a estar dotados del mejor torpedo pesado que hay en la actualidad. Va a ser capaz de lanzar misiles contra buque y también efectuar ataques a tierra. Va a ser la primera vez que un submarino español sea capaz de lanzar un misil. Hasta ahora nuestras capacidades de armamento estaban basadas en el empleo de torpedos y minas, ahora seremos capaces de lanzar misiles.

Otro avance importante va a ser la automatización. Va a estar muy automatizado, eso implica que el número de dotación se va a reducir. Y la seguridad. Está diseñado con equipos redundantes y en caso de una emergencia tenemos esa doble seguridad en todos los equipos vitales.

Un ejemplo práctico de cómo los militares del S-81 van a tener que cambiar la mentalidad, dice Corral, es a la hora de un ataque. En los de la serie S-70, de los que quedan solo dos a punto de jubilarse, un torpedo llegaba a 20 kilómetros de distancia y el objetivo se visualizaba siempre antes. Ahora alcanza 50, con lo que los lanzamientos se harán sin tenerlo a la vista.

El S-81 les hará, por otro lado, la vida más fácil. Tendrán más espacio, más metros cuadrados habitables y solo 32 marinos necesarios para operarlo, frente a los 65 que necesitaban sus predecesores, más pequeños. Aun así, la vida allá abajo es dura y la desconexión del mundo, casi total. Podrán bajar centenares de metros y estar quince días sin salir del agua.

¿Cómo es la vida de un submarinista?

Es muy peculiar. Es dura porque tienes muchas limitaciones y restricciones. A nosotros nos gusta decir que es una vida de máximos y mínimos: mínimo de aire, mínimo de espacio y mínimo de intimidad, pero máximo de compañerismo, máximo de trabajo en equipo y de profesionalidad. Eso resume la vida a bordo.

Nos organizamos como los barcos, con turnos de guardia. Las limitaciones de comunicaciones hacen que la gente haga más piña en las diferentes cámaras o alojamientos, porque no tienen mucho más que hacer que estar ahí y compartir el tiempo con sus compañeros. No es como en otras unidades, que tienen conexión a internet y están más a su aire con el teléfono o la tableta. Aquí no, aquí jugamos al dominó en nuestro tiempo libre, vemos películas que nos grabamos en un disco duro... se hace más vida de cámara, como decimos nosotros.

Hasta cierto punto es de agradecer no estar tan hiperconectados...

Sí, es una desconexión tecnológica. Hay gente que pagaría por estar unas semanas completamente desconectados del teléfono y a nosotros no nos queda otra.

Visto lo visto, ¿hay que estar hecho de una pasta especial para ser submarinista?

R.- La única característica es no ser claustrofóbico, el resto lo que hace falta es vocación y pasión, porque si no, no afrontas estas limitaciones. Con eso cualquiera puede ser submarinista.

jueves, 22 de abril de 2021

La princesa de Asturias 'bautiza' el submarino 'S-81 Isaac Peral', el no nuclear más potente y avanzado del mundo


CARTAGENA.- Los reyes de España Felipe VI y Letizia, acompañados por la Princesa de Asturias, Leonor, y la Infanta Sofía, han presidido este jueves en Cartagena la botadura del submarino S-81 Isaac Peral, considerado como "el submarino convencional (no nuclear) más avanzado del mundo".  

Ha sido precisamente la princesa de Asturias, madrina del batiscafo, la encargada de su 'bautizo' con una botella de vino seleccionada especialmente por la Armada para la ocasión. Leonor, acompañada de su padre, ha cortado la cinta con la bandera de España a la que estaba sujeta la botella, que inmediatamente ha salido despedida y ha impactado contra el casco del submarino para sellar la botadura. 

En la ceremonia, el presidente de Navantia, Ricardo Domínguez García-Baquero ha destacado que la construcción del submarino ha supuesto "el mayor reto tecnológico" de la historia de la empresa pública de construcción naval, destacando la complejidad con un ejemplo: "En la construcción de un avión se emplean 50.000 horas; en la de un submarino más de 3.000.000". 

"Hablamos del submarino convencional (no nuclear) más avanzado del mundo", ha sentenciado Domínguez. 

No en vano, la serie S-80 supone el mayor reto industrial y tecnológico afrontado por la industria de defensa nacional. Navantia da un enorme salto tecnológico, ya que asume por vez primera el rol de diseñador y completa el ciclo de la evolución tecnológica: pasar de construir en España con diseño extranjero a construir en España con diseño propio. 

Este proyecto coloca a la ingeniería naval española a la vanguardia en la fabricación de submarinos no nucleares, compitiendo con países punteros en la materia como Rusia, China, EE UU, Alemania o Corea del Sur.  

A la ceremonia de puesta a flote también han asistido la ministra de Defensa, Margarita Robles; el Jefe del Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), almirante qeneral Teodoro López Calderón y el Almirante Jefe de Estado Mayor de la Armada (AJEMA), almirante general Antonio Martorell Lacave; además de la presidenta de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), Belén Gualda. 

La construcción del submarino S-81 se ha llevado a cabo en el astillero que Navantia tiene en Cartagena y se trata de la primera entrega de las cuatro previstas de la serie S-80. Los tres submarinos restantes, el S-82 Narciso Monturiol, el S-83 Cosme García y el S-84 Mateo García de los Reyes, se irán sumando a la flota con una cadencia de uno cada dos años. Defensa invertirá en los cuatro sumergibles casi 4.000 millones de euros.

Los submarinos de la serie S-80 están entre los más modernos del mundo por las altas prestaciones que ofrecen. El sistema de propulsión independiente del aire (AIP) que posee se encuentra entre los más avanzados del sector y permite una gran autonomía operativa bajo el agua de hasta 21 días sin necesidad de salir a flote. 

Otra de sus características más destacadas es su discreción, lo que hace al batiscafo difícilmente perceptible. La clave está en el especial diseño de su hélice, un secreto celosamente guardado por los ingenieros para evitar copias.

Preparados para navegar sin problemas por cualquier zona del planeta, los submarinos destacan además por su capacidad disuasoria, ya que son capaces de lanzar misiles a objetivos en tierra firme o instalar minas inteligentes en los fondos marinos. Están preparados, incluso, para lanzar misiles Tomahawk, las armas de precisión guiadas por GPS que pueden volar a más de 800 km/h y son capaces de alcanzar objetivos hasta a 1.600 kilómetros de distancia.

Tras esta puesta a flote, en las próximas semanas darán comienzo las actividades de pruebas de puerto y, posteriormente, las pruebas de mar, que incluyen navegación en superficie e inmersión hasta alcanzar la cota máxima. La primera navegación del S-81 está prevista a principios de 2022 y su entrega a la Armada un año después. 

 

https://www.youtube.com/watch?v=MlmbbtaOz20 

La Familia Real asiste a la puesta a flote del nuevo submarino de la Armada


CARTAGENA.- Los reyes de España han presidido este jueves la puesta a flote del nuevo submarino de la Armada, el S-81 Isaac Peral, en los astilleros de Navantia en Cartagena, en la que han estado acompañados por sus hijas, Leonor, princesa de Asturias y madrina del bautizo del sumergible, y la infanta Sofía.

La familia real ha sido recibida en el astillero por la ministra de Defensa, Margarita Robles, y el delegado del Gobierno en la Región de Murcia, José Vélez.

Tras los saludos, se ha tomado una fotografía ante una placa conmemorativa del acto junto a una veintena de trabajadores del astillero que han participado en la construcción del S-81.

Posteriormente, los reyes y sus hijas han recorrido el interior de las oficinas de la empresa estatal Navantia, donde han visitado el Centro de Diseño Virtual, en el que se ha proyectado un vídeo sobre este astillero, además de hacer una visita virtual al submarino.

La ceremonia ha comenzado con la proyección de un vídeo sobre el centenario de la puesta a flote del primer submarino en las instalaciones de Navantia, que ha precedido a las alocuciones del presidente de Navantia, Ricardo Domínguez; el jefe del Estado Mayor de la Armada, Antonio Martorell, y la ministra de Defensa, Margarita Robles.

Domínguez ha calificado el acto como un "hito histórico" para la defensa nacional y Navantia al haber superado el "mayor reto tecnológico" de la industria militar española, que tendrá la "soberanía estratégica" para construir por primera vez, y sin depender de otros países, un arma submarina.

Mientras, Martorell ha recordado que la puesta a flote de un buque es "uno de los días de mayor alegría" para la Armada española, además de considerar un "inmenso honor" que la princesa de Asturias haya aceptado amadrinar el submarino.

Finalmente, Robles ha indicado que España "se siente orgullosa" de la labor de las Fuerzas Armadas y ha agradecido el trabajo de Navantia, la Armada y la Flotilla de Submarinos, con base en el Arsenal de Cartagena.

Tras la proyección de otro vídeo con la navegación virtual del S-81 y la bendición del submarino por parte del capellán, la princesa de Asturias, acompañada por su padre, ha subido a una escalinata situada a la altura de la amura del sumergible, donde ha cortado la cinta con la bandera de España que sujetaba una botella de vino, que ha quedado libre y ha impactado contra el casco.

Esta visita supone un paso más en el proceso iniciado por la Casa Real para dar mayor protagonismo y visibilidad a la princesa Leonor, heredera al trono y que ha sido designada como la madrina del sumergible en el acto celebrado bajo el aviso de nivel amarillo por fuertes tormentas en el litoral de la Región de Murcia.

A partir de hoy, el S-81 Isaac Peral se trasladará desde el taller donde se ha construido en el astillero de Navantia hasta el mar mediante un dique inundable, una maniobra que requiere de varias horas y que se hará en días posteriores. Una vez en el agua, comenzarán las pruebas de puerto y, en una segunda fase, las pruebas de mar, con navegación en superficie e inmersión hasta su cota máxima.

Se calcula que en 2026 los cuatro sumergibles encargados a Navantia de la serie S-80 (el S-81 Isaac Peral, el S-82 Narciso Monturiol, el S-83 Cosme García y el S-84 Mateo García de los Reyes) estarán operativos.

Solo nueves países -EE.UU., Francia, Reino Unido, Alemania, Suecia, Rusia, Japón, China y Corea del Sur- tienen actualmente la capacidad de diseñar y construir submarinos, un reducido grupo al que se sumará España de llegar el S-81 Isaac Peral a buen puerto.

En el caso de los S-80 (además del Isaac Peral Navantia realiza otros tres para la Armada), su construcción se tuvo que parar en seco en 2012, ocho años después de la puesta en marcha del proyecto, por un problema con los pesos, lo que obligó a replantear el diseño, alargando hasta los 80,8 metros de eslora, y más autonomía de desplazamiento. El techo de gasto se fijó en 2018 en 3.907 millones de euros.

Ello los convierte el arma submarina no propulsada con energía nuclear más avanzada del mundo, y susceptible de optar a contratos como el de la India, cuya Marina prevé comprar seis sumergibles.

Precisamente, en el acto desarrollado hoy han estado presentes los embajadores en España de Marruecos, India, Grecia, Australia y Canadá, países cuyas fuerzas armadas pueden tener un potencial interés en realizar encargos a Navantia para esta serie de submarinos u otro tipo de buques.

La Princesa de Asturias bautiza en Cartagena el S-81, el primer submarino de la serie S-80


 CARTAGENA.- La Princesa de Asturias ha ejercido este jueves de madrina en la ceremonia de puesta a flote del submarino S-81 'Isaac Peral', el primero de la serie S-80 que Navantia va a poner en marcha y que para su diseño ha optado por el Manual de Ingeniería de Sistemas de la NASA, en el que se definen los procesos necesarios y los hitos de revisión requeridos.

La ceremonia, que se ha desarrollado en el astillero de la dársena de Navantia, ha estado presidida por Sus Majestades los Reyes, la propia Princesa Leonor y su hermana, la Infanta Sofía, acompañadas por Manuel Muñiz, secretario de Estado de la España Global.

Se trata de la segunda vez que la Región de Murcia cuenta con la presencia de la Princesa Leonor y la Infanta Sofía. En mayo de 2014 acompañaron a los entonces Príncipes de Asturias a los actos conmemorativos del 25 aniversario de la XLI promoción de tenientes de la Academia General del Aire (AGA) en San Javier.

A su llegada han sido recibidos, entre otros, por Margarita Robles, ministra de Defensa; José Vélez, delegado del Gobierno en Murcia; Ana Belén Castejón, alcaldesa de Cartagena; Belén Gualda, presidenta de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales; y Ricardo Domínguez, presidente de Navantia.

Tras saludar a los embajadores en España de Marruecos, India, Grecia, Australia y Canadá, así como al jefe del Estado Mayor de la Defensa, Teodoro Esteban López; a la secretaria de Estado de Defensa, Esperanza Casteleiro; al jefe del Estado Mayor de la Armada, Antonio Martorell; al director de Operaciones y Negocios de Navantia, Gonzalo Mateo-Guerrero; y al director del Astillero de Cartagena de Navantia, Agustín Álvarez, se han realizado una fotografía ante una placa conmemorativa.

Posteriormente, han recorrido el interior de las oficinas, donde han visitado el Centro de Diseño Virtual, en el que se ha proyectado un audiovisual sobre Navantia Cartagena, y se ha realizado una visita virtual al submarino. 

Durante la ceremonia, cuya maestra ha sido la periodista Elvira Bernabéu, se ha proyectado un video sobre el centenario de la puesta a flote del primer submarino en las instalaciones de Navantia y han intervenido, por este orden, el presidente de Navantia, el jefe del Estado Mayor de la Armada y la ministra de Defensa.

En el turno de intervenciones, Martorell ha destacado que se trata de "un hito de gran trascendencia en un programa vital para la defensa de España y la industria nacional". Palabras a las que se han sumado tanto la ministra de Defensa como el presidente de Navantia, Ricardo Domínguez, que hablaba del submarino convencional más avanzado del mundo que supondrá una enorme proyección internacional para la industria naval española.

Finalmente, Margarita Robles ha indicado que España "se siente orgullosa" de la labor de las Fuerzas Armadas, ha tenido palabras de agradecimiento para los ciudadanos de Cartagena, y ha agradecido el trabajo realizado por Navantia, la Armada y la Flotilla de Submarinos, con base en el Arsenal de Cartagena.

Tras la proyección de otro vídeo con la navegación virtual del S-81 y la bendición del submarino por parte del capellán, la princesa de Asturias, acompañada por su padre, ha subido a una escalinata situada a la altura de la amura del sumergible, donde ha cortado la cinta con la bandera de España que sujetaba una botella de vino, que ha quedado libre y ha impactado contra el casco.

En la ceremonia, celebrada a escasos 400 metros de la sala donde se expone el primer sumergible de propulsión eléctrica capaz de lanzar un torpedo, diseñado por el marino e inventor cartagenero Isaac Peral en los años 80 del siglo XIX, también ha habido hueco para que la Familia Real se hiciera una fotografía ante el sumergible y otra con los más de 40 integrantes de la dotación de quilla del S81. 

Esta visita supone un paso más en el proceso iniciado por la Casa Real para dar mayor protagonismo y visibilidad a la princesa Leonor, heredera al trono y que ha sido designada como la madrina del sumergible en el acto celebrado bajo el aviso de nivel amarillo por fuertes tormentas en el litoral de la Región de Murcia.

A partir de hoy, el S-81 Isaac Peral se trasladará desde el taller donde se ha construido en el astillero de Navantia hasta el mar mediante un dique inundable, una maniobra que requiere de varias horas y que se hará en días posteriores. Una vez en el agua, comenzarán las pruebas de puerto y, en una segunda fase, las pruebas de mar, con navegación en superficie e inmersión hasta su cota máxima.

Se calcula que en 2026, los cuatro sumergibles encargados a Navantia de la serie S-80 (el S-81 Isaac Peral, el S-82 Narciso Monturiol, el S-83 Cosme García y el S-84 Mateo García de los Reyes) estarán operativos.

Solo nueves países del globo -EE.UU., Francia, Reino Unido, Alemania, Suecia, Rusia, Japón, China y Corea del Sur- tienen actualmente la capacidad de diseñar y construir submarinos, un reducido grupo al que se sumará España de llegar el S-81 Isaac Peral a buen puerto.

En el caso de los S-80 (además del Isaac Peral Navantia realiza otros tres para la Armada), su construcción se tuvo que parar en seco en 2012, ocho años después de la puesta en marcha del proyecto, por un problema con los pesos, lo que obligó a replantear el diseño, alargando hasta los 80,8 metros de eslora, y más autonomía de desplazamiento. El techo de gasto se fijó en 2018 en 3.907 millones de euros.

Ello los convierte el arma submarina no propulsada con energía nuclear más avanzada del mundo, y susceptible de optar a contratos como el de la India, cuya Marina prevé comprar seis sumergibles.

Precisamente, en el acto desarrollado hoy han estado presentes los embajadores en España de Marruecos, India, Grecia, Australia y Canadá, países cuyas fuerzas armadas pueden tener un potencial interés en realizar encargos a Navantia para esta serie de submarinos u otro tipo de buques.

Así es el primer submarino diseñado y construido íntegramente en España


MADRID.- Hito de la industria naval. Navantia presentó este jueves en Cartagena el primer submarino diseñado y construido íntegramente en España. El S-81, que llevará el nombre Isaac Peral, es el último desafío de la empresa pública con el que logra superar el muro de construir en España con diseño extranjero para pasar a construir en España con diseño propio, según relata elEconomista.

 El sumergible tiene una eslora de 80,8 metros, un diámetro de 7,3 metros y un desplazamiento en inmersión de alrededor de 3.000 toneladas. Entre sus aportaciones tecnológicas destacan el sistema de combate, control de plataforma y sistema de propulsión anaeróbico. 

Este sistema de propulsión independiente de la atmósfera le permite obtener energía eléctrica, a partir de pilas de combustible que utilizan tecnología procedente del sector aeroespacial, a cualquier profundidad. De esta manera, puede permanecer semanas sin salir a cota periscópica, lo que mejora su discreción, principal atributo de un submarino.

Se trata de un submarino altamente automatizado que gracias al sistema de control de plataforma de última generación permite ser operado por una tripulación reducida (32 marinos y 8 plazas para el embarque de personal adicional), capaz de alcanzar una velocidad en inmersión superior a los 19 nudos, y una cota máxima de inmersión mayor de 300 metros. Asimismo incorpora un sistema de combate capaz de lanzar misiles tácticos de ataque a tierra.

Estas prestaciones tecnológicas convierten al Issac Peral en la nave más avanzada del mundo sin tener en cuenta los modelos de propulsión nuclear. Es por ello, reconoce la compañía, que ha despertado el interés de varias marinas de otros países y ha abierto una puerta al mercado internacional.

El programa S-80 ha supuesto un salto para Navantia y para la industria externa, ya que en él participan un centenar de empresas de 11 comunidades autónomas diferentes. El proyecto genera empleo directo e indirecto para más de 6.000 personas, el 10% de la fuerza laboral industrial de Murcia. 

En cifras económicas, tiene un impacto anual en el PIB español superior a los 250 millones de euros, de los que más de 80 millones son aportación directa al PIB regional (el 1% del PIB murciano).

La ceremonia de puesta a flote, que se celebró este jueves, tuvo lugar junto al taller en el que se ha construido el submarino antes de que se inicie el proceso por el que éste se trasladará al agua mediante un dique inundable. Esta maniobra, que requiere varias horas, se realizará en los días siguientes como acto de trabajo en el astillero.

Una vez puesto a flote, darán comienzo las actividades de pruebas de puerto y, posteriormente, las pruebas de mar. La empresa calcula que la primera navegación del S-81 sea a principios de 2022 y su entrega a la Armada un año después. 

Un homenaje a Isaac Peral

Como no podría ser de otro modo, la empresa pública se ha decantado por bautizar su último reto con el nombre de Isaac Peral en homenaje al teniente de navío de la Armada. Y es que, tras la crisis de las Carolinas en 1885, Peral anunció que había resuelto definitivamente el reto de la navegación submarina.

Inmediatamente un grupo de científicos de la Escuela de Ampliación dieron su aprobación para que fuese trasladado al ministro de Marina, Manuel de la Pezuela, quien recibió el proyecto con entusiasmo. Por desgracia, los ministros que le sucedieron demostraron una dolorosa indiferencia (Berenger y Rodríguez Arias).

Gracias al interés de la reina regente María Cristina, el submarino fue botado en 1888. Sin embargo, a pesar del éxito de las pruebas de la nave, las personalidades del momento desecharon el invento y alentaron una campaña de desprestigio contra Peral, que finalmente solicitó su baja en la Marina.

Ahora, más de siglo y medio después, el nacimiento de este submarino con su nombre honra su memoria tras los sinsabores que tuvo que vivir.

domingo, 18 de abril de 2021

Se pone a flote el primer submarino S-80, un hito de la industria española


 MADRID.- La puesta a flote el próximo jueves del nuevo submarino desarrollado por Navantia para la Armada es un hito para la industria española. Diecisiete años después del arranque del proyecto, el primer sumergible de la serie S-80 pasará en Cartagena su prueba de fuego, ante la atenta mirada de la industria mundial. 

Solo nueves países del globo -EE.UU., Francia, Reino Unido, Alemania, Suecia, Rusia, Japón, China y Corea del Sur- tienen actualmente la capacidad tanto para diseñar como para  construir submarinos, un reducido grupo al que se sumará España de llegar el S-81 Isaac Peral a buen puerto.

Su puesta en el agua el jueves en los astilleros que tiene Navantia en el Arsenal de Cartagena, en un acto al que asistirán los Reyes y sus hijas, será el principio de la última etapa del sumergible, que se prevé entregar en 2023 una vez se acabe de poner a punto y supondrá un respiro para la Armada, ya que cuenta ahora solo con uno operativo.

Idear y construir un submarino, dicen los expertos, es un proceso más parecido al de una nave espacial que al de un barco. Se diseña para permanecer largos periodos de tiempo bajo el mar, su ventaja táctica principal, con lo que tiene que ser lo más autosuficiente posible, y sus materiales están además sometidos a una alta presión. 

En el caso de los S-80 (además del Isaac Peral, Navantia realiza otros tres para la Armada), su construcción se tuvo que parar en seco en 2012, ocho años después de la puesta en marcha del proyecto.

Un problema con los pesos lo frenó y se decidió acudir a la US Navy y a General Dynamics, con cuya ayuda se replanteó de forma integral. En 2016, Defensa aprobó el nuevo diseño del submarino, de mayor eslora, hasta los 80,8 metros, y más autonomía de desplazamiento. El techo de gasto se fijó en 2018 en 3.907 millones de euros. 

Salvados los escollos, los S-80 rediseñados, de 7,3 metros de diámetro, llevan dentro 60 kilómetros de cables y se pueden operar con 32 marinos, frente a las 65 personas que necesitaban sus predecedores, los de la clase S-70 construidos en los años 70 del siglo pasado en colaboración con Francia.

Cuentan con un sistema de combate integrado, un "cerebro" que aúna todos los sensores y armas para responder ante una amenaza, son capaces de bajar a centenares de metros y lanzar misiles a tierra.

Podrán permanecer bajo el agua quince días, una autonomía estratégica que permite su sistema de propulsión independiente de la atmósfera (AIP). Con él, obtienen agua y electricidad a cualquier profundidad gracias a un sistema de pila combustible donde el hidrógeno (H2) y el oxígeno (O2) se combinan para producirlos.

Ello los convierte en un "arma submarina" más eficaz y los hace atractivos para otros países. Como la India, cuya Marina tiene abierto un programa de compra de seis sumergibles al que aspira Navantia con los S-80, que califica como los submarinos convencionales (no nucleares) más avanzados del mundo.

La naviera pública española aspira a conseguir lo mismo que con sus fragatas F-100, en las que un contrato inicial del Ministerio de Defensa de unos 2.400 millones generó contratos adicionales por otros 2.000 millones con países como Noruega o Australia.

Navantia calcula en unos 250 millones de euros el impacto anual de este proyecto en el PIB español y asegura que por cada euro directo de PIB se generan, de forma adicional, 1,4 euros en la economía española.

Más de cien empresas de once comunidades autónomas han participado en el desarrollo de estos nuevos submarinos, que sostienen, solo en la región de Murcia, 2.000 empleos anuales directos (7.000 contando los indirectos).

Tienen también impacto en otros centros de Navantia, concretamente en Cádiz, donde se han desarrollado los sistemas de combate y la dirección del lanzamiento de torpedos, y en la fábrica de turbinas en Ferrol, que construye varios de sus elementos.

En tiempo de trabajo, el programa de los S-80 ronda las 20 millones de horas dedicadas a la producción y 6 millones a la ingeniería, unos números que dan una idea de su complejidad.

A partir del jueves, el S-81 Isaac Peral se trasladará desde el taller donde se ha construido en el astillero de Navantia hasta el mar mediante un dique inundable, una maniobra que requiere de varias horas y que se hará en los días siguientes.

Una vez en el agua, comenzarán las pruebas de puerto y, en una segunda fase, las pruebas de mar, con navegación en superficie e inmersión hasta su cota máxima.

Su primera navegación está programada para principios de 2022 y su entrega definitiva un año después, tiempo en el que la Armada tendrá que sostenerse con dos submarinos S-70, un número que solo le permite tener como máximo uno operativo, frente a los ocho que tenía en los años 80.

Se calcula que en 2026 los cuatro encargados a Navantia (el S-81 Isaac Peral, el S-82 Narciso Monturiol, el S-83 Cosme García y el S-84 Mateo García de los Reyes) estarán operativos, lo que permitirá a España recuperar el campo perdido en esta arma estratégica.  

sábado, 17 de abril de 2021

La Princesa Leonor será la madrina del nuevo submarino Isaac Peral (S-81)



MADRID.- La Princesa de Asturias será la madrina del nuevo submarino Isaac Peral (S-81) de la Armada Española cuya puesta a flote tendrá lugar el próximo jueves en el astillero de Navantia en Cartagena, según revela hoy el diario Abc.


La ceremonia será presidida por Su Majestad el Rey, acompañado por la Reina, la propia Princesa Leonor y su hermana, la Infanta Sofía. De este modo, la Heredera de la Corona protagonizará un nuevo acto después de que el 24 de marzo visitara en solitario la sede del Instituto Cervantes.

El acto de la puesta a flote del submarino Isaac Peral es un nuevo hito de uno de los principales programas de modernización de las Fuerzas Armadas: «El programa S-80 es el mayor reto industrial y tecnológico afrontado por la industria de defensa nacional. Navantia da un enorme salto tecnológico, ya que asume por primera vez el rol de autoridad técnica de diseño y se completa el ciclo de evolución tecnológica: pasar de construir en España con diseño extranjero a construir con diseño propio», destacan fuentes del astillero Navantia.

Se trata también de un proyecto clave para el futuro de la Armada Española y en el que se han invertido 17 años. Tras fallos hallados en 2013 por el desvío de pesos en el diseño y que hacían imposible su futura flotabilidad, el Ministerio de Defensa decidió enmendar el proyecto en 2018, siendo necesario acometer un rediseño del mismo, con un incremento de la eslora en 10 metros y, claro está, una nueva inversión que pasó de los 2.135 millones de euros iniciales a los 3.906,7 millones finales.  

Los submarinos S-80 tendrán una eslora total de 80,8 metros, un diámetro de 7,3 metros y un desplazamiento en inmersión de alrededor de 3.000 toneladas. Entre sus aportaciones tecnológicas destacan el sistema de combate y control de plataforma de Navantia Sistemas, y un sistema de propulsión anaeróbico revolucionario desarrollado por Navantia que aporta gran sigilo en inmersión, denominado BEST-AIP.

Este sistema de propulsión independiente de la atmósfera le permitirá obtener energía eléctrica, a partir de pilas de combustible que utilizan tecnología procedente del sector aeroespacial, a cualquier profundidad. Así, podrá permanecer semanas sin salir a cota periscópica, lo que mejorará su discreción, principal cualidad de un submarino.

«Los S-80 se convertirán así en los submarinos convencionales (no nucleares) más avanzados del mundo, lo que ha despertado el interés de varias marinas de otros países y ha abierto una puerta al mercado internacional en un sector altamente tecnológico», esgrimen desde Navantia.

En la puesta a flote del submarino también estarán presentes la ministra de Defensa, Margarita Robles; el presidente de la Región de Murcia, Fernando López Miras; el jefe de Estado Mayor de la Defensa (Jemad), almirante general Teodoro López Calderón; el jefe de Estado Mayor de la Armada (Ajema), almirante general Antonio Martorell; el presidente de Navantia, Ricardo Domínguez; y la presidenta de la SEPI, Belén Gualda. 

viernes, 16 de abril de 2021

Los Reyes presidirán el próximo jueves la ceremonia de puesta a flote del submarino S-81 en Cartagena


 CARTAGENA.- Sus Majestades los Reyes Felipe VI y doña Letizia, acompañados por la Princesa de Asturias, Leonor, y la Infanta Sofía, presidirán el próximo jueves, 22 de abril, la ceremonia de puesta a flote del S-81, el primer submarino de la serie S-80, en el astillero de Navantia en Cartagena.

El S-81, que llevará el nombre 'Isaac Peral', es el primer submarino diseñado y construido íntegramente en España y, por lo tanto, es una clara apuesta por el desarrollo tecnológico nacional, lo que potenciará la independencia estratégica de la defensa del país y la proyección internacional del tejido industrial español.

Con este programa, España entra en el reducido grupo de países que pueden diseñar y construir submarinos, un desafío enormemente complejo puesto que se trata de buques que deben operar de forma autónoma en un entorno hostil. Por lo tanto, requieren conocimientos altamente especializados en disciplinas diversas y una base industrial y tecnológica de apoyo extremadamente cualificada, según informaron fuentes de Navantia en un comunicado.

A la ceremonia de puesta a flote asistirán la ministra de Defensa, Margarita Robles; el presidente de la Región de Murcia, Fernando López Miras; el Jefe del Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), almirante general Teodoro López Calderón y el Almirante Jefe de Estado Mayor de la Armada (AJEMA), almirante general Antonio Martorell Lacave; además del presidente de Navantia, Ricardo Domínguez y la presidenta de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), Belén Gualda.

El programa S-80 es el mayor reto industrial y tecnológico afrontado por la industria de defensa nacional. Navantia da un enorme salto tecnológico, ya que asume por vez primera el rol de Autoridad Técnica de Diseño y se completa el ciclo de la evolución tecnológica: pasar de construir en España con diseño extranjero a construir en España con diseño propio.

CARACTERÍSTICAS DEL SUBMARINO

Los submarinos S-80 tendrán una eslora total de 80,8 metros, un diámetro de 7,3 metros y un desplazamiento en inmersión de alrededor de 3.000 toneladas. Entre sus aportaciones tecnológicas destacan el sistema de combate y control de plataforma de Navantia Sistemas, y un sistema de propulsión anaeróbico revolucionario desarrollado por Navantia que aporta gran sigilo en inmersión, denominado BEST-AIP.

Este sistema de propulsión independiente de la atmósfera le permitirá obtener energía eléctrica, a partir de pilas de combustible que utilizan tecnología procedente del sector aeroespacial, a cualquier profundidad. Así, podrá permanecer semanas sin salir a cota periscópica, lo que mejorará su discreción, principal atributo de un submarino.

Los S-80 serán, por lo tanto, los submarinos convencionales (no nucleares) más avanzados del mundo, lo que ha despertado el interés de varias marinas de otros países y ha abierto una puerta al mercado internacional en un sector altamente tecnológico.

La ceremonia de puesta a flote, que se celebrará siguiendo medidas de seguridad sanitaria, tendrá lugar junto al taller en el que se ha construido el submarino antes de que se inicie el proceso por el que éste se trasladará al agua mediante un dique inundable. Esta maniobra, que requiere varias horas, se realizará en los días siguientes como acto de trabajo en el astillero.

Una vez puesto a flote, darán comienzo las actividades de pruebas de puerto y, posteriormente, las pruebas de mar, que incluyen navegación en superficie e inmersión hasta alcanzar la cota máxima. La primera navegación del S-81 está prevista a principios de 2022 y su entrega a la Armada un año después.

El programa S-80 ha supuesto un salto cualitativo para Navantia, que se sitúa en primera línea del mercado internacional de submarinos convencionales, con ofertas activas en varios países. Lo es también para la industria colaboradora, ya que en el programa S-80 participan un centenar de empresas de 11 comunidades autónomas diferentes.

Genera empleo directo, indirecto e inducido para más de 6.000 personas y un impacto anual en el PIB español (contribución directa, indirecta e inducida) superior a los 250 millones de euros, de los que más de 80 millones son aportación directa al PIB regional (el 1% del PIB de Murcia).

martes, 13 de abril de 2021

El patrullero de altura 'Alborán' (P-62) comienza una campaña de vigilancia y apoyo a las actividades de pesca


CARTAGENA.- El patrullero de altura de la Armada Española 'Alborán', que tiene su base en Cartagena, tiene previsto salir a la mar, en la tarde de este martes, para iniciar una campaña en el Mediterráneo y golfo de Cádiz hasta el 1 de mayo.

El patrullero, además de su dotación, embarcará a inspectores de pesca pertenecientes a la Secretaría General de Pesca (SEGEPESCA) que realizarán las labores de inspección pesquera, según informaron fuentes de la Armada en un comunicado.

Durante las navegaciones de caladeros en aguas tanto nacionales como internacionales, el buque realizará labores de inspección pesquera, además de presencia naval, control y apoyo a la flota pesquera, y vigilancia y control del espacio marítimo, entre otras.

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Para la salida, se han seguido todos los protocolos de prevención de la COVID-19, alistándose además el material necesario para la precaución en las propias inspecciones a los diferentes pesqueros.

La construcción de este navío se llevó a cabo en Vigo (Pontevedra) siendo entregado a la Armada el 8 de enero de 1997. El diseño final del buque, que no responde a ningún prototipo ya definido, resulta de modificar un proyecto inicial de buque pesquero para adaptarlo a buque de apoyo e inspección.

El 'Alborán' tiene su base en Cartagena y pertenece a la Fuerza de Acción Marítima. Cuenta con una dotación de 37 personas, a la que se incorporan inspectores de pesca para apoyar en las labores de control e inspección durante las campañas de vigilancia de pesca.

miércoles, 7 de abril de 2021

El almirante de la Flota de la Armada compara los protocolos de construcción del S-80 por Navantia con los que utiliza la NASA


CARTAGENA.- El almirante de la Flota de la Armada española Eugenio Díaz del Río se ha mostrado en Cartagena “contento” y “muy ilusionado” por la puesta a flote del submarino S-80 'Isaac Peral' el día 22, en un acto en el que estará presente el rey Felipe VI.


Díaz del Río, que realiza su primera visita oficial a las unidades de la Flota en Cartagena después de su toma de posesión el pasado mes de febrero, ha afirmado que se trata de un “programa complejo”, porque “construir y diseñar un submarino es muy complejo”, y en tal sentido comparó los protocolos de Navantia con los de la NASA para desarrollar el submarino.

Ha mostrado además su confianza en que “será un arma muy capaz” y en que se cumplirán los plazos previstos. En concreto, estará operativo a principios de 2023. Ahora, ha señalado Díaz, “queda comprobar que el submarino puede navegar con seguridad”.

El almirante de la Flota ha recordado que el desarrollo de la serie de submarinos S-80 no solo afecta a la Armada, ya que supone 9.000 puestos de trabajo directos e indirectos.

El objetivo de su visita ha sido “conocer mejor si cabe las unidades que pertenecen a la flota para apoyarlas mejor, ser más eficaz en su gestión”. Ha dicho que ha salido con “muy buena impresión” porque se ha encontrado “un cuartel muy preparado, muy capaz, con ganas de innovar”.

Ha puesto el foco en la importancia del papel de la Armada porque actualmente “los almacenes del mundo están en la mar”, y ha señalado que “el 80% de los bienes que consumimos o el 90% del gas o del petróleo viene por la mar”, por lo que “no se puede tener sin vigilar, sin saber qué es lo que pasa y sin tener la capacidad de reaccionar si pasa algún incidente”.

Sobre la incidencia de la pandemia en la Armada, ha explicado que “en los barcos se han hecho burbujas para evitar que, si en una burbuja hay un contaminado, se contaminen las otras burbujas”, y se han implementado todos los protocolos existentes.

En Cartagena se han vacunado el 90% de las dotaciones, lo que supone más de mil personas inmunizadas.

sábado, 3 de abril de 2021

Desarrollan un avanzado sistema de detección temprana de amenazas submarinas


CASTELLÓN/CARTAGENA.- Una colaboración entre universidades y pymes, financiada por el Ministerio de Defensa, ha desarrollado un sistema nacional de detección temprana de amenazas submarinas -como submarinos enemigos o minas- usando vehículos no tripulados y redes de sensores que, además, podrá tener también aplicación civil.

El proyecto SIMBAAD (Sistema Integrado de Monitorización y Búsqueda de Amenazas Acuáticas para Defensa) está coordinado por la Universitat Jaume I de Castelló y cuenta con la participación de la Universitat de les Illes Balears, la empresa tecnológica madrileña UTEK, especializada en el desarrollo de sistemas no tripulados, y el astillero gallego Narwhal Boats.

Asimismo, se cuenta con el apoyo de la Armada a través de la ETS (Escuela Técnica Superior) de Ingenieros de Armas Navales, según ha explicado el catedrático de la UJI de Ciencia de la Computación e Inteligencia Artificial, Pedro José Sanz.

SIMBAAD está financiado por la Dirección General de Armamento y Material del Ministerio de Defensa, dentro del Programa COINCIDENTE, y responde a las necesidades detectadas en las tecnologías asociadas al uso colaborativo de vehículos no tripulados y redes de sensores.

Según fuentes del proyecto, se trata de una colaboración, Administración-Universidad-Empresa que permitirá "lograr importantes avances científico-tecnológicos a nivel nacional".

El sistema, actualmente en desarrollo, estará compuesto de una embarcación no tripulada de superficie que integrará un vehículo submarino autónomo. Ambos vehículos llevan incorporados diversos sensores para la detección de potenciales amenazas marinas, además de todos los elementos necesarios para facilitar las comunicaciones y su navegación autónoma.

El conjunto se completa con una red de sensores desplegados en boyas. Todos los elementos del sistema se comunican entre sí y envían los datos, en tiempo real, a una estación de control remota que permite la operación a distancia de los vehículos no tripulados.

La combinación de sensores fijos y móviles permite una optimización de los recursos y una mejor cobertura de la zona a proteger.

El conjunto se completa con sistemas de detección e identificación automática de amenazas y, además, de un entorno de simulación específico que facilitará el entrenamiento de los usuarios finales del sistema.

Entre estas amenazas que se podrían identificar se encuentra un submarino enemigo, una mina o cualquier objeto no identificado, susceptible de contener sensores, explosivos o cualquier medio que pueda amenazar la seguridad de un área determinada, incluyendo infraestructuras portuarias o embarcaciones de cualquier tipo.

SIMBAAD, iniciado a finales de 2020, tiene una duración prevista de dos años y se espera completarlo con una demostración de las capacidades del prototipo final desarrollado, presumiblemente en instalaciones de la Armada.

Aunque este proyecto está orientado a Defensa, algunas de sus contribuciones tendrán impacto directo en la sociedad civil: en zonas portuarias, tanto destinadas a mercancías como transportes de personas, podrá realizar actuaciones de prevención y seguridad, incluyendo operaciones de mantenimiento de todo tipo, como inspección de cascos de buques, inspección de muelles de carga, o colectores y cables submarinos, entre otros.

domingo, 29 de noviembre de 2020

Defensa autoriza la contratación para la reparación del buque cazaminas Turia M-34 con una dotación de 25 millones


 MURCIA.- La senadora del PSOE, Lourdes Retuerto, ha anunciado que el Ministerio de Defensa ha autorizado la contratación para la reparación del buque cazaminas Turia M-34 con una dotación de 25 millones de euros, según informaron fuentes de esta formación política en un comunicado.

"La duración de las reparaciones será de 24 meses, y supone también la fabricación de los submarinos S-80, incrementar la carga de trabajo y el prestigio a nivel mundial para Navantia en la especialización de reparaciones de este tipo de buques militares", ha aseverado.

Ha asegurado que el Gobierno de España demuestra de nuevo su apuesta por la industria de Defensa y por la inversión en las empresas que potencian la investigación y el desarrollo, "más ahora en los momentos tan duros por los que estamos pasando".

"Sabemos que estas inversiones suponen amplios retornos en conocimiento e investigación, además de los empleos que genera, en este caso, en Cartagena y Comarca", ha señalado Lourdes Retuerto, quien ha insistido en la importancia que supone Navantia para Cartagena y su comarca como motor económico, así como para la Región de Murcia.

Finalmente, ha recordado que el cazaminas Turia M-34, que fue botado en 1999, se construyó en la antigua factoría Izar en Cartagena, la actual Navantia.

"En agosto de 2019 el buque quedó varado frente a las playas de La Manga del Mar Menor al chocar contra una masa rocosa, mientras participaba en las labores de rescate del avión C-101 del Ejército del Aire, que se estrelló el día anterior y le costó la vida al piloto de la Academia General del Aire que realizaba un vuelo de instrucción", ha concluido.

lunes, 23 de noviembre de 2020

El patrullero 'Infanta Cristina' cumple 40 años al servicio de España

 CARTAGENA.- El patrullero de altura 'Infanta Cristina', cumple este martes el 40 aniversario de su entrada en servicio en la Armada, a la que se incorporó como corbeta en 1980, al igual que el patrullero de altura 'Infanta Elena' que cumplió su 40 aniversario en abril de este año 2020.

Estos dos buques son los dos últimos en servicio de las antiguas corbetas clase 'Descubierta', según informaron fuentes de la Armada en un comunicado.

Undécimo buque nombrado en honor de un Infante de España y octavo con el nombre de 'Cristina', el patrullero 'Infanta Cristina' fue concebido inicialmente como corbeta, siendo así la cuarta de la clase 'Descubierta'. Fue construido por la Empresa Nacional Bazán en Cartagena y entregado a la Armada el 24 de noviembre de 1980.

Entre los años 1980 y 2003, con numeral F-34, participó en la guerra del golfo Pérsico para la liberación de Kuwait, formando parte de la Fuerza Multinacional que hizo efectivo el bloqueo naval impuesto a Irak por la ONU. Además, como corbeta, participó como miembro activo en numerosas agrupaciones internacionales dentro del marco OTAN.

Hasta la fecha, han servido a España por los mares del mundo en este buque un total de 1.378 personas entre hombres y mujeres. Ha tenido 27 comandantes, siendo el primero el vicealmirante Carlos Sánchez de Toca Acebal, 312 oficiales, 319 suboficiales y 747 miembros de marinería y tropa profesional.

A estos números hay que añadir los numerosos remplazos de marinería que rotaban por la corbeta en los años del servicio militar obligatorio y los innumerables guardiamarinas y oficiales alumnos que cada fin de curso recorrían España, poniendo en práctica lo aprendido en la Escuela Naval Militar.

En estos cuarenta años, el buque ha navegado en millas el equivalente a 27 vueltas al mundo, visitando 87 puertos diferentes entre nacionales y extranjeros. Así, navegando hacia el norte, llegó a la semana naval de Kiel como buque OTAN; con rumbo al sur visitó Sudáfrica y Angola durante sus despliegues por el golfo de Guinea, a levante, inmerso en la Operación Atalanta, sus cuatro motores le llevaron a Kenia, Seychelles y Madagascar cruzando el Canal de Suez como patrullero y hasta Rumanía cruzando los estrechos del Bósforo y Dardanelos como corbeta, siguiendo los pasos de Colón hacia poniente visitó Brasil, Uruguay y los canales patagónicos recalando en Ushuaia.

Entre septiembre de 2004 y junio de 2005 se procedió a su transformación de corbeta a patrullero de altura quedando encuadrado en la Fuerza de Acción Marítima con el numeral P-77.

Como patrullero ha realizado importantes despliegues internacionales, destacando la Operación Atalanta en el océano Índico, integrado en la Fuerza Marítima Europea (EUNAVFOR); la operación UNIFIL en el Mediterráneo oriental de apoyo al Líbano y más recientemente en el golfo de Guinea efectuando seguridad cooperativa con los países de la región.

En todos y cada uno de sus despliegues y misiones, la 'corbetica', la 'cristinuca' siempre volvió a su misma base, a Cartagena.