CARTAGENA.- La paralización temporal de la refinería de petróleos de Escombreras ya tiene fecha de caducidad o al menos eso fue lo que anunció el director de Repsol en Cartagena, Francisco Vázquez, al consejo de administración de la Autoridad Portuaria.
«Nos ha comunicado que estará parada hasta la primera quincena de mayo. A partir de ahí no hay fecha exacta de la reanudación de la producción, que dependerá del mercado», explicó el presidente del Puerto, Adrián Ángel Viudes, a 'La Verdad'.
«Nos ha comunicado que estará parada hasta la primera quincena de mayo. A partir de ahí no hay fecha exacta de la reanudación de la producción, que dependerá del mercado», explicó el presidente del Puerto, Adrián Ángel Viudes, a 'La Verdad'.
El cese de la actividad se debió a las pérdidas que la refinería estaba acumulando por la bajada de consumo de gasolina y el descenso continuado de beneficios en el refinado de cada barril de petróleo. Viudes dijo que el director del complejo «se mostró optimista al comunicar que la parada oficial es hasta la primera quincena de mayo y que no hay ninguna decisión de ir más allá, al menos de momento».
Vázquez expuso al consejo de administración la situación en la que se encuentra la petrolera en Cartagena. Explicó que por cada barril que refinaban perdían un euro. Su producción era de cien mil barriles diarios, por lo tanto los pérdidas llegaron a ser inasumibles.
Repsol paró la producción definitivamente hace nueve días tras desactivar sus unidades de producción de forma progresiva. Los trabajadores ya anunciaron que la paralización sería de tres semanas, pero que después de esa fecha no sabían lo que podría suceder.
Un portavoz de la empresa confirmó que la refinería estará parada completamente hasta la segunda quincena de mayo, fecha en la que podría reanudarse la producción, «siempre y cuando el mercado se haya recuperado y las circunstancias comerciales sean propicias».
Viudes reconoció que la Autoridad Portuaria «está notando» los efectos de la parada de Repsol y advirtió que si no se compensa la entrada de crudo con el tráfico de productos ya refinados, las pérdidas en la cuenta de ingresos del puerto «podrían rondar los doscientos mil euros mensuales».
La ausencia total de tráfico de Repsol en el puerto cartagenero parece no obstante improbable, reconoció Viudes, quien declinó dar cifras definitivas «hasta conocer las cantidades exactas de productos refinados que la empresa importará».
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