TOTANA.- La Confederación Empresarial del Bajo Guadalentín (Cebag) advirtió “profundas diferencias” con el Ayuntamiento de Totana el Plan General Municipal de Ordenación (PGMO) que la corporación municipal aprobó en su versión provisional definitiva el pasado viernes.
El alcalde, José Martínez Andreo, y el concejal de urbanismo se reunieron durante tres horas con el presidente de Cebag, José Luis Hernández, y varios directivos de Cebag, a fin de comentar diversos aspectos del PGMO.
Así, según el Cebag, Martínez Andreo expuso que la reunión “era para informar del contenido del Plan, a la vez que de la disposición del Equipo de Gobierno a avanzar en posibles acuerdos que pudiesen mejorar el mismo”.
Sin embargo, según manifestó, “esa actitud de acuerdo no era compatible con la posibilidad de que Cebag presentase de nuevo varios miles de alegaciones, al tiempo que se mostró partidario de crear una comisión de trabajo para intentar acercar posiciones y acuerdos que se trasladarían a la Comunidad antes de la aprobación definitiva del Plan”.
Hernández manifestó que la reunión “se producía tarde pues no se había cumplido el compromiso de que ésta tuviese lugar antes de la aprobación del Plan”, y añadió que “ahora el interlocutor para aceptar o no las alegaciones era la Comunidad y no el Ayuntamiento”.
También recordó que a juicio de Cebag “no se habían cumplido y materializado en su totalidad prácticamente ninguno de los 12 puntos del acuerdo suscrito en su día, por lo que era muy difícil tener confianza y credibilidad en que quien hace solo unos días no ha cumplido lo acordado, esté dispuesto a hacerlo unas semanas después, cuando ahora no tiene competencia formal para hacerlo”.
Hernández trasladó a Martínez Andreo su “malestar por no haberse recogido en el Plan acuerdos que están recogidos en términos similares en otros planes aprobados en municipios vecinos”, y se mantienen o incorporan “proyectos de difícil o imposible realización como el trasvase de agua desalada desde Mazarrón, un tranvía para todo el municipio y la creación de la Universidad del Agua”.
Así, según el Cebag, Martínez Andreo expuso que la reunión “era para informar del contenido del Plan, a la vez que de la disposición del Equipo de Gobierno a avanzar en posibles acuerdos que pudiesen mejorar el mismo”.
Sin embargo, según manifestó, “esa actitud de acuerdo no era compatible con la posibilidad de que Cebag presentase de nuevo varios miles de alegaciones, al tiempo que se mostró partidario de crear una comisión de trabajo para intentar acercar posiciones y acuerdos que se trasladarían a la Comunidad antes de la aprobación definitiva del Plan”.
Hernández manifestó que la reunión “se producía tarde pues no se había cumplido el compromiso de que ésta tuviese lugar antes de la aprobación del Plan”, y añadió que “ahora el interlocutor para aceptar o no las alegaciones era la Comunidad y no el Ayuntamiento”.
También recordó que a juicio de Cebag “no se habían cumplido y materializado en su totalidad prácticamente ninguno de los 12 puntos del acuerdo suscrito en su día, por lo que era muy difícil tener confianza y credibilidad en que quien hace solo unos días no ha cumplido lo acordado, esté dispuesto a hacerlo unas semanas después, cuando ahora no tiene competencia formal para hacerlo”.
Hernández trasladó a Martínez Andreo su “malestar por no haberse recogido en el Plan acuerdos que están recogidos en términos similares en otros planes aprobados en municipios vecinos”, y se mantienen o incorporan “proyectos de difícil o imposible realización como el trasvase de agua desalada desde Mazarrón, un tranvía para todo el municipio y la creación de la Universidad del Agua”.
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