El tiempo pondrá las cosas en sitio, no lo dice Valcárcel lo comentan dirigentes socialistas. La decisión de Pedro Saura, el máximo líder de los socialistas murcianos, de optar por la plaza de senador autonómico, compaginando la portavocía en la Asamblea Regional, ha abierto un nuevo ‘campo de debate’ en el interno del partido para disfrute de los populares. Juan Escudero, uno de los responsables del ‘triunvirato’ puesto por Ramón Ortiz, afirma que se ha buscado una salida cómoda para garantizarse su futuro personal y le compara con Napoleón. Mira quién habla. Plena sintonía con los portavoces populares.
Después del batacazo electoral del pasado 27-M parece que los socialistas murcianos andan medio tocados y dando tumbos en la lona. No se encuentran entre ellos y sus decisiones, por muy sublimes que puedan ser no las entienden ni la mayoría de sus simpatizantes. En estrategia política de laboratorio la decisión de Saura es de sobresaliente. Es una apuesta firme por defender los intereses de Murcia y recuperar electorado.
En la Asamblea Regional, con su pequeña minoría se fiscaliza las actuaciones del Gobierno regional e interviene sólo cuando lo haga el presidente de la Comunidad. Donde puede trabajar más para lograr ventajas para Murcia es en Madrid, donde el Gobierno central es de su mismo color. Se trataría de marcar la iniciativa política regional en muchos temas de futuro. Para ello hace como otros líderes regionales socialistas en la oposición, se van al Senado. La Cámara Alta tiene fama de ser precisamente la galería de una mina y con una presencia testimonial cada quince días se cumple con el cometido.
Mientras tanto se mueve, aprovecha sus contactos en el gobierno de Zapatero, sobre todo en los Presupuestos Generales, abandera la defensa del trasvase Tajo-Segura contra las ambiciones de blindajes de los castellanos-manchegos. En resumen una puesta firme de futuro para fortalecer su liderazgo dentro del PSRM y elaborar buenas candidaturas para las generales y luego dios vera. La explicación estratégica les suena sin embargo a un sector histórico del PSRM a cuento chino. “Antes de que le echemos por su fracaso electoral se ha buscado un buen colchón”, comentan.
Las explicaciones oficiales siempre generan dudas, como ha sucedido con los cambios en el gobierno de Valcárcel con De la Cierva y Herranz. A día de hoy pocos se creen, aunque sea verdad, que De la Cierva se fue llorando tan contento por motivos familiares y personales, o que Herranz dejó Sanidad por criterios economicistas. En el caso de Saura también se emocionó al hablar del trabajo como senadora de Martínez. Mucha emotividad con este calor estival. En el PP hay líder regional sólido, en el PSRM siguen en ello.
La otra ‘corrida de la Prensa’
Los profesionales del periodismo siempre han sido una cantera de políticos. La connivencia entre ambas profesiones siempre ha terminado por hacer parejas de hecho. Con la llegada de los populares al poder en la Región de Murcia fueron varios los compañeros que se cambiaron de trinchera, con José Antonio Ruiz Vivo y Antonio González Barnés en Murcia o Francisco Ferreño en Cartagena, como caso más significativos. En los pasados comicios se produjo también el salto de María José Alarcón como alcaldable en las filas socialistas.
Ahora le ha tocado a la Asociación de la Prensa, de la junta directiva ha salido el presidente camino de la Consejería de Presidencia, y su compañera de junta directiva, Carmen Guardia, responsable de Europa Press, de directora general de Comunicación. Se queda al frente de la Asociación provisionalmente Juan Tomás de Frutos, y hasta dicen que no sería nada raro que también saltará a la cancha. Luego queda la amplia redacción que suponen los gabinetes y asesoramientos institucionales en el Gobierno regional y en los principales Ayuntamientos. A este paso en las redacciones se van a quedar los becarios y el del tambor.
Después del batacazo electoral del pasado 27-M parece que los socialistas murcianos andan medio tocados y dando tumbos en la lona. No se encuentran entre ellos y sus decisiones, por muy sublimes que puedan ser no las entienden ni la mayoría de sus simpatizantes. En estrategia política de laboratorio la decisión de Saura es de sobresaliente. Es una apuesta firme por defender los intereses de Murcia y recuperar electorado.
En la Asamblea Regional, con su pequeña minoría se fiscaliza las actuaciones del Gobierno regional e interviene sólo cuando lo haga el presidente de la Comunidad. Donde puede trabajar más para lograr ventajas para Murcia es en Madrid, donde el Gobierno central es de su mismo color. Se trataría de marcar la iniciativa política regional en muchos temas de futuro. Para ello hace como otros líderes regionales socialistas en la oposición, se van al Senado. La Cámara Alta tiene fama de ser precisamente la galería de una mina y con una presencia testimonial cada quince días se cumple con el cometido.
Mientras tanto se mueve, aprovecha sus contactos en el gobierno de Zapatero, sobre todo en los Presupuestos Generales, abandera la defensa del trasvase Tajo-Segura contra las ambiciones de blindajes de los castellanos-manchegos. En resumen una puesta firme de futuro para fortalecer su liderazgo dentro del PSRM y elaborar buenas candidaturas para las generales y luego dios vera. La explicación estratégica les suena sin embargo a un sector histórico del PSRM a cuento chino. “Antes de que le echemos por su fracaso electoral se ha buscado un buen colchón”, comentan.
Las explicaciones oficiales siempre generan dudas, como ha sucedido con los cambios en el gobierno de Valcárcel con De la Cierva y Herranz. A día de hoy pocos se creen, aunque sea verdad, que De la Cierva se fue llorando tan contento por motivos familiares y personales, o que Herranz dejó Sanidad por criterios economicistas. En el caso de Saura también se emocionó al hablar del trabajo como senadora de Martínez. Mucha emotividad con este calor estival. En el PP hay líder regional sólido, en el PSRM siguen en ello.
La otra ‘corrida de la Prensa’
Los profesionales del periodismo siempre han sido una cantera de políticos. La connivencia entre ambas profesiones siempre ha terminado por hacer parejas de hecho. Con la llegada de los populares al poder en la Región de Murcia fueron varios los compañeros que se cambiaron de trinchera, con José Antonio Ruiz Vivo y Antonio González Barnés en Murcia o Francisco Ferreño en Cartagena, como caso más significativos. En los pasados comicios se produjo también el salto de María José Alarcón como alcaldable en las filas socialistas.
Ahora le ha tocado a la Asociación de la Prensa, de la junta directiva ha salido el presidente camino de la Consejería de Presidencia, y su compañera de junta directiva, Carmen Guardia, responsable de Europa Press, de directora general de Comunicación. Se queda al frente de la Asociación provisionalmente Juan Tomás de Frutos, y hasta dicen que no sería nada raro que también saltará a la cancha. Luego queda la amplia redacción que suponen los gabinetes y asesoramientos institucionales en el Gobierno regional y en los principales Ayuntamientos. A este paso en las redacciones se van a quedar los becarios y el del tambor.
2 comentarios:
Ramón Ortiz, ex secretario general del PSRM-PSOE, portavoz socialista en la Asamblea Regional y candidato a la presidencia de la Comunidad Autónoma en dos ocasiones, señaló ayer a La Verdad hacer «constatado que muchos militantes, la mayoría de la gente, opinan que hay que pegarle un giro al partido», al tiempo que se mostró en desacuerdo con la designación del secretario general, Pedro Saura, como senador autonómico.
Ortiz, que se ha convertido en las últimas semanas, tras los malos resultados electorales cosechados por el PSOE en las pasadas elecciones, en una de las voces más autocríticas con la actual situación del partido, reveló que «muchos miembros del Comité Regional habían decidido asistir a la reunión -la celebrada la pasada semana- y votar en contra de la propuesta de Saura como senador, pero les aconsejé que no era razonable, porque si se hubiera rechazado la propuesta habría supuesto un voto de censura para el secretario general que podría haber provocado su dimisión y la apertura de una profunda crisis».
Ortiz opina que «el discurso tremendista que hemos esgrimido en las pasadas elecciones nos ha reportado los peores resultados de la historia y nos ha situado de espaldas al electorado, y la forma de elegir a Pedro Saura como senador autonómico, con las numerosas ausencias que hubo en el Comité Regional, le ha situado de espaldas a la militancia».
El ex secretario general del PSRM-PSOE agrega que «el sentir general en el partido es que Saura debería centrarse en su trabajo como jefe de la oposición, ya que el puesto de senador podría haberlo ocupado otra mucha gente».
Unidad
A pesar de ello, Ramón Ortiz considera que en este momento el partido «debe mantenerse unido para tratar de obtener los mejores resultados en las próximas elecciones generales, porque hay posibilidades de lograrlo, y dejar para el congreso regional del próximo año la elección de una nueva dirección que construya un nuevo discurso y una nueva política con la que se sientan identificados los militantes y la sociedad».
A su juicio, y a pesar del malestar que dice existir en el seno de la organización con el actual secretario general, «el sentimiento de unidad es el que prevalece, pero es gracias al sentido de responsabilidad de los militantes».
De "La Verdad"
Un malestar del que se ha hecho eco Ramón Ortiz, quien fuera candidato del PSRM a la Presidencia de la Comunidad en las convocatorias electorales de 1999 y 2003 después de ocupar varios altos cargos en el Gobierno regional en tiempos de María Antonia Martínez. Ortiz aseguraba ayer a la Cadena SER que “muchos militantes del PSOE no entienden que se envíe a Pedro Saura al Senado”.
Las palabras de Ortiz convierten en clamor las críticas soterradas de buena parte de la militancia a propósito de la estrategia electoral de los dirigentes del PSRM, de las que algunas fuentes socialistas advertían hace ya semanas, y que el ex alcalde de Los Alcázares, Juan Escudero, hizo patentes al comparar a Saura con Napoleón, quien como aquel senador éste se autodesignó emperador. Y más cuando no son pocos los que esperaban que el designado para ocupar el escaño autonómico en el Senado fuese Manuel Hurtado, después de su autoinmolación tras la debacle electoral en Ceutí.
Unas críticas que a buen seguro se expresarán abiertamente en el próximo congreso del partido, que se celebrará después de las próximas elecciones generales. Y sobre todo a tenor de los deseos también expresados en voz alta por parte del propio Ortiz, para quien en esa cita “se ha de producir un giro de 180 grados”.
Sin ser más explícito, el dirigente socialista adelanta los movimientos internos que, hasta entonces, se van a producir en el seno del PSOE. La marcha de Saura a Madrid no se entiende demasiado bien, sobre todo tras su promesa poselectoral de darlo todo por hacer una buena oposición en la Asamblea Regional, y en algunos círculos ya se habla de “huida hacia adelante”.
De "El Faro"
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