jueves, 1 de marzo de 2007

El rey Juan Carlos I abrió, con su visita a Murcia, el III centenario del imaginero Francisco Salzillo




El presidente y el fiscal jefe del Tribunal Superior de Justicia de la Región de Murcia (TSJ) abandonaron el acto por el maltrato que les dispensó el protocolo de la Presidencia de la Comunidad Autónoma en esta ocasión


MURCIA.- El Rey don Juan Carlos I abrió hoy los actos del tercer centenario del nacimiento del imaginero italo-murciano, Francisco Salzillo, inaugurando la exposición 'Testigo de un Siglo', que se podrá visitar hasta final del próximo mes de julio en la capital regional.

El Rey inauguró una muestra que don Juan Carlos calificó, tras recorrerla durante más de una hora, de "magnífica" y "soberbia".

Desde más de media hora antes de la llegada del Rey, esperaban en las inmediaciones del Museo Salzillo cientos de personas, en un día muy soleado y caluroso en la ciudad de Murcia.

A las doce en punto llegó el monarca, acompañado de la ministra de Cultura, Carmen Calvo, momento en el que el público estalló en aplausos y gritos de júbilo. Un grupo de unos 50 funcionarios municipales, vestidos con camiseta y gorra amarillas, se concentraron en silencio, sosteniendo carteles que levantaron a la llegada del Rey donde se leía 'Majestad, necesitamos ayudas' y 'Convenio digno para todos'.

Don Juan Carlos, que fue recibido en la plaza San Agustín por el presidente de la Comunidad Autónoma de Murcia, Ramón Luis Valcárcel, saludó a las autoridades presentes y descubrió una placa conmemorativa, sita en la fachada principal del Museo Salzillo, en la que ponía que "Su Majestad el Rey Don Juan Carlos I inauguró la exposición 'Salzillo, Testigo de un siglo' con motivo del III Centenario del nacimiento del escultor Francisco Salzillo. 1 de marzo de 2007".

FIRMA EN EL LIBRO DE HONOR

Después de realizar los saludos protocolarios, se dirigió al interior del Museo para contemplar las más de 300 piezas que componen la exposición. En primer lugar, se dirigió al vestíbulo de la Iglesia de Jesús, donde el presidente de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno, el abogado Rafael Cebrián, invitó al Rey a firmar en su Libro de Honor. Precisamente, el mismo libro recogía ya la rúbrica, como Infante, de Don Juan Carlos en el año 1959.

Este libro también recoge la rúbrica de su abuelo Alfonso XIII, quien inauguró en su día la muestra sobre Salzillo, "Imaginería Sagrada", y de su hija la Infanta Cristina, que viajó a Murcia en octubre de 2002 para inaugurar la más reciente ampliación del Museo Salzillo.

A partir de la firma, se inició la visita guiada por el comisario de la exposición, el catedrático de Arte de la Universidad de Murcia, Cristóbal Belda. Su Majestad resaltó la talla de San Juan, obra que a petición suya se incluyó en el pabellón de España de la Expo de Sevilla en 1992, así como la imagen de Santa Cecilia, y el curioso belén napolitano, aunque éste ya lo conocía. De igual forma, se detuvo ante el altar mayor de la Iglesia de San Andrés.

El Rey estuvo acompañado en su recorrido por el presidente de la Región de Murcia, Ramón Luis Valcárcel, y por la ministra de Cultura, Carmen Calvo, y juntos recibieron las explicaciones sobre los detalles de la muestra por parte del profesor y especialista en Salzillo, Cristóbal Belda.

Cuando finalizó el recorrido, don Juan Carlos fue obsequiado con el busto de la imagen de San Juan, del escultor Juan José Quirós, que lleva por título 'Homenaje a Salzillo'. También se le entregó el catálogo oficial de la muestra.

Al término de la visita a la exposición, que estará abierta al público hasta el 31 de julio, don Juan Carlos mostró su satisfacción por haber podido conocer la obra de Francisco Salzillo "en profundidad" gracias a las cien piezas cuidadosamente escogidas para esta ocasión, con la que se conmemora el tercer centenario del nacimiento del escultor italo-murciano.

El monarca se interesó, de nuevo y de forma especial, por la imagen de San Juan realizada por el imaginero en 1756, y también por los numerosos bocetos de las obras de Salzillo, que está mezclada en la exposición con otros proyectos de obras de grandes maestros como Bernini.

Don Juan Carlos, que conocía la obra de Salzillo desde los tiempos en que estudió en la Academia General del Aire cuando acudió a la procesión del Viernes Santo, felicitó a los organizadores por acercar a todos los ciudadanos, ya que el acceso será gratuito, la obra profunda del escultor, uno de los mejores del Barroco.

El Rey también valoró el trabajo de Salzillo como gran escultor del Barroco español, y se mostró especialmente satisfecho de que "Salzillo, testigo de un siglo" viaje en fechas próximas a Valladolid por ser otra de las ciudades con mayor tradición imaginera.

El recorrido de don Juan Carlos comenzó con una anécdota cuando alguien encontró en el suelo un billete de cincuenta euros, y tanto el Rey como los asistentes, entre bromas, convinieron en hacer depositario del billete al director general de Caja Murcia, Egea Krauel, quien poco después, dicen, introdujo el dinero en un cepillo del centro de acogida Jesús Abandonado que hay situado en el lugar(?).

Y al final, el Rey protagonizó una escena entrañable cuando saludó con un "a sus ordenes" y un cariñoso abrazo a uno de sus antiguos profesores en la Academia General del Aire, el entonces comandante jurídico y ex consejero nacional del Movimiento por Murcia, el asturiano Ernesto Andrés Vázquez, con quien recordó las dos ocasiones en que éste le arrestó por hablar después del toque de silencio.

Según Cristóbal Belda, el Rey fue un visitante "ejemplar" de la exposición por el gran interés mostrado durante el recorrido, y resaltó que a don Juan Carlos la muestra le pareció "sensacional" por la calidad de las obras, el espacio y el color.

El desarrollo de la vista concluyó con un vino honor al que asistieron unos 300 invitados, representantes de casi todos los sectores políticos, sociales, económicos y culturales de la Región de Murcia.

Tras la inauguración, el Rey fue despedido por los varios centenares de murcianos que acudieron a saludarle del mismo modo que le recibieron, con el estruendo de vítores y aplausos, que acallaron los lemas coreados por un grupo de jóvenes que agitaban banderas republicanas con el escudo constitucional de España entre 1931-1939 y que contiene casi los mismos símbolos que el introducido en 1978 con la Corona.

Junto al presidente murciano, Ramón Luis Valcarcel, y la ministra, Carmen Calvo, don Juan Carlos almorzó mas tarde en el restaurante "Buenavista", en las afueras serranas de Murcia camino de la base militar de San Javier, junto al presidente de la Asamblea Regional, Francisco Celdrán, el obispo de la diócesis de Cartagena, Juan Antonio Reig Pla, el alcalde de Murcia, Miguel Angel Cámara, el delegado del Gobierno, Angel González, y presidente y director general de Caja Murcia, Juan Roca Guillamón y Egea.

El jefe de prensa del Palacio de La Zarzuela, Juan González Cebrián, explicó que durante el viaje desde Madrid hasta San Javier, don Juan Carlos comentó con el jefe de la Casa del Rey, Alberto Aza, y otros miembros de su equipo, los muchos recuerdos que le unen a esta tierra, y de modo particular al sobrevolarla ya, que en sus tiempos de cadete militar, la conoció de punta a punta.

El alcalde de Murcia, Cámara, dijo, mientras esperaba la llegada de Su Majestad, que la muestra "es una oportunidad para que la Murcia moderna, que armoniza con su pasado, que se da conocer más allá de sus fronteras, y para que Murcia acoja al Rey con el cariño que le tiene".

ASISTENTES

Entre los asistentes al acto, destacaron el presidente de la Asamblea Regional de Murcia, Francisco Celdrán; el delegado del Gobierno Murcia, Ángel González; el alcalde de Murcia, Miguel Ángel Cámara; el obispo de la diócesis de Cartagena; Juan Antonio Reig Plá; y el almirante de Acción Marítima, Juan Carlos Muñoz.

Del mismo modo, acudieron los consejeros de Educación y Cultura, y de Turismo, Juan Ramón Medina Precioso y José Pablo Ruiz Abellán, respectivamente, y el presidente de la Sociedad Estatal de Conmemoraciones Culturales, José García-Velasco.

También estuvieron en el histórico acto los portavoces del PP y del PSOE en la Asamblea Regional, Juan Carlos Ruiz y Teresa Rosique, respectivamente, así como los alcaldes de Molina de Segura, Bullas, Cehegín, Yecla, Caravaca de la Cruz, Jumilla, San Pedro del Pinatar; y el secretario general de UGT-Murcia, Antonio López Baños.

El presidente del TSJ, Juan Martínez Moya, y el fiscal-jefe, Manuel López Bernal, abandonaron el acto poco después de comenzar la visita regia por culpa del desatino del servicio de protocolo de Presidencia de la Comunidad Autónoma, que los relegó a un segundo plano entre los invitados y fuera del nivel que les corresponde por su rango y representación.

Este hecho pasó prácticamente desapercibido por la discreción de ambos miembros del poder judicial murciano para no empañar el protagonismo de don Juan Carlos pero, en absoluto, para algún periodista, expresamente no acreditado por San Esteban pero que cubría el evento desde la suficiente distancia como para mantener la perspectiva.

La exposición "Salzillo, testigo de un siglo" ha sido organizada y patrocinada por la Comunidad Autónoma, el Ministerio de Cultura, la Sociedad Estatal de Conmemoraciones Culturales, la Fundación Caja Murcia y el Ayuntamiento de Murcia, con la colaboración de la Diócesis de Cartagena, el Museo Salzillo y la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno.

SENTIDO DE UNA EXPOSICIÓN

El Rey inauguró lo que no es sino el acto central del programa conmemorativo del tercer centenario del nacimiento del imaginero murciano, que se abrirá hoy mismo al público y que viajará a partir del otoño a Valladolid y México, en fechas y sedes aún por determinar.

La exposición supone un recorrido por el esplendor de la Murcia que vio nacer al escultor en 1707, y el contexto cultural, científico y social en que se encontraba España en pleno siglo de oro.

La exposición, ideada por el catedrático de Historia del Arte Cristóbal Belda y cuyo diseño es obra del arquitecto Pablo Puente, autor también de las exposiciones "Huellas" (Murcia, 2002) y "El Belén de Salzillo. Fantasía Histórica de la Navidad" (Vaticano, 1998), aglutina más de 300 piezas procedentes de museos, parroquias y colecciones particulares de España, Portugal, Italia, Alemania y Austria.

Entre sus atractivos, el centenar de obras de Salzillo, uno de los máximos exponentes de la producción barroca universal, junto a trabajos de grandes artistas como Bernini, Zurbarán, Nicolás de Bussy, Pedro Duque Cornejo o José Risueño, entre otros, además de documentos, tapices, platería y mobiliario de la época.

"Salzillo, testigo de un siglo", instalada en el museo al que da nombre el escultor y en las contiguas iglesias de Jesús y San Andrés, arranca con un retrato de Carlos II, monarca recién fallecido cuando nació el imaginero, realizado por Juan Carreño de Miranda, y concluye con una selecta muestra del belén de 500 piezas que modeló el artista y cuyo montaje, realizado en colaboración con una peña huertana, recrea el Palacio Riquelme de Murcia.

Esta exposición, que trata de situar al escultor en la producción barroca con numerosos detalles de su evolución artística, se estructura en tres secciones, y puede visitarse en Murcia de forma gratuita, previa petición de cita, hasta el próximo 31 de julio.

Para hacer posible este homenaje al escultor, en los últimos meses se ha desarrollado un trabajo de restauración de las cerca de cien piezas barrocas de Salzillo, entre ellas algunas jamás vistas por el público como un "niño mostrando el corazón" propiedad de sus herederos, y también de las sedes expositivas.

De hecho, el tercer centenario del nacimiento de Salzillo ha hecho posible el descubrimiento del color azulado de la cúpula de la iglesia de San Andrés, así como poder recuperar el corredor que comunicaba, en su momento, esta iglesia con la capilla de la Virgen de la Arrixaca, propiedad de la Cofradía de Jesús y que volverá a cerrarse a partir de agosto.

Los trabajos de rehabilitación acometidos en el entorno de la muestra también han cambiado el suelo de la iglesia de San Andrés, hasta ahora con numerosas capas, unas sobre otras, de cemento cromado y que estrena ahora mármol, sobre cámaras de aire para frenar los adversos efectos de la humedad.

En el primer mes habilitado para efectuar reservas anticipadas, más de 65.000 personas se han puesto en contacto con la organización para ver esta muestra, de carácter gratuito y primera sobre la obra de Salzillo como autor corresponsable de los avances y conquistas del siglo XVIII.

"Francisco Salzillo" se abrirá hoy al público, y los primeros visitantes que podrán recorrer la exposición serán escolares de cuarto y quinto de primaria del colegio público San Pablo, de Murcia.

Francisco Salzillo, nacido en Murcia en 1707, fue hijo de un escultor napolitano, Nicolás, afincado en la ciudad escasos años antes del nacimiento del imaginero, que realizó toda su obra de temática religiosa y, en su mayoría, en madera policromada, y falleció en 1787 sin haber viajado nunca fuera de Murcia, salvo en una ocasión en que lo hizo a Cartagena.- (Resumen de Europa Press, EFE y NEM)

11 comentarios:

Anónimo dijo...

¿No faltaba en ese encuentro el fiscal López Bernal?

Anónimo dijo...

Lo del Beso de Judas, ¿encierra algún mensaje subliminal, Paco?

¿Habían sido invitados Saura, Pujante o Diego de Ramón, como líderes del resto de partidos de oposición?

¿Ha tratado alguien de sacar ventaja electoral al fotografiarse junto al monarca en precampaña?

¿Qué pintaba el director general de Cajamurcia, no bastaba con el presidente, o es que Roca es un florero en la entidad?

¿Se incorporaron a la seguridad del monarca las decenas de agentes del CNI que pululan por Murcia desde hace meses?

Intuyo que lo de hoy ha sido el "canto de cisne" de los peleles Valcárcel y Cámara.

Anónimo dijo...

¿Tampoco estaba el presidente del TSJ, Martínez Moya? ¿Es que no quiere fotos en público con estos presuntos?¿Se quedó a almorzar el almirante de Acción Marítima?

Anónimo dijo...

¿Se perdió en el "vino de honor" alguna botella de "Chivas"? Si así fue, que busquen en el despacho de algún consejero que consume una diaria de media para olvidar dónde se ha metido, con quién, y qué futuro profesional le aguarda después de mezclarse con esta mierda. Desde luego, es para pensar que todo es un mal sueño.

Anónimo dijo...

¿Escudo con la corona en las banderas republicanas? O el periodista es un cafre o actúa de mala fe.
La bandera que portaba un servidor llevaba escudo sí, pero el escudo republicano que promulgó el decreto del 27 de abril de 1931. Y donde el periodista veía una corona, no había sino castillos en forma de corona.
El comportamiento de la gente que nos rodeaba ha sido bochornoso (continuas provocaciones, insultos y amenazas), y denota qué tipo de gente se siente agusto interpretando su papel de súbdito. Pese al bloqueo mediático, se está levantando el tabú de la monarquía en este país.

Anónimo dijo...

Dicho popular:

Al burro delicado que no quiera comer paja, ponle unas gafas verdes para que se crea que es alfalfa.

Anónimo dijo...

Supongo enterado al monarca de que sentados a su mesa en el almuerzo, estaban dos de los tres conspiradores más importantes en Murcia por la instauración de una república autoritaria, previo extrañamiento de don Felipe, doña Leonor y doña Leticia, de momento, para que ningún miembro de su descendencia vuelva a reinar. El oficio de Su Majestad confío que los detectó enseguida pese a su disfraz de tonto útil uno, y niño bueno, el otro.

Anónimo dijo...

Que sepa Don Juan Carlos de Borbón que la gentuza esta que todavía manda en Murcia y que ayer le recibió y le aisló, no es, en ningún modo, representativa de la gran mayoría de su sociedad civil. En el acto se pudo ver a mucho facineroso y se notaron ausencias significativas del poder social murciano.

La afrenta hecha a los dos representantes del Poder Judicial en este preciso instante, es un pulso a quienes, dentro de pocos meses, deben acusarles y juzgarles por el saqueo constante a que tienen sometido a esta región de mansos, vendidos y traidores también.

Anónimo dijo...

Esa es otra, las ci¡ontinuas meteduras de pata del actual equipo de protocolo y relaciones públicas de la Presidencia.
Antes, con Ricardo de Prado , las cosas eran diferentes. Estaba considerado como uno de los tres mejores Jefes de Protocolo de todo el estado, junto con los de La Zarzuela y la Generalitat. Ingnoro el motivo de su paso a la reserva, pero, desde luego, la imagen de la Región ha bajado mucho desde que no ocupa esos menesteres.

Anónimo dijo...

Se comenta que el rey, ante las manifestaciones de la AVT cantando el cara al sol y la de los jóvenes republicanos, tuvo que salir por la puerta de atrás.

También se ha aireado que el protocolo de presidencia de la Comunidad Autónoma impidió el acercamiento del Fiscal López Bernal al jefe de la corona.

Anónimo dijo...

El caso de Ricardo de Prado es paradigmático de como se infrautilizan los recursos, en este caso humanos, por parte de la administración del PP. Los puestecicos para los clientes, valgan o no valgan.