La presentación se efectuó en el transcurso de una reunión en la que estuvieron presentes tanto los organismos de la Administración del Estado implicados en dichas intervenciones, como las Fuerzas Armadas y las empresas de servicios esenciales básicos de ámbito superior al regional.
En estos planes, en cuya elaboración han participado con la Comunidad Autónoma distintos organismos estatales, y en especial la Unidad de Protección Civil de la propia Delegación del Gobierno, se establecen los canales y sistemas de participación de los distintos organismos presentes en la reunión, a fin de lograr la mayor rapidez y eficacia posible cuando sea necesario intervenir. También se tiene en cuenta el nivel territorial y competencial de las intervenciones.
Las situaciones de emergencia por inundaciones o movimientos sísmicos, contemplan como órgano competente ante los mismos a la Comunidad Autónoma en los niveles 0, 1 y 2, mientras que la dirección de los operativos pasa al Estado en el nivel 3, cuya declaración corresponde al ministro del Interior, a iniciativa propia o a instancia de la Comunidad Autónoma o la Delegación del Gobierno.
Los planes también contemplan que en el nivel 2 la Comunidad Autónoma pueda solicitar la creación de un comité de dirección en el que se integran aquélla y la Administración del Estado, suponiendo además la participación de los medios de ésta no asignados al plan.
En el caso de contingencias por contaminación marina hay que tener en cuenta, además de que la competencia en tierra corresponde a la Comunidad Autónoma, el modo en que se produce. Así, si se diera el caso de que un vertido pudiera afectar a un país vecino, habría que activar el plan internacional, mientras que el plan a seguir sería el nacional en caso de mar abierto, el territorial si es en la costa y el interior si es un puerto.
Sobre los niveles hay que decir que, en líneas generales y para todas las situaciones de emergencia, no únicamente las contempladas en estos tres planes, corresponden a '0' cuando puede ser controlada con los medios disponibles al activarse un plan interior o municipal, actuando el plan territorial como apoyo y/o seguimiento.
Nuevos desprendimientos en el Puerto de la Cadena
La Demarcación de Carreteras del Estado ha iniciado estudios geotécnicos de la montaña por encima de la zona de dominio público, desde donde se produjeron los desprendimientos registrados ayer en la autovía A-30, a la altura del Puerto de la Cadena, a fin de prevenir que se repitan hechos similares.
Las intensas lluvias caídas en la zona causaron dos desprendimientos, uno sobre las 12.30 horas, en el que se retiraron unos 30 kilos de rocas y piedras, y el otro sobre las 21.00 horas, con la caída de una roca de unos 70 centímetros de longitud máxima, que rodó hasta la mediana de la autovía, seguida de otras dos piedras de menor tamaño que quedaron en el arcén.
Como consecuencia de esa segunda caída se vieron afectados cinco vehículos, en uno de los cuales viajaba el presidente de la Comunidad Autónoma de Murcia, Ramón Luis Valcárcel, aunque afortunadamente no hubo que lamentar desgracias personales en ninguno de ellos.
Una vez se produjo el primer desprendimiento, la Demarcación de Carreteras del Estado estableció un operativo de conservación, estudio y prevención de la A-30 y la zona de montaña anexa, formado por un equipo de Inspección Geotécnico y por un grupo del Centro de Conservación Integral de Carreteras compuesto por un furgón de doble cabina, un vehículo 4x4 y una pala retroexcavadora, así como seis operarios, que procedieron a limpiar y señalizar los desperfectos.
Las intervenciones llevadas a cabo, coordinadas con la Delegación del Gobierno, consistieron en un primer momento en la limpieza y señalización de los desperfectos ocasionados por dicho desprendimiento.
Del informe emitido se desprende que, en el punto donde se produjo el desprendimiento, la autovía está formada por tres carriles de 3,5 metros de ancho, un arcén de 2,5 metros y un sobreancho de 2,5 metros.
A partir de éste se dispone de una barrera de hormigón y un muro de 4,5 metros de altura, que está separado del talud por un cunetón de unos 43 metros de anchura. A su vez, el talud de 25 metros tiene una banqueta a media altura, y está revestido por una malla de guiado de triple torsión.
Desde la Delegación del Gobierno informaron en un comunicado que "la intervención fue breve, ya que sólo hubo que retirar un total de 30 kilos de material, quedando en la zona un retén de vigilancia durante unas horas para vigilar la posibilidad de nuevos desprendimientos", lo que ocurrió hacia las nueve de la noche, con la caída de una segunda roca y otra dos piedras de menor tamaño.
Inmediatamente se desplazó de nuevo una inspección al lugar de los hechos formada por los ingenieros de la Demarcación de Carreteras del Estado y se decidió proceder al corte preventivo de un carril de circulación durante la noche, así como la protección adicional con una línea de barrera de hormigón junto al arcén y otras medidas para regulación del tráfico, como el corte provisional del carril derecho de bajada en sentido Murcia.
En la madrugada de hoy, con el cese de la lluvia, se volvió a realizar una inspección, al tiempo que se han iniciado estudios geotécnicos de la montaña por encima de la zona de dominio público, desde donde parece que se produjeron los desprendimientos.
1 comentario:
¿Y para cuándo tomamos medidas efectivas para eliminar de estas zonas de riesgo obstáculos, construcciones, etc, etc.? Demasiada planificación de lo evidente y poca o nula eficiencia en resolver el problema real. El estado de derecho debe dotarse de medidas más rápidas y eficaces para restaurar el dominio público hidráulico a su estado original, por ejemplo, por encima de los intereses particulares o sencillamente de los atropellos de particulares.
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