miércoles, 9 de julio de 2008

Los dos quieren seguir en sus cargos / Juan Redondo

Salen de sus comparecencias ante el magistrado Julián Pérez Templado como quien ha cortado orejas y rabo en La Condomina después de hacer una magnífica faena y haber cobrado un suculento contrato.

Sin embargo en esta ocasión los dos diestros tan felices, José Martínez Andreo y Juan Morales, no son toreros, sino dos políticos en activo que están imputados en un escándalo urbanístico en Totana y que pasean por la calle tras haber depositado su correspondiente fianza, setenta mil euros el actual alcalde; y doscientos mil, el diputado regional.

Hace un tiempo fueron compañeros y amigos, entonces Morales estaba de alcalde y Martínez Andreo era su delfín.

Ahora están intentando echarse las pulgas el uno al otro y si te he conocido no me acuerdo. Y todo, según apunta el sumario, por culpa del “maldito parné”.

Los dos políticos totaneros a pesar de sus diferencias coinciden al menos una cuestión: su atrincheramiento en el cargo público. Los dos viajan por independientes, Morales repudiado por el PP desde el principio del escándalo totanero, y Martínez Andreo, tras el reciente cambio de opinión por parte de la dirección regional de los populares murcianos, que primero le apoyaron y ahora ya no le quieren como compañero de viaje.

Partiendo de la presunción de inocencia y en espera de que la Justicia ponga a cada uno en su sitio, la continuidad de dos de los principales protagonistas de Totem en sus cargos públicos empieza a crujir en la ciudadanía.

El diputado regional lo tiene claro, seguirá en ese trabajo liviano que reporta 3.000 euros al mes, aunque no haya aparecido por el “puesto que tiene allí” este año por motivos psicológicos. Dicen que con los reglamentos en la mano los grupos parlamentarios no tienen mucho que hacer. El alcalde ya ha reflexionado y no ha encontrado motivos para dejar el sillón.

En el Debate sobre el Estado de la Región, Valcárcel aseguraba que el imputado dejaría la alcaldía para no perjudicar a su pueblo, ni a la imagen del PP. “Lo tenemos que solucionar antes de irnos de vacaciones, y si es por las buenas mejor”, comentan dirigentes regionales de los populares. Todo indica que tendrán que recurrir a las “menos buenas”, porque a Martínez Andreo le gusta el bastón municipal.

Los consejeros podrán disfrutar de las vacaciones

El presidente de la Comunidad está tranquilo y no se plantea maniobras antes de las vacaciones, según comentan sus más allegados. Vamos que los consejeros parece que se pueden ir tranquilos en agosto porque no se prevén movimientos en forma de remodelación. Después del congreso regional y con los presupuestos del próximo año encarrilados dicen podría pasar otra cosa.

Sin embargo en este primer año de su cuarto mandato, parece que ha habido dos momentos en los que el líder popular se planteó seriamente hacer cambios en el Ejecutivo. “La primera fue por Semana Santa y la segunda tras el Debate del Estado de la Región”, señalan dirigentes populares regionales. “Ahora se le ha pasado la última calentura y está más tranquilo y calmado”.

www.elfaro.es

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Los dos son unos perfectos sinverguenzas, chorizos y corruptos.

Anónimo dijo...

Sr. Redondo, por qué no estudiay presenta Ud. alguna alternativa para liquidar esta delirante y continua noticia? No es su responsabilidad, pero dada la inacción del varcarcelato y de los políticos de nuestra querida región en aportar una solución al tema, cualquier opinión fundamentada es bienvenida. Porque esto ya es insufrible.

Anónimo dijo...

Normal que quieran seguir en sus cargos. No me los imagino trabajando "más allá del móvil"