viernes, 11 de julio de 2008

El alcalde de Yecla confirma que el parricida atravesaba un crisis económica

YECLA.- El alcalde de Yecla, Juan Miguel Benedito, del PP, afirmó que el parricida de 43 años, Juan Pérez Varela, que hoy mató con un cuchillo de grandes dimensiones a su mujer, Josefa Serrano Azorín, de 39 y a sus dos hijos, ambos menores, Alba de 6 y Samuel de 4, en esta próspera localidad, industrial y agrícola, del Noroeste murciano donde no se conoce el desempleo, y que posteriormente se suicidó de un disparo de escopeta en presencia de la Policía, estaba atravesando "una crisis económica importante".

Apuntó que tal vez podría haber sido ésta la causa de lo ocurrido. El susodicho, albañil y pintor de profesión, se había convertido en pequeño promotor inmobiliario durante los últimos años y vivía en el actual chalé unifamiliar, construido por él mismo, desde 2003.

Existen, además, testimonios de que Pérez Varela se encontraba agobiado por las deudas y, tal vez, presa de una fuerte depresión. Una carta manuscrita del parricida, una especie de testimonio macabro, achaca su decisión a problemas económicos. Su pequeña empresa no funcionaba y tenía, al parecer, deudas leoninas, según su propio testamento ológrafo encontrado junto a las víctimas.

Según testimonios de los vecinos del paraje, un hábitat disperso y salpicado de viviendas unifamiliares, entre oliveras y almendrales al abrigo de una sierra cercana, las víctimas eran todas gente muy noble, formal y nada conflictiva.

Benedito dijo estar "muy consternado" por este crimen para el que, a su juicio, "no hay palabras", al tiempo que brindó "el apoyo técnico y psicológico" a los familiares de las víctimas.

El hombre los mató con un cuchillo de grandes dimensiones y luego se suicidó con una escopeta.

El suceso ocurrió en torno a las nueve de la mañana en una casa unifamiliar ubicada en las proximidades del polígono industrial de La Herrada del Manco, en un paraje rural del término municipal.

A las nueve y veinticinco se recibió en la Comisaría de Policía de Yecla una llamada, en la que una persona que sólo se identificó por su nombre, dijo que había matado a su mujer y a sus dos hijos, y requería la presencia policial para entregarse.

Al lugar se desplazó de forma inmediata un destacamento del Cuerpo Nacional de Policia y, a su llegada, los agentes vieron al autor de la llamada portando una escopeta en las manos, de la que se escapó un disparo.

Según el delegado del Gobierno, un agente realizó un disparo intimidatorio y, al acercarse, el hombre volvió la escopeta hacia sí y se disparó a la altura de la barbilla.

Ya en el interior de la casa los agentes encontraron a una mujer y dos niños muertos por arma blanca, juntos en el suelo y sobre una manta.

Al ser un paraje rural, se ha hecho cargo de las investigaciones la brigada judicial Guardia Civil. Los primeros policías que inspeccionaron la casa se encontraron con algunos restos de hachís.

Ahora la Guardia Civil investiga cuáles son las razones de las elevadas deudas. El saldo de sus cuentas corrientes no sumaba hoy más de 9.000 euros en total.

1 comentario:

Anónimo dijo...

De crisis economica nada. Hacer campaña con un hecho tan terrible es despreciable.