martes, 10 de junio de 2008

Entre el “murcianismo exigente” y el “españolismo exigente” / Juan Redondo

Anda Saura en plan regional con su “murcianismo exigente” no sabiendo como encontrar un discurso que cale entre el electorado murciano, cuando aparece Ramón Luis Valcárcel en el Día de la Región para defender el “españolismo exigente” en contra de un posible “Estado de las Autarquías”.

Como ha cambiado la cosa política regional en el espacio de 366 días. El pasado año se acababa de salir de unas elecciones autonómicas y estaba fresca aún una campaña aspera y crispada, con intercambio de graves descalificaciones y con la corrupción como base del discurso socialista. En el acto institucional del Romea, Francisco Celdrán y Ramón Luis Valcárcel aprovecharon para descargar con dureza contra los perdedores y de paso contra el Gobierno de Zapatero, ya que las generales estaban en un horizonte próximo.

Ahora estamos en una etapa de calma chicha, con los dos grandes partidos en etapas precongresuales, más centrados en sus pugnas internos y guardando fuerzas para el Debate sobre el Estado de la Región, que se inicia mañana. De ahí que Saura haya dejado en su discurso su gran dependencia de Madrid y Ramón Luis Valcárcel al contrario con el congreso nacional del PP en puertas haya centrado su intervención en un mensaje más españolista.

El acto de este año ha sido muy institucionalista, sin tensiones ambientales. Se celebró en Ceutí donde, como recordó el alcalde, populares y socialistas han dado un ejemplo de como anteponer los intereses de los ciudadanos a los meramente partidistas.

El presidente de la Asamblea se limitó esta vez a recordar el papel callado de la Cámara en el desarrollo de una idea de Región. El titular del Ejecutivo Regional tampoco se complicó mucho la vida.

Recordó la importacia del capital humano en el desarrollo regional, la diferencia entre convivencia y cohabitación, la defensa de la Constitución para denunciar y combatir “las actititudes, los comportamientos, las soflamas, que alientan enfrentamientos y visiones disgregadoras del Estado, transmutando autonomía por independencia”.

El “egoismo” de algunas comunidades en contra de la vertebración nacional también fue criticado por Valcárcel al defender las virtudes del actual sistema de financiación autonómica. No hubo referencia al Gobierno Central, ni al agua o a las infraestucturas ferroviarias, ni tampoco a la crisis económica o al aumento del paro.

Los galardonados y sus familiares, auténticos protagonistas del acto se vieron arropados por el Consejo de Gobierno, senadores y diputados nacionales, con la excepción del alcalde socialista de Ceutí, Manuel Hurtado; diputados regionales, representantes de los agentes económicos y sociales, de las Universidades, del poder judicial y de los Ejercitos y muy pocos alcaldes. Un acto institucional en un día lluvioso que terminó con ágape muy distendido.

La reaparición del diputado Bermejo

“Ha estado muy liado con los problemas del ministerio, pero todo lo que venga ala Región de Murcia siempre será poco”. Mariano Fernández Bermejo, ministro de Justicia, reaparecía por la Región tras las elecciones geneales en las que encabezo la lista del PSOE. En el acto institucional del Día de la Región estaba presente como diputado nacional.

Relajado y coloquial, sin la corte de los funcionarios judiciales que con sus pitos le acompañaron durante la campaña electoral, rehuyó pronunciarse sobre el debate interno de los socialistas murcianos. “El PP si tiene un buen debate montado” señaló.

Bermejo tiene intención de retomar las negociaciones para transferencias de Justicia a la Comunidad, que quedaron paralizadas por las elecciones generales. “Estan encaminadas y tenemos que reanundar las conversaciones con el Gobierno Regional, ya que hay muy buena predisposición por ambas partes”.

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