viernes, 7 de diciembre de 2007

La plataforma ‘No a este plan urbanístico’ de Totana se concentrará el viernes 14

TOTANA.- La plataforma ciudadana ‘No A Este Plan Urbanístico’, de Totana, ha convocado una concentración “apartidista”, en la plaza de la Constitución de la localidad a las 20:30 horas del próximo viernes 14 de diciembre, para mostrar su rechazo al Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) municipal.

Según una nota de esta plataforma, la convocatoria, que tiene por lema “No queremos esto para Totana”, responde “a las recientes actuaciones judiciales llevadas a cabo en la localidad relacionadas con asuntos urbanísticos”, en referencia a la operación Tótem, que llevó a prisión al alcalde, José Martínez Andreo, y mantiene en libertad provisional a once personas, nueve de ellas bajo fianza.- (EFE)

2 comentarios:

Anónimo dijo...

El sueño inmobiliario de Núñez Árias se diluye en la 'Operación Tótem'

Quienes le conocen aseguran que el abogado vigués Manuel Núñez Arias es incapaz de centrarse en un único negocio. Del dueño del Grupo Nuaria, una de cuyas siete filiales aparece directamente implicada en la Operación Tótem contra la corrupción urbanística en Totana. En concreto, Inmonuaria, que a través de un convenio -sujeto a la aprobación del Plan General del municipio- pretendía levantar 5.040 viviendas, tres hoteles y un campo de golf en la pedanía agrícola de El Raiguero.

Según publica el diario La Voz de Galicia, de Núñez Árias dicen que le gusta diversificar, arriesgar y jugar muy fuerte, y con esas armas no es difícil dejar enemigos o agraviados por el camino. Un pequeño grupo de ellos juró un día venganza, y les ha llegado esta semana, la más negra de cuantas ha pasado el curtido letrado detenido el pasado lunes en su espectacular pazo de Ramallosa.

LLAMADAS DE VIGO A TOTANA

Una venganza servida fría

El entorno de Núñez no deja de hacer cruces imaginando quiénes serían los que en septiembre del pasado año llamaron y rellamaron desde Vigo a Totana recomendando a Izquierda Unida que buscaran hasta debajo de las piedras posibles fisuras legales en el proyecto urbanístico que el abogado vigués iba a levantar a lo largo de 2,2 millones de metros cuadrados en los que todavía se cultivan lechugas, bróculi y berenjenas.

Quien sabe de sus negocios no duda en apuntar como sus principales enemigos a los miembros de una familia para la que Núñez Arias hizo de intermediario en la compra de un gran inmueble del centro de Vigo. La compra se hizo pensando en un notable proyecto urbanístico, pero las normas para la zona no permitieron dicha idea. Los que se sintieron estafados vendieron, pero juraron venganza, y dado el caso que la Fiscalía hizo de las denuncias públicas de Izquierda Unida de Totana, la consiguieron.

Con las diligencias que darían lugar a la Operación Tótem parece haberse diluido por completo el gran sueño urbanístico de Manuel Núñez, pese a que su empresa ya ha pagado más de dos millones de euros al Ayuntamiento de Totana y ha abonado a los propietarios de las 40 fincas que necesita una señal de los 70 millones de euros prometidos. De hecho, Núñez Árias ha tenido que probar el amargo sabor de los calabozos desde su detención el pasado lunes 26 de noviembre hasta que la juez le tomó declaración, cuatro días después. Entonces fue uno de los pocos arrestados que no cubrió su rostro. Aparecía lleno de energía, luciendo una barba de cuatro días perfectamente cortada y una ropa que le distinguía perfectamente del resto de imputados. El empresario, que ya había sufrido problemas de salud tras su arresto, dio algo más de color a la maratoniana jornada en los juzgados con un problema cardiaco que provocó su traslado al Centro de Salud junto a los juzgados.

DECLARANDO ANTE LA JUEZ

La experiencia del abogado

Según fuentes cercanas al caso, el problema surgió justo cuando la juez le comunicó que debía pasar en prisión la noche, y que sólo quedaría libre tras abonar una fianza de 150.000 euros. Las mismas fuentes intuyen que Núñez Árias trató así de evitar pasar la noche en prisión, buscando un destino menos duro en un hospital.

Al día siguiente, tras abonar la fianza -una minucia comparada con su poder económico- volvió a Galicia. La juez le impuso la obligación de presentarse al juzgado todos los viernes -hoy incluido- pero parece ser que eximió al dueño de Nuaria de tener que doblar el mapa semanalmente y le dio la opción de hacerlo en una sede judicial viguesa.

En la Transición de los años sesenta a los setenta, Núñez Árias entraba en los múltiples vericuetos del régimen franquista para ejercer de letrado del sindicato vertical. La experiencia laboral le sirvió para asistir como abogado en numerosas suspensiones de pago y quiebras.

Su negocio creció, y tras representar la marca de un prestigioso bufete de abogados en Vigo, procedió a extenderse a lo largo de los despachos del segundo piso del inmueble número 2 de la calle Manuel Núñez. Sintomática es la búsqueda de esa casualidad en su nombre y apellido con el de la calle que sirve de sede social a algunas de las empresas del abogado vigués. Esas oficinas le sirvieron para hacer frente a crecientes deudas a finales de los noventa, años en los que tuvo que sortear incluso trámites de embargo de la mansión que domina, con torreón incluido, en Ramallosa, junto a la desembocadura del río Miño.

Pero antes, dejó una impronta de su hacer ante los tribunales. Representó con éxito al ex presidente del Celta Ignacio Núñez en su pleito contra el club cuando fue destituido y relevado por Horacio Gómez. El mismo Manuel Núñez había integrado la cúpula celeste. El juicio del crimen múltiple de Nigrán fue su segundo gran caso mediático. Ahora, Núñez Árias vive pendiente de Totana, donde su sueño se ha hecho pesadilla.

EN EL PAPEL DE VÍCTIMA

Los 'otros costes' del proyecto

Pese a todo, su casta de superviviente sigue viva. Al parecer, en su declaración ante la juez en Totana, el empresario y abogado se trató de apuntar al papel de víctima y denunció que se le habían exigido pagos para poder desbloquear y agilizar su proyecto. A pocos se les escapa que estas mordidas hubiesen quedado en el olvido si finalmente el hormigón y los greens de golf hubieran cubierto El Raiguero, pero parece ser que hasta para un constructor avezado como él, la presión era directamente proporcional a la enorme inversión con la que quería desembarcar en Murcia.
De "La Voz de Galicia"

Anónimo dijo...

¿Y del tráfico supuestamente ilegal de agua en Fuete Alamo qué se sabe?
Hoy parece que han detenido a un agricultor, pero ese es un pobre hombre, hay que ir por los gordos, que buen cobijo dicen que tienen.