viernes, 6 de abril de 2007

Regalo del Cielo en el tricentenario del imaginero: Agua para todos de verdad, incluidos los "salzillos"


MURCIA.- Después de dudarlo durante unos minutos, ante el ligero chispeo de lluvia a la hora prevista de la salida, el presidente y hermano mayor de la Cofradía de Jesús, el abogado Rafael Cebrián, decidió unilateralmente esta mañana el inicio del cortejo, sobre las 8,15 horas, sin consultarlo previamente con los mayordomos de las diversas hermandades, como hubiese sido lo normal: una votación a capuz alzado en vista de las perspectivas de empeoramiento del tiempo, con un pronóstico del 95% de probabilidades de lluvia ocasional de cierta intensidad en la ciudad de Murcia, según el Instituto Nacional de Meteorología.

El resultado de esa forzada decisión de Cebrián, por conmemorarse este año el tricentenario del nacimiento de Salzillo y estar la Región de Murcia en vísperas electorales municipales y autonómicas (?), ha sido la interrupción, algo esperada, del desfile procesional cuando terminaba de pasar por la plaza del cardenal Belluga, hacia las doce del mediodía, y después de tres horas y media sin caer ni una sola gota sobre imágenes y penitentes pero con un cielo siempre amenazante, que terminó por desaguar tras unas rachas de viento moderado de levante.

Jesús Nazareno, San Juan y la Dolorosa pudieron ser refugiados en la iglesia de Santo Domingo, durante más de hora y media, mientras la Verónica fue retenida en la parroquia de Santa Catalina. El resto de los pasos, hasta cinco, cubiertos con plásticos como los anteriores, no pudieron ser introducidos en San Nicolás por la estrechez de sus puertas y tuvieron que ser llevados, como buenamente se ha podido, hasta su sede en la iglesia de Jesús: hablamos de la Cena, la Oración en el Huerto, el Prendimiento, los Azotes y la Caída, precisamente las mejores obras de Salzillo, que hoy han corrido cierto riesgo innecesario por lo embarrado de las calles del recorrido.

Poco antes de las dos de la tarde, y en un momento de sol con apertura de algunos claros, la Policía Municipal ha abierto un cortejo excepcional a través de la calle Acisclo Díaz, directamente hacia la iglesia de Jesús aunque ya sin llegar a retirar los plásticos que se habían colocado para preservar de la lluvia a estas excepcionales imágenes que han dado a Murcia una fama universal entre los más eruditos.

Entre los visitantes ilustres de este tricentenario, el embajador USA en España, señor Aguirre, quien presenció la procesión completa de los "salzillos" desde la tribuna oficial situada delante del Palacio Episcopal.- (NEM)

(En la fotografía, el Jesús Nazareno, obra de Rigusteza que no de Salzillo, y titular de la Cofradía, es sacado bajo plástico de la iglesia de Santo Domingo para llevarlo a hombros a la iglesia de Jesús escoltado por la Policía Municipal de Murcia)

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Precisamente por el inclaculable valor de las imágenes y, sobre todo, po el peligro de los estantes que portan los tronos más grandes se debía haber tomado una decisión más democrática. Pero en la Cofradía de Jesús llevan en la sangre lo de mandar en plan caciquil y dudo que vayan a cambiar.

Anónimo dijo...

El paso de Nuestro Padre Jesús, el titular de la procesión de Los Salzillos, de Murcia, se refugió de la lluvia en la iglesia de Santo Domingo, mientras a la iglesia de Jesús, destino final de la misma, únicamente pudieron llegar cinco de los seis primeros pasos.

El tiempo permitió que se celebrará con normalidad el cortejo procesional a los primeros tronos: La Santa Cena, La Oración en el Huerto, Los Azotes, el Prendimiento, que llegaron sin problemas a la iglesia de Jesús, hasta donde también llegó el paso de La Caída, que lo consiguió tras acortar su recorrido.

La lluvia comenzó a caer sobre las 11,45 horas y mientras la mayoría de cofrades y nazarenos hicieron el recorrido completo hasta la iglesia de Jesús, los responsables de la Cofradía, a la vista de la fuerza del chaparrón, decidieron retirar los pasos, que ya habían protegido con plásticos de forma previa, a las iglesias más cercanas del recorrido previsto.

De esta forma, La Verónica se tuvo que refugiar en la iglesia de Santa Catalina y los de Nuestro Padre Jesús, San Juan y La Dolorosa fueron introducidos por los nazarenos estantes en la iglesia en Santo Domingo.

También acabó la procesión bajo la intensa lluvia, a su paso habitual, una representación de la Brigada Paracaidista de Javalí Nuevo.

La procesión la más numerosa en cuanto a participantes de Murcia es conocida como la de Los Salzillos, ya que todos sus pasos, a excepción de Nuestro Padre Jesús, son obra del escultor Francisco Salzillo.

La procesión se esperaba con especial devoción ya que este año se conmemora el tercer centenario del nacimiento del escultor, lo que se celebra con una exposición, entre otras con las tallas que salieron hoy en procesión, titulada 'Salzillo, testigo de un siglo'.- (EFE)

Imperator dijo...

La fotografía no corresponde a este año, apunte que creo debería de hacerse, no hay más que observar que la fachada de la Iglesia de Jesus está aún sin restaurar.

Hay dos cuestiones distintas: La salida de la procesión, que creo se hizo bien, pues se estuvo aguantando casi media hora y no llovía, ademas durante toda la semana los pronosticos de lluvia por las mañanas fallaron, sólo llovio por las noches. Apuntarte que la decisión de salir en procesión no es competencia del Cabildo sino de la Junta Particular, la competencia de aquel es la suspensión. Ademas el dia anterior, jueves santo, el Refugio suspendió también su cortejo y no calló una gota, la unica precipitación fue la su presidente Sanchez Parra, en la decisión de suspender, también influyó, sin duda, el tema del III Centenario. Creo que se hizo bien sacándola.

Segunda cuestión: El desastroso plan de emergencia, esto si fue una auténtica chapuza, la inexperiencia en estas lides de algunos de los responsables de la procesión, señalo al Comisario de Procesión Marquina, pusieron en peligrono sólo a los pasos sino tambien a cofrades y espectadores, aquí si se falló rotundamente, lo viví desde dentro y fue penoso.