PALMA.- Los trabajadores de las oficinas centrales de Sa Nostra en Son Fuster protagonizaron una concentración de diez minutos frente a la sede central de la entidad y varias sucursales para protestar por los recortes de plantilla que se han anunciado con motivo de la reestructuración del Banco Mare Nostrum, del que forma parte la entidad isleña junto a Cajamurcia, Caja Granada y Caixa Penedés, concretamente la propuesta de reestructuración del grupo BMN realizado por la dirección.
Desde Mare Nostrum se anunció recientemente su intención de extinguir 530 contratos, cerrar 120 oficinas y reducir los salarios un 5%, entre otras medidas. Esta propuesta cuenta con el rechazo de los sindicatos Unió Obrera Balear, UGT y CCOO y de los consejeros que representan al personal.
Para reflejar esta oposición, decenas de trabajador de Son Fuster –los sindicatos cifran la participación entre un 85% y un 90% de la plantilla de estas instalaciones– se concentraron ante este edificio durante diez minutos, una protesta que se va a mantener cada miércoles a las 11 de la mañana, según se ha anunciado, para pedir la retirada y anulación de la propuesta, según han informado los representantes de los trabajadores en un comunicado conjunto.
El temor de los sindicatos es que los recortes de personal van a ser proporcionalmente más duros en Sa Nostra y en Caja Granada, y que una de las estrategias sea la de obligar a los empleados a desplazarse fuera de la isla, para que éstos se vea obligados a renunciar a su empleo con una indemnización máxima de nueve meses.
Para reflejar esta oposición, decenas de trabajador de Son Fuster –los sindicatos cifran la participación entre un 85% y un 90% de la plantilla de estas instalaciones– se concentraron ante este edificio durante diez minutos, una protesta que se va a mantener cada miércoles a las 11 de la mañana, según se ha anunciado, para pedir la retirada y anulación de la propuesta, según han informado los representantes de los trabajadores en un comunicado conjunto.
El temor de los sindicatos es que los recortes de personal van a ser proporcionalmente más duros en Sa Nostra y en Caja Granada, y que una de las estrategias sea la de obligar a los empleados a desplazarse fuera de la isla, para que éstos se vea obligados a renunciar a su empleo con una indemnización máxima de nueve meses.
Rechazan, pues, la propuesta de reestructuración presentada por la dirección del grupo BMN -formado por Sa Nostra, Caja Murcia, Caja Granada y Caixa Penedés- que plantea la extinción de 530 contratos y el cierre de 120 oficinas.
Los representantes sindicales han asegurado en ese comunicado conjunto que rechazan y desautorizan "la pretendida reestructuración de la plantilla presentada por la dirección de BMN" y han criticado que la propuesta parte de quienes en el pasado "han gestionado las cajas de forma ineficaz, cometiendo errores memorables" y que tienen "nula credibilidad para liderar una plantilla modélica".
"La dirección hace sus números y dice que estima adecuada como solución al naufragio que ellos han propiciado la muerte laboral de centenares de personas", critica la nota, que acusa a los directivos de haber provocado "la muerte de una caja centenaria" de referencia en Baleares y de dejar que la Obra Social "se vaya por el desagüe".
Han advertido de que los parones continuarán todos los miércoles hasta que la dirección anule la propuesta, que consideran "oprobiosa".