MURCIA.- La economía regional ya no rula. Lo dice el último boletín de coyuntura de la Confederación Regional de Organizaciones Empresariales de Murcia (CROEM), correspondiente al segundo trimestre del año, y en el que la patronal murciana ha puesto negro sobre blanco todo su pesimismo, según recoge "La Verdad".En contra de la tesis oficial del Gobierno regional, los empresarios murcianos consideran que la crisis económica está produciendo mayores estragos en la Región que en el conjunto de España («en general se aprecia una contracción de la actividad ligeramente más acusada en Murcia», afirma el informe), lo que les lleva a concluir que la economía regional «habría registrado un crecimiento trimestral muy reducido o, incluso, nulo».
Uno de los datos que a la patronal le induce a pensar que Murcia está ya en crecimiento cero es que «el mercado laboral murciano ha comenzado a destruir empleo», según los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) correspondientes al segundo trimestre del año.
El informe de CROEM advierte además que «la inflación alcanza cotas desconocidas en la última década (4,9%)», lo cual se ha trasladado a los costes laborales, «que marcan un máximo en la serie histórica, con las negativas consecuencias que ello conlleva para la competitividad».
Ningún sector económico se salva en el análisis que realiza la patronal murciana, pero la caída es especialmente dura en la construcción, que casi se encontraría ya en tasas de crecimiento negativas.
Sólo la leve recuperación experimentada por las exportaciones en los últimos meses aporta algo de luz al tenebroso panorama que dibuja el último boletín de coyuntura económica de la Región de Murcia elaborado por la CROEM.
Para contrarrestar la crisis, la patronal «urge que se apliquen a la mayor celeridad posible los programas que integran el Plan de Dinamización y las medidas coyunturales del Plan Industrial», y también propone redoblar esfuerzos hacia «la mayor contención del gasto corriente y la agilización de las inversiones públicas».
No obstante, CROEM advierte que todo ello «no será suficiente», y reclama de manera urgente la aplicación de las reformas propuestas por la CEOE, entre las que figura la flexibilización del mercado laboral, la reducción de los costes laborales y una bajada del impuesto de sociedades y de las cotizaciones a la Seguridad Social de las empresas.
La pesadumbre de la patronal murciana se pone sobre todo de manifiesto en el editorial que abre el boletín, en el que indica sobre la situación económica actual que «lo que comenzó con el calificativo de 'aterrizaje suave', es ya un 'desplome' en toda regla», que, a juicio de los empresarios murcianos, «empeora por momentos y de forma continuada».
Notable retroceso industrial
La negativa evolución del sector industrial, al que se apuntaba como posible alternativa de la construcción como locomotora de la economía regional, es uno de los aspectos más desmoralizadores del informe de coyuntura de la patronal murciana.
CROEM constata «un notable retroceso» en la industria regional en el primer semestre del año y, para colmo, «las perspectivas no apuntan hacia una recuperación sensible».
La caída de la construcción, que arrastra con ella a toda la industria auxiliar, es una de las razones de los malos resultados, pero no la única, ya que todas las ramas industriales registran tasas de variación anuales negativas. Sólo la energía, con un crecimiento del 18,9%, se salva.
El indicador de clima industrial ya ofrece datos negativos en el primer trimestre y agudiza su caída en el segundo. Los empresarios han detectado además «una intensa» caída en la cartera de pedidos y en la tendencia de la producción. Un dato que ilustra claramente la situación en la industria regional es la desfavorable evolución de la inversión y el consumo de energía entre los meses de enero y mayo: la primera se desploma un 48,9% y la segunda cae un 7,5%.
Sobre la agricultura, el informe llama la atención sobre los perjuicios del encarecimiento de los combustibles y la huelga del transporte, que generó unas pérdidas de más de 100 millones de euros, y que se suman al problema estructural de la falta de agua.
El incierto futuro de la Construcción
El epígrafe dedicado a la construcción del último boletín de coyuntura económica de la CROEM es una sucesión de indicadores negativos, por lo que el informe considera «factible» que el sector «llegue incluso a alcanzar tasas de crecimiento negativas al finalizar 2008», y lo que es peor, la patronal no vislumbra una fecha próxima para su recuperación.
La edificación residencial es la más afectada por la crisis, como lo prueba el dato de que en el primer trimestre del año el número de viviendas iniciadas fuer casi un 30% inferior al del mismo periodo del 2007.
La vivienda terminada mantiene cierto vigor, según los empresarios, gracias a la inercia de los ejercicios precedentes, y entre enero y marzo creció un 48,7%. Sin embargo, el futuro inmediato no es nada alentador, ya que el número de visados de obra nueva retrocedió un 59% entre los meses de enero y abril, lo que denota la drástica disminución de proyectos registrada entre los promotores inmobiliarios.
Otro dato negativo que explica la caída de la actividad residencial es la disminución de la compraventa de viviendas en la Región, que fue de un 13,9% en los primeros cinco meses del año.
La construcción se ha visto además afectada por la «discreta licitación pública», que hasta el mes de mayo había registrado un descenso del 32,5% con respecto al año anterior. Según la patronal, sólo la Administración del Estado «muestra cierto avance» en lo que respecta a la inversión pública, «en contraposición a las caídas significativas (-61,5%) de los entes territoriales» (Comunidad Autónoma y ayuntamientos).
El sector servicios, según el informe de los empresarios, es uno de los más perjudicados por la crisis económica, a causa del retraimiento del consumo de los hogares. La caída del comercio al por menor (-5,5%), de la matriculación de automóviles (-47,7%) y de las pernoctaciones en hoteles (-6,2%) en los primeros seis meses del año así lo prueban. El único dato positivo lo ofrece el puerto de Cartagena (en la imagen), que aumentó un 28% el tráfico de mercancías.
1 comentario:
Más recetas neoliberales para pagar la crisis el estado, es decir, todos, en vez de los que más dinero han ganado este año. Y por qué no aumento del IBI para viviendas vacías, subida de impuestos a bienes de lujo (incluidas propiedades y 2as residencias), penalización por contratos precarios, aumento de impuestos por actividades incompatibles con el medio ambiente, etc? Qué listos son los de la CROEM!!!
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