sábado, 30 de junio de 2007

Los trabajadores de la CAM reclaman que los beneficios mejoren sus condiciones laborales

ALICANTE.- La asamblea general de Caja Mediterráneo (CAM) correspondiente a la primera mitad del año, se celebró en un ambiente de tensión imprevisto. Los representantes de los trabajadores convirtieron la cita en una plataforma reivindicativa que llegó a exasperar al propio director general, Roberto López Abad.

Las críticas llegaron por parte de todos los sindicatos, que reclamaron que los beneficios y resultados positivos de los que presume la entidad deberían mejorar las condiciones laborales, que en algún caso llegaron a calificar de “inhumanas”.

Los consejeros generales presentes fueron testigos de las intervenciones realizadas por los dirigentes sindicales –hasta siete–, quienes cuestionaron en todos los casos la política de personal desarrollada. La mayoría hizo especial hincapié en la desigualdad salarial existente, aunque también se apuntó la escasa flexibilidad de los horarios o la eliminación de la jornada de tarde de los jueves. Mientras, reiteraron que existe cada vez una mayor presión y exigencia que no se traduce en retribuciones y beneficios sociales.

Las exposiciones realizadas hicieron fruncir el ceño a más de uno en la mesa presidencial de la asamblea, aunque quienes se mostraron más contrariados fue la cúpula ejecutiva, con López Abad y la directora general adjunta, Maria Dolores Amorós, a la cabeza. Los sindicatos han dado así un primer toque de atención a la caja sobre sus reivindicaciones.

Reivindicación de logros

Sin embargo, el director general persentó un informe en el que destaca que la CAM es el octavo grupo financiero nacional y la cuarta entidad de ahorros de España, por volumen de negocio en sus dos vertientes de crédito y recursos. Otras magnitudes importantes de CAM son 1,4 millones de tarjetas, una red de 1.750 cajeros automáticos y más de 38.000 terminales de punto de venta en establecimientos.

Por lo que respecta a la cuota de mercado a nivel nacional, la CAM ha aumentado la cuota en más del 43% en el último quinquenio. Este fuerte ritmo de crecimiento de CAM ha venido acompañado de una importante creación de empleo directo, de tal forma que la plantilla actual se sitúa en 6.537 profesionales, 656 mas que en el ejercicio anterior. De hecho, la dirección resalta que cuenta con una plantilla joven, la edad media se sitúa en 39 años, y con experiencia –la antigüedad media ronda los 14 año– en la que mas del 45% son mujeres, representando mas del 60% de las nuevas contrataciones.

López Abad subraya la evolución muy positiva de todos los márgenes del negocio con respecto a 2005, especialmente el índice de eficiencia que se ha situado en un nivel por debajo del 40%, con una mejora de 10,2 puntos porcentuales en el año, así como del aumento de los recursos propios computables de 5.477 millones de euros al finalizar el ejercicio, un 19,7% mas que en 2005.

Principales ‘rating’

Además, la caja alicantina ha obtenido en 2006 la evaluación A+ por la agencia de rating, Standard & Poor’s que viene a sumarse a las dos anteriores, Fitch y Moody’s, que evalúan la gestión de la entidad desde hace ya bastante tiempo. Esta nueva calificación permite a la CAM acudir a los mercados mayoristas en condiciones favorables, pasando a formar parte del selecto grupo de entidades españolas que cuentan con rating de las tres principales agencias internacionales. Con estos avales, la dirección defiende la importante gestión que se realiza.

Precisamente, la asamblea general ha aprobó en la sesión las cuentas anuales consolidadas de CAM y sus sociedades dependientes así como la aprobación y distribución de los importantes resultados económicos obtenido en la Cuenta de Pérdidas y Ganancias en el ejercicio 2006 y la aprobación de la liquidación del presupuesto de Obras Sociales para el mismo ejercicio.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Según mis noticias lo de CajaMurcia fue totalmente al revés: los sindicatos se mostraron encantados con la gestión y rindieron pleitesía a su señor jefe. Debió ser apabullante la actitud tanto de CCOO como de UGT, estos últimos mayoritarios.¡Lo que vamos a tener que ver!
No estaría mal que hicieseis alguna cosa sobre las diferencias, intentando ver las causas de las diferentes reacciones. Claro que el tal Sebastian de UGT, conocido mío tanto él como su familia, es un heredero del sindicato vertical, al que perteneció su papi y del que sacó sus beneficios y relaciones que le permitieron medio colocar a sus hijos.