El portavoz
del Partido Popular en el Congreso de los Diputados, Rafael Hernando,
confía en que su partido podrá formar Gobierno una vez que se celebren
las próximas elecciones en el País Vasco y Galicia. Según Hernando, en
las últimas horas se ha producido un cambio en la actitud de los
dirigentes socialistas al dejarle claro a Pedro Sánchez, sobre todo los
andaluces, que “no hay que engañar a los españoles” porque su
alternativa al Partido Popular es inviable.
A
su vez, la renuncia del ex ministro de Industria, José Manuel Soria, a
acceder al Banco Mundial como director ejecutivo, tras las
presiones del Gobierno de mariano Rajoy, facilitan bastante las
relaciones con sus todavía socios de Ciudadanos.
El
encargado de darle el mensaje al secretario general de los
socialistas de que su alternativa es inviable, mensaje con el
que ha vuelto la confianza a los populares de cara a poder formar
Gobierno a principios de octubre, ha sido el secretario de
organización del PSOE-A, Juan Cornejo.
No se trata de un
cualquiera. Cornejo que a su cargo une la condición de no hacer la
menor declaración sin el permiso o sin el mandato de la
presidenta de Andalucía, Susana Díaz, explicaba este lunes que “no
están en el debate de la abstención aún”. Con posterioridad
admitía que ese momento puede llegar y llegará. Pero, claro, habrá
condiciones.
Lo dan por hecho los populares, como comenta
su portavoz en el Congreso, pese al fracaso de la nueva
conversación política mantenida entre el presidente del
Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, y el secretario general de
los socialistas, Pedro Sánchez.
El encuentro telefónico ha
sido muy breve. Diez minutos, mal llamados escasos, que les han
llevado a reconocer a los responsables de ambos partidos que
permanece el bloqueo de cara a la inmediata formación de
Gobierno.
Aunque en esta ocasión no se ha sugerido que Rajoy
tendría que dar un ‘pasito al lado’, como sugirió Susana Díaz el
pasado mes de diciembre, para que los socialistas den su primer
paso hacia la abstención, una mayoría de socialistas consideran
que esta abstención del PSOE tiene que tener un precio.
Descartan
que la renuncia de José Manuel Soria como representante español
para ser director ejecutivo del Banco Mundial pueda considerarse
parte del precio a pagar por los populares, como alguno de ellos ha
sugerido.
El caso Soria había llevado a populares y
socialistas a subir el tono en la reunión de la Mesa del Congreso de
este jueves. Ante la decisión de que no hubiera ningún pleno antes
del día 25, la fecha de las elecciones vascas y gallegas, con lo cual
no tenían la posibilidad de que de Guindos tuviera que acudir al
pleno a explicar cómo se había realizado el proceso de selección,
ha llevado inmediatamente a que PSOE y Podemos se pusieran de
acuerdo para convocar un pleno con carácter de urgencia, que la Mesa
les ha negado.
Según fuentes populares todo este ruido se
explica porque el equipo de Pedro Sánchez está muy necesitado de
organizarla ´muy gorda´ antes de que lleguen las gallegas. Las
previsiones no pueden ser más catastróficas para los socialistas
en Galicia. En el caso del País Vasco tampoco son mucho mejores.
Sería
el momento en el que habiendo constatado que es “inviable” la
conformación de una alternativa como ha dicho el presidente de
Aragón, Javier Lambán, tal y como espera el Partido Popular, se
facilite la investidura y la conformación del nuevo Gobierno.
Algunas partes parecen ciencia ficción, pero es la ciencia ficción con la que trabajan desde el Partido Popular.
(*) Periodista
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