MURCIA.- La Región de Murcia lleva más de 20 años pidiendo agua.
Agua que seguramente no necesite, como apuntan desde diferentes estudios
relevantes pero fuera de la oficialidad de los estamentos murcianos.
Las disputas que el gobierno del Partido Popular ha tenido con Castilla
la Mancha, Aragón y Cataluña sobre el reparto del agua, con la famosa
"llamada a la solidaridad" y el "Agua para todos" pueden estar cada vez
más cerca de su final si se atiende a lo que asegura Luis Francisco
Turrión, hidrogeólogo murciano que lleva más de 25 años estudiando y
trabajando con el agua de la Cuenca del Segura y conoce perfectamente la
situación, en una entrevista con http://www.eldiario.es
En un estudio publicado recientemente
para Greenpeace España, Turrión analiza la situación hídrica de la
Cuenca del Segura, los fallos contables del Plan Hidrológico desde 1998
que persisten en la actualidad y el falso mito de que en Murcia no hay
agua.
¿Qué le motivó a realizar un estudio detallado de la situación hídrica de la Región de Murcia?
Julio Barea, responsable de Greenpeace, me propone realizar en 2015 un
estudio de los últimos diez años de la situación hídrica en Murcia, a
partir de un estudio previo suyo publicado anteriormente, que se llama El negocio del agua en la cuenca del Segura. Acepté
el reto de hacer este informe con mi valoración en el que trato de
hacer que la gente comprenda el fraude hídrico al que estamos sometidos.
El informe lo presenté hace un año y con el beneplácito de Greenpeace y
acompañado de un vídeo con testimonios fue publicado hace unos días.
¿Qué es ese fraude hídrico del que habla?
La planificación hidrológica en España, y concretamente en la Cuenca
del Segura, se fundamenta en una serie de trampas respecto a las aguas
subterráneas y un déficit que es irreal en términos contables.
Ese déficit es lo que lleva años denunciando la Región de Murcia y por
lo que pide más trasvases y que ha ocupado la mayor parte de la agenda
política del gobierno en los últimos años.
Los datos oficiales dicen que la Región de Murcia tiene un déficit
hídrico estructural de 400 hectómetros cúbicos incluyendo el agua que
recibe del trasvase Tajo-Segura. Por lo tanto, según se acordó en el RD
1/2016 del Plan Hidrológico de la Cuenca del Segura requiere
transferencias externas a pesar del trasvase que ya existe. Algo curioso
porque a lo largo de la planificación hidrológica de los últimos años
esta cantidad es recurrente: 400 hm3 en el año 1998, en el Plan
2009-2015 y la misma cantidad en el último de 2016.
¿Y cómo se calcula el agua que tiene una cuenca hidrográfica?
El balance hídrológico se toma de restar a lo que llueve de media
anualmente en una cuenca el agua que desaparece a través de la
evapotranspiración. El resultado da el recurso natural medio, el agua
media de la cuenca en definitiva. Ese agua resultante se distribuye en
dos flujos: el flujo fluvial (ramblas, ríos...) y el flujo profundo
(descarga subterránea submarina).
Y aquí quiero
llegar porque el Júcar calcula que en ese balance, su flujo profundo es
de unos 500 hectómetros cúbicos que van directamente al mar. Lo que hace
el Júcar es directamente no contar con ese flujo de agua, en una
decisión más política que científica, pero al menos sí refleja el dato.
Por su parte, la Cuenca del Segura también cuenta únicamente con el
flujo de agua fluvial pero con la diferencia de que ni siquiera calculan
el flujo de agua subterránea.
La gran trampa del Plan Hidrológico del Segura 2015-2021 y que habla en el informe es la información sobre el agua subterránea
De hecho ya hay infraestructuras que nos permitirían captar el agua
subterránea. En Murcia por ejemplo hay más de 60 pozos que permiten
recoger agua antes de que llegue al mar, en los que tuve el gusto de
trabajar. Hoy en día solo funcionan apenas una decena en la Batería
estratégica de pozos de sequía y no sabemos por qué la CHS no continúa
abriendo.
Un claro ejemplo de cuánto nos equivocamos
en los cálculos hídricos se demuestra cuando nos comparamos con las
Islas Baleares, quienes única y exclusivamente contabilizan el nivel de
sus acuíferos y agua subterránea a la hora de analizar su situación
hídrica, porque evidentemente ellos no pueden recibir ningún trasvase.
¿Y quién toma estos cálculos y porque hay diferencias en la forma de contabilizar entre una cuenca y otra?
Según la Instrucción de Planificación Hidrológica, de 2008, es la
Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), quien tiene que decir lo que
llueve y lo que se evapotranspira, además de todos los datos climáticos
oficiales y el modelo regionalizado de predicción del cambio climático.
Sin embargo, cuando analizamos los planes hidrológicos de España, nos
llevamos la sorpresa que quien ha dicho lo que llueve en la Cuenca del
Segura no ha sido AEMET sino el Centro de Estudios y Experimentación de
Obras Públicas (CEDEX).
Entonces no habría necesidad alguna en Murcia de un trasvase, incluso del ya existente que es el Tajo-Segura
El continúo debate entre trasvase sí, trasvase no, solo hace que se
manipulen los datos de información hidrológica en toda España. El último
ejemplo que he puesto es claro, con el único objetivo de crear una
sensación de escasez irreal. Esta sensación provoca que se acepten de
forma dócil todas las infraestructuras públicas creadas "para traer
agua" y subidas de precio del agua totalmente injustas. El Plan del
Segura no calcula el agua subterránea que contienen sus embalses
subterráneos; es decir, sus acuíferos o masas de aguas subterráneas.
Estos almacenamientos de agua ignorados, fueron estimados a finales de
los años 70 por el Instituto Geológico y Minero de España (IGME) y por
el antiguo Iryda en unos 100.000 hm3 en el conjunto de la cuenca del
Segura. Cifra que es cien veces superior al total del agua que pueden
acumular sus embalses superficiales. En Murcia hay agua de sobra.
¿Y qué coste podría tener crear las infraestructuras necesarias para aprovechar ese agua subterránea y desengancharse del Tajo?
No sé los cálculos pero la gran mayoría de infraestructuras para poder
paliar el déficit hídrico ya existen, solo que no se aprovechan. Las
desaladoras ya están construidas, pero deben empezar a funcionar a pleno
rendimiento cuanto antes, también los pozos de la batería estratégica y
que costaron 50 millones de euros en su momento y de los que ya he
dicho solo funcionan de momento una decena. Además de numerosos pozos
que ya existen en Hellín o Calasparra muy válidos. Dicen que del Tajo
hacen falta 350 hm3 y entre desaladoras y el agua subterránea de las
baterías estratégicas podemos alcanzar de sobra esa cifra y no depender
más del trasvase.