Este esfuerzo inversor se ha traducido en la intervención de 28 piezas de patrimonio mueble, además de más de 200 piezas arqueológicas, lo que supone uno de los mayores volúmenes de trabajo registrados por el CRRM, tanto por número de bienes tratados como por la complejidad y relevancia de las obras intervenidas.
La inversión histórica de este ejercicio se vincula de manera especial a la actuación integral sobre la colección de la Fundación Adela Barba, destinada a enriquecer los fondos del Museo de Bellas Artes de Murcia (MUBAM).
Esta intervención ha permitido la restauración de un conjunto excepcional de obras, con autores de primer nivel como Giulio Cesare Procaccini, Mateo Cerezo, José de Ribera o Frank Francken II, consolidando una de las incorporaciones patrimoniales más relevantes de los últimos años para el museo regional.
Los trabajos desarrollados han alcanzado los más altos estándares de excelencia técnica, lo que sitúa al Centro de Restauración como un referente en el ámbito de la conservación del patrimonio mueble.
A esta labor se suma el significativo volumen de piezas arqueológicas intervenidas, procedentes de distintos museos de la Región, que ha permitido registrar porcentajes de intervención históricos desde la creación del CRRM.
Junto a estas actuaciones, el Centro ha desarrollado restauraciones de obras clave pertenecientes a la Asamblea Regional, al Museo Regional de Arte Moderno de Cartagena, así como a templos y cofradías de la Diócesis de Cartagena, incluidas esculturas y pinturas de gran valor histórico, artístico y devocional.
Parte de las actuaciones financiadas con cargo a los presupuestos de 2025 se concluirán y entregarán durante el primer trimestre de 2026.
En el ámbito arqueológico, el CRRM ha intervenido más de 200 piezas, procedentes del Museo Arqueológico de Murcia, el Museo de Arte Ibérico El Cigarralejo de Mula y el Museo Jerónimo Molina de Jumilla, reforzando la conservación de los fondos arqueológicos regionales.
Además de las restauraciones, el Centro ha realizado numerosas visitas técnicas, informes especializados y tasaciones, con lo que consolida su función como servicio público esencial para la protección del patrimonio cultural.
La conjunción de recursos económicos históricos, la calidad de los procesos aplicados y la relevancia de los bienes intervenidos convierten 2025 en un año decisivo para el Centro de Restauración de la Región de Murcia, lo que pone de manifiesto el papel fundamental que desarrolla en la salvaguarda y puesta en valor del patrimonio cultural regional.
