
Paredes, que acudió ayer al Palacio de Justicia de Cartagena, mantiene que en este asunto han ido a por él y que, en el fondo, no hay nada de nada.
“La acusación se basa en testigos protegidos y en lo que dijeron una serie de prostitutas sudamericanas que, en su mayor parte, están ya en la calle, probablemente dedicadas a lo mismo”.
Sin embargo, determinadas fuentes del caso relacionan a Paredes con problemas en Chequia, hace unos meses, por sospechoso de trata de blancas, y con actividades inmobiliarias dudosas en Cartagena, muy parecidas a las que hicieron célebre a la PSV que se llevó por delante a Nicolás Redondo, y de las que sí tenía noticia la alcaldesa de Cartagena, Pilar Barreiro, quien, al parecer, llegó a interceder con vehemencia por su agente ante las autoridades correspondientes en el primer supuesto.
En la sede central ugetista, en Madrid, preocupan seriamente las derivaciones indirectas de este caso (abierto tras un homicidio en un club de alterne de Cartagena) en lo que inevitablemente pueda afectar al sindicato y antecedentes que no invitan al optimismo, de trascender a destiempo algunas situaciones, difíciles de explicar, de las que hasta ahora no había tenido noticias Cándido Méndez (en la fotografía) desde la sede de UGT en Murcia.
Nada más estallar este escándalo, Méndez llamó a Madrid a López Baños y a Jiménez, en su calidad de secretario regional de UGT el primero, y responsable regional de servicios públicos el segundo, para tener una versión de primera mano sobre lo acaecido y poder así contrastar la propia información requerida por él de la policía criminal y la fiscalía. El máximo responsable nacional del sindicato es consciente de tener con esto un problema y no se descartan puntuales dimisiones en la ejecutiva federal nada más se celebren las elecciones municipales y autonómicas.
Luego ha venido la sorprendente derrota electoral de la UGT en las elecciones sindicales realizadas en la Comunidad Autónoma de Murcia, donde inesperadamente la muy vigorosa Federación de Servicios Públicos ha sido vencida por CC. OO., y las voces que han esperado a que pasase el 1º de Mayo para expresarse con total libertad, al sugerir los ya inevitables cambios en algunas plantas de la calle de Santa Teresa, sin prisa pero sin pausa, para antes de las próximas elecciones generales y aprovechando el paréntesis del verano.
Preocupan, especialmente, unas teóricas grabaciones en vídeo, anteriores a todos estos hechos y realizadas, al parecer, en el citado club de alterne del Campo de Cartagena, al menos a sindicalistas de cierto relieve que parece lo frecuentaban, según ha trascendido en círculos de la investigación, que se han negado a señalar nombres para no complicar mucho más una situación que, por la actitud de Paredes en prisión provisional, se va cargando con el paso de los días y es susceptible de salpicar eventualmente a gente más importante de la Región de Murcia.