domingo, 27 de mayo de 2018

Zaplana, calado hasta los huesos

MADRID.- 6,5 millones ocultos de Zaplana. Aquí la historia de Eduardo Zaplana en la semana del gran hundimiento del PP. Cuando el ex ministro, símbolo del 'milagro' de Aznar, ha entrado en la cárcel por blanqueo, y el PP ha sido condenado por lucrarse de la maraña corrupta de la 'trama Gürtel'. Su perdición arranca con cuatro papeles que el ex presidente de Valencia se olvidó en un falso techo de su primer piso de lujo... Un amigo: "No entendemos cómo un tipo tan inteligente como él ha caído tanto tiempo después, y por un despiste", recoge El Mundo.

Una figura con estampa de alero de baloncesto recorre los pasillos de parqué de uno de los centros deportivos más exclusivos de Madrid. Su cuerpo es fibroso y luce calcetines blancos relucientes a la altura de las rodillas como si fuese un jugador de la NBA. Le acompaña uno de los entrenadores personales más veteranos de este gimnasio vip (120 euros al mes) al que también acudían los ex presidentes de la Comunidad de Madrid Ignacio González y Cristina Cifuentes. Es sábado. Y, como todos los fines de semana, acude disciplinado a su cita. Dos horas y media de levantar pesas con las piernas, machacarse los abdominales en el suelo y hacer bicicleta elíptica.
Siempre fue esclavo de su imagen, pero ahora, a sus 62 años, con una leucemia diagnosticada y tratada que no acaba de abandonarle, tiene otra razón para cuidarse. En el club se refieren a él como «don Eduardo» y cuando alguno de los asiduos le pregunta por su etapa política prefiere cambiar de tema. Responde con evasivas. Aquel sábado parecía aún intocable, a pesar de que las sospechas de corrupción llevaban años persiguiéndole.
La noticia abrió los informativos de este martes: Eduardo Zaplana, símbolo de toda una época en el PP -alcalde de Benidorm, presidente de la Comunidad Valenciana, ministro de Trabajo y portavoz del Gobierno de Aznar en el 11-M-, detenido. La Guardia Civil le acusa de los presuntos delitos de blanqueo de capitales, cohecho, prevaricación, malversación, delito fiscal... por haber enviado dinero a paraísos fiscales procedente de comisiones obtenidas por adjudicaciones de contratos públicos cuando era presidente de la Generalitat Valenciana.
El jueves a las 1.17 horas de la noche, «don Eduardo», el eterno conseguidor, el businessman de los felices 90, «el encantador de serpientes», como le define un amigo, entró en la cárcel de Picassent, a 21 kilómetros del Palau de la Generalitat que él mismo gobernó.
La caída de Zaplana, aperitivo de la severa condena por el caso Gürtel, ha cogido por sorpresa a su reducido núcleo de amigos, con los que ha solido verse en restaurantes de primer nivel hasta días antes de su detención. «No entendemos que un tipo inteligente como él haya caído tanto tiempo después y por un despiste», asegura uno de ellos.

Primer capítulo

El papel oculto en un falso techo que, en manos del jefe de una mezquita, acabó con su 'trama'
El mandato en la Comunidad Valenciana de Eduardo Andrés Julio Zaplana Hernández-Soro (Cartagena, 1956) siempre estuvo bajo la sombra de la sospecha. Terra Mítica, el Instituto Valenciano de la Exportación, los contratos con Julio Iglesias, sus vínculos con la Caja de Ahorros del Mediterráneo... y todo precedido por el caso Naseiro, la trama de financiación irregular del PP que se derrumbó cuando el Tribunal Supremo anuló las escuchas policiales y en la que Zaplana declaraba su intención de hacer dinero. (No fue grabado diciendo aquello de «He venido a la política a forrarme», como siempre se le ha atribuido erróneamente, sino esta otra frase, en 1990: «Me tengo que hacer rico porque estoy arruinado»).
Pero no. Pese a la desconfianza que generaba su figura, nada ni nadie consiguió sentarle en un banquillo. Ni tan siquiera que prestara declaración en calidad de investigado. Sólo ahora, cuando hace 10 años que había aparcado su carrera política, aquellas sospechas le han enviado a prisión.
El principio de su fin fue un curioso hallazgo, fruto quizá de un olvido imperdonable. Un empresario sirio llamado Imad al Naddaf alquiló un piso de lujo en Valencia que en el pasado había pertenecido a Zaplana. Y, realizando supuestamente una reforma en la vivienda, situada en el edificio La Pagoda de la plaza de la Legión, uno de los barrios más exclusivos de la ciudad, encontró tras un falso techo cuatro hojas manuscritas. 
Hace tres años, esas cuatro hojas acabaron en manos de la Fiscalía Anticorrupción gracias a Marcos Benavent, el llamado yonqui del dinero. Según el relato de este comisionista arrepentido del PP (con sus grabaciones desencadenó la operación Taula en torno a la ex alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, y al ex presidente de la Diputación, Alfonso Rus), Al Naddaf, un habitual de los círculos empresariales valencianos, le había entregado los papeles poco después de instalarse en la antigua residencia de Zaplana.
El aludido, fundador del Consejo Islámico Valenciano y ex responsable de la Gran Mezquita de Valencia, se aferra ahora al secreto de sumario para no comentar su participación en el caso. «Muchos datos que se han publicado son incorrectos», se limita a contestar a preguntas de este suplemento.
¿Y qué ponía en esas cuatro páginas? En ellas, Zaplana habría esbozado el plan para cobrar 6,4 millones de euros en comisiones a través de dos adjudicaciones cocinadas en su etapa al frente del Gobierno valenciano (1995-2002): una relativa a la privatización de la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) y otra vinculada al Plan Eólico de la Comunidad Valenciana, según el auto de la juez que investiga la denominada operación Erial, María Isabel Rodríguez Guerola, desvelado por El Mundo. Las jugosas mordidas procederían, vía Luxemburgo, del grupo empresarial Sedesa, perteneciente a la familia Cotino.
La investigación sobre las ITV, adjudicadas en 1998 por 37 millones y por un plazo de 25 años, prorrogables a 75, a una unión temporal de empresas (UTE) entre las que figuraba Sedesa, se centra en el cambio normativo que introdujo en 2009 el entonces consejero valenciano Rafael Blasco, condenado a nueve años de prisión por el caso Cooperación
La modificación impuso nuevas cláusulas como la revisión de la sonometría, que elevaron el precio medio por revisión de vehículo de 18,4 a 46,5 euros. Fue entonces cuando muchos de los concesionarios vendieron su participación, con lo que lograron importantes beneficios.
El procedimiento con respecto al Plan Eólico fue similar. En 2002 la Generalitat adjudicó por lotes las zonas de implantación de los molinos de viento. Y Sedesa resultó adjudicataria (en una UTE denominada Proyectos Eólicos Valencianos) de la zona sexta. La firma de Vicente Cotino (sobrino del ex vicepresidente del Gobierno valenciano y ex director de la Policía Nacional Juan Cotino) disponía de una participación del 25% del total de Proyectos Eólicos Valencianos, mientras que Endesa, a través de su filial ECyR, era propietaria del 55% de las acciones y Bancaja, del 20%. 
Siete años y 16 días después, la empresa dirigida por Vicente Cotino salía de Proyectos Eólicos Valencianos vendiendo su participación a Endesa y apuntándose con la operación un beneficio neto de 34,7 millones de euros, según consta en la documentación remitida al Registro Mercantil.
Todo, sin embargo, había quedado tapado hasta la aparición de los papeles en la antigua vivienda de Zaplana. A partir de ahí, la titular del juzgado de instrucción número 8 de Valencia ha tirado del hilo hasta vincular al ex ministro con un desvío de fondos realizado hace 12 años a través de una sociedad llamada Imison Internacional.
Los ingredientes de película en este caso no se agotan. Porque quien administraba esta sociedad, radicada en Luxemburgo, era nada menos que la sobrina de Francisco Paesa, investigada en su día por dar cobertura con sus empresas a su tío, el célebre espía que ayudó a fugarse de España al ex director general de la Guardia Civil Luis Roldán.
En todo caso, el dinero vinculado a Zaplana, siempre según el auto judicial, habría permanecido oculto en Uruguay, Andorra y Paraguay. Hasta que en 2005 y 2006 dio inicio la operación para que esos fondos volvieran, blanqueados, a España.
El ex presidente de la Comunidad Valenciana lo niega todo.

Segundo capítulo

La pista uruguaya y el negocio de limpiar el Mar Menor con Ignacio González
En los documentos que ha investigado la Guardia Civil en la operación Erial, Uruguay ocupa un papel importante. En concreto, aparecen citados dos bufetes de este país: la firma Caputi & Ventura y el abogado Fernando Belhot, socio del despacho South Capital Partners, con sede en Montevideo.
Según la investigación, Belhot podría ser la persona que asesoró a Zaplana para crear un entramado offshore con el fin de ocultar su fortuna. Lo cierto es que no es la primera vez que este abogado aparece en una investigación policial ligada al ex ministro.
El letrado uruguayo formó parte de un trío de negocios que hace poco más de un año emprendió un proyecto cuanto menos llamativo. Lo formaban, según desveló la operación Lezo, el ex presidente de la Comunidad de Madrid Ignacio González (que en el negocio se hacía llamar Jaime Liberal), Eduardo Zaplana y el propio Belhot.
Su idea: comprar la licencia de un producto químico para el tratamiento de aguas fabricado por la firma alemana Shieer e introducirlo en España. 
En febrero de 2017, según publicó el diario La Verdad, el abogado uruguayo se presentó con un ciudadano alemán y otro chileno ante la Consejería de Agricultura de Murcia (de donde es originario Zaplana) para vender un producto milagroso que acabaría con la contaminación del Mar Menor. Vertiendo su aditivo líquido, llamado Biofish, las aguas quedarían purificadas, sostenían.
La aventura (fallida) salió a la luz cuando estalló el caso Lezo. ¿Era una estrategia para blanquear dinero? Según el juez Eloy Velasco, que instruía la causa, Ignacio González pudo recurrir a la estructura societaria de Belhot para traer a España fondos radicados en el extranjero.
El abogado ha reconocido esta semana a El Confidencial que conoce a Eduardo Zaplana desde hace años, y que el ex ministro fue quien le presentó a Ignacio González.
Los dos ex presidentes autonómicos no han perdido el contacto en los últimos tiempos, por cierto. (Tampoco Zaplana y José María Aznar). «Don Eduardo» vio a González por última vez en la boda de la hija del madrileño a principios de este mes. Su entrada en prisión y posterior excarcelación no los separó.
«Eduardo es muy amigo de sus amigos», dice una fuente cercana a él. «Cuando te dan una hostia o pierdes tu puesto de trabajo, es el primero en llamarte».

Tercer capítulo

Las casas de lujo del ex ministro y su sueldo en Telefónica
La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil sigue ahora la pista del dinero ligado a Eduardo Zaplana. Supuestamente, el ex ministro utilizó como testaferros a un matrimonio de toda confianza: su amigo de la infancia Joaquín Barceló Llorens -con el que formó parte de la peña festiva El Picarol en Benidorm, y a quien el ex ministro fue colocando en distintos cargos públicos mientras él ascendía políticamente-, y su mujer, Felisa López González.
Los investigadores sospechan que la pareja ayudó a Zaplana a ocultar parte de su fortuna a través de sus empresas. Los Barceló-López poseen seis sociedades con sede en Alicante que suman unos activos inmobiliarios valorados en 9 millones de euros, según informó El Economista.
Bajo lupa están también los movimientos patrimoniales que Eduardo Zaplana y su familia han llevado a cabo en los últimos meses. Su entorno insiste en que su nivel de vida no era ostentoso y sí muy rutinario.
El ex ministro popular tenía despacho en Telefónica en calidad de asesor en el área de asuntos públicos. La compañía de comunicaciones lo fichó en 2008, en cuanto dejó su escaño en el Congreso de los Diputados, por un sueldo que nunca ha sido revelado, aunque sí estimado en unos 600.000 euros anuales. 
El mismo día de su detención, Telefónica suspendió su relación laboral con él, casi al mismo tiempo en que el PP anunciaba también la suspensión de su militancia. En su entorno subrayan, en todo caso, que no fue el PP quien le colocó en la empresa. «Fue su gran amigo Javier de Paz, mano derecha de [José Luis Rodríguez] Zapatero, el que le ayudó a entrar en Telefónica a pesar de lo que se ha ido contando», asegura uno de los amigos más cercanos de Zaplana.
Desde hace seis años el ex ministro del PP cobraba otro sueldo (99.000 euros en 2017) de la distribuidora de tabaco Logista por su cargo como consejero independiente, además de administrar Decuria Consulting, una consultora especializada en abrir puertas que fundó poco después de fichar por Telefónica y que en ocho años facturó más de 2,3 millones de euros.
¿Y sus inmuebles?
A nombre de Eduardo Zaplana y de su esposa, Rosa Barceló Martorell (hija del rico hotelero Miguel Barceló, ya fallecido), figuran actualmente dos: un chalé con piscina en la Cala de Benidorm y un piso de 290 metros cuadrados en la calle Monte Esquinza, en la selecta zona madrileña de Almagro (barrio de Chamberí), que el ex ministro estaba reformando. Una de las líneas de la investigación tiene que ver con esta casa: Zaplana la compró el pasado marzo por alrededor de 1,8 millones de euros a tocateja, sin hipoteca.
La familia asegura que adquirió el inmueble con el dinero que acababa de ingresar (2,8 millones de euros) gracias a la venta de otro: un imponente piso de 532 metros cuadrados en el número 138 del Paseo de la Castellana, junto al estadio Santiago Bernabéu, donde Zaplana y los suyos se establecieron en noviembre de 2002 cuando le nombraron ministro y tuvo que trasladarse a Madrid.
Aquella adquisición ya generó sospechas en su día: Zaplana pagó 1,62 millones de euros por el piso con un préstamo bastante ventajoso concedido por la Caja de Ahorros del Mediterráneo. Según explica el ex periodista de El Mundo Alfredo Grimaldos en su libro de investigación Zaplana. El brazo incorrupto del PP (editorial Foca, 2007), en la fecha de concesión del crédito el secretario de la caja era su amigo Francisco Grau Jornet, quien esta semana ha sido también arrestado como presunto contable de la trama de blanqueo.
«No tiene dinero fuera de España y siempre ha vivido de acuerdo con sus posibilidades», han dicho fuentes familiares a El Mundo
Argumentan que también el piso de Castellana lo compró Zaplana con la venta de otro anterior, la vivienda familiar ubicada en Valencia en la que el empresario sirio encontró los papeles que originaron la operación Erial.
Sin embargo, otro dato cuestiona esta versión. Según la información de Grimaldos, Zaplana y familia no vendieron su casa de Valencia hasta otoño de 2006, cuatro años después de marcharse a la capital.

Cuarto capítulo

Y cómo últimamente se hacía 'el pobre' y pedía dinero a sus amigos
«Sabemos que siempre ha estado en el punto de mira, sobre todo, con los pinchazos de la operación Lezo, pero pensábamos que eran meras sospechas y que no había nada», asegura un amigo de Zaplana. 
«Cuando nos hemos enterado de que supuestamente guarda un montón de millones de euros en Uruguay, no nos lo creíamos. Porque, de hecho, ha llegado hasta a pedir dinero a algún amigo, y no es comprensible si tienes ese dineral. Era una persona que no exhibía su dinero».
Algunos en su entorno creen ahora que si Zaplana les solicitaba ayuda económica era para ocultar que al otro lado del charco guardaba la cantidad suficiente como para asegurar una vida tranquila a varias generaciones.
En los últimos meses el ex ministro vivía de alquiler. Y seguía haciendo negocios. Según las fuentes consultadas, hace unos meses cerró un restaurante que compartía junto a otros socios en los bajos de un hotel de lujo junto a la plaza de Colón en Madrid debido a que las cuentas no iban bien. También intentó comprar un edificio en Alicante para convertirlo en apartamentos, aunque finalmente no lo consiguió.
En sus reuniones con su círculo, en todo caso, las preocupaciones que trasladaba eran su familia (tiene dos hijas; su hijo Eduardo murió en 2011 con tan sólo 22 años a causa de una enfermedad que padecía de nacimiento) y su recuperación de la leucemia. Eso sí, en las últimas fechas había manifestado un especial pesimismo respecto al devenir del Partido Popular.
«Últimamente decía que veía cómo ahora los políticos del PP no tenían empaque, preparación, como los de antaño. Que les faltaba categoría política. Que antes tenían a Álvarez Cascos, que te podía gustar más o menos pero controlaba el partido con mano de hierro y tenía visión», comenta una fuente cercana. 
«Decía que ahora el PP no tiene visión política y que no ha sabido anticipar el asunto de Cataluña, del que él mismo avisó a Rajoy hace años. Pero no es sólo crítico con el PP; también con el resto de partidos, de los que dice que tienen muy poco nivel».
Aunque la inquina la reservaba, según su entorno, para el presidente del Gobierno, a quien le gustaba referirse con calificativos tan poco halagüeños como «el hijo de puta». Esa animadversión ya quedó clara en los pinchazos que posibilitaron que trascendiera una conversación suya con Ignacio González:
-Éste no puede continuar. Este Rajoy es imposible. Esta legislatura no puede durar. Yo jamás voy a hacer nada [por lo] que puedan decir que he jodido el PP. Pero eso sí, cuando llegue el momento [en] que éste caiga, poner claramente cuál es mi posición y que yo con éste no tengo nada que ver. A ver si cuando éste caiga nos va a arrastrar a todos.
«No le perdona que haya tratado de hacer ver que él era el único limpio de aquella generación del PP cuando él estaba metido en el ajo», indica el amigo. 
«El PP antiguamente cuidaba mucho más a los suyos y ahora ve cómo Rajoy se va quitando de encima a amigos como si fueran unos apestados con tal de aguantar en el poder».

El Erial moral del zaplanismo

VALENCIA.- El zaplanismo nació en 1995 para marcar una época en la Comunidad Valenciana. Con él y su equipo se inició la construcción de un proyecto del PP que duró 20 años, pero que se interrumpió con la dimisión de Francisco Camps en 2011, se apagó con la derrota electoral de Alberto Fabra en 2015 y ha acabado siendo enterrado dramáticamente con la condena y el procesamiento del breve José Luis Olivas y el sobresaltado encarcelamiento de Eduardo Zaplana por supuesto cobro de comisiones ilegales, recuerda hoy El Mundo.

El único consuelo que le queda a la fiel pléyade de seguidores zaplanistas es que una de las "almas" de aquel proyecto, el que fuera jefe de gabinete de Zaplana, Juan Francisco García, ha quedado en libertad aunque con cargos y la retirada del pasaporte y la prohibición de viajar.
El ex presidente Zaplana ha ingresado en prisión en medio del silencio de quienes hasta hace muy poco le seguían aclamando con el orgullo personal de pensar que habían hecho historia. 
El zaplanismo llenó hasta reventarlo el salón de actos del Ateneo Mercantil de Valencia el pasado 16 de abril sin saber que aquella reunión sería la última, una especie de epitafio colocado 36 días después a las puertas de la cárcel de Picassent que rezará Aquí comenzó el 'Erial'.
Todavía en estado de shock, los discípulos del zaplanismo sufren ahora la horfandad del eterno "jefe", del faraón moral y político de un grupo que fue pasado a cuchillo en cuanto Francisco Camps se hizo lo suficientemente fuerte como para matar al padre. Camps y Zaplana se despreciaban mutuamente. 
Y ese sentimiento caló entre sus generales, hasta el punto que parte del zaplanismo ha ido celebrando cada una de las operaciones policiales y judiciales que acumulaban las huestes de Camps, numerosas y sucesivas desde que estalló el caso Gürtel.
En los escasos días que han pasado desde la detención de Zaplana, apenas se ha escuchado la voz de los integrantes de aquel grupo. Obviamente, no está el horno para bollos.Sólo una de sus ex conselleras, la benidormí Gema Amor, incondicional entre las incondicionales, se ha atrevido a tomar la palabra. 
Amor ya no milita en el PP. Es la portavoz del grupo Liberales en el Ayuntamiento de Benidorm y este jueves tomó el altavoz para lamentar la reacción del PP, que no tardó ni 21 minutos en dar de baja a Zaplana como militante. La prueba, según ella, de que "el deporte nacional es la envidia y el rencor".
La ex consellera de Turismo, es verdad, lo tiene más fácil que otros para reivindicar la memoria de Zaplana en estos días de plomo. Ya no milita en el partido y sigue en la política, algo que no pueden decir ya la mayoría de los que formaron parte de aquella administración inicial del PP que, bajo la presidencia de Zaplana, siempre hizo gala de buena gestión y de profesionalidad. 
La lista de todos los que han sido progresivamente despachados por (o del) PP es larga. La mayoría de los que fueron consellers, directores generales, subsecretarios o altos cargos de mucho o poco vuelo han vuelto a su actividad privada anterior.
Los zaplanistas siempre marcaron distancias con el campsismo en dos aspectos: la (hasta ahora) nula mancha de corrupción, de un lado; y el empuje de modernidad dado a la Comunidad Valenciana, por el otro.
Ahora, los cimientos que todavía se percibían incorruptos en la administración que construyó el PP, están bajo sospecha. El Gobierno del Botànic ha dado carpetazo al llamado 'modelo Alzira', inaugurado en 1999 por Zaplana aplicando medidas ensayadas por la Tercera Vía de los laboristas Blair y Giddens. 
Y planes como la privatización de la Inspección Técnica de Vehículos, aparentemente bien diseñados, están bajo sospecha de que se enjuagaron con sobornos. También el famoso 'modelo Cotino' para construir plazas de residencias geriátricas, que realmente fue el modelo del conseller Rafael Blasco, ahora camarada de Zaplana en la prisión, quien lo implantó. Lo que queda del zaplanismo, efectivamente, es un "Erial".
El ingreso en prisión de un presidente de la Generalitat, el primero en la historia, supone el enésimo golpe a la imagen de la Comunidad Valenciana, envuelta desde el estallido de la Gürtel, en febrero de 2009, en una auténtica tormenta de casos de corrupción que ha llevado a la cárcel a nombres muy ilustres, como el del propio Blasco, fichado por Zaplana para ser el «cerebro» en su equipo de Presidencia; Carlos Fabra, ex presidente de la Diputación de Castellón y uno de los hombres que le ayudaron a consolidar su poder territorial y, este jueves, la ex consellera de Turismo Milagrosa Martínez, que ascendió a los cielos de la política con Camps y ha dado con sus huesos en la cárcel de Villena para cumplir 9 años. O el ex alcalde de Torrevieja, Pedro Hernández Mateo, a quien incluso se le denegó el indulto desde el Gobierno.
La reconstrucción de la verdad del caso Zaplana todavía ofrece sombras, como la participación de la sobrina del ex espía Francisco Paesa en la gestión de las cuentas en Luxemburgo a través de las que se canalizaron las mordidas, de la que informó en exclusiva Esteban Urreiztieta en El Mundo.
 O el alcance de la participación de Vicente y José Cotino, sobrinos de Juan Cotino, ambos puestos en libertad por la juez que instruye el caso para sorpresa de muchos. O incluso el extraño episodio que contamos hoy en El Mundo del funcionario que hurgó en los papeles del Plan Eólico días antes de que los pidiera la GuardiaCivil. Pero la sentencia moral al zaplanismo está dictada.

Un alto cargo espió en las actas del plan eólico ligado a Zaplana días antes que los agentes de la UCO

VALENCIA.- Un jefe de servicio del IVACE, dependiente de la Conselleria de Economía, acudió al archivo del Centro Logístico de la Generalitat y revolvió los documentos que investiga la Guardia Civil. En concreto manipuló la carpeta del área IV que fue adjudicada a los Cotino. Los guardias civiles acudieron al archivo el miércoles 23 a revisar la misma carpeta.

Un alto funcionario de la Conselleria de Economía accedió el pasado 16 de mayo al Centro Logístico de la Generalitat ubicado en Riba-roja y estuvo manipulando los documentos del Plan Eólico de la Comunidad Valenciana que ahora investiga la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil por su presunta relación con el 'caso Erial', en el que se imputan delitos de blanqueo de capitales, cohecho, malversación y prevaricación al ex presidente de la Generalitat Eduardo Zaplana, según documentos y testimonios a los que ha tenido acceso El Mundo.
Se trata del jefe de servicio de Recursos Humanos y Servicios Generales del Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial (IVACE), Alfonso Roselló, quien, de momento, no ha dado explicaciones oficiales de su visita al archivo y el motivo por el que removió las carpetas del Plan Eólico justo seis días antes de que los agentes de la Guardia Civil acudieran al mismo lugar con el propósito de hallar pruebas o indicios delictivos del caso que instruye la juez del juzgado de instrucción número ocho de Valencia. 
Los guardias civiles fueron al archivo de Riba-roja el miércoles 23 y revisaron, durante la mañana, la misma documentación que previamente había sido manejada.
Roselló no deparó en que su visita al archivo del Consell iba a quedar reflejada en el registro de entradas que recogen los vigilantes que se encargan de controlar los accesos. En concreto, el jefe del IVACE entró a las 12.33 horas al recinto el día 16 y durante 25 minutos, según ha sabido El Mundo, estuvo obteniendo carpetas y revisando documentación del Plan Eólico que puso en marcha Eduardo Zaplana durante su etapa de presidente del Gobierno valenciano y antes de ser nombrado ministro de Trabajo y Servicios Sociales en 2002.
El empleado de la Conselleria que dirige Rafael Climent, de Compromís, se detuvo en la carpeta que contiene toda la información del área IV del plan eólico, que se corresponde con la adjudicación que recibió Sedesa, la empresa de Vicente Cotino Escrivá -sobrino del ex político Juan Cotino- que disponía de una participación del 25% del total de Proyectos Eólicos Valencianos, mientras que Endesa, a través de su filial ECyR, era propietaria del 55% de las acciones y Bancaja disponía del 20%.
Un proyecto que fue ejecutado en 2006 pero que fue licitado en 2001 con un presupuesto de 450 millones y siete parques previstos en la comarca del Alto Palancia en Castellón.

La Orquesta de Jóvenes de la Región de Murcia convoca 16 plazas

MURCIA.-La Orquesta de Jóvenes de la Región de Murcia (OJRM) ha convocado 16 nuevas plazas de violín, viola, contrabajo y trompa para aspirantes de entre 16 y 25 años nacidos, residentes o estudiantes de música en esta Comunidad Autónoma.

El plazo de inscripción está abierto hasta el 11 de junio y las pruebas de acceso se realizarán a finales de ese mes.
El pasado año fueron convocadas 80 plazas, a las que se presentaron 200 aspirantes, 2,5 por cada una.

Mª Antonia Álvarez: "A Dimas lo quieren echar de presidente por denunciar la corrupción de 'El Corte Inglés'"


MADRID.- Dicen que una madre mataría por su hijo. Que no hay nada como el amor materno. Estas sentencias explican mejor que ningún argumento financiero el origen de la guerra por el control de El Corte Inglés, la emblemática empresa española de la que dependen más de 100.000 trabajadores directos y otros tantos indirectos. Una batalla que enfrenta a Marta y Cristina Álvarez y Dimas Gimeno por la presidencia de un 'holding' que factura más de 15.000 millones y cuyo germen parte de la animadversión personal entre María José Guil, la madre de las hijas que adoptó Isidoro Álvarez, y María Antonia Álvarez, la del sobrino del que fuera alma máter del primer grupo de distribución de España. La entrevista El Confidencial

Hija de agricultores y huérfana a los seis años, María Antonia Álvarez, (Borondes, Asturias, 1946), ha presentado tres demandas contra Marta y Cristina Álvarez Guil para reclamar la parte de la herencia que considera le dejó su hermano Isidoro y de la que se han apropiado, según su criterio, unas sobrinas a las que nunca reconoció. 
Ni ella ni doña Eustaquia, la madre del octogenario presidente de El Corte Inglés fallecido en septiembre de 2014 por una leucemia. Una pelea judicial en la que exige, sobre todo, el reconocimiento de los derechos de su hijo, al que "están machacando desde el primer día".

- PREGUNTA: ¿Por qué ha llevado a los tribunales a las hijas de Isidoro?
- RESPUESTA: Durante tres años me he reunido con Carlos Martínez Echevarría (albacea del testamento y alto directivo de El Corte Inglés) para reclamar una solución que nos permitiese poder pagar los impuestos derivados de la herencia que me dejó mi hermano. Les dije que necesitaba los dividendos y me indicaron que no me preocupara, que iba a ser incluso millonaria. Pero yo no tengo dinero y ellas lo saben. En la última reunión que tuve con ellos me dijeron que yo no les podía poner una demanda porque Isidoro les había encomendado cuidar de mí. Pero me estaban ahogando.

P: ¿Considera que Marta y Cristina la han engañado en el testamento con Cartera de Valores IASA, la tenedora del 14% de El Corte Inglés?
- R: Cuando fuimos al notario, un señor de apellido Aznar, a abrir el testamento, en un despacho contiguo, habían hecho una junta de accionistas de IASA para sacar 140 millones de euros de patrimonio y dejarlo en 50.000 euros. Inocentemente firmamos el testamento porque desconocíamos que apenas unos minutos antes, usando su mayoría en la sociedad de cartera, iban a quedarse con parte del dinero. Fuimos sin abogados porque jamás pensamos que Martínez Echevarría, presidente de IASA y albacea, nos haría algo así. Tardaron tres años en darnos el primer dividendo, a finales de 2017. Queremos que reintegren el dinero.

- P: ¿Cree que ha sido una venganza porque su madre, doña Eustaquia, nunca consintió el matrimonio de su hermano con María José Guil ni las aceptó a ellas?
- R: No sé si es una venganza personal. Es cierto que mi madre no autorizó el matrimonio por la historia de María José, que ya había estada casada con un señor llamado Camorra, que tenía dos hijas. Mi hermano se casó cuando tenía 60 años, en secreto, en una capilla de un convento, con solo cinco personas. No nos enteramos ni que se habían casado porque él no se atrevió a decírselo y siguió viviendo en nuestra casa hasta varios meses después. Nunca vinieron a ningún acto de nuestra familia porque mi madre no lo permitió.

- P: ¿Y usted?
- R: Yo no actúo por venganza. Lo hago por defender lo que es mío, la sangre. A mí me gusta el dinero, como a todos, pero hay cosas que no se pueden comprar. Dimas nunca ha querido poner ninguna demanda porque no ha querido airear estas cosas. Y no demandamos a El Corte Inglés, demandamos a IASA, porque para nosotros El Corte Inglés es sagrado.

- P: ¿Es un tema de piel, de sangre?
- R: Ellas se creen las dueñas de El Corte Inglés, pero solo tienen el 15%. Es un expolio. Así está El Corte Inglés. Su sangre es Camorra, no Álvarez. Ellas no entraron en la empresa hasta que tuvieron cuarenta y tantos años e Isidoro nunca las quiso dentro para nada.

- P: Pero ellas mandan con ese 15% porque tienen el control de la Fundación Ramón Areces, dueña del 37% del capital. ¿Por qué piensa que quieren la salida de Dimas Gimeno de la presidencia y del consejo?
- R: Porque Dimas ha denunciado la corrupción interna, como la del departamento de seguridad que dirige Juan Carlos Cernuda, tras recibir unos anónimos con muchos detalles. Carlos Martínez Echevarría y Leopoldo Lasaga (el otro directivo coetáneo de Isidoro) nos han traicionado porque ellos quieren salir inmaculados de todo esto. Pero si mi hijo sale de El Corte Inglés saldrán cosas muy feas. Eso no puede quedar así.

- P: ¿Hay posibilidad de algún tipo de acuerdo para solucionar esta crisis familiar?
- R: Dimas sigue y sigue empeñado en llegar a un acuerdo. Quieren hacer lo mismo que con Leopoldo del Nogal, al que le pagaron una gran cantidad para que se fuera. Pero, aunque mi hijo quisiera llegar a un acuerdo, yo no lo firmaré porque tengo que defender los derechos de César Rodríguez (su abuelo), Ramón Areces, Isidoro y los 100.000 empleados. ¿Sabes los empleados que se han dejado la vida ahí? Víctor del Pozo, el consejero delegado, le ha dicho a mi hijo Miguel Ángel que yo acepte el dinero y me vaya a comprar bolsos. Ya hemos rechazado mucho dinero.

- P: ¿Considera que Marta está preparada para ser presidenta de El Corte Inglés, como se ha postulado para sustituir a tu hijo?
- R: Si Isidoro hubiera querido que sus hijas estuvieran en el consejo de administración, las hubiera nombrado justo antes de la junta general de accionistas del 31 de agosto de 2014, quince días antes de su muerte. Estas señoras echaron a todos los directivos que eran afines al presidente para tener todo el control. Víctor del Pozo los ha echado porque no les gusta a ellas. Hace un año estaba comprando yogures y Jesús Nuño de la Rosa (el otro consejero delegado) está ahí por lo que está.

- P: ¿Y su hijo?
- R: Ellas no quieren que se vaya Dimas, sino todos. Mi otro hijo, Miguel Ángel, que dirige el centro de San José de Valderas (Madrid) y mi yerno. Tenemos que desaparecer. Nos tenemos que ir todos. No solo del consejo de El Corte Inglés, también de la Fundación Ramón Areces, de la que Dimas y mi hermano César son patronos. ¿Pero qué hemos hecho?

- P: Supongo que ellas se sienten ofendidas por el trato que le dieron ustedes.
- R: Supongo, pero no lo sé. Yo no he vuelto a hablar con ellas. Yo he aguantado mucho, han dicho muchas cosas feas de mis hijos. A Dimas lo han machacado y hasta se han ensañado con él. Pero he querido aguantar para ver si llegábamos a un acuerdo. Dimas no va a estar en el consejo. O sigue de presidente, o lo echan. El no va a renunciar.

- P: ¿Se han sentado con otros socios para buscar una solución?
- R: Sí, pero cada uno tiene sus intereses. Los García Miranda —9%— son varios hermanos y alguno quiere vender. Los Areces, con otro casi 10%, están esperando. Y Qatar, si yo fuera Qatar, esperaría. Hará lo que le convenga, aguardando a quedarse con el chollo. Se quedará finalmente con El Corte Inglés, igual que hicieron con Harrods. Primero compraron el 10% y después se quedaron con todo.

- P: ¿Y con ellas?
- R: Sí. Ha vuelto a haber reuniones con Lasaga y Martínez Echevarría para buscar una solución. Pero Dimas no se va a ir. Lo tienen que echar. Que se mojen, que lo cesen. Y entonces va a haber cosas muy gordas.

- P: ¿Qué salida tiene El Corte Inglés?
- R: La única salida de El Corte Inglés es el lujo porque por abajo no puede competir con las otras empresas (en referencia a las marcas del Grupo Inditex). Tiene que ir al modelo de Lafayette, a Harrods. Dimas quería hacer del centro de Castellana el mayor centro de lujo de Madrid.

- P: ¿Qué diría su hermano de todo esto?
- R. Que luchara. Mi hermano nunca lo hubiera permitido. El pensaba que nosotros no teníamos que pagar los impuestos de la herencia. Carlos Martínez Echevarría no se lo dijo. Nosotros estuvimos presentes en todos los testamentos, en los trece, y ellas solo en el último. Les deja estrictamente la herencia legítima porque las adoptó en 2004, cuando ya estaban casadas y con hijos. Si ellas no hubieran hecho nada de esto, nunca hubiéramos demandado.

'Navantia' Turbinas entrega un equipo para el primer logístico australiano

EL FERROL.-La fábrica de Turbinas de Navantia acaba de culminar la fabricación del engranaje reductor para el primero de los dos buques de aprovisionamiento en combate para la Armada de Australia. 

En la factoría del astillero ferrolano culminaron también las pruebas de aceptación en fábrica, con presencia de representantes del cliente y de la certificadora Lloyd’s Register, según La Voz de Galicia.
La Fábrica de Turbinas participa en este programa suministrando las cajas reductoras y los timones para ambos buques, de forma similar a lo realizado en el programa de los destructores (AWD) clase Hobart, que se construyen en el astillero ASC de Adelaide con diseño y tecnología de Navantia.
También participa en el desarrollo de las F-110.

La justicia europea decidirá el futuro de 100.000 empleados públicos con contrato temporal

MADRID.- El Tribunal de Justicia Europeo (TJUE) tiene entre sus manos un importante dictamen que podría suponer un vuelco en la situación que viven más de 100.000 empleados públicos en nuestro país. Se trata de la resolución que determinará si es posible hacer fijo al personal sanitario temporal que viene encadenando contratos temporales desde hace más de tres años, recoge www.vozpopuli.com.

La demanda, elevada a instancias comunitarias, surge a raíz del caso de un informático del SERMAS (Servicio Madrileño de Salud) que permanece en situación de estatutario interino desde hace más de 17 años. Una situación que comparten miles de empleados del sector público y que puede suponer, si el TJUE resuelve en este sentido, que la Administración española esté incurriendo desde hace años en una contratación en fraude de ley.
El pasado mes de marzo, el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo nº 8 de Madrid planteó la cuestión prejudicial al Tribunal de Justicia Europeo, cuya decisión será vinculante. 
El juzgado madrileño, según han informado los sindicatos, trasladó al tribunal europeo si debe conceder la fijeza al personal estatutario temporal (interino, eventual o de sustitución) en situación de abuso de temporalidad como es el caso del procedimiento judicial en cuestión, el del informático del Servicio Madrileño de Salud que permaneció en el mismo puesto durante más de 17 años.
Sus representantes legales pidieron que se le reconociera una condición equiparable a la del personal estatutario fijo en cuanto a las condiciones de cese (y en el resto de condiciones de trabajo) como sanción adecuada, aplicando una normativa básica europea, la Directiva 1999/70/CE, a su situación de "evidente abuso de contratación temporal por parte de la Administración para satisfacer necesidades que son de obvio carácter permanente".

Tres años como límite de temporalidad 

La directiva europea determina que la temporalidad debe tener un límite -3 años en el caso de los empleados públicos españoles-. Además, las normativas nacionales deben incluir medidas de sanción al empleador que abusa y otras compensatorias para el empleado en situación de abuso de temporalidad.
La jueza que eleva la cuestión al TJUE reconoce en su escrito que "no encuentra norma nacional capaz de alcanzar el objetivo que pretende la Directiva" e indica que la aplicación de la legislación española es "incompatible" con los objetivos marcados en la Directiva Europea contra la temporalidad, de lo que deduce  que en nuestra legislación nacional no se ha acogido la directiva europea o se ha hecho de forma deficiente.
Después de aceptar la cuestión prejudicial, si el Tribunal de Justicia de la Unión Europea se pronuncia de manera favorable obligaría a estabilizar a más de 100.000 empleados públicos de toda la Administración que mantienen la situación de interinidad desde hace más de tres años. Los interinos que se encuentren en esta situación pasarían a ser personal laboral fijo de la Administración sin necesidad de pasar ninguna oposición, con el único requisito de haber permanecido en su puesto durante más de tres años.

Los interinos piden hacer efectiva la transposición

Miles de interinos, constituidos recientemente en una plataforma, denuncian que nuestro país está retrasando "la obligación de transponer la normativa europea en materia de contratación temporal en la Administración Pública -España tenía un plazo de cinco años para hacerlo- a pesar de las diversas sanciones que ha impuesto la Unión Europea por el incumplimiento de su normativa”. 
La Plataforma de Interinos sostiene que, precisamente en base a esa directiva comunitaria, los trabajadores temporales con más de tres años de antigüedad han adquirido derechos y exigen que sus puestos sean convocados a consolidación por concurso de méritos en vez de por ofertas de empleo convencionales (la tradicional oposición).
De ser así, a la ya abundante Oferta de Empleo Público acordada por el Ejecutivo y los sindicatos para los próximos años habría que sumar esta consolidación de plazas que supondría de facto -según las aspiraciones de los interinos- el aumento de los empleados públicos en más de 100.000 personas. Si ya numerosos organismos advierten de las dificultades económicas para mantener el sector, habría que reorganizar de urgencia las cuentas públicas para asumir este sobrecoste.
 Es evidente que si este anexo legal se resuelve en favor de los interinos, las demandas de consolidación de plaza se dispararían. El Tribunal europeo tiene, desde Luxemburgo, las claves para el futuro del sector público.

El Papa invita a la «solidaridad con las personas afectadas por enfermedades graves»

CIUDAD DEL VATICANO.- Sumándose a la «Jornada Nacional del Alivio», instituida en Italia en el 2001, el Papa Francisco ha pedido este domingo «solidaridad con las personas afectadas por enfermedades graves», y ha enviado un saludo a familiares y pacientes reunidos en el hospital Gemelli, donde fue internado muchas veces san Juan Pablo II, tal como recuerda Abc.

Durante su encuentro con veinticinco mil fieles para el rezo del Ángelus en la plaza de San Pedro, el Santo Padre exhortó igualmente a «reconocer también las necesidades espirituales de las personas enfermas graves. Y a estar cerca de ellas, con ternura».
Comentando la fiesta de la Santísima Trinidad, Francisco ha citado una carta de hace casi dos mil años a los cristianos de Roma en la que San Pablo, después de haber «experimentado en primera persona la transformación realizada en él por el Dios-Amor, nos comunica su deseo de que le llamemos "Padre" o mejor "Papá" con la misma confianza total de un niño que se abandona en los brazos de quien le ha dado la vida».


Junto con Dios Hijo, el Papa se ha referido especialmente a Dios Espíritu Santo, «gracias a cuya presencia y fuerza podemos realizar con serenidad la misión de anunciar el Evangelio, ampliando así la comunión con Él y la alegría que de ella proviene», sabiendo que «la alegría es el primer lenguaje del cristiano».
El próximo domingo, festividad del Corpus Christi, el Santo Padre se ausentará por primera vez de Roma para sumarse en Ostia a la procesión que sale de la iglesia de Santa Mónica, la madre de San Agustín-ambos antiguos vecinos de esa localidad portuaria-, hasta llegar a la iglesia de «Nuestra Señora de los Buenos Aires», una advocación que los Trinitarios popularizaron entre los marineros y que daría nombre a la ciudad natal de Francisco.
Con ese desplazamiento para asistir a la procesión del Corpus Christi en una zona periférica, el Papa recuerda que ya lo hizo en 1968 su predecesor Pablo VI, a quien canonizará junto con el arzobispo mártir salvadoreño Oscar Romero, el próximo 14 de octubre en Roma, durante el Sínodo de los Jóvenes.

Miles de personas piden en Madrid el fin de todas las fiestas con toros


MADRID.- Miles de españoles y extranjeros se han manifestado este domingo en el centro de Madrid para reivindicar la abolición de la tauromaquia en todas sus formas, acción que ha contado con unos 500 activistas que han roto banderillas creando una nube roja para representar la sangre de los toros.

La manifestación comenzó en la Puerta del Sol con un espectáculo performance en el que los activistas rompieron banderillas creando una gran nube roja para simbolizar la sangre de los más de 20.000 toros, vacas, vaquillas, novillos y becerros que cada años mueren en festejos taurinos en España.
Laura Gonzalo, la portavoz de la manifestación, ha apuntado que la convocatoria, a la que según los convocantes habrían asistido 40.000 personas, ha sido apoyada por once asociaciones de defensa animal nacionales e internacionales, además de seis organizaciones patrocinadoras.
Asimismo se han adherido más de 170 colectivos procedentes de toda España y de fuera de nuestras fronteras, además del partido político (Equo) y de las Asociación Parlamentaria de Defensa de los Derechos de los Animales (APDDA).
Gonzalo ha explicado que reivindican la eliminación de los espectáculos taurinos de los listados de patrimonio y bien de interés cultural de España, y terminar con toda ayuda con fondos públicos y con la participación de menores de edad.
Los participantes iniciaron el recorrido con una pancarta en la que se podía leer "Tauromaquia es violencia" y "Tú la puedes parar", y lemas como "tauromaquia abolición" o "tauromaquia vergüenza nacional".
Según Gonzalo, la manifestación pretende continuar un "camino que ya se ha iniciado en España para poner fin con cualquier tipo de festejo que se realiza con animales".
Victoria Lacalle, colaboradora de Gladiadores por la Paz y sicóloga experta en temas de violencia, ha declarado que la "tauromaquia representa el talón de Aquiles del maltrato hacia los animales, y acabar con ello significaría acabar con otras formas de violencia hacia humanos y otros animales".
Que esto esté permitido socialmente influye en el resto de la sociedad a la hora de que "ese mismo tipo de violencia se puede ejercer hacia otros animales o seres vulnerables como puede ser considerados los niños o las mujeres", ha asegurado Lacalle.
Varias personas del mundo de la cultura han mostrado su apoyo a la manifestación, entre ellas, la cantante de Amistades Peligrosas Cristina del Valle, la actriz y cantante Beatriz Rico, la escritora Rosa Montero, la cantante Mari de Chambao y la actriz Emma Ozores.
También la actriz María Briones, el humorista francés Rémi Gaillard, los creadores de EcoCirco (circo sin animales en Francia) André-Joseph y Sandrine Bouglion, y la escritora y periodista Pilar Eyre, además de los eurodiputados de Equo Florent Marcellesi, Juantxo López de Uralde y Rosa Martínez, entre otros.
Asimismo, el fundador del Partido antiespecista REV de Francia, Aymeric Caron, y del Partido Animalista contra el maltrato animal (PACMA).
Entre los participantes se encontraban el cofundador de Ecologistas en Acción, Theo Oberhuber, el portavoz de la Asociación Parlamentaria por la Defensa de los Animales, Chesús Yuste.
El recorrido ha llegado hasta la explanada del Museo Reina Sofía, donde se han leído manifiestos.

La Región supera los 98.000 autónomos que se marcó como meta

MURCIA.- La Región de Murcia ya se encuentra por encima del objetivo anual de trabajadores autónomos establecido por la Consejería de Empleo, Universidades, Empresa y Medio Ambiente. Desde el Servicio Regional de Empleo y Formación (SEF) se fijó la cifra de 97.900 autónomos como referencia a alcanzar de cara al cierre de 2018, partiendo de los 97.061 con los que concluyó diciembre de 2017. Sin embargo, esa marca ya se ha superado.

El ritmo de altas en la Seguridad Social de trabajadores por cuenta propia ha superado las expectativas en el primer cuatrimestre del año, lo que ha propiciado que a la finalización de abril ya se contabilicen 98.802 autónomos, es decir, 902 más que la cifra estimada para todo el año. Así, en los primeros cuatro meses de 2018 se han ganado 1.741 autónomos, a un ritmo de 435 cada mes y 14 cada día.
El incremento de la cifra total de afiliados de este colectivo desde enero hasta abril es, por tanto, del 1,79 por ciento, un dato que está por encima de la subida media en el conjunto del país, que ha sido del 1,48 por ciento. Para la Región de Murcia se trata de la subida más intensa de los últimos diez años en un primer cuatrimestre.
El consejero de Empleo, Universidades, Empresa y Medio Ambiente, Javier Celdrán, destacó que "es fundamental mantener estos niveles de crecimiento del autoempleo, porque los autónomos son un colectivo prioritario para este Gobierno. Los trabajadores por cuenta propia han sido protagonistas de la recuperación y, de hecho, la mejor forma de fortalecer la recuperación es fortalecer a los autónomos".
La Consejería de Empleo, a través del SEF, mantiene abiertas dos líneas para facilitar el establecimiento como autónomos de personas desempleadas. Una de ellas son las ayudas de entre 3.000 y 9.900 euros a aquellas personas sin empleo que se den de alta como autónomos y justifiquen haber realizado inversiones en inmovilizado material necesarias para el desarrollo de la actividad, por importe no inferior 2.500 euros.
Además, también se encuentra en vigor la Cuota Cero para que ni jóvenes inscritos en Garantía Juvenil ni parados de larga duración tengan que pagar tarifa de autónomos en su primer año de actividad. Igualmente, estas personas reciben una ayuda para el inicio de la actividad que oscila entre 2.000 y 3.500 euros.
Concretamente, para los hombres es de 2.000 euros; si el beneficiario es mujer, la ayuda es de 2.500 euros; y si presenta discapacidad o está en riesgo de exclusión social, asciende a 3.500 euros.
La Consejería también cuenta con una Oficina para la Defensa del Autónomo y la pyme (DEPA), cuyo principal objetivo es el de intermediar entre la Administración regional y las pymes y autónomos en todo lo concerniente a la tramitación de los procedimientos administrativos para el inicio, consolidación y desarrollo de la actividad empresarial.
Esta Oficina respondió antes de 48 horas al 99 por ciento de consultas que recibió en 2017. Así, el balance de datos pone de manifiesto que 96 de las 97 solicitudes a esta unidad fueron atendidas en ese plazo.
Las consultas pueden ser iniciadas por teléfono, por correo electrónico (escribiendo a la dirección depa@carm.es) y a través de la sede electrónica de la Administración autonómica (sede.carm.es). Además, también se encuentra habilitada una cuenta de Twitter (@DEPA_Murcia), que permite una interacción con la Oficina.

Chubascos ocasionalmente tormentosos hoy en la Región

MURCIA.- Cielos nubosos hoy en la Región de Murcia, con chubascos ocasionalmente acompañados de tormentas, más intensos en el Noroeste y poco probables en el litoral, con apertura de claros al final del día y brumas matinales en el Campo de Cartagena.

Temperaturas mínimas con pocos cambios y máximas en descenso.
Vientos variables.

Nada personal, solo corrupción / Ángel Montiel *

En España no existe una mafia estructurada a lo Capone porque ese lugar lo ocupan determinados políticos. En Colombia, por ejemplo, el Estado de Bienestar fue una construcción de Pablo Escobar, que sustituía al Estado. En nuestro país, el Estado sustituye a la mafia. Es preferible siempre la mafia, porque queda el recurso de que ésta sea perseguida por el Estado, pero ¿qué esperanza cabe cuando la mafia es el Estado?

Ejemplo: lean, antes de vomitar, el artículo que publicaba ayer la ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, en La Razón. Empezaba así: «En estos mismos momentos en los que usted lee este artículo, hay miles de militares en alerta, en guardia permanente, sin descanso y sin distracción, con la única misión de protegernos, de frenar, prevenir e incluso combatir cualquier amenaza que se pueda cernir sobre nuestros hogares».

Así es. Pero a la secretaria general del PP, que proseguía la redacción de su artículo con la retórica consabida, le faltó apuntar a continuación de ese párrafo: «Y mientras hay militares que ponen en riesgo su vida por este país y usted sigue leyendo este artículo, hay gente de mi partido que se está forrando de manera ilegal gracias a la protección que les damos desde Génova 13, según estiman los jueces. ¿Qué deberían pensar de nosotros estos militares?». 

Podría referirse igualmente a los parados, a los empleados precarios, a los trabajadores fijos con el sueldo reducido, incluso a los ciudadanos acomodados que pagan sus impuestos y exigen una Administración pública decente. 

Hasta podríamos perdonarle a la secretaria general del PP que hubiera hecho un apunte a pie de página, en letra pequeña: «Mi marido no es uno de los que trafican con influencias para pagar nuestro chalé de dos millones de euros mientras envío a los soldados a misiones peligrosas; si acaso, el de la vicepresidenta Soraya».

Fuera de bromas, encontrar en algún lugar un artículo firmado por Cospedal con el título Servir a España al día siguiente de la publicación de la sentencia sobre la Gürtel es una provocación intelectual. Cuando alguno de estos patriotas de opereta pronuncia la palabra España, lo recomendable (incluso o especialmente para los propios militantes de base del PP) es echarse las manos a las carteras. 

La doctrina del PP sobre los supuestos de corrupción consistía en relegar a las sentencias judiciales la toma de responsabilidades políticas, pero llegado el caso, ni con éstas. Nada importa que un tribunal de Justicia haya dictaminado que el presidente del Gobierno de España (e incluso de Esss-paaa-ññña) carece de credibilidad en su testimonio jurado, de modo que será un iluso quien espere alguna verdad en sus mítines. Su propósito, el de Rajoy, es seguir gobernando, porque la práctica política indica que a una mayoría de ciudadanos no les importa que les roben, siempre que los ladrones sean del PP. 

En este contexto, el crítico más destacado a la resolución judicial sobre la corrupción del PP ha dido el presidente del Gobierno murciano, Fernando López Miras. Su ironía no ha sido bien entendida, a no ser que en su intención no existiera ese propósito, lo cual sería muy grave. Cuando dijo, tras conocer la sentencia de la Gürtel que, mientras se producían los acontecimientos que han dado lugar a ella, él se encontraba tocando la flauta dulce en el colegio de los franciscanos, en realidad lo que vino a sugerir, queriendo o sin querer, es que si hay alguien a quien registrar debe ser Rajoy. 

López Miras era un espíritu puro en los tiempos en que el gallego cobraba sobresueldos de la cuenta B en cajas de puros, gratificando después al benefactor con el consejo de «Luis, sé fuerte». De modo que, en el fondo, ese ´yo no estaba allí´ es una denuncia implícita, aunque involuntaria, a quienes sí estaban. Lo curioso es que aun aceptando ignorancia de la corrupción estructural como animal marítimo, una vez que López Miras se licenció en flauta y maduró lo suficiente para elegir una opción política se decidió por el partido de la Gürtel. No debió faltarle información, incluso si solo fuera lector de La Razón. A no ser que tengamos un presidente que carezca de nociones sobre el pasado inmediato, lo cual sería muy preocupante.

Los murcianos tenemos la sensación de que López Miras nunca existió. Todo lo que gravita sobre la política actual le es ajeno. Hace poco aseguró que «está claro que mi Gobierno no tiene responsabilidad sobre lo que se haya hecho en el Mar Menor». Claro. Ni sobre cualquier otra cosa que haya ocurrido hace más de un año. Pero es el presidente de la marca que arrastra un largo historial de corrupción y de incompetencias. ¿Asume el pasado o lo denuncia? 

Esta es la clave, aunque de quien se convirtió en el primer fervoroso defensor de la decencia política de Cristina Cifuentes no se puede esperar mucho sobre su intuición política, y menos sobre su independencia respecto al consignatario de la ´organización criminal´ en que para la Justicia consiste el PP.¿O es que el truco consiste en cambiar de presidente en Murcia cuando las cosas se ponen feas para que alguien llegue de nuevas como si nada fuera con él? Nada, salvo la estructura corrupta y la impregnación social de la marca dopada ante los sectores cautivos.

López Miras ha estado muy atinado, a su pesar, al calificar a los protagonistas de la trama gürteliana con que se ha financiado el partido al que pertenece de ´sinvergüenzas´. Pero ¿quiénes son los sinvergüenzas? ¿Los que hacían el trabajo sucio, instrumental, o quienes daban a éstos cobijo en la cueva de ladrones de Génova 13 y se han ido de rositas, aunque desacreditados políticamente por la sentencia judicial? ¿Es más sinvergüenza Bárcenas por llevar la cuenta B del PP o el presidente del partido que autorizó la destrucción de los ordenadores en que ésta se registraba una vez que fue descubierta? 

Como la respuesta es obvia, hemos de deducir que López Miras ha llamado sinvergüenza a Rajoy. Con un par. Ah ¿que es un malentendido?

A estas alturas, la única pregunta a la que hay que responder es: ¿perteneces a la mafia o la denuncias? Y es urgente que se sepa de qué lado se está.


(*) Columnista


Eduardo Zaplana, el rey del mambo / Enric Vila *

Eduardo Zaplana fue una especie de Albert Rivera antes de Ciudadanos. Nacido en Murcia en 1957, su carrera no se explica sin la mediocridad de las élites locales y la necesidad de Madrid de ofrecer una épica española en territorio hostil, a través de un aventurero simpaticote y seductor.

Ambicioso y hedonista, llegó a ser el dueño casi absoluto de la Comunidad Valenciana. Con el apoyo de Las Provincias y de un Aznar cada vez más poderoso, estableció una red clientelar densísima basada en el capitalismo de amiguitos y en la política franquista del coros y danzas, pasada por un barniz de modernidad chavacana, pero llamativa.

Como condottiere al servicio de Madrid, disfrutó de tanta impunidad que la noticia de su encarcelamiento ha generado una mezcla de hilaridad y de sorpresa. Alfons López Tena recuerda que, en tiempo de Zapatero, los miedos de la oposición valenciana pararon una sátira teatral de su vida basada en una obra de Brecht que explica el ascenso de Hitler a través de la historia de un gángster de Chicago.

La ascensión de Zaplana empezó en 1991 cuando su suegro falangista le compró la alcaldía de Benidorm a través de una tránsfuga nombrada Maruja la bienpagá, que en el 2009 todavía cobraba del PP. En Benidorm ensayó la política turbia y propagandística que después aplicaría a la Generalitat para poder repartir beneficios a través de la inflación de sobrecostes.

Cuando ETA asesinó a Manuel Broseta en 1992 quedó un vacío de liderazgo en la derecha del país y Zaplana lo llenó con el apoyo de Aznar y de algunos caciques locales. En 1995, era investido presidente con los votos de Unión Valenciana, que pronto quedaría disuelta en el magma de nuevos intereses creados por el PP. El presidente valenciano impulsó una política urbanizadora que ha llevado a mucha gente a la prisión y que acabó con la intervención de la Unión Europea.

La cultura del saqueo, tan viva en un territorio marcado por la reconquista, se asoció a una idea barata de triunfador, que Zaplana representaba de buen grado y consciente de los votos que le daba. El contraste con el amodorramiento de la anterior etapa socialista le dio una aureola carismática y moderna. Los constructores multiplicaron con él los beneficios y eso también contribuyó a extender mucha alegría.

Zaplana despertó una euforia grosera, frívola y cofoista, en un momento que la economía española vivía al ritmo frenético de la ruta del bacalao. El presidente del Valencia, Paco Roig, le dijo un día, entre carcajadas: "Presidente ahora voy diciendo que eres maricón para compensar las historias que circulan sobre tus mujeres." Cuando el presidente dejó embarazada a una de las consejeras de su gobierno envió al arzobispo a hablar con su mujer para convencerla de la importancia de la familia.

Obsesionado para ir a Madrid, promovió proyectos como Tierra Mítica o la Ciudad de la Luz de Alicante que se acabaron hundiendo, pero que de momento le permitían satisfacer su corte y dar una imagen de presidente dinamizador y business-friendly. Las grandes escenografías sin base y la atracción de figuras internacionales decaídas como Julio Iglesias o Yoko Ono eran celebradas por Canal 9, que le reía, todas las gracias.

En 2002 Aznar lo nombró ministro de Trabajo. Para no ceder el poder en un solo sucesor que le pudiera coger el control del país se marchó a Madrid dejando una guerra civil dentro del partido. Como portavoz del gobierno de Aznar lideró, junto con Acebes, la estrategia del PP de atribuir el atentado del 11-M a ETA.

Cuando era portavoz del grupo de Rajoy, en tiempo de Zapatero, pidió permiso en la mesa del Congreso para hacerse un jacuzzi en el despacho: "Ya sabes que después de algunas visitas hay que ducharse", le dijo a un diputado, tratando de convencerlo de que pidiera también hacerse uno.

Una vez fracasado el intento de desbancar a Rajoy, justo cuando España empezaba a pagar las facturas de los desenfrenos, en el 2008 dejó la política. El PP enseguida lo colocó en  Telefónica y de presidente del Círculo Siglo XXI. En Valencia había perdido la batalla contra Francisco Camps y Rita Barberá y muchos de sus efectivos fueron pasando a Ciutadans, mientras él se operaba la nariz, los ojos y asistía a sesiones de rayos UVA.

En el 2011, murió uno de sus hijos, y en el 2015 le fue diagnosticada una leucemia de la cual se recuperó, después de haber estado enfermo terminal. La cruzada contra la corrupción hizo que mucha gente se preguntara cómo era posible que todos sus antiguos colaboradores fueran cayendo menos él. 

Cuando todo el mundo daba por hecho que saldría intocado, un imán de la mezquita de Valencia encontró un montón de documentos en un falso techo de un piso de lujo que había sido propiedad suya, cuando era el rey del mambo de Valencia.

En el peor momento de su vida, ahora que la leucemia le había reaparecido y a su mujer se le había declarado también una, la policía lo detuvo cuando iba a quimioterapia. El juez lo ha hecho ingresar en la prisión sin fianza acusado de delitos fiscales y pertenencia a banda criminal.


(*) Periodista


Memento mori, Zaplana / Antonia Moreno *

La detención de Zaplana ha sorprendido tanto como era esperada. No es necesario recordar la influencia, la capacidad de seducción y el poder que acumuló el cartagenero que consiguió la alcaldía de Benidorm tras una buena boda, un “marujazo”-censura y convenientes amistades de nuevos ricos que le prometieron su sueño: un Opel Vectra de 16 válvulas.

La leyenda sobre su eterno bronceado, las camisas de 200 euros compradas por docenas, su sonrisa blanqueada, sus affaires femeninos, la idolatría de su tropa...ha forjado la imagen del icono de una época que comenzó con él: el nuevo rico, el “puto amo”, el poderoso, el intocable, aquel a quien todos quieren parecerse y quieren acercarse. No hubo nadie que se atreviera a susurrarle memento mori?


En la Vega Baja sabemos mucho de Zaplana. Como un Cesar intocable también aquí estableció un campamento de legionarios segundones que jamas usaron la gomina con tanta gracia. Hace unos meses, se filtró una foto a la prensa en la que Zaplana comía en el restaurante El Chanos de Molins con algunos de sus acólitos territoriales en la Vega Baja. Entre ellos, el ex alcalde de Callosa Javier Pérez Trigueros, el ex alcalde de Dolores, concejales y pedáneos del PP de Orihuela y la ex alcaldesa Monica Lorente.

En la comarca de la Vega Baja, Zaplana era dios y competir con dios en esta comarca tiene mérito. Cohecho, prevaricación, tráfico de influencias, amaños, fraudes, extorsión, son sólo algunos de los delitos que por aquí tiene la soldadesca zaplanista ya en espera de juicio. Ahora que ha caído el águila, los polluelos sentirán el verdadero vacío del banquillo.

Se acaba toda una época pero comienza otra. Decenas de concejales y políticos zaplanistas se han refugiado en las tropas de Ciudadanos como células durmientes a la espera del fruto. La recolección electoral de la siembra planificada por Aznar y Zaplana en el partido de Rivera será su manera de perpetuar su alargada sombra. Lo que no sabe Rivera, si es que si aspira a ser el nuevo Zaplana de la política española, es que ni en el fondo ni en la forma tiene nada que hacer. 

Solo alguien como Eduardo luce con glamour la pulserita de bandera española y luego corretea sus negocios por el extranjero con tanta “soltura”económica. Sólo alguien como Zaplana pacta con Pujol sin que se le descolore el rojigualda de la muñeca. Sólo alguien como Zaplana tiene el cuajo de imponer el requisito lingüístico valenciano para ser profesor y consigue que se señale a los de enfrente. Sólo Zaplana sabe ser Zaplana. 

Sus valientes legionarios están esperando el banquillo o la cárcel. Nada queda de aquellas huestes gloriosas; si acaso, títulos honoríficos y fotos solemnes con fajines purpurados, humillados símbolos en sus gaznates y pompa hortera de serviles palanganeros.

Algunos zaplanistas han logrado, como pulgas parasitarias, saltar de perro, saltar de amo. Podéis reconocerlos con facilidad, de partido en partido, saltaron hasta Ciudadanos. Qué le vamos a hacer. Siempre ha pasado. Espero que Rivera vigile bien su campamento. El Opel Vectra 16 válvulas se ha quedado muy anticuado. A saber qué modelo de coche les representa.

El resto, soledad y tierra saqueada. Una Vega Baja polvorienta de sueños, aletargada por miles de votantes del PP que naufragan estupefactos y cabreados por tanta ilusión traicionada, una Vega Baja que, por fin, ha empezado a disfrutar de gobiernos decentes en sus municipios tras las últimas elecciones. Ha costado mucho desenmascararles. Y hay que seguir señalando a los emboscados, que los hay. Pase lo que pase, por favor, estemos atentos, siguen ahí. Aprendamos.


(*) Periodista


Prioritario: Atajar la corrupción del PP y la de sus cómplices / Rosa María Artal *

La sentencia de la Gürtel ha tenido consecuencias políticas. El PSOE ha cumplido lo que era ya un deber ineludible y ha estado a la altura de las circunstancias presentando una moción de censura a Mariano Rajoy. Bien encauzada, al proponer un  gobierno de Pedro Sánchez que repare algunas graves fracturas sociales, para, después, convocar elecciones. Unidos Podemos le ha ofrecido "apoyo incondicional". Los números están muy justos y obligan, en los diferentes bandos, a la flexibilidad. Es esencial extremar la atención porque el problema de la corrupción no acaba en el PP como partido.

Tenemos el país que tenemos, la sociedad que tenemos profundamente afectada por tantos años de corrupción y de mirar para otro lado. Hay infección y contagio. Muchas rémoras se arrastran y no se ve un horizonte idílico, pero  cualquier opción es mejor que vivir en este estado que ha corrompido hasta la vida diaria. Es indispensable saber que la trama viene actuando desde diversos flancos y que nuestra única esperanza es la decencia. Nada menos. Y, por tanto, desactivar la engrasada maquinaria corrupta que acompaña al PP, con información, con denuncias, apelando a la ética, a la honestidad.  

La corrupción del PP no hubiera sido posible sin todos aquellos que la apoyan. Los corruptores empresariales, los cómplices mediáticos y la propia sociedad que sustenta estas prácticas delictivas con su silencio e incluso sus votos. La sentencia de la Gürtel está sirviendo de catalizador para detectarlos con toda nitidez. Es uno de los aspectos nada secundario que acarrea la decisión judicial. Y no tienen más que ver las portadas de los diarios tradicionales para saberlo. La postura de Rajoy, sus tenebrosas amenazas, su desprecio a Pedro Sánchez priman de tal forma que la condena por corrupción parece algo irrelevante.  Una temible crisis institucional  nos  golpea y es por la moción de censura.
 
El PP ha reaccionado con las técnicas habituales. Las conocemos. Acaba de pasar por el proceso Cristina Cifuentes como antes lo hiciera José Manuel Soria, salvando las distancias. Es un protocolo reglado. Minimizar la acusación (en este caso la sentencia), mentir sin freno, agarrarse a  presuntos eximentes: “casi no es una condena” –lo dijo Hernando- y al voto particular de un magistrado. A continuación,  esparcir basura, atacar y despreciar a los oponentes políticos que les critican,  para seguir encandilando a los del “todos lo hacen”.  Creer este cuento a estas alturas, tras toda una vida de corrupción institucionalizada -desde 1989 ha sido acreditada judicialmente-, no cuela. No existe gente tan estúpida, tan corrupta en su permisividad, sí.

El protocolo debe incluir ocuparse de nombramientos judiciales. En 9 años de instrucción han sufrido los rigores del PP en el poder policías, fiscales y jueces. El magistrado del voto particular, el juez Ángel Hurtado, defendió que estuvieran en el tribunal con él los constantes Enrique López y Concepción Espejel, se opuso a que fueran apartados por su vinculación al PP,  intentó sin éxito que Rajoy no fuera citado como testigo y retrasó la publicación de la sentencia hasta, casualmente, la aprobación en el Congreso de los presupuestos.

Los más destacados lavanderos del PP que operan en los medios quedan en evidencia al leer la sentencia. Hay que saber que existen y valorar su papel, son tentáculos del propio Partido Popular. La sentencia habla de “corrupción institucional a través de mecanismos de manipulación de la contratación pública”. 

Del procedimiento: “Mediante el inflado de precios que se cobraban de las distintas administraciones públicas afectadas”. De la finalidad “la obtención ilícita de importantes beneficios económicos a costa del erario público”. Del alcance “La sentencia acumula 28 delitos de prevaricación, 24 de cohecho, 26 de blanqueo, 36 de malversación de fondos públicos y 20 contra la Hacienda pública”. Es solo una parte de lo que extrae como  hitos probados, el director de eldiario.es Ignacio Escolar.

El periodista Carlos Hernández sintetiza las coordenadas del PP: “Rajoy ha mentido en sede judicial, en sede parlamentaria y en los medios de comunicación”. “El PP ha hecho de la mentira su único medio de supervivencia.” “El PP usó su caja B para pagar a periodistas mercenarios”. Acreditado el caso de la empresa de Jimenez Losantos, la ultraderechista Libertad Digital, ¿cuánto más habrá por lo que vemos con solo abrir los ojos? Rajoy  siempre estuvo ahí. Hay un M.Rajoy que cobró. La Caja B esconde muchas mordidas en forma de sobre. 

Ahí siguen agitando sus puñitos los seguidores de esa pléyade de periodistas y tertulianos, contratados para echar colonia sobre la basura del PP y distraer de la verdad una y otra vez. Para hacer dudar al menos a los que quieren creer, no saber.  Hacen caja y las empresas que los llaman hacen caja con ellos. Es uno de los principales daños que estamos sufriendo. Cuando la opinión no es tal sino una venta de un producto defectuoso.

Tenemos un buen surtido en pocas horas. Consignas del PP, tal cual, sin cambiar ni una coma,  y las de cosecha propia. El Tribunal se ha excedido. A ver si lo arregla el Supremo. La recuperación económica del PP, que también es mala suerte recién publicado el informe del Banco de España que señala graves lagunas.   Luego siempre ganan las elecciones, sin mencionar el dopaje de la corrupción. Penas durísimas, mayores que por violaciones o asesinatos.  Es falso. 

Y llama la atención que se atrevan a decir eso por un micrófono. La corrupción mata, viola, daña. Las opiniones decentes deben hacer ver esa relación o al menos no disuadirla. Los recortes en sanidad, matan. Los copagos farmacéuticos para quienes no pueden costearlos, también. El frío también. La precariedad, la angustia por el permanente temor a perder el empleo. Es repugnante que se desligue la corrupción de sus consecuencias.

El portavoz del PP Martínez Maíllo y el propio  presidente Rajoy han insistido mucho en que esta moción debilita a España. Las páginas de los medios internacionales están llenas de la condena sin precedentes a un partido político en el gobierno por sus sucias prácticas. Y deben sentirse atónitos de ver las tragaderas morales de buena parte de la sociedad española y algunos de sus políticos y periodistas.

Con aires de superioridad,  ambos dirigentes del PP se han referido a la mochila con la que cargaría Pedro Sánchez: los independentistas y Podemos. Los dos cocos para asustar a los españolistas que traguen bien el robo del dinero de todos. Nada deslegitima más a un partido que la corrupción, aprovecharse de los cargos públicos para robar a los ciudadanos. Y de esos tienen unos cuantos en el PP, además de su condena explícita como partido.

A Pedro Sánchez le han caído todas las iras. El PP se ha mostrado irritado con su decisión. Cambia de opinión. Como Rajoy o  Albert Rivera, en modo extremo. Como Pablo Iglesias o Irene Montero.  Pero el ojo mediático derecho solo ve incoherencias en la izquierda. No ve, parece, ni los daños sociales de la corrupción.  Quizás porque forma parte de ella.

Ciudadanos ha quedado descolocado. No apoyará la moción de censura del PSOE. Le vienen mejor elecciones aunque en Madrid no tomara esa postura. Un gobierno, más o menos progresista, que corte el grifo a tanta corrupción, a tanta arbitrariedad,  tanta potenciación de la desigualdad, que devuelva la libertad de expresión al menos a RTVE, dejaría muy en evidencia el mensaje único de Ciudadanos del "ay, se rompe España", común al PP. 

Parece un sueño. Igual se queda en eso. Vistas las reacciones del clan dominante, lo van a poner muy difícil. De momento, disponemos de una rara oportunidad para limpiar las cloacas y desalojar a una derecha que nos ha llenado de inmundicia la España que tanto dicen amar. Inconvenientes habrá, los lavanderos mediáticos harán horas extra para presentar un PP aceptable. Las armas electorales sucias ya se han visto desde el primer minuto. La maquinaria trabaja a todo gas. 

Para que la Moción triunfe y se consolide, todos deberán aprender de errores pasados. Y sumar, porque lo básico es salir del pozo. Quién sabe si con aires más limpios, se recupera la dignidad y la decencia que no toda la sociedad atesora. Muchos deberían hacerse ese favor, hacérnoslo a todos.


(*) Periodista


Rajoy furioso y asustado / Pablo Sebastián *

Las trituradoras de papel del Palacio de la Moncloa van a ser engrasadas y puestas a punto para que el día de la mudanza de Mariano Rajoy, que está al llegar, no queden rastros de los secretos que se tramaron en la residencia de la Presidencia del Gobierno de España. La que Rajoy ejerció los últimos ocho años con implacable autoritarismo (incluso con los suyos), sin respeto a la democracia y libertades y sentado sobre un barril repleto de pólvora de corrupción del PP.

La vomitona de insultos y descalificaciones que ha lanzado Rajoy en contra  de Pedro Sánchez por haberle presentado una merecida moción de censura tras conocerse la sentencia del caso Gürtel y el repugnante argumentarlo del PP prueban de la furia y miedo de Rajoy a perder el poder y a sentarse ante un juez por la corrupción.

Acababa de conseguir don Mariano un ‘triunfo político’ con la aprobación de los Presupuestos de 2018 haciendo concesiones a los nacionalistas que ahora demoniza como aliados de Sánchez. Pero, ironía del destino, esos Presupuestos se pueden convertir en un seguro para que Sánchez pueda agotar la legislatura como presidente del Gobierno hasta mediados de 2020.

Los Presupuestos de Rajoy fueron flor de un día. Y puede que no habrían sido aprobados si la sentencia de Gürtel (secuestrada unos día por Rajoy), se hubiera publicado antes como estaba previsto. Pero a pesar de esas precauciones la gran fiesta de la corrupción del PP se les disparó con la detención de Zaplana que dejó lívidos a Urkullu y Rivera (compañeros de Presupuestos) a los que desde La Moncloa les dijeron que Zaplana -que fue portavoz de Rajoy en el Congreso- era de la ‘pandilla de Aznar’.

Pero tras el ingreso en prisión de Zaplana estalló la sentencia de Gürtel y se desataron todas las alarmas. Y Rajoy, experto en no tomar decisiones y en cobardía (como cuando no se atrevió a aplicar el artículo 155 en Cataluña el día 7 de septiembre, impidiendo el referéndum del 1-O y la declaración de la independencia) se tomó a chufla la sentencia de Gürtel y repitió el mantra de ‘los casos aislados de corrupción del PP’ -que más bien es una epidemia-, convencido que el tiempo la enterraría, como su SMS a Bárcenas de ‘Luis se fuerte’.

Incluso cuando, al calor de la indignación nacional por Gürtel, se empezó a hablar en la tarde del jueves de la moción de censura (Pablo Iglesias se la pidió a Pedro Sánchez) y en el Gobierno y el PP empezó a circular el pánico, Rajoy se lo tomó a broma y descartó un inmediato adelanto electoral antes de que Sánchez presentará en el Congreso (con astuta premura) la moción de censura contra Rajoy, que lo puede llevar a la Presidencia del Gobierno.

Pero cuando Iglesias y varios partidos nacionalistas le ofrecieron a Sánchez su apoyo a la moción, entonces empezaron a sonar todas las sirenas en de La Moncloa y el PP. Y Rajoy, preso de ira y de miedo, anunció que caerían sobre España todas las plagas de Egipto en el caso de que Pedro Sánchez fuera elegido -democráticamente, por cierto- Presidente del Gobierno.

Y en estas estamos, con Rajoy despavorido y casi haciendo las maletas, y con un Albert Rivera desconcertado e indignado al ver que Sánchez puede llegar a La Moncloa antes que él. Motivo por el que Rivera pide elecciones inmediatas y renuncia a castigar la corrupción del PP (a cuyo hedor ya está habituado) con la misma dureza con la que linchó de implacable manera a Cristina Cifuentes en Madrid por un máster irregular en nada comparable a la sentencia de Gürtel.

La sumisión de Rivera a Rajoy empieza a ser escandalosa y obscena por cuanto nos advierte que lo único que importa a Rivera es ser el sucesor de Rajoy y quedarse con los votos del PP. Olvidando Rivera que apoyó la fallida investidura de Sánchez en marzo de 2016, tras firmar un programa conjunto de Gobierno con el PSOE que calificó de ‘momento histórico’. Pero a Rivera se le han subido las encuestas a la cabeza y sus principios y compromisos democráticos se le han caído a los pies.

Aunque eso, que hace ya algún tiempo que lo venimos apreciando en Cs, es poca cosa si lo comparamos con los desesperados bramidos de Rajoy que se escuchan en toda España y en Europa como un ancestral lamento que emana de la cripta de esa casa de los horrores que se llama La Moncloa. El lugar donde las máquinas trituradoras de papel parecen estar a punto de arrancar su función de eliminar rastros y huellas de su último inquilino por lo que pudiera pasar.

Naturalmente hasta el rabo todo es toro. Y Rajoy ya salió ileso de otras dos pruebas anteriores: la fallida investidura de Sánchez con el voto en contra de  Podemos; y su investidura a finales de 2016 tras la caída de Sánchez en el PSOE y la abstención de los socialistas en la investidura de Rajoy. 

Ahora da la impresión, visto el apoyo inicial de Podemos a Sanchez, que la pelota está en el tejado nacionalista y sería asombroso que a Rajoy lo salvara en última instancia Puigdemont.


(*) Periodista