MURCIA.- El Tribunal Superior de Justicia (TSJ) ha utilizado un 
auto dictado en 2009 por el Tribunal Supremo en el caso Gürtel sobre la 
competencia para investigar al entonces senador Luis Bárcenas para abrir
 diligencias en el caso Novo Carthago, no solo contra el consejero 
Antonio Cerdá, sino también contra otras dos personas no aforadas.
Así
 se recoge en el auto en el que la Sala de lo Civil y Penal del TSJ 
asume la competencia para investigar a Cerdá por dos presuntos delitos 
de prevaricación y un delito de tráfico de influencias por su presunta 
intervención en una modificación urbanística para hacer viable una 
macrourbanización de 3.000 viviendas y dos campos de golf que afectaba a
 una zona protegida del Mar Menor.
A partir del auto
 del Supremo, la Sala indica que el criterio jurisprudencial contenido 
en el mismo le lleva a incoar estas diligencias no solo contra el 
aforado Cerdá, sino, también, contra el exdirector general del Medio 
Natural, Carlos Brugarolas, y la asesora del consejero María Antonieta 
Fernández, que ya fueron imputados por el Juzgado de Instrucción nº 2
 de Murcia.
No obstante, acota la actuación 
investigadora contra estos últimos al indicar que "respecto a los hechos
 que, aunque tengan puntos de contacto, no exista relación directa con 
el aforado, deberá continuar la instrucción la magistrada del Juzgado 
nº 2".
Con esta resolución se trata de armonizar
 el derecho al juez predeterminado por la ley y la seguridad jurídica, 
ya que, señala, en caso contrario, podrían darse resoluciones judiciales
 contradictorias si un mismo caso fuese dividido entre varios tribunales
 según la condición de los encausados.






