BRUSELAS.- El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, dijo esperar de Bruselas que «vigile y obligue a la transposición de toda la normativa y el cumplimiento milimetrado en España de la normativa europea» para garantizar el caudal suficiente del Tajo. 
García-Page, acompañado de una representación del Gobierno manchego, 
presentó al comisario de Medio Ambiente, Karmenu Vella, el informe de 
evaluación del grado de conservación de la ribera y los hábitats del río
 Tajo a su paso por Castilla-La Mancha.
«Hemos venido (a Bruselas)
 a decir lo que siempre hemos dicho de manera coherente con la 
Constitución, las leyes españolas y las leyes europeas aprobadas por 
España para defender nuestro agua, el agua de todos los españoles y por 
tanto también de Castilla-La Mancha», señaló.
Afirmó que lo que 
sufre el Tajo con el Trasvase es «un atropello ambiental» y que a los 
castellanomanchegos se les «agota la paciencia», por lo que «la próxima 
legislatura va a ser determinante. No hay más tiempo que perder», 
añadió, para mostrarse a favor de un «diálogo» tras las elecciones «para
 buscar alternativas».
Asimismo, se mostró «muy satisfecho» por la sentencia del Tribunal Supremo
 que anula parcialmente el Plan Hidrológico del Tajo por no fijar los 
caudales ecológicos en Aranjuez, Toledo y Talavera de la Reina. 
«La 
verdad es que estamos muy contentos, que te den la razón los tribunales 
es siempre trascendente, pero que sea después de una lucha tan sostenida
 en el tiempo, a veces tan solitaria, y a veces aguantando tantos 
insultos de insolidaridad o de acusaciones falsas, es especialmente 
gratificante». 
No hay comentarios:
Publicar un comentario