MURCIA.- El Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de
la Región de Murcia ha desestimado el recurso que tres agentes del
Cuerpo Nacional de Policía presentaron contra la sanción que le fue
impuesta por no informar a sus superiores del descubrimiento del sistema
de escuchas instalado en varios coches policiales dentro de la
investigación abierta por el caso de Cala Cortina.
La sentencia respalda así la resolución
de marzo de 2015 de la dirección general de la Policía que impuso a los
recurrentes la sanción de suspensión de funciones durante 15 días como
autores de una falta grave.
Para la dirección general, incurrieron en
esa falta «al incumplir la obligación de dar cuenta a la superioridad,
con la debida diligencia, de todo asunto que, por su entidad, requiera
su conocimiento o decisión urgente».
Las sanciones por la vía
disciplinaria se produjeron en agosto de 2014, y tuvieron su origen en
el sumario abierto en un Juzgado de Cartagena para esclarecer
la muerte de Diego Pérez, un vecino de Las Seiscientas cuyo cadáver
apareció en Cala Cortina en marzo de 2014.
La Policía Judicial
de Cartagena pidió permiso al juez para instalar un sistema de escucha
en tres vehículos utilizados por los agentes sometidos a investigación.
Los policías sancionados no son los que a partir de octubre serán
juzgados por la muerte y detención ilegal de Diego Pérez.
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