ALICANTE.- El gabinete de seguridad del aeropuerto de Alicante-Elche
ha decidido prolongar hasta mañana martes el cierre del aeropuerto de
Alicante-Elche al tráfico ante la previsión que la borrasca Gloria siga
azotando con fuerza la provincia -empezará a remitir mañana cuando tome
dirección Cataluña-.
En prinicipio se esperaba abrir hoy a las 13 horas pero
los daños que ha sufrido una parte de la cubierta tras el incendio del
pasado miércoles han provocado la prolongación de la clausura. En
condiciones normales la terminal hubiera estado operativa pero la
previsión de fuertes rachas de viento aconsejan mantener el cierre para
prevenir, por ejemplo, algún desprendimiento sobre de material de la
cubierta sobre la plataforma de aviones o las propias pistas. Los bomberos siguen desmontando elementos suceptibles de ser arrastrados por el viento.
El aeropuerto de Alicante-Elche pemanece cerrado y
clausura afecta en en estos momentos a los 76 vuelos previstos, la
mayoría cancelados y otros operando en Murcia y Valencia en función de
lo que hayan decidido las compañías aéreas.
En principio, y a falta de saber qué harán los técnicos, la primera
salida sería uin vuelo de Ryanair a Santiago de Compostela.
En cuanto al
balance de ayer, fuentes de Aena han informado desde el cierre a las 13
horas se vieron afectados 114 vuelos de los que 88 operaron en Murcia y
Valencia y 26 fueron cancelados. Las compañías montaron un "puente" por
carretera con autobuses que salían es de IFA, ya que
los accesos a la terminal se cortaron. Con los 114 vuelos de ayer y los
76 de esta mañana, el total de vuelos afectados asciende a 190.
La peor de las combinaciones posibles se conjuró ayer en el Aeropuerto de Alicante-Elche: una fenomenal borrasca, que obligó a decretar la alerta roja en la provincia por lluvia y viento, se cernió sobre unas instalaciones que ya se encontraban entre algodones después del incendio padecido en su cubierta durante la pasada semana.
La
consecuencia, el cierre del tráfico aéreo de la terminal al menos desde
las 13.00 horas de ayer domingo y, en principio, hasta las 13.00 horas de hoy lunes.
La decisión de Aena, asumida «para ampliar las medidas de seguridad
derivadas del incendio que afectó a la cubierta de la terminal a causa
de la borrasca», provocó como es lógico un sinfín de trastornos a las compañías, que tuvieron que reorganizar toda su estrategia operativa. Ayer domingo, se suspendieron 114 vuelos y este lunes lo han hecho otros 67 hasta la una de este mediodía. En total, 181.
Un total de sesenta de esas operaciones fueron reprogramadas
durante ambas jornadas en los dos aeródromos más cercanos, treinta en
el Internacional Región de Murcia y el mismo número en el de Manises en
Valencia.
Solo ayer domingo, el de Murcia había acogido 17 llegadas y 13
salidas y además había ampliado su horario hasta las 1.00 horas de la
madrugada. Por su parte, el de Valencia alojó 16 llegadas y 14 salidas de
operaciones que en principio deberían haber tenido lugar en El Altet.
Es
verdad que desde el jueves el aeropuerto había recuperado su operativa
de vuelos al 100% -que es la que quedó interrumpida ayer domingo-, pero
también algunas zonas de la terminal habían seguido cerradas por razones
de seguridad.
Aena aseguró que trabajaba junto al servicio de emergencias para recuperar la normalidad
«primando siempre la seguridad de pasajeros, usuarios y empleados». Es
decir, que la intención de Aena de reabrir las instalaciones de El Altet
quedaba condicionada a las previsiones meteorológicas de hoy lunes, que
en principio siguen sin pintar bien, toda vez que se mantendrá el
escenario de fuertes vientos y precipitaciones intensas.
Ya
desde el pasado sábado, Aena se había preparado para esta contingencia,
instalando parapetos de contención en la terminal para evitar que el
agua se colara en la terminal. Pero evidentemente, la situación no
estaba para que El Altet pudiera acoger un tráfico aéreo normalizado. Y
por eso se obró en consecuencia.
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